Dormitorios

Antes que un armario exento, que destaca más y cobra protagonismo, opta por un frente de armarios empotrados con puertas lisas. Esto dará sensación de que la pared queda despejada aunque se trate en realidad de un armario de gran capacidad. Diseña de suelo a techo y de pared a pared. Si el armario no llega hasta el techo, no "ocupes" la zona alta sobre el mueble.

Lo que percibe el ojo influye en la sensación de amplitud de un espacio. Los muebles han de ser sencillos, como hemos mencionado, mejor de diseño bajo y horizontal. Pero puedes tener en cuenta la geometría como ilusión óptica. Las líneas verticales u horizontales te pueden hacer ganar altura o ensanchar el espacio, respectivamente. Juega con ellas en el cabecero, por ejemplo.

Para tener la percepción de amplitud, deja que se vea el suelo. No está reñido con la colocación de alfombras, pero si despejas el suelo y este es claro, lograrás sentir más espacio todo. Es importante ver el suelo y el rodapié, algo relacionado con lo que indicábamos más arriba acerca de escoger muebles con patas.

El truco para que por la noche, al encender las luces, el dormitorio no parezca más pequeño es que no haya rincones oscuros. Esto es importante si estás acostumbrado a estar. Pero la iluminación de la habitación ha de ser suave. Así que apuesta por lámparas con regulador de intensidad.  Además de la general, luces en la zona de la cama y en al menos otro punto de la estancia (en un rincón con una lámpara de pie o sobre una cómoda).

Despejar las paredes y las superficies concede sensación de amplitud así que no puede faltar en este listado de ilusiones ópticas para que el espacio parezca más grande. Decora solo con algún complemento, no demasiado voluminoso. Si tiene un color que se mimetiza con la pared, será más adecuado al no aportar contraste cromático. Y agrupa varios en un punto en lugar de "desperdigarlos".

¿Sabías que si el ojo no percibe contraste de colores todo le parece más profundo y espacioso? Pues para que un dormitorio parezca más grande no mezcles colores. Usa una paleta monocromática. Es una de las varias ideas para dormitorios pequeños que vas a encontrar, pero en este caso tan sencilla de aplicar como jugar con el mismo color en todos los elementos.

Si los complementos de cristal y vidrio son ligeros para decorar, ¿imaginas que la pared que delimita tu pequeño dormitorio sea transparente? Toma nota de este truco y disfruta de la ilusión óptica. Un panel fijo y otro corredero o abatible, pero acristalado, es una opción que concede metros. Para no perder intimidad, coloca una cortina que puedas echar.

¿Tienes un mueble en tu recibidor de color oscuro que lo envejece? Actualízalo con una mano de pintura. Las pinturas a la tiza o Chalk paint cuentan con una paleta de colores tan bonita que te costará decidirte. La estilista Solange Van Dorssen optó por un tono azul pastel, pero en turquesa o gris claro te quedará igual de bonito ¡y súper actual con ese acabado empolvado! Como no hace falta lijarlo, en apenas media hora estrenarás mueble y recibidor. 

Si la decoración de tu habitación es sencilla y de líneas puras necesitarás un armario acorde a ese estilo. Elige módulos de la medida que mejor se adapte a las dimensiones de tu dormitorio y ciérralos con puertas lisas de color blanco. En la imagen encuentras un ejemplo de cómo puede quedar un armario de Ikea, espacioso y con mucho sitio para guardar, en una pared amplia. A la hora de elegir los tiradores apuesta por los más sencillos, como el modelo Billsbro.

A veces en los dormitorios muy pequeños resulta difícil encontrar un espacio para instalar el armario. Una solución es componer una estructura tipo puente en la pared del cabecero. Con los armarios de Ikea lo tienes fácil, ya que ofrecen muchísimas opciones de personalización. En la imagen puedes ver un ejemplo de cómo resulta la composición: módulos Pax de Ikea a ambos lados de la cama (de 50 y 100 cm de ancho) y dos módulos Platsa en la parte central.

Versátil y práctico, este armario blanco ocupa toda un frente ofreciendo un sistema de almacenaje muy completo para un dormitorio principal. La estructura Pax, de Ikea, se combina en este caso con las puertas Bergsbo y tiradores de acero inoxidable Orrnäs. El catálogo de la firma sueca incluye módulos de diferentes medidas (dentro de la serie Pax) para que puedas contar con los que necesitas.

¿Tu dormitorio dispone de un pequeño espacio de vestidor separado por un tabique? Entonces puedes amueblarlo con módulos sin puertas equipados con accesorios para organizar el espacio interior. En el caso de la fotografía se ha elegido una estructura PAX con acabado en madera, barras para colgar prendas largas y cortas, cajones y bandejas extraíbles para accesorios.

