Librerías

Abrir el salón hacia un recibidor espacioso, una zona de paso o una escalera hará que se amplíe. Los límites se pueden crear con la distribución y con muebles, pero disfrutar de la continuidad que no favorecen los tabiques convencionales.

Inspírate con estilo

3 salones en 3 estilos con grandes ideas: clásico, moderno y nórdico (con vídeo)

¿Estás cansada de colores claros en las paredes del salón y quieres darle un nuevo look? ¡Atrévete a pintar una pared de un color diferente! Eso sí, en el resto del mobiliario deberá predominar la neutralidad. Verás cómo lograrás un espacio súper personal. Y puedes integrar un mueble más voluminoso, pintándolo en color, como en este salón.

Ya sea un espacio de trabajo que tiene que estar en el salón, una zona de lectura o el comedor. Es posible que tu salón comparta espacio con el comedor, pero ¿cómo puedes dar a cada uno un ambiente diferente? Puedes jugar con un zócalo o con el papel pintado, también con molduras, dejar que los cuadros enmarquen un rincón o hacer que el sofá y un mueble adosado a su trasera delimiten. A pesar de marcar diferencias, puedes integrar salón y comedor, por ejemplo, dándole homogeneidad y armonía al conjunto con los mismos acabados, colores y estilo.

Unos estantes en la pared o una estantería abierta, tú decides qué poner según el número de piezas que quieras colocar. Ya sean libros o vajillas, el orden debe ser prioritario. En el caso de los libros, recuerda colocarlos en horizontal y vertical y entremezclarlos con objetos decorativos no muy grandes, como en la imagen. Para las vajillas, puedes apilar algunos elementos dejando otros huecos más despejados. Procura mantener la zona limpia: la acumulación de polvo es el gran inconveniente de este tipo de muebles. Pero hay muchas más ideas para decorar estanterías abiertas. 

Si tu salón es pequeño y no sabes cómo sacarle todo su jugo, fíjate en esta propuesta de Anna Vendrell que puedes trasladar al tuyo en 2023. ¿Las claves? Paredes en blanco roto, una librería abierta y simétrica ubicada tras el sofá a medida, una mesa ligera y dos pufs. ¡Suficientes para garantizar calidez y orden!

Otras ideas fabulosas para actualizar tu casa en 2023 son crear una librería de obra para aprovechar el espacio sin saturarlo y unos muebles bajo la ventana, que sirvan de mirador y de almacenamiento extra. Ambas sugerencias las han llevado a cabo las interioristas Loreto Prieto y Elena Llorente en este salón.

Desde que el teletrabajo entró en nuestras vidas, muchos son los interioristas que se han ocupado y preocupado de actualizar nuestras casas añadiendo un escritorio en el salón o el dormitorio.

Marta Tobella lo logró así de fácil, incorporar una balda a la altura adecuada a una librería ligera del salón. Con solo poner una silla, ya tendrás una zona de trabajo, y si la quitas nadie sospechará que la hay.

La decoradora Laura Ehlis pensó en un diseño moderno para una librería en la escalera que tuviera en cuenta el contenido. Los huecos asimétricos permiten que quepan desde libros de bolsillo hasta grandes volúmenes. "Lacamos la estructura de DM igual que las paredes y para los travesaños optamos por la misma madera de roble de la escalera. Así se integra mejor en el espacio". Vale unos 936 €.

Esta casa, que apareció en nuestro número de abril, tenía una base clásica muy señorial pero necesitaba una actