Estilo rústico

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Rincón de lectura de casa rústica con banco debajo de la ventana y techos inclinados 00497716

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Un espectacular rincón de relax arropado por la madera

Este rincón es pura magia. Por el espacio, arropado por la madera de pino de Flandes, y por las maravillosas vistas nevadas del Valle de Arán.  La propietaria de este refugio de montaña no lo dudó y aprovechó ese privilegiado ventanal con un banco que, equipado con mullidos cojines, ofrece un rincón de relax único. 

Recibidor rústico de casa de montaña 00521591

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Un recibidor muy personal de sabor alpino

¡Qué personal! Y cuánto encanto. Y el secreto es la decoradora Jeanette Trensig, que supo transformar ese recibidor rústico de casa de montaña oscuro y sin personalidad en esta entrada abrigada, acogedora y con personalidad. Para ello, la decoradora se alió con piezas especiales, como ese espejo o el banco con detalles de astas, y revistió la pared con un papel de pelo de potro, muy cálido y acogedor. 

Espejo y banco de Cado. Papel pintado con textura de piel, de Élitis. Perchero de Luzio.
Dormitorio rústico con chimenea 00519948

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Un dormitorio rústico con piezas escogidas

Este dormitorio es una invitación al descanso. Y su decoración, muy cuidada, es parte del acierto. Al carácter rústico del espacio, con esa preciosa pared de piedra a pie de cama, se suma su elección de piezas, hecha por el decorador Pablo González con mucho mimo. Desde el armario, cuyas puertas son recuperadas, hasta la chimenea de mármol, que es puramente decorativa pero que da mucho encanto a este dormitorio rústico

Espejo de India & Pacific. 
 Isla de cocina con campana extractora y almacenamiento 00519945

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Una cocina rústica con piezas recuperadas

Esta cocina es nueva, pero respeta la esencia de las cocinas rústicas tradicionales. De hecho, el decorador Pablo González preservó y restauró las paredes piedra y vistió el techo de vigas de madera, que le dan esa personalidad rústica al espacio. Optó por un suelo de mosaico antiguo comprado en un rastrillo y la alacena se cerró con una puerta de armario recuperada. 

Muebles de Ikea.
Cocina de casa de campo blanca con gran office 00513400

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Una cocina de casa de campo inspirada en las de antaño

Esta cocina está inspirada en las cocinas de las antiguas casas de campo, en las que la vida familiar discurría entre sus cuatro paredes. Por eso se ha buscado un look rústico en la selección de materiales –encimera de mármol, baldosas que recuerdan un mosaico hidráulico...– y en el mobiliario. Para el office se ha escogido una mesa recuperada y unas sillas que imitan las antiguas de enea. Una cocina moderna, pero con la esencia de las de antes. 

Mobiliario diseño de Vifecar Cocinas, lámparas de Maisons du Monde y baldosas, en Almudena Balmaseda.
baño-estilo-rustico-con-mueble-suspendido-ducha-y-papel-pintado-00499154

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Un baño rústico pequeño y con mucho encanto

Este baño es pequeño, pero el equipo de Luderna Design lo ha mimado al detalle para lograr un baño rústico con mucho encanto y personalidad sin con ello renunciar a la practicidad (¿te has fijado en lo cómoda que es la ducha con esa mampara transparente). Así, las paredes menos expuestas al agua se han revestido con un papel pintado con renos que le da un sabor alpino y los tiradores del mueble se han elegido a juego. ¿Y ese suelo en acabado decapado o el mueble? Es amor a primera vista. 

Mueble diseñado por Luderna Design con tiradores en Etsy.
Salón rústico con sofás en gris y paredes de piedra.

Sofás Louvre, butacas Midnight, pufs Pompei y mesa de centro modelo Magnus, de Maisons du Monde. Alfombra, de Muji. 

El Mueble

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Con muros de piedra

Y si las vigas de madera dan encanto, lo mismo ocurre con las paredes de piedra, como las que tiene este salón.

La interiorista Maite Prats lo reformó respetando los muros que, además de darle personalidad, son un estupendo aislante térmico. Y frente a ese estilo rústico que desprenden, el estar se amuebló con sofás de lino y una mesa moderna que lo actualizan.

