Cuadros

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Salón elegante en blanco y negro.

Sofá y butacas, de Sandon. Estantería diseño de Sandon con trasera con papel de Élitis.

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Sube tu espacio de nivel

La tonalidad por la que más interioristas se decantan a la hora de empezar un proyecto es, sin duda, el blanco cálido. Es atemporal, delicado y muy chic. Gracias a él, todos los espacios parecen más grandes, luminosos y ganan presencia. El Estudio de Interiorismo Sandon lo eligió en este salón no solo para las paredes, también para el sofá, la estantería y el techo. ¿A qué resulta súper elegante y luminoso

Salón con estantería y cuadro.

Librerías, butacas, sofás y estores de lino, diseño de Coton et Bois. Cuadro, de Carol Moreno.

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Elige tu tono según tu gusto y la luz

Los blancos son muy complejos por la cantidad de tonalidades que tiene. Entonces ¿cuál elegir para no errar en la decisión? Depende de las preferencias personales... Y de la luz natural de la estancia: si es muy luminosa, decántate por un blanco frío con una base azulada o gris, que refresque el ambiente. Pero si es poco luminosa, opta por un blanco cálido, mucho más acogedor. Es el elegido por Asun Antó y Javi Baldrich en este salón con el sello inconfundible de Coton et Bois. El blanco es el protagonista de paredes, techos y muebles.

Salón con sofá, molduras en pared y cuadro con iluminación.

Sofá y puf, de Thales de Mileto. Mesa de centro de mármol y metal, de Borgia Conti. Alfombra, de Gancedo.

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Pinta el techo y unifica

Un truco infalible entre los interioristas es extender el color de la pintura de las paredes hasta el techo. Al dar a todo el espacio un color uniforme, no solo conseguirás una sensación de elegancia en la habitación, sino que también harás que tus techos parezcan más altos. Prueba de ello es este salón en blanco cálido decorado por Eva Baena.

Recibidor con consola de madera, lámpara de sobremesa y cestas.

Proyecto de Asun Antó. Consola, de Brucs, y lámpara, de Vical, en Coton et Bois.

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Incluye cuadros en la decoración

Está claro: el arte suma interés visual y personalidad a cualquier espacio, incluido el recibidor. Así que, ya sabes, decora la pared principal del tuyo con cuadros. Puedes optar por una sola pieza grande o crear una composición con varias imágenes. Y si lo prefieres, también puedes apoyar los cuadros en un mueble como hizo en este caso la interiorista Asun Antó.

Composición de cuadros en la pared.

Sofá de Ikea, mesas de Brucs, cojines de Zara Home y Matèria, y alfombra de IKEA.

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Crear una composición de pared a lo grande

Con muchas obras que cubran una pared por completo. Estudia bien la disposición de los elementos, deja espacio suficiente entre cada marco y combina molduras. Dale sentido a las obras que muestres y juega con las tonalidades similares para que resulte equilibrada. Si lo haces con gusto, este truco funcionará, aportando estilo a la habitación.

Dormitorio principal con cabecero de obra y ropa de cama rosa y gris

Funda nórdica, almohadas y cojín rosa, de Filocolore. Colcha y cojines a cuadros, de Calma House. Manta, de Zara Home.

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El dormitorio principal con un cabecero a medida

Lo más sobresaliente del dormitorio principal es el cabecero a medida, de obra y a tono con la pared. Da profundidad y resulta muy práctico: la repisa es genial para decorar con cuadros y las hornacinas funcionan a modo de mini librerías con sus apliques integrados. Unas mesillas en madera y metal le dan un extra de capacidad. La ropa de cama en gris y rosa empolvado es perfecta para ese toque romántico sin ser empalagoso.

Recibidor decorado con banco de madera y composición de fotografías en la pared.

Recibidor decorado con banco de madera y composición de fotografías en la pared.

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Tercer error: confundir orgullo con presumir

"En decoración, podemos exhibir el orgullo a través de espacios que reflejen la identidad y los éxitos de los propietarios como fotografías de momentos de éxito o con personalidades reconocidas, publicaciones en prensa, obras de arte significativas o una colección personal especial", dice Pia. Evita a toda costa que ese énfasis en exhibir tu identidad se vuelva excesivo y arrogante y cuida que los elementos que elijas se integren de manera armoniosa con el resto de la decoración como se ha hecho en este caso.

Pasillo con composicion cuadros en pared.