Cuando el espacio no es un problema podemos optar por un armario grande que vaya del suelo al techo y ocupe una pared completa. Añadir un módulo con baldas abiertas aporta dinamismo al conjunto. El armario de la imagen combina dos acabados distintos: el color verde grisáceo de las puertas y el tono de madera natural del módulo abierto. Este es el armario modular PAX con puertas MERÅKER. 

Si junto al dormitorio hay un pasillo estrecho que no sabes cómo aprovechar, prueba a instalar un armario modular. Toma medidas y comprueba que la estructura elegida se adapta al hueco disponible. Tienes un amplio repertorio de módulos para elegir por lo que es muy posible que encuentres el mueble perfecto para tu espacio. En cuanto a las puertas, las correderas son las más apropiadas para cerrar el armario, ya que su apertura requiere menos espacio. Este es el modelo PAX con puertas SVARTISDAL.

Si buscas ideas de dormitorios con armarios de Ikea, recuerda que apostar por un armario modular de gran capacidad es una buena opción si necesitas más almacenaje en el dormitorio. Y si la planta es rectangular puedes instalarlo en la pared frente a la cama. Elige un modelo sencillo del mismo color de la pared para que se integre mejor en el espacio. En la foto, la estructura de armario de Ikea PAX se cierra con puertas blancas de diseño actual: el modelo BERGSBO.

Si no dispones en la habitación de una pared en la que instalar un armario grande, tendrás que ponerlo en algún hueco libre, aunque sea más estrecho. Eso sí, amplíalo hasta el techo para ganar más capacidad de almacenaje. Las puertas blancas y lisas resultan más ligeras y fáciles de combinar con el resto del mobiliario. Como ejemplo, el armario de la foto: una estructura básica Pax cerrada con puertas Forsand (disponibles en un altura máxima de 229 cm). Las puertas, de 50x229 cm, cuestan 25 euros y los tiradores de acero, modelo Kallrör, 12 euros.

Si hablamos de calidez y de rincones acogedores se nos llena la boca con las virtudes de este color. Es alegre, elegante, cálido, luminoso, combinable... Con una manta, un cojín, un cuadro o una flor qué fácil es dar vida a cualquier estancia. El ocre nos recuerda a la luz del sol y los días de verano. En este dormitorio otoñal, Solange Van Dorssen ha elegido tonos mostaza para dinamizarlo. ¿Has visto lo bien que combinan con el gris?

Tiene fama de ser un color frío pero no será así si te alías con las texturas. El interiorista Roger Bellera ha añadido un cabecero de madera, lanas y linos para equilibrar la temperatura. Gracias a ellos ha logrado llenar de color y calor este dormitorio.

El sueño de una noche de otoño es dormir bajo un techo abuhardillado de madera, ante una chimenea chispeante y arropada por unas cálidas mantas estampadas con cuadros: el look cabaña ideal. Pero este dormitorio supera con creces esta escena, la madera oscura de las vigas vistas, la butaca tapizada de cuadros y las mantas amontonadas por capas en vivificantes tonos rojizos le añaden una personalidad y una fuerza única, inesperada.

Usar un mueble tipo cómoda para delimitar el espacio reservado para el vestidor es una buena idea cuando se trata de separar ambientes, por ejemplo vestidor-dormitorio; vestidor-baño o vestidor-zona de paso. De esta manera se amplía el espacio de almacenamiento. Importante: que la trasera del mueble que escojas quede rematada.

Con la misma idea para separar ambientes que veíamos anteriormente pero con un mueble distinto. En este caso, un armario a media altura que es usado como zapatero. Basta en este caso un fondo reducido de 35-40 cm y no de 50-60 cm como en el caso de una cómoda. Juega con esta idea para delimitar el vestidor respecto a la zona de descanso.

De esta manera no hay tanta sensación de cerramiento, se mantiene el paso de la luz, pero se separan los ambientes. En dormitorios amplios es una buena idea para crear una zona de vestidor, independiente de la de descanso o un espacio para trabajar que no quede expuesto desde la cama. Incluso, como solución para independizar el recibidor.

¿Una estancia abierta y diáfana? Puede que sea tal su extensión que necesites ideas para separar espacios. Es decir, delimitar para crear ambientes independientes aunque conectados. No siempre se busca unificar. Cuando se quiere delimitar, incorpora un panel fijo o móvil de cristal con guías en el techo. Es una buena idea para separar una zona de trabajo de un salón o de un dormitorio.

En el dormitorio principal, un cabecero tapizado en beis se actualizó decorándolo con chinchetas. El resto de la habitación se amuebló con una cómoda y mesillas de noches procedentes de anticuario que enfatizan su carácter clásico. La cama vestida con varias capas le dan un aspecto gustoso y relajante. El dormitorio cuenta con vestidor, ¡no podía ser de otra manera!