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Con listones y vigas naturales en forma de trapecio

En las construcciones de montaña, es habitual ver cómo las vigas se prolongan por las paredes adoptando una forma de trapecio que envuelve la estancia. Un ejemplo de ello es este salón rústico, proyectado por Carme Caubet, que aúna listones y vigas naturales sin barnizar. Para aclarar el color de la madera puedes decaparlas con chorro de arena y eliminar el barniz. Así, ganarás más luz.

Sofá con chaise longue, de Manuel Larraga con tela de Andrew Martin. Butacas, de Crearte, con tela de Andrew Martin. Mesa de centro, de Chehoma. Lámpara de pie, en Carmen Caubet. 
00489233 Recibidor rústico con mueble de madera abierto y pared de piedra

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Recibidor rústico con un mueble recuperado

Otro rasgo del estilo rústico, junto al uso de madera, es la presencia de paredes de piedra. En este recibidor con la piedra semi a la vista, la interiorista  Jeanette Trensig ha recuperado un mueble bajo abierto con acabado envejecido para amueblarlo.  Lo completa una alfombra étnica en blanco y negro que lo ilumina.

Espejo, en Mercader de Venecia. Alfombra, en Carolina Blue. Lámparas, en Cado.
00477841 Recibidor con banco volado y perchero de madera

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Con banco de obra volado y perchero de madera

A veces la madera deja de lado su aspecto habitual y se muestra en otras tonalidades, por ejemplo, el gris. Para conseguirlo de forma natural se expone durante más de un año a la intemperie sin necesidad de utilizar ningún tinte. En este recibidor rústico se eligió este tipo de madera en sintonía con las paredes lacadas y el banco de obra. Para dinamizar este estilo tan nórdico, se dispuso en el suelo una alfombra tipo kilim multicolor que lo reaviva. Un sencillo perchero de madera y cojines de lino son su única decoración.

Colgador, de Ikea. Alfombra, de Deko Palace.
00508677 Recibidor con consola de madera y alfombra en la pared

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Recibidor rústico de madera reciclada y fibra

La fibra es la mejor compañera de la madera en el estilo rústico. También, la cerámica y el vidrio. Este recibidor ibicenco, decorado por Mireia Pla, lo demuestra. Las paredes encaladas acogen una consola de madera reciclada mientras que la alfombra sufre un inesperado cambio de lugar. En lugar de vestir el suelo, se ha fijado en la pared decorándola. El resultado es este recibidor rústico súper fresco.

Consola, de Asitrade. Bandeja y cestos, de Es Cucons. 
Recibidor rústico con armarios de madera lacados en blanco 00513573

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Recibidor rústico con armarios camuflados

Un truco para bajar visualmente los techos altos es revestir las paredes con lamas horizontales. Fue lo que hizo la interiorista Elisabet Blázquez, de Dadà Interiors, en este recibidor rústico con armarios camuflados en la pared alistonada y pintada de blanco. Además de madera, se ha utilizado cristal junto a la puerta y en la parte superior para convertir la entrada en un lugar cálido, luminoso y acogedor.

Alfombras, de Hands and Lands. 
00510581 Recibidor rústico con consola de madera

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Con una sencilla consola de madera bruta

El hueco de la escalera es otro best place para ubicar el recibidor. En este de la imagen, la interiorista Covadonga Plaza ha dispuesto —al ser la barandilla de metal— una consola de madera bruta. Hace juego con la tarima de castaño sin pulir, ambas caldean el ambiente. La sencillez de este mueble posibilita decorarlo con objetos llamativos, como esa colorida noria tan ideal.

Cesta, de Zara Home. Escalera diseño de la decoradora.
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Con una cómoda heredada y un banco de jardín

Las piezas heredadas son excelentes para amueblar el recibidor. En este de la imagen, rústico, de madera y piedra, el interiorista Pablo González ha ubicado una cómoda de herencia. Sus cajones resultan perfectos para almacenar ropa de mesa y cama y así aligerar los armarios del dormitorio. Frente a ella ha dispuesto un banco de jardín que hace más confortables las esperas. Una buena manera de mostrarnos que la mezcla de distintos tipos de maderas es posible y queda fenomenal.