Pasillo con composicion cuadros en pared.

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Una galería artística en una pared del pasillo

Otra idea muy convincente para renovar la decoración del pasillo es llevar a una pared una galería de fotos y láminas con marcos de diferentes formas y estilos, o bien, una propuesta más racional en forma de cuadrícula con idénticos elementos.

Pasillo con paredes con molduras y cuadro.

Pasillo con alfombra, de Basarabian, y cuadro al fondo.

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Una obra pcitórica llamativa

Con un efecto similar al del espejo, renueva o cambia la decoración de tu pasillo con un cuadro llamativo y original que acapare miradas. Debe tener un gran tamaño y lucir en una de las paredes del pasillo que quede muy expuesta. De esta manera, la obra se verá desde lejos.

Marcos dorados.

Marcos dorados.

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No a los objetos dorados

La decoración de estilo vintage siente predilección por las molduras, los marcos, los jarrones y los maceteros dorados. Sin embargo, utilizarla en los meses de calor suele transmitir calor, pesadez y sensación de ambiente recargado, justo lo contrario de lo que se pretende en la decoración de verano.

Recibidor con aparador antiguo tipo vintage y cuadros encima.

Recibidor con lámpara antigua tipo faro, en Cassai Home & Fashion.

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Sí rotundo a los detalles marinos

El verano es mar, barcos, faros, anclas, redes, caracolas y ¡todo lo que se te ocurra! Puedes exponerlos a modo de colección en una consola o conseguir un total look utilizándolos también en una composición de cuadros, lo que ayudará a sumergirte en una decoración 100% veraniega.

Salón con sofás grises y cuadro en tonos tierra.

Salón decorado por Asun Antó. Sofás, librerías de DM lacado y mesas de centro de roble, diseño de Coton et Bois.

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Alabar por alabar

Puede que tus amigos tengan en la casa alguna pieza decorativa que te gusta especialmente o, por el contrario, te desagrada de forma supina. En cualquier caso, debes ser sincera y no decir que algo te gusta cuando no es así. Puedes ser más diplomática y comentar que no es tu estilo. Saldrás del paso sin parecer mal educada.

Salón con chimenea decorado con dos sofás grises enfrentados.

Salón con sofás, diseño de Coton et Bois. Butaca, de Atemporal. Mesas, de Taller de las Indias. Alfombra de yute, de BSB.

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Calidad, antes que cantidad

Procura no llenar el salón de muebles y objetos baratos. Es preferible que las piezas más importantes como los sofás y la mesa de centro sean muebles de calidad, significativos y duraderos. Esto te ayudará a crear un salón con elementos que realmente aprecies.

Salón con sofás enfrentados de color beige y mueble de salón blanco con almacenaje.

Salón con sofá y butacas, diseño de Coton et Bois. Mesa de centro, de Simla. Alfombra, de Mimbre & Co, en Coton et Bois.

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6. No dejes que la ira se adueñe de la decoración de tu salón

"Lo suyo es evitar colores y texturas que generen tensión. Mejor, elige colores que transmitan calma y armonía, tonos que contribuyan a crear un ambiente sereno y acogedor", comenta la interiorista. 

Salón con sofás tapizados en tonos neutros y cuadro en la pared.

Salón decorado por Eva Baena. Sofá y puf de Thales de Mileto. Mesas auxiliares, de Tristán Domecq. Cojines, de Indietro y Mestizo Store. Cuadro, de Línea Lateral.

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5. Evita la gula y no te empaches de muebles y accesorios innecesarios

"Para conseguir un ambiente sereno y equilibrado, es importante no sobrecargar el espacio", afirma la decoradora. El pecado de la gula (ya sabes, el exceso de muebles y complementos) te llevará a un salón desordenado y abrumador. 

Salón con sofás en color gris y pinceladas de color azul y naranja.

Salón con sofás y mesa de centro, de Coton et Bois. Mesa auxiliar, de Cottage Little House.

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7. No seas avariciosa

¡Ni caprichosa! Lo sabemos: con tanta información es fácil sentir la necesidad de renovar constantemente la decoración del salón. Caer en la tentación de comprar cada dos por tres, productos de tendencia, sin tener en cuenta la calidad y durabilidad de los objetos existentes. 

"A la hora de decorar el salón es importante escoger piezas claves que hagan que tu salón sea un espacio cómodo y acogedor. Sacrificar esto por diseños que nos gustan meramente por su apariencia, hará que se vea frío y desangelado", concluye Asun Antó. 

