Vajillas

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Comedor con mesa redonda con mantel de lino decorada para San Valentín con velas, rosas y copas de vino y cava.

Comedor con copas y servilletas, de Zara Home. Sevilletero, de Deco&Co. Cafetera que es también lámpara y jarrón de cristal, de Cottage Little House. Portavelas, de Coton et Bois.

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La cena más romántica

Los detalles marcan la diferencia, así que este San Valentín conquista a tu pareja preparando un ambiente lleno de magia: luz tenue, velas aromáticas, vuestra canción... Saca a relucir tu mejor vajilla, las copas de cristal de bohemia, las rosas rosas o rojas para que presidan la cena y envíen un mensaje de amor a tu pareja. ¡Feliz día de los enamorados! 

Comedor con armario empotrado en verde, mesa de madera con vajilla, mantelería azul y jarrón con flores.

Comedor con papel pintado, en Estudio Hoc Volo. En la mesa, la vajilla es de Sandra Marcos, los vasos verdes de Zara Home y los individuales de lino de Balakata.

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Más allá del rojo y los corazones

Si no te gusta decorar con corazones y en blanco y rojo, ¡no pasa nada! Que sea San Valentín no significa que tengas que llenarlo todo de corazones. De hecho, es el mejor momento para sacar tus mejores galas. La mantelería con bordados, la cristalería fina, la vajilla de las ocasiones especiales... El truco está en elegir una gama de colores y seguirla, tanto en los platos como en los textiles de mesa y, por supuesto, también en el centro que elijas para decorar y subir el nivel de tu mesa.  

Detalle de una mesa con bajoplatos de fibra natural.

Detalle de una mesa con bajoplatos de fibra natural.

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Y que sea muy eco

A veces, lo sencillo es lo más elegante. La mesa ha de ser romántica sí, pero también debe de estar a la última. Elige una vajilla de cerámica, lisa y de un color de tendencia, como esta en color mostaza de la imagen. La cubertería, de madera y el posaplatos, de fibra natural. ¡Que se note que os preocupáis por el medio ambiente!

Porche con comedor exterior decorado con jarrón de flores, vajilla y velas.

Porche con comedor exterior decorado con jarrón de flores, vajilla y velas.

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Cena a la luz de las velas

Si vives en una zona en la que las temperaturas lo permiten, ¡no dudéis en celebrar este día tan especial en vuestro jardín o terraza! No hay mejor momento para estrenar la temporada. Así podrás ser un poco más informal al decorar la mesa de San Valentín. Eso sí, no prescindáis de las velas si cenáis fuera: serán la clave para crear una atmósfera seductora, relajada y muy romántica.   

Mesa con bandeja y tazas.

Mesa con bandeja y tazas.

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Entre tacita y tacita...Un buen plan

Y mientras se hacen las galletas, tomaros un café bien cargado ¡el día promete ser largo y hay que estar bien despejados! Saca esas tacitas tan ideales que comprásteis en vuestro primer viaje juntos. Mientras lo saboreáis, podéis planear lo que vais a hacer... ¿O preferís dejaros llevar? 

Mesa de comedor exterior con vajilla y cristalería.

Mesa de comedor exterior con vajilla y cristalería.

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No nos gustan ya las vajillas incompletas

Hasta hace bien poco tener una vajilla incompleta no nos preocupaba, total poner un plato bajero de un tipo y el sopero de otro ¡era tendencia! Pero ojo, eso ya se ha acabado. ¡Es hora de que jubiles esos platos de su padre y de su madre y te compres una vajilla completita! En El Mueble nos gustan blancas porque son súper elegantes y atemporales. Elige una así y tendrás vajilla para rato (si no la rompes antes, claro).

Estanterías y vajilla en cocina

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Vajilla rota

Seguro que tienes algún bol o plato con pequeñas grietas de esas que se forman cuando estamos fregando y las piezas chocan. ¿El problema? Que además de poder cortarte en cualquier momento es muy complicado eliminar la suciedad de estos recovecos, por lo que tu salud se puede ver resentida. ¡Llegó el momento de reemplazar la vajilla!