Banco de hierro, de El Rastro.
Recibidor con banco y perchero de madera lacado en verde 00515317

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Una pieza única con banco descalzador

Muy similar al mueble anterior pero sin armarios es el que amuebla en solitario este recibidor rústico. Se trata de una sola pieza de madera alistonada en forma de cubo en la que se integran un estante, perchas y un cómodo banco con colchoneta y cojines para descalzarse mejor. Lacado en un verde soft, tan de tendencia y a juego con la carpintería, la interiorista Gabriela Conde ha colocado un par de apliques en la parte superior para iluminar la entrada. El suelo de microcemento se ha vestido con una alfombra de fibra redonda.

 

Recibidor rústico revestido de madera 00517196

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Revestido de madera con una mini consola

Los recibidores rústicos típicos de las casas de montaña se abrigan con madera, no solo en el mobiliario sino también en los revestimientos. Buena prueba de ello es este de tipo cottage, firmado por la interiorista Isabelle Mattera: una caja de madera amueblada con una mini consola, que parece sobresalir de la pared, decorada con velas. ¡Qué bienvenida tan cálida!

Cabaña de madera construida por Chalets Nordika. Consola, de PNP Furniture. Taburete, de Little House. Alfombra, de Carolina Blue. Lámpara de techo, de Sophie Bataglia. 
00518303 Recibidor rústico con banco de madera y espejo apoyado en la pared

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Recibidor rústico de madera con banco, espejo y velador

Este recibidor rústico de madera se caracteriza por sus curvas, que van desde la arquitectura hasta la decoración. Su techo abovedado, la puerta, el banco con dibujos redondeados y la mesita velador en la esquina son una oda a las líneas sinuosas. ¡Hasta el espejo de cuarterones cae rendido a su influjo! Los cojines florales y rosados y la cesta de fibra en el suelo imprimen un estilo romántico a la decoración.

00521591 Recibidor rústico de montaña con banco de madera tapizado y vigas en el techo

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Con un banco de madera tapizado, perchero y espejo

Este pequeño recibidor rústico de montaña necesitaba parecer más grande. Para ampliarlo visualmente la interiorista Jeanette Trensig, de Cado Interiors, lijó y barnizó el techo de vigas y la carpintería de madera con el fin de aclararlo. Cubrió las paredes de un papel pintado que imita la piel de potro en un verde caqui, muy cálido y acogedor. Y lo amuebló con piezas pequeñas y sencillas: un banco tapizado, un perchero de madera y un espejo con marco decorado con astas de ciervo.

Espejo y banco, de Cado. Papel pintado con textura de piel, de Élitis. Perchero, de Luzio. 
00526664 Recibidor con pared rastrelada de madera

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Recibidor rústico de madera blanqueada con banco y estante

Aprovechar un retranqueo para ubicar el recibidor es una excelente idea. En este de estilo rústico, la madera se ha blanqueado adoptando un tono beis suave muy cálido. La interiorista Marta Prats ha rastrelado la pared con listones de madera dispuestos en vertical para darle más altura visual. Lo ha decorado con colgadores de madera y dos tableros, uno superior para almacenamiento y otro inferior, a modo de banco. Unos cojines y unas cestas le muestran así de acogedor.

00530452 Recibidor rústico chic con cómoda de madera envejecida

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Con una cómoda decapada en blanco

Un mueble antiguo es el mejor reclamo para un recibidor rústico. En este, los arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar, dispusieron una bonita cómoda de cajones que lijaron y decaparon para dejarla con este aspecto envejecido. En contraste la decoraron con una moderna lámpara de mesa tipo hongo.

00532313 Recibidor rústico con consola de madera y paredes de piedra

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Con un mueble original en verde vintage

¡Quién le iba a decir a un antiguo mostrador de mercería que acabaría siendo la estrella de este recibidor rústico de techo abovedado y paredes de piedra! Otra prueba más de cómo renovar un mueble antiguo y darle una segunda vida. La interiorista Chari Manzano respetó su color verde, el mismo que lucen la carpintería de las ventanas al fondo y las vasijas que lo decoran. El original mueble comparte protagonismo con una  colorista alfombra de pelo.