Salón con pared de cuadros pintada de gris.

Salón con sofá del Estudio de Clara Valls. Pinturas y dibujos antiguos.

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Están desfasadas: las paredes llenas de cuadros

En El Mueble no nos gustan las paredes desnudas, pero tampoco las que están llenas hasta los topes. Como sucede en este salón, donde una composición hecha con pinturas y dibujos antiguos no deja ni un cm libre en la pared de detrás de sofá. Tantos objetos juntos, aunque decorativos y colocados con sentido, generan desorden visual y dan un aspecto desfasado al comedor. Lo ideal sería rebajar la composición para que la pared pudiera respirar y no estuviera tan llena. Los marcos en negro, dorados y con marquetería tampoco ayudan a quitarle años al salón. Así puedes decorar con cuadros y acertar. 

Dormitorio con cabecero de roble con mesitas de noche integradas

Dormitorio con cabecero de roble con mesitas de noche, diseño de Sacum.

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Un cabecero con repisa

Los cabeceros a medida que van de pared a pared son un buen recurso de almacenaje. Aprovecha la parte superior como repisa para colocar cuadros, libros o jarrones. Es lo que ha hecho en este cabecero de roble la interiorista Marta Tobella.

Además, ha creado una hornacina que sirve de mesilla de noche. Los apliques integrados evitan tener que poner lámparas de sobremesa liberando espacio.

Dormitorio con cómoda blanca y cuadro en la pared frente a la cama.

Dormitorio con cómoda realizada a medida. Cuadro y cortinas, en Sandra Vergara. Plantas, de Goya Floristas.

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Una cómoda a los pies de la cama

Si lo de poner la cómoda como mesilla de noche no te convence porque necesitas más espacio de almacenaje, pon un modelo a medida, a los pies de la cama o en un lateral.

Este modelo en blanco, elegido por Sandra Vergara Studio, cuenta con 6 amplios cajones. De diseño minimalista, se presenta sin tiradores Su apertura push lo hace más cómodo y actual. 

Mueble de televisor bajo en madera.

Salón con mesa de centro de &Tradition, cojines de Filocolore, cuadros en Sandra Vergara, aparador de Treku en Marina Diseño, lámpara Cesta en Avanluce, alfombra de Papiol y plantas de Goya Floristas.

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Mucho orden, poco a la vista

Susana no quiere ni oír hablar de desorden en el salón: "Tengo una mesa de centro con cajones para guardar en ellos lo que uso, pero no quiero dejar por medio: el punto, las lanas del amigurimi, los sudokus, los juegos de mesa…" Y añade que "en el mueble de la tele pongo mandos y accesorios de las videoconsolas, así no se ven (son muy antiestéticos) y el salón se limpia más fácil".

Dormitorio con decoración slow con cabecero de obra, todo pintado en color neutro.

Dormitorio con cuadro de Inés Arnedo, mesitas de Cado, lámpara de techo de Let’s Pause y cesto de Sacum.

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¿Qué colores se usan para decorar un dormitorio slow?

No hay colores prohibidos para pintar o decorar el dormitorio, pero sí algunos que aseguran que la atmósfera será la adecuada para calmar y sosegar. Lo colores neutros funcionan porque son relajantes. Son una base idónea para crear la decoración que prefieras. Además, potencian la luminosidad. No hablamos tanto de blanco puro sino de una gama más neutra, afín a las tonalidades tierra más claras. Sobre ella, ¿por qué no incorporar otros colores que te hagan sentir bien, aunque sean oscuros, en menor cantidad?

Salón con mueble detrás del sofá.

Hacia el salón, detrás del sofá, mueble a medida. Lámpara de sobremesa, en Andrea House. En la zona de estar, cuadro y butaca, en Sacum. Flores, de Colvin.

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Un salón a medida lleno de detalles ingeniosos

"Hicimos una reforma total para hacerlo más práctico. De hecho, el piso antes solo tenía una planta. Lo convertimos en dúplex aprovechando el trastero y la terraza que había arriba", explica Ricard. Así ganaron un salón y comedor al aire libre. "Abajo es donde se encuentra toda la zona de día y noche. Eliminamos el recibidor, que era diminuto, de manera que la entrada queda abierta al salón comedor. El sofá divide las estancias y el mueble en la trasera sirve para dejar las llaves al llegar y para dar servicio al comedor", añade. 