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Arrastrar piezas que ya no te gustan

Es uno de los errores más habituales que cometemos cuando nos cambiamos de piso y nos llevamos los muebles. Sí, es posible que esa alacena heredada te haya dado mucho juego en tu anterior casa, pero en la de ahora no logras encajarla. Para María Vázquez, de Dr. Livinghome, tienes dos opciones: deshacerte de ella —por mucho que te pese— o transformarla, pintándola de otro color o inventándote otro uso, por ejemplo. Hay que dejar hueco a las cosas que te hacen feliz, deshaciéndote de esas otras que ya no lo hacen. ¡Pruébalo porque funciona!

Alacena, de Becara decapada por Jeanette Trensig. Banqueta, de Cado. 
Detalle de vitrina con el interior pintado de rosa fucsia.

Detalle de vitrina con el interior pintado de rosa fucsia.

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En gris y fucsia

Las vitrinas decoradas no solo se pueden forrar con papel pintado: una mano de pintura exterior e interior hace maravillas. La interiorista Mª Ángeles Morral ha decidido lacar esta de la imagen en un tono gris soft por fuera y un rosa fucsia, súper llamativo, por dentro. Puedes pintar los bordes interiores en blanco para que se perciba aún más la diferencia de color. ¡Aquí tienes el resultado! ¿Te gustaría saber cómo pintar un mueble y darle otra vida?

Mesa con mantel rosa y lámpara de madera.

Mantel de Natura Casa, vajilla de Zara Home y cubiertos de Muy Mucho.

El Mueble / Stella Rotger

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Detalles cuidados

La mesa se ha vestido con un mantel de color terracota que da vida a un espacio muy sobrio decorado con las piezas básicas.  

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Ideas para celebrar una Navidad diferente

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Rutina de mañana para mantener el orden en casa

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Rutina de mañana para mantener el orden en casa

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Por qué no debes renunciar a la mesa de centro

Detalle morteros

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Detalle morteros

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Ideas para una Navidad en petit comité

Vajillero de madera recuperado decapado en blanco con puertas con rejilla de gallinero junto a mesita con sillas plegables 332852

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Esencia recuperada

Deja de pensar que esa mesa que encontraste en la casa del pueblo no tiene remedio, y dale una capa de pintura a la tiza, ¡seguro que cambias de parecer! Este ejemplo lo ilustra a la perfección: una pequeña y antigua mesa de madera que se reinventó al pintar la base en color blanco, manteniendo el tablero con su madera original.

Alacena decapada y con puertas de rejilla, en Velafusta.
Detalle de una mesa decorada con velas y copas.

Detalle de una mesa decorada con velas y copas.

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Las velas

Revisa tus velas y portavelas que tras las cenas veraniegas y noches hasta la madrugada han quedado más que consumidas. Incluidas las que repelen los mosquitos (generalmente de citronella). No las guardes si están prácticamente acabadas. Las que sí puedas reaprovechar el verano que viene, mejor guardadas para que la cera no coja polvo.

Estantería de cocina con vajilla.

Vajillero hecho a medida y diseñado por Mayte Pombo. 

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No abarrotes las baldas

El mejor truco para que 'guardar a la vista' es colocar los objetos de forma equilibrada. Como se ha hecho en este espacio. Por un lado, los estantes abiertos en los que van los recetarios van de menos a más, dejando espacios libres que ayudan a presumir del papel pintadlo con motivos florales que decora la estancia. Y lo mismo en el vajillero. Deja que platos, tazas y fuentes respiren. No amontones todo en una pila. Además de feo, corres el riesgo de que se caiga cuando vayas a coger algo. 

Mesa de verano vestida con un mantel de rayas.

Comedor exterior con mesa y silla de El Corte Inglés; caminos de mesa de lino, platos, y bajoplatos de La Última Parada.

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La mantelería de verano

Como ocurre con la que uses dentro de casa, debes revisarla cada cierto tiempo por las manchas insalvables. Mantelería, manteles individuales y servilletas que visten las mesas de verano, pero son irrecuperables, pasan a engrosar la lista de las cosas que debes tirar cuando acabe este verano. Piensa que puedes convertir algunos de estos textiles en agarraderas de cocina o paños.

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Mesa puesta

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Palillos chinos para una ocasión especial

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Mesa puesta con mantel

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Cosas de ocasión especial: manteles

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Los mismos colores que el mantel

Repetir los colores del mantel en el servicio de mesa es un truco genial para que la mesa quede equilibrada. Aquí las notas más Classic Blue las ponen las servilletas, las copas y el bajoplato azul oscuro que hace destacar la vajilla pintada artesalmente. Del toque amarillo, un color complementario al azul, se encargan los cubiertos dorados, el plato del pan y el centro de flores.