Consola, de La Europea. Alfombra, de Rica Basagoiti.
Recibidor rústico con paredes revestidas de madera 00536089

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Recibidor rústico con un mueble de madera multiusos

Este mueble realizado con listones de pino se presenta en una sola estructura que ¡lo integra todo! Estante flotante superior para almacenar, banco descalzador, percheros y dos armarios cerrados que guardan la ropa de abrigo. La interiorista Irma Aleu lo ha pintado en un gris azulado y lo ha acompañado de alfombra y cestas de fibras naturales. ¿Su truco? Que no llega hasta el techo y deja que la luz circule libremente.

Recibidor rústico de madera con mesa de centro de madera redonda 00536805

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Recibidor rústico con una mesa redonda en el centro

Ya las impresionantes puertas recuperadas de la entrada anticipan lo que depara el interior: un recibidor rústico amueblado con un mueble antiguo lacado en blanco, salvo el sobre de madera, y una mesa maciza redonda. La interiorista Dafne Vijande la ha dispuesto en el centro lo que aporta dinamismo al espacio. El suelo de baldosa de barro cocido se ha vestido con una alfombra de fibra natural material similar al de la lámpara suspendida.

Mesa, de Becara. Aparador, de Crisal. Puertas, de La Fábrica de Hielo. Lámpara de techo, de la Casa Bella. Alfombra, de Leroy Merlin. 
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Una chimenea abierta y rústica en el centro del salón

El aspecto de esta chimenea de leña es completamente exterior pero está en medio del salón. La interiorista Carmen Caubet ha recuperado el antiguo hogar abierto y ha colocado sobre él una campana con salida de humos. Alrededor de ella ha dispuesto un taburete y un banco de piedra vista que lo mismo sirve de mesa de apoyo que de asiento.

Butacas, de Crearte con tela de Andrew Martin, en Carme Caubet. 
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Rústica con el hogar cerrado

Este hogar de leña en negro mate se ha dispuesto en el rincón para no quitar espacio. En torno a él la interiorista Clara Masllorens colocó los sofás dándole al salón un extra de calidez que se extiende hasta el comedor. Este tipo de chimenea suspendida es ideal para viviendas unifamiliares o áticos.

Sofá, de Casual Solutions. Mesas de centro, de Coco-Mat. Puf, de Calma House. Cortinas, de Filocolore. Alfombra, de Cado. 
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Chimenea moderna y minimalista con mini librerías

Otro ejemplo de chimenea minimalista es este que presenta la interiorista Carla Catalán en este salón rústico chic. El cassette cerrado de leña  está insertado en la parte inferior de este bloque blanco. Carla sacrificó las librerías por las vistas y, en su lugar, decidió crear unas pequeñas hornacinas a los lados del tubo de la chimenea que hacen las veces de estanterías. La chimenea va apoyada en un banco de obra que va de pared a pared y sirve de asientos extra.

Sofá y mesa de centro, de Alto Interiorismo. Lámpara de pie, de Marset. Alfombra, de BSB.
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Rústica, a medida, con banco y espacio para la tele

Esta impresionante chimenea de hierro diseñada por Elisabet Blázquez, de Dadà Interiors, es súper completa. Se trata de una única estructura que incluye un leñero en su parte inferior, una instalación para poner la televisión y una prolongación de tres metros de largo a modo de banco. La pared de piedra donde va ubicada resalta aún más su carácter rústico. ¡Realmente fantástica!

Alfombras Beni Ourain, de Hands and Lands. Puf kilim, de Filocolore. 
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Moderna arropada por la madera

En las casas de montaña, la madera es el material por excelencia. En este salón, la chimenea de leña, recuperada y diseñada a medida, se presenta con un look moderno. La interiorista Carmen Caubet la ha revestido de madera integrando el leñero con el fin de conservar su esencia rústica. La estructura de madera se prolonga en un lado con un banco a medida y estantes flotantes en la pared.

Butaca, de Athezza. Puf, de Peausserie Sabatier. Chimenea diseñada por Carmen Caubet. Mesa de centro, de Light & Living. Alfombra, de Nani Marquina. 
00511584 Dormitorio infantil con escritorio y zona superior de juegos

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Un dormitorio infantil para estudiar...y jugar

Decorar un dormitorio infantil es todo un reto. En este abuhardillado, la interiorista Carla Catalán ha ubicado en la parte inferior un escritorio con un sencillo tablero volado y dos sillas. En el frente empapelado en gris pueden colgar los horarios, las fechas de exámenes... Mientras, en su altillo ha creado una zona de juegos a la que se accede por una escalera ¡qué divertido! Eso sí, solo cuando se finalizan las tareas.