Salón con sofa en L, butaca, cuadros en la pared y puff.

Salón con sofá, puff y mesas de centro, diseño de Clara Valls. Butaca, de Cado Interiors. Lámparas, en Gonu. Alfombra, de Papiol.

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El salón tiene muchos guiños decorativos que lo hacen especial

El sofá va a juego con los pufs en un cálido color crudo que resta frialdad a los cerramientos negros. Justo detrás, la interiorista diseñó un arrimadero. "En esa pared quise hacer algo especial, por eso la decoré con un papel pintado que le da protagonismo y profundidad. Se me ocurrió este collage de espejos, marcos dorados y algún cuadro, todos de tamaños diferentes, en una mezcla de negro y dorado", continúa Clara. 

Zona de estar con sofá en L, muro de cristal y cuadros en la pared.

Zona de estar con sofá y mesas de centro a medida. Cojines, de Filocolore y Sacum. Plaid de Filocolore. Papel pintado, de Flamant. Cuadros, de Maite Bayó.

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Varias paredes de cristal separan las diferentes estancias de la zona de día

"Creamos una gran zona de día con el salón, el comedor y la cocina. Todos reciben el calor de la chimenea, situada en medio del espacio abierto y con tres caras acristaladas. Uno de sus laterales nos sirvió para colgar el televisor, que se puede ver desde el sofá rinconera", nos explica Clara.

Pared del cabecero decorada con cuadros.

Cabecero diseño de Calamita. Mesita modelo Mario, de Crisal. Banco de madera antiguo. Cuadros, en Mandrágora. Lámpara de sobremesa y jarrón, de Pantay. Edredón y cojines, de Maison de Vacances. Colcha, de Zara Home. Papel pintado de Pierre Frey. Alfombra, de Salgueiro.

El Mueble / Fernando Bedón

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Una combinación de éxito

En el dormitorio continúan las telas en tonos tierra, las fibras en las pantallas de las lámparas y los muebles de madera, al igual que en el resto de la casa, pero con un resultado más sereno.

Salón pequeño con la pared del sofá pintada en un tono más oscuro que el resto.

Sofa´ de Anmoder y butaca de Casa y Campo. Mesas de centro de Cae de Cajo´n y puff de terciopelo de Mestizo.

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Engaña al ojo

Un truco para crear ilusión de profundidad y amplitud es pintar una de las paredes dos o tres tono más subidos que el resto. Eso sí, es importante que tengas en cuenta la orientación de la estancia y si es muy luminosa o no. En un salón con poca luz natural, utilizar un tono más oscuro te ayudará a crear un ambiente acogedor y cálido, pero si no está muy bien iluminado puede tener el efecto contrario. Asegúrate también de que los colores elegidos se complementan entre sí y con el resto de la decoración. 

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Salón con sofá, de IKEA. Mesa de centro, de La Maison. Cuadro, de Cado. Cojines, de Catalina House.

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Una mezcla que no llena

Un sofá azul, una butaca negra, unas mesas de fibra... ¿El truco? En los complementos: dorado en lámparas y cuadro, para reflejar la luz que recibe (y amplía), y las plantas, que se traducen en el cerebro como "exterior" y este como "espacio". Las fibras naturales también son aliadas de los espacios pequeños: ¡son tan frescas como ligeras a la vista! 

Recibidor vintage de madera con composición de cuadros 00409357

Recibidor con consola de madera antigua y composición de fotos con marcos de madera.

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El recibidor siempre debe tener un toque personal

Como en este recibidor, donde una composición de fotografías familiares con marcos de madera decoran la pared de la consola. ¿El truco de nuestras estilistas para que una composición de cuadros quede bien? Elegir piezas proporcionales al espacio, buscar un elemento que tengan en común, como aquí los marcos de madera, y probar la ubicación de cada obra primero en el suelo. Haz fotos de las distintas composiciones que pruebes. Te ayudarán a elegir la que te gusta más. 

Pared de la bañera decorada con un cuadro

Pavimento y baldosas de las paredes, del estudio Martínez Elorza. Armario bajolavabo, de Kyrya. Cuadro, de Lu Ink. Bañera, de Roca. Grifería, de Noken. Alfombra, en Carolina Blue. Toalla, en La Maison. Proyecto de las decoradoras Elisa Martínez y Odone Elorza.