 

cocina con tocinera como isla

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Una isla bien habitada

En la cocina, cuando no utilices la mesa tocinera como superficie de trabajo, puedes decorarla con la vajilla de uso diario. Es una buena forma de tenerla a mano. Y, en la balda inferior, almacena ensaladeras, fruteros o boles de cerámica. ¡Ya sabes que el blanco y la madera funcionan muy bien! 

Cocina moderna con mesa tocinera recuperada y taburetes industriales

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Para trabajar y picotear

Seguro que sabes lo que es una mesa tocinera. Sí, esas mesas típicas que había en las cocinas de las casas rurales en torno a la cual se hacía prácticamente toda la vida. Aquí se ha recuperado para esta cocina moderna donde funciona como isla de trabajo. Puedes añadirle unos taburetes y también hará las veces de barra de desayunos. La propia comida será su mejor decoración. ¿Te has fijado lo bien que casa con muebles actuales? Es el nuevo rústico chic.

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¿Lo ves claro?

¿Sabías que si pintas las paredes de un color claro es más fácil cambiar de escenario? Este salón abierto a la cocina se pintó adrede en un suave beige por dos motivos: para delimitar espacios y por si apetece renovar el ambiente al cabo de unos años. En este caso, no se vuelve a pintar ¡se cambian las fundas del sofá y los cojines y listo! 

Alfombra, de Guáimaro. Cuadro, de Kenay Home. Mesita de centro, de Bruka.
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Lino y colores suaves, tendencia para este verano

Viste la mesa de tu balcón con una mantelería de lino y una vajilla de un color delicado, ¡dará igual si tu balcón es pequeño o grande! La mesa de exterior será la estrella de tu verano.

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Momentos de paz

Sentada en el porche de tu casa y rodeada de jardín tienes la suerte de escuchar el rumor del río que justo pasa por allí. ¡Qué relajación! Instala el comedor exterior lo más cerca posible del agua, así conseguiréis estar frescos y tener ese agradable sonido de fondo. En este de la imagen llama la atención su techo de madera artesonado tipo cenador y la discreta, pero elegante, lámpara de techo.

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¿Qué celebramos?

Si estás pensando en hacer una fiesta sorpresa en casa para celebrar el final de curso, el cumpleaños de tu hijo o ¡que por fin estáis todos juntos!, además de ocuparte del menú y de la presentación de la mesa, no te olvides de la decoración exterior. En ella no deben faltar guirnaldas, globos, farolillos, o pompones de papel, como estos dispuestos en el techo. Encuentra inspiración en www.airedefiesta.com. 

Mesas, sillas, banco y sillones de bambú, de Ikea.
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¡Más madera!

Resistente, decorativo y funcional, así quieres el suelo de tu comedor exterior. Materiales hay muchos: cerámica, vinilo, piedra natural, microcemento... pero a ti  te gusta la madera por su calidez pero lo que no te hace tanta gracia es su mantenimiento. Elige variedades tropicales que no lo necesitan, como la madera de bangkirai, ipe o masaranduba. Esta de la imagen es de teca.

Sillas, de Sacum. Mantel, de Matèria.

 

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La isla bonita

¡Esta casa lo tiene todo! Un amplio jardín, una piscina grandiosa en forma de L y un porche con comedor exterior, protegido con una pérgola de toldo corredero y cortinas. La piscina sin bordillo permite entrar en ella andando desde el mismo porche. Vamos que terminas de comer y ¡al agua, patos! 

Sillas de hierro envejecido, de Becara. Pavimento de piedra caliza, de Colmenar.
Porche con comedor exterior y zona chillout frente al mar

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¡Esto es vida!

Rodeada de pinos y con el mar de fondo, esta casa tiene el enclave perfecto para instalar un comedor exterior en el porche donde disfrutar en familia y con amigos. A su lado se creó una zona de relax informal, perfecta para sestear o tomar la penúltima copa. Y mientras llegan los invitados ¿qué tal un instante de romanticismo solo para dos? 

Mesa, de Maisons du Monde. Sillas, de Casa Paya.
Comedor exterior con mesa y sillas de madera.