Mobiliario, diseño de Alto Interiorismo. Sillas, de Vitra. 
Salón rústico con sofá gris, dos mesas de centro de madera, vigas y aparador.

Salón con lámpara de sobremesa, modelo Greta, de Carpyen. Lámpara de pie, de Santa&Cole.

El Mueble

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10. La iluminación debe ser cálida y suave

Nuestro cerebro asocia los tonos amarillentos con calidez, confort y relajación. Por eso, si queremos que en nuestra casa domine una atmósfera acogedora, es importante lograr una luz de ambiente cálida o neutra que genere ambientes agradables e íntimos. Para lograrlo, juega con varios puntos de luz: lámparas de sobremesa o de pie. Cada estancia tiene su truco, igual que los tiene iluminar el salón

Dormitorio rústico con cabecero tapizado de gris, vigas de madera en el techo y ropa de cama gris y mostaza.

Dormitorio con cama con cojines de La Maison, Mikmax y Carlotta + Gee. Plaids de Maison de Vacances. Sábanas de Zara Home. Lámpara de techo de Ineslam Iluminación.

El Mueble / Pere Peris

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El dormitorio principal es cálido y mantiene la esencia de la casa

"El suelo es de roble mate, parecido a los muebles, y da unidad a la decoración, desde los tres dormitorios hasta el estudio y el salón. La casa pedía un look natural y es justo lo que le hemos dado", indica Lara. 

Dormitorio de estilo rústico con vigas de madera, cabecero tapizado de algodón gris y mesita de noche de madera.

Junto a la cama, cabecero de algodón diseño de Space Stage. Mesita de Maisons du Monde. Jarrón de House Doctor.

El Mueble / Pere Peris

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En el dormitorio se lacaron y pintaron las ventanas de blanco piedra

Una de las claves fue usar la madera mate: "al ser un refugio al lado de los Pirineos, era importante utilizar el roble, pero en su versión más clara, para no restar luminosidad", detalla la interiorista. "Por otro lado, los colores piedra son un guiño al antiguo pajar del XVIII. Suavizan y armonizan toda la decoración", añade.

Zona de trabajo con arrimadero, escritorio de madera y taburetes frente a la ventana.

En el despacho, mesa de roble diseño de Space Stage. Taburetes de Sit Down. Piel de oveja de Ikea. Libretas de Pepa Paper. Alfombra de Cotlin.

El Mueble / Pere Peris

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Un pequeño hogar que invita al relax y a la desconexión

Las ventanas que encontramos a lo largo de la casa dejan pasar el sol, aportando un plus de luminosidad a cualquier hora del día, como se puede apreciar en esta agradable y práctica zona de trabajo. Nos ha encantado: ¡volveremos!

Salón comedor rústico con puffs y sofá de lino y techo con vigas de madera.

Salón comedor con sofá confeccionado según diseño de Space Stage. Puf y cojines de lino de Dareels Design.

El Mueble / Pere Peris

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El salón, el comedor y la cocina forman un espacio abierto

En realidad, esta casa en forma de cabaña era un centenario pajar del 1700 en plena Cerdaña, que el estudio Space Stage ha transformado en la casa acogedora y envolvente que vemos ahora. "Tenía mucha piedra y podía resultar fría, por eso nos concentramos en darle calidez", nos cuenta Lara, la artífice de la reforma. 

Salón rústico con ventanas, vigas de madera y dos puffs.

Junto a la ventana, mesas de Maisons du Monde. P ufs de Dareels Design. Plaid de Zara Home. Alfombra de Cotlin. Cortinas a medida.

EL Mueble / Pere Peris

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Las ventanas van de suelo a techo y bañan de luz las estancias

Para dejar entrar la luz y evitar la sensación de oscuridad que tenía la vivienda, crearon una ventana en la cubierta, en pleno tejado, y esta es una de las claves de la reforma. ¡Entra mucha luz!