La planta lineal de esta casa XS termina en el dormitorio en uno de los extremos (en el otro se halla la cocina). En él hay sitio para lo básico: la cama, dos banquetas que hacen de mesillas de noche y un banco de madera a los pies. Las vigas vistas en el espacio abuhardillado le dan un encanto especial. ¿Te has fijado en el original cabecero?

En la planta de arriba se encuentran los dormitorios y los baños con vistas al bosque que rodea la casa. En el amplio dormitorio principal, la pared del cabecero se ha revestido con un papel pintado muy acorde con el exterior. En la ventana se ha creado un agradable banco mirador. Y al otro lado de la cama se encuentra la chimenea que hace la estancia aún más acogedora.

El cuarto de baño en suite continúa con la línea rústica del resto de la casa. Una cómoda antigua, decapada y lacada en gris, hace las veces de mueble de baño. Se le añadió una encimera de mármol blanco sobre la que descansa el lavamanos exento con grifería vintage. Un espejo redondo con cuerda remata la estancia.

Este dormitorio tiene espíritu de refugio, con sus techos inclinados y su lucernario. Pero el reto fue optimizarlo al máximo. Y se logró redistribuyendo el espacio. La cama se situó en la zona más baja del dormitorio reservando la de mayor altura para el armario, que salva el techo y combina puertas batientes con otras plegables, para aprovechar mejor el espacio. No te pierdas el resto de soluciones de este ático. 

En el dormitorio, también en blanco como el resto de la casa, se diseñaron armarios hasta el techo para ganar un vestidor al que no le falta de nada. Empotrados, con puertas lisas y en blanco, como las paredes, pasan desapercibidos. Y es que aquí el protagonismo son las preciosas vistas. 

Las molduras hace tiempo que han dejado de ser algo clásico para convertirse en un recurso muy de moda para dar un encanto especial a un espacio. Las de poliuretano son ligeras, económicas y muy fáciles de instalar. Además, hay firmas especializadas, como Orac Decor, que cuentan con revestimientos de 3D con los que podrás transformar por completo el look de tu dormitorio.

Si no te atreves con un mural, un recurso muy decorativo, fácil y económico de personalizar el dormitorio y sumarle un plus de calidez es revestir la pared del cabecero con un papel pintado de efecto textil. Los de hoy en día están muy logrados, reproducen las tramas y texturas de los tejidos con mucha precisión.

Si cuentas con espacio, una cama cama con dosel dará personalidad y un look singular a tu dormitorio. Además, si la vistes con unas cortinas livianas, te protegerá de insectos y te dará cierta privacidad. Al ser piezas muy especiales, puedes dejar la estructura desnuda para darle mayor relevancia, como la de la imagen.

Los dormitorios abuhardillados derrochan un encanto especial: son acogedores, derrochan luz natural y provocan cierto misterio. Para darles más atractivo aún, reviste de madera paredes y techo. Además de decorarlos, aislarán la estancia térmicamente.

Una manera de sumar personalidad a un dormitorio es convertir los elementos funcionales, como separaciones de ambientes, en piezas decorativas. Y esto es lo que ha hecho el equipo de Egue y Seta en este dormitorio, con esta escultórica celosía de madera, que es la robamiradas del espacio.

Una lámpara especial puede transformar por completo un dormitorio soso y darle mucho encanto. Esta, un icono de Ay Illuminate, es sencilla pero a la vez muy chic y estilosa, con el plus que encaja en decoraciones de corte más elegantes, como la de este dormitorio decorado por Isabel Otero, y otros más bohemios.

La cama es una gran superficie dura y plana, la manera de quitarle dureza y convertirla en una cama gustosa y apetecible, como las que nos gustan en El Mueble, es vestirla con diferentes capas de ropa de cama, combinando texturas y materiales, es decir, si el nórdico es de lino, que el edredón sea de terciopelo. Al darle volumen, la vida adquiere "vida".

El cabecero, al enmarcar la cama, que es la pieza estrella del dormitorio, tiene un poder enorme para transformar un dormitorio de soso a súper estiloso. Este dormitorio, decorado por Teresa Gutiérrez, no sería el mismo sin este divertido y personal cabecero de terciopelo rosa.

Los textiles son los grandes creadores de calidez y un gran aliado para dar personalidad a un espacio de manera rápida y fácil. Y las alfombras, que en El Mueble las recomendamos en toda la casa (¡incluso en la cocina!) , en el dormitorio son un must. No solo porque ofrecen una pisada mullida muy agradable, sino porque visten el suelo y, según el diseño que escojas, se convierten en elementos muy decorativos.

Pintura y papel pintado serán dos buenos aliados en la nueva deco de tu dormitorio. Si está pintado en blanco, realiza un zócalo en la pared de otro color: ¿qué tal un azul relajante? Realza la zona del cabecero con un mural pintado, como el de este dormitorio reformado por Hoc Volo.