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Atrévete con la idea de incluir obras de arte

¿Por qué no decorar la pared del baño con cuadros? Más allá de las temáticas relacionadas con el aseo, son muchos los motivos que encajan con decoraciones de estilo moderno: desde una gran obra abstracta hasta imágnes relajantes del mar, la playa o el mundo marino. También las composiciones de fotografías en blanco y negro. Lo importante es que la enmarcación esté en sintonía con los acabados del baño. 

Salón con sofá con chaiselongue beige, puff y cuadro en la pared.

Sofá, de Maisons du Monde. Puff, de Pomax.

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Una ilustración que derrocha feminidad

Si no sabes cómo decorar la pared del sofá, toma buena nota de este salón, porque el cuadro se lleva todas las miradas. ¡No necesitas más complementos para triunfar!

Salón de primavera con sofá modular blanco, paredes en verde menta y cuadro y textiles en turquesa.

Sofá, de Ikea. Cojines, plaids, cuadro, cómoda y butaca, de Sacum. Alfombra de yute, de Merc & Cía.

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Tonos pastel también en las paredes

Otro de los colores característicos de los salones de primavera son los pasteles: rosas, azules y verdes empolvados son únicos para cambiar el look al estar. Este de la imagen es buena prueba de ello. Se han elegido un verde menta muy suave en las paredes y el turquesa en textiles, lisos o estampados a rayas, para refrescar el ambiente. Ambas tonalidades repiten la gama cromática del cuadro. ¡La serenidad que refleja es total!

Salón de primavera con sofás en blanco, butaca gris y cuadro con pinceladas azules.

Sofá, de Joquer, en La Oca Selezione. Mesa de centro, de Taller de las Indias.

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El azul atrae al buen tiempo

Y si el color verde es un talismán para los salones de primavera, el azul no se queda atrás. En este de la imagen, diseñado por la interiorista Estela López, de Deco & Living respira ¡tanta frescura! ¿El truco? Los detalles en azul de textiles, marcos de fotos, el pie de la lámpara, libros y el fabuloso cuadro de María Miralles.

Salón con sofas enfrentados de color beige y mueble bajo en blanco con almacenaje.

Sofá y butacas, diseño de Coton et Bois. Mesa de centro, de Simla. Alfombra, de Mimbre & Co, en Coton et Bois.

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En calma

¿Quieres colores más relajados para tu salón de primavera? Uno infalible es el verde por su carácter atemporal, fresco y próximo a la Naturaleza. La interiorista Asun Antó ha renovado este de la imagen con blancos, linos, maderas y distintas tonalidades de verde que invitan al sosiego.

Salón con sofá beige, textiles coral y cuadros de pájaros en balnco y negro.

Sofá, de Luzio. Mesa de centro, de Vical. Butaca y cuadros, de Sacum. Alfombra, de Papiol.

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Suave coral para un salón sereno

En esta ocasión, Rocío Vega, de The New Home Concept, se ha decantado por un tono coral en contraste con el negro de los cuadros y la mesa auxiliar. Lo ha utilizado en la tapicería de la butaca, los cojines, el plaid y la alfombra logrando una buena armonía con el beige del sofá, la madera clara y los pufs de fibra.

Pared del sofá decorada con una composición de fotografías en blanco y negro.

Sofá y marcos, de IKEA. Mesas, de Brucs. Lámpara, de Lux Cambra. Cojines color teja y con rayas teja, de Matèria, y a cuadros, de Sacum.

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Tus mejores momentos, parte de la decoración

Revisa tus fotografías, recupera tus mejores tomas o esos momentos inolvidables e imprímelas en el mismo formato. Si te gustan las composiciones equilibradas, enmarca las fotos con molduras idénticas y a la hora de colgarlas en la pared, deja una distancia equidistante entre ellas. Para que el resultado final luzca armonioso, lo ideal es que la pared sea de un color neutro, las fotos en blanco y negro y los marcos del mismo color: negro, blanco o madera son buenas opciones.

Pared decorada con mapas cartográficos

Casa de la interiorista Aurora Monasterio. Lámpara de techo, diseño de la interiorista. Alfombra, de Zara Home. Cortinas, de Pierre Frey.

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Decorar con mapas

Encontrarás mapas de distintos estilos: desde diseños personalizados de lugares que tienen un significado especial para ti, hasta opciones vintage o ilustraciones vanguardistas, y todos aportarán un toque cosmopolita a cualquier rincón de tu casa. ¿Qué tal si haces una composición de mapas tanto de tus viajes como de esos  destinos que quieres conocer? Eso sí: procura que sean del mismo estilo para lograr un efecto armónico y equilibrado.