Salón comedor con sofá beige, techo de vigas de madera y chimenea.

En el comedor, mesa de roble diseñada por el estudio Space Stage. Sillas de Maisons du Monde. Bandejita de madera en La Maison. Mantel de Libeco. Jarrón de House Doctor.

El Mueble / Pere Peris

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Una casa actual y moderna con el encanto de lo rústico

Otra es la mezcla. "Nos apetecía combinar elementos de montaña rústicos con toques más minimalistas y contemporáneos, como la chimenea negra diseñada por nosotros", nos explica Lara. Para que la chimenea quedara moderna y decorativa, dejaron a la vista su tubo metálico, sin ocultar la viga maestra, y colocaron los leñeros debajo, con los troncos a modo de decoración.

Cocina abierta al salón y comedor con vigas de madera en el techo y muro de separación detrás del sofá.

Cocina de Segalia. Grifería negra de Luisina. Alfombra de lana de Cotlin. En el salón, mesa de centro de Maisons du Monde. En el comedor, mesa a medida y lámpara de HK Living.

El Mueble / Pere Peris

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La zona de día está unificada por las vigas antiguas de la casa original

Los colores están inspirados en los de las piedras de aquel pajar original y van del gris al ocre, incluso en muebles como la cocina. ¡Es ideal!

Cocina rústica con muebles de color piedra, grifería y antepecho negro y vigas de madera.

Cocina de Segalia con grifería negra de Luisina.

El Mueble / Pere Peris

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La cocina abierta al salón es el sueño de cualquier chef

La cocina es abierta al salón y queda separada visualmente gracias a una pieza con truco: la trasera de madera del sofá que esconde los radiadores y al mismo tiempo delimita ambientes.

Alacena con cestos de fibras, vajilla de porcelana y tablas de madera.

En la alacena, cestas de Zara Home y con asas de Can Garanya. Vajilla de La Esmeralda. Tablas de cortar de Zara Home. Cuchara de madera de Cor de Drac. Salero y aceiteras de Casa Viva

El Mueble / Pere Peris

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Un rincón con elementos de la cocina tradicional

En la alacena de la cocina, podemos ver como Lara ha cuidado hasta el último detalle y todos los elementos rústicos, con mucha madera y fibra, combinan entre sí. ¡La más pura esencia de esta cabaña!

Cocina rústica con muebles color piedra, vigas en el techo y ventana.

Cocina rústica con muebles color piedra, vigas en el techo y ventana.

El Mueble / Pere Peris

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La cocina tiene un mueble bajo cerca de la ventana para admirar las vistas

En la cocina el antepecho es negro, muy original, que combina con la grifería del fregadero y los tiradores. Hay una pequeña encimera baja con un par de cestas para tomar algo sentado mientras contemplas las vistas espectaculares de la Cerdaña. ¡Inigualable!

Baño rústico revestido de madera.

Mueble bajolavabo de madera tratada por Juan Laguna. Espejo, de Leroy Merlin. 

El Mueble

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Un baño cálido revestido de madera

Si te gustan esos baños tipo sauna finlandesa revestidos de madera por los cuatro costados, te encantará este de la imagen. Se ha forrado por entero con listones y en lugar de colocar un mueble de lavabo se han puesto dos mesas suspendidas a juego, con sus respectivos lavabos exentos. Recuerda que el uso de madera en zonas húmedas como el baño requiere de un tratamiento especial. Un espejo de pared a pared completa su cálida decoración.

Entrada con un gran ventenal que permite ver el árbol de navidad.

Entrada rústica con un gran ventanal.

El Mueble / Pere Peris

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Brillo en la cabaña

Nos adentramos en una casa situada en plena Cerdaña catalana de piedra y madera. Un hogar rústico muy acogedor, ideal para pasar los días de invierno. 

Comedor abierto a la cocina rústico con vigas.

Cocina con mobiliario, de Lara Vallés. Encimera, de Neolith. Sillas, de Bo Concept. Lámparas de techo, de Normann Copenhagen.