Mesa y sillas de teca de Ethimo, similares al modelo Acqua de Greendesign. Mantel de lino gris y mantel azul de Zara Home. Suelo de cemento.

El Mueble

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Aquí caben 8

Fíjate bien en esta imagen porque es otra toma del porche anterior donde se aprecia mejor el comedor exterior a cubierto e instalado junto a la cocina con barbacoa. Lo han equipado con una mesa de madera de teca y butacas a juego. Para el suelo se ha elegido cemento pulido blanco, muy resistente. ¿Quieres ver el porche al completo?

Comedor exterior con sillas en verde mint.

Sillas de mimbre, de Carolina Blue.

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Un toque de mint, por favor

Además de en blanco y madera, alegra tu comedor exterior con colores veraniegos. ¿Qué tal un suave turquesa? Fue el que se eligió aquí para refrescar las sillas de mimbre. ¡Y mira qué curioso! Bajo la ventana se dispuso un alféizar que lo mismo puede servir de soporte para plantas que de pasaplatos. 

El comedor exterior

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Con cocina exterior y barbacoa

En este acogedor porche se ha ampliado la zona de la chimenea-barbacoa para instalar una cocina exterior formada por un mueble de obra con superficie de azulejos y puertas de madera donde almacenar menaje, manteles y cojines. Y a su lado, el comedor exterior. Qué practico ¿verdad? 

Comedor exterior de estilo rústico con mesa y bancos.

Comedor exterior de estilo rústico con mesa y bancos.

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De estilo rústico

Paredes de piedra, suelos de barro cocido, pérgola de madera o imitación, muebles de exterior a la sombra de una higuera... ¿Te inspiran los comedores rústicos como este exterior en el porche? Llévalo al tuyo eligiendo muebles de madera o fibra natural y un toldo apropiado para conseguir ese efecto de sol y sombra tan agradable.

Comedor exterior con toldo tipo vela, mesa de madera y metal, bancos, árboles y vistas al bosque_438317

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¡Viento en popa, a toda vela!

¿Te sientes una privilegiada en tu casa de campo rodeada de jardín y vistas al monte? ¡No es para menos! Solo te queda colocar en un lugar estratégico el comedor, entre dos árboles alineados será perfecto. Así podrás colgar de sus ramas guirnaldas festivas, globos, farolillos solares o tensar toldos tipo vela, como el de la imagen.

Mesa y bancos, de Renova. Cojines, de Filocolore.
Comedor exterior en una terraza pequeña.

Mesa de Con Alma Design, mantel de lino de La Maison y sillas en Leroy Merlin.

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Mirando al mar

Esta terraza sin duda está a la altura. Sentados en su mesa de comedor de madera maciza y acabado natural permite vislumbrar el magnífico horizonte azulado que la rodea. Un listón en su estructura inferior y las butacas con brazos garantizan el descanso de extremidades. Si tienes una terraza similar o aspiras a ello, no te olvides de abrir una o dos sombrillas orientables que cubran bien las sillas y protejan de los rayos UV para que el sol no os moleste mientras coméis.

Comedor exterior en una terraza con vistas.

Mesa y sillas, de Casa Viva. 

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Es hora de relajarse

Ya solo con sentarse frente al mar notarás que el tiempo se detiene. En esta terraza con maravillosas vistas se ha colocado una mesa rectangular y sillas de director. Si al desplegar estas ves que la tela tiene manchas, límpiala con bicarbonato sódico, talco o leche. Y si la lona está muy deteriorada, entonces no lo dudes y cámbiala.

Comedor exterior bajo toldo.

Mesa de ratán, en Terraza Balear.

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Una pared de ladrillo ¡y tan fresca!

¡Y no es para menos! Este generoso comedor cuenta con una completa cocina equipada con una barbacoa para disfrutar del verano al máximo. 

Comedor exterior rodeado de plantas.

 Mesa y sillas, de Fermob en Teodora Exteriorismo. Mantel celadón, de Catalina House.

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Todos a la sombra

¿Te acabas de cambiar a una planta baja con terraza? Seguro que ya te has percatado qué rincón dispone de más sombra a la hora de la comida. Justo allí instala tu comedor de verano. Este de la imagen cuenta con prácticas sillas de aluminio apilables y está rodeado de setos y cestos con hortensias que le dan intimidad, color y frescor, a partes iguales.