Recibidor con banco de madera y pared decorada con cuadros

Recibidor con consola de madera con composición de fotografías y elementos decorativos decorando la pared.

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Crea composiciones muy personales

Con la combinación de fotografías de distintos formatos y elementos decorativos de diferente índole se consiguen decoraciones tan personales y únicas como la que ves sobre estas líneas. ¡Ponlo en práctica! Para un resultado de diez, enmarca las fotografías con molduras que encajen con el estilo decorativo de la estancia. 

Pared decorada con una balda en la que se apoyan tres cuadros

Sofá, de Atemporal. Cojines, de Inuk, Casamance y Maison de Vacances; y mesa de centro, de Ethnicraft, en La Maison. Bandeja, de Coton Et Bois. Láminas, en Sacum.

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Decora la pared con sentido práctico

Aprovecha la pared del sofá para exponer tus láminas, ilustraciones o grabados sobre una balda, como se hizo en este salón. Lo único que debes de tener en cuenta es que entre la balda y el respaldo quede una distancia de 20-30 cm para que no os golpeéis la cabeza al sentaros.

Dormitorio con armarios y consola de madera que camufla el radiador.

Cuadro, de Carmen Figueras. Armarios, diseño de la decoradora realizados por Kubuni Reforms.

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¿Cómo medir un cubre radiador?

Debes medir el ancho (desde el comienzo de la tubería hasta el final, el alto (desde el suelo hasta el final del radiador) y el fondo (desde la pared hasta la parte más sobresaliente del radiador). También el zócalo de alto y de profundidad y, por último, medir la distancia que hay entre la pared y el comienzo del radiador. 

En este dormitorio, Marta Tobella ha utilizado una mesa de madera, a modo de consola, para tapar el radiador. Y ha colocado unas cestas de fibra delante de él para hacerlo invisible a la vista. 

 

Salón con sofá esquinero y mesa de centro.

Sofás, de Atemporal. Mesa de centro, de Pilma. Alfombra, de KP. PUF, de Sacum.

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Alegra una pared sosa con cuadros

A la hora de colocar varias láminas o cuadros, vigila que creen un efecto armónico. Fíjate aquí: están alineadas por debajo, sobre una línea invisible a 15 cm del respaldo del sofá, creando una combinación perfectamente equilibrada

Elige tonos suaves, en la gama de los cojines y los detalles. Para la pared, lo mejor es que sea blanca o de colores neutros claros: gris, arena...

Puedes encontrar las láminas, desde 15'95 €. Y los marcos, desde 21'95 €. Todo, en desenio.es. ¿Cómo colgarlos? Lo mejor es intentar no hacer agujero. Los colgadores de velcro de Command (10'99 €/ pack de 12, Leroy Merlin) soportan hasta 3'6 kg de peso y se quitan sin dejar ni rastro. Basta con pegar uno en cada esquina superior. 

Dormitoro con mueble a medida debajo de la ventana.

Cama de La Maison, papel en Arte, cuadros de Carmen Figueras, mesita de Ferro BCN, aplique de Luxcambra, y pufs y lámpara de sobremesa en Sacum.

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Arte al gusto

Mezclar estilos es posible si se hace en la dosis justa. Y a través de los cuadros, fotografías o arte se logra infundir estilo personal a un dormitorio decorado en neutros. Así que no dudéis en decorar las paredes con aquel arte que os inspira a cada uno.

Baño con mueble en madera, espejo redondo y cuadro.

Baño con mueble bajolavabo, de Codis. Apliques, de Baxter. Espejo, de Muuto, en Idees Disseny.

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Colocar una lámina en la pared más vacía

Nora Zubia, del estudio Slow & Chic, lo tiene claro: ''colocar una lámina en la pared que quede más vacía siempre ayuda a darle un toque final a la decoración de un baño pequeño''. Lo mejor es que es un truco válido para todos los baños, lo único que tienes que hacer es elegir el tipo de lámina y el marco en función del estilo general.

Pasillo blanco con cuadros y zócalos lisos y blancos.

Pared decorada con una composición de cuadros.

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¿Qué tamaño debe tener un zócalo para el pasillo?

Independientemente de la estancia en la que se pongan, el tamaño estándar de los zócalos es de unos 7-8 cm, aunque la tendencia de los últimos años es aumentar su altura, llegando a alcanzar los 14 cm. También en los zócalos de los pasillos.