El Mueble

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Todo en uno

Y no solo van solos o en compañía de sus hijos: "otras veces nos gusta que vengan amigos. Entonces Marc se entrega a la cocina y estamos todos juntos en este acogedor salo´n-cocina-office con chimenea que hemos creado", cuenta Lara Vallés. Ese, precisamente, es el acierto de esta cabaña: por un lado, tiene un espacio abierto y social, donde la cocina abierta es protagonista; y por otro, han separado la zona privada. 

De papel 397963

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Un papel pintado de cuadros tipo patchwork

Vista de lejos, parece que la pared del cabecero de este dormitorio abuhardillado se ha revestido con una tela. ¡Nada más lejos! Se trata de un peculiar papel pintado con estampado de cuadros que le va como anillo al dedo a esta deco tipo cabaña. Sus rayas, a modo de pespuntes, hacen dividir visualmente cada cuadro en una especie de manta patchwork. Lo han elegido las interioristas Laia y Marina Raguant ¡y han acertado de pleno!

Mural en la pared, a modo de cabecero. Lámpara flexo, de Marina & Co. Mesita de noche, diseño de Jorge Laucirica, de Integra.
Cocina moderna y rústica en color negro y madera.

Mesa, diseño de Marin&Co, realizado por Cool Wood. Sillas, modelo Olga, de Crearte Collections. Lámpara, modelo Aim de Flos, en Marina&Co. Taburete peludo, de Natures Collection. 

El Mueble

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Cambia las lámparas de techo

Con una composición de tres lámparas con pantallas de color negro en la zona de comedor, además de conseguir una iluminación óptima que se proyecte sobre la mesa, lograrás sumar estilo y modernidad. Esta idea también es perfecta para cocinas que cuenten con isla o península.

Un recibidor rustico con banco vintage y espejo con marco de madera.

Un recibidor amplio con techo abuhardillado.

El Mueble

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Con un banco recuperado

Un recibidor rústico siempre gana cuando se coloca un banco de madera en él, ¡y más si está recuperado! Para hacerlo más cómodo, se han colocado dos cojines de asiento y otros tantos a modo de respaldo. El conjunto se completa con un espejo con marco también de madera y unos apliques hechos a partir de unas tejas viejas. 

Un recibidor rústico con mesa de madera redonda y lámpara de fibras.

Mesa, de Becara. Aparador, de Crisal. Puerta, de La Fábrica de hierro. Lámpara de techo, de La Casa Bella. Alfombra, de Leroy Merlin.

El Mueble

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Un recibidor rústico como salido de una película

Grande, espacioso, sencillo y de lo más rústico. Este recibidor nos tiene enamoradas debido a la enorme lámpara de techo, licencia que se ha permitido la decoradora Dafne Vijande gracias a los altísimos techos. Después, un aparador blanco con aires vintage junto a la pared y una mesa redonda completan la bienvenida.

Un recibidor rústico con mesa redonda y espejo con efecto envejecido.

Mesa, de pino reciclado, en Vical. Lámpara de pie, en Teca de Java. Alfombra, en Dareels. Espejo envejecido, en Taller de las Indias.

El Mueble

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Un recibidor rústico con un toque vintage

Probablemente, sean las puertas de entrada, de un suave color aguamarina, pero también los suelos de toba y los techos en bovedilla, lo que ayudan a este recibidor rústico a destacar sobre otros. Su mesa redonda, de líneas clásicas, así como el espejo, con efecto envejecido, simplemente, parece que llevan ahí toda la vida y aportan un toque vintage. ¡Vaya bienvenida!

Un recibidor rústico con paredes y techos de piedra.

Consola, de La Europea. Alfombra, de Rica Basagotti.

El Mueble

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Rodeado por la piedra

Todo en este recibidor rodeado por piedra dice 'pasa, pasa' y es que está completamente abierto hacia el salón. Para suavizar el efecto de la piedra y dar un poco de color, se ha colocado una consola de color verde, así como una alfombra con colores deslavados, que ilumina y alegra este recibidor rústico.

Recibidor rústico con banco y perchero.

Banqueta y perchero, de Marina&Co.

El Mueble

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Un recibidor pequeño, ¡pero tan rústico!

Poco más que un perchero de pared y un pequeño banco de madera son los muebles de este mini recibidor en el que el estilo rústico encuentra su paradigma. Para darle aún más calidez, las paredes se han pintado de un gris suave, que encuentra la calidez en la alfombra de fibras.