Comedor con sillas de fibras, mantel blanco y dos lámparas de techo.

Comedor con mesa y sillas, de Sacum. Mantel, de Estudi Meritxell Ribe. Bandeja, de Coton et Bois. Vajilla, de Sacum.

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Juego de volúmenes

Si tu mesa es rectangular, elige elementos circulares para decorarla que rompan la rectitud de líneas. En esta de la imagen, vestida con doble mantel en colores naturales, se ha buscado la sencillez con objetos en madera y mimbre, y la luminosidad, con el cristal. ¿Y qué pasa con las lámparas suspendidas? La clave está en el equilibrio. "Ten en cuenta el tamaño y la altura de las lámparas", aconseja Elisa López. "Si es muy grande o llamativa procura que los elementos que decoren la mesa no sean demasiado ostentosos", añade.

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Comedor con mesa, sillas, lámpara de techo y pavimento, de Coton et Bois.

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Juego de té, en bandeja

Si como los buenos británicos no perdonas tu tacita de té a las cinco en punto, deja todo dispuesto en la mesa de comedor pero bien ordenado. Y qué mejor que en una bandeja como base, como en la imagen, con tazas y azucarero acompañados de un bonito buqué de flores. ¡Ojo al detalle! En lugar de centrar la bandeja en la mesa, que daría una sensación estática, se ha colocado en oblicuo para dotarla de movimiento. ¿Qué prefieres estar en la hora del té más cómoda en el sofá o en la cocina? No problem! Coge la bandeja y llévatela dónde quieras. 

Comedor con vigas de madera y mesa ovalada de madera y butacas de fibras.

Comedor con mesa y sillas, en India & Pacific. Alfombra, de BSB. Cortinas, con tela de Güell-Lamadrid, en el estudio de Bárbara Sindreu.

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Con piezas de menaje

En los meses de verano cuando el calor aprieta ¡qué bien sienta un vaso de gazpacho bien fresquito a cualquier hora del día! ¿Qué te parece si dejas en la mesa del comedor unos boles preparados para saciar la sed a media mañana? Haz un descanso y siéntate a la mesa a deshoras, verás qué bien te sienta. En esta de la imagen, amplia y ovalada, se ha decorado con dos jarrones floridos separados por un mantel de lino doblado. Junto a ellos, una jarra de agua o unos boles apilados ¡para elegir bebida! 

Comedor abierto a la cocina y al salón con sillas de madera

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Con un vano y una zona de paso

Ni puertas abatibles ni correderas, un amplio vano separa esta cocina abierta del salón comedor, lo suficiente para la independencia de los espacios. Una buena solución para cocinas poco luminosas que así se benefician de la claridad que entra por el salón. Mientras, una zona de paso enfrenta el comedor, pegado a la pared, del salón ubicado al otro lado. 

Comedor estampado natural 0512884

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La extraña pareja

Este comedor de estilo nórdico se ha rendido al beis tanto en el mobiliario como en los textiles pero mantiene un ligero coqueteo con el gris. Resulta sorprendente como un color cálido y otro frío se llevan tan bien. ¿El secreto? Combínalos sin abusar de ninguno de ellos, usando uno en un 60% del espacio y el otro, un 30%.

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Tan clásico como una glorieta

No podemos imaginar un sitio más privilegiado para comer que la clásica glorieta con ventas de cuarterones. La mayoría solo podemos soñarla pero podemos copiar la elegancia del doble mantel, la delicada vajilla de cristal, el color y olor de las rosas... porque no hay nada más como disfrutar de una preciosa mesa puesta.

Sillas de Cottage Little House, mantel de lino de Mavi Lizan y sobremesa de Patchwork de Velafusta, alfombra de Gra. 
Vista aerea comedor

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La mesa del comedor en relación al espacio

El espacio condicionará el tamaño de la mesa, pero también la forma. En comedores de planta cuadrada, se recomienda una mesa cuadrada o redonda. En cambio, si es alargado, rectangular, y si es irregular, mejor redonda para disimularlo. En cuanto al tamaño, "asegúrate que entre la mesa y el siguiente mueble o la pared queden al menos 80 cm libres para circular con comodidad. Su hay un mueble tipo aparador, al menos 100 cm", sostiene la decoradora.