Pueden ser lisos u ornamentados con pequeñas molduras, como los de esta imagen, perteneciente a un proyecto de Sylvia Preslar. Protegen la pintura y decoran el pasillo.

Salón con sofá, molduras en pared y cuadro con iluminación

Sofá y puf de Thales de Mileto. Mesas auxiliares negras con espejo de Tristán Domecq. Cojines de Indietro. Los estampados, de Mestizo Store.

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¿Necesitas una mesa de centro?

Atenta, porque puedes sumarte a otra tendencia de esta primavera 2023: los modelos con el sobre de piedra. Ya sean naturales o sinterizadas, las piedras ya no se limitan a revestir suelos y paredes, sino que también dan forma a todo tipo de piezas de gran personalidad y belleza. ¡Cada vez más!

Salón con tres sofás blancos alrededor de una mesa de centro de madera

Proyecto de Rubén de Matea. Sofás, mesa de centro, butaca, alfombra y cuadro hecho a medida por Decolab.

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Los tonos pastel

Son luminosos, frescos, versátiles, ayudan a agrandar visualmente los espacios pequeños… ¡y esta primavera son tendencia! Quítate esa idea de la cabeza de que los colores pastel son ñoños o cursis y llévalos al salón o a tu dormitorio. Verás cómo ganan en elegancia.

Pasillo luminoso con molduras y cuadro.

Alfombra, de Basarabian. Cuadro, de Galería Lausín & Blasco.

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Coloca alfombras en tonos neutros

Fíjate en el suelo de esta zona de paso con paredes y molduras blancas. Como era oscuro, pero los dueños no querían cambiarlo, Sylvia Preslar optó por cubrirlo con una alfombra de pasillo en tonos suaves. Gracias a este truco, ha ganado en luz y amplitud y, además, hace que el pasillo parezca mucho más acogedor.

Salón con sofá gris, estantería y estante con cuadros.

Sofá, de T&C Projects. Mesa de centro, de Sacum. Llibrería y estante, diseño de Pia Capdevila.

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Unas paredes sin vestir

Unas paredes desnudas pueden hacer que tu casa resulte mucho más fría y menos acogedora. Unos cuadros en las paredes (y esto vale para el dormitorio, el comedor y el salón, por supuesto), lo llenarán de vida. Si eliges un gran cuadro, asegúrate de colgarlo más cerca del sofá que del techo. 

Un consejo: si te gusta cambiar la decoración, coloca un estante sobre el que apoyar varios cuadros que puedas renovar cuando quieras sin necesidad de agujerear las paredes. 

Aparador vintage decapado en salón con lámpara de mesa y cuadro de palmeras.

Aparador turquesa, de Obsolete Mallorca. Óleo de palmeras, de Seawashed. Lámpara de mesa, de El Corte Inglés.

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Un aparador de madera con un toque vintage

En mercadillos, rastros y almonedas encuentras, a veces, piezas únicas por las que sientes un flechazo nada más verlas. Fue lo que le paso al Estudio Seawashed con este aparador vintage, decapado y lacado en un tono turquesa. Perfecto para colocarlo en una pared del salón y guardar en él la vajilla. Su color y su decoración evocan la proximidad del mar.

Aparador de madera en el salón con cuadros en la pared.

Aparador de olmo, de El Globo Muebles. Cuadros, de Carlos Arriaga.

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Un aparador cálido y con capacidad

¿Te imaginas cómo sería tu casa sin muebles de madera? Triste, fría, desapacible... Por eso no dudes en decorar tu salón con una, dos o tres piezas de este material capaz de transformar una casa en hogar.

Dafne Vijande ha redecorado este salón con un aparador bajo de madera que, además de bonito, permite guardar para mantener el orden y decorar su superficie. ¡Y da tanta calidez! ¿Quieres ver diferentes estilos de aparadores para el salón?

Comedor rústico en blanco con sillas de fibras.

Mesa de caoba de herencia. Sillas similares en Ornatus. Vajilla y alfombra de El Corte Inglés. Mantel de Zara Home. Alacena blanca y óleos de anticuario.

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El salón está conectado con el comedor

El salón conecta con el comedor mediante un arco. Esta estancia resulta muy especial debido a las baldosas tradicionales en el suelo. Siguiendo en la misma línea de la casa, encontramos muchas piezas clásicas y sillas de fibras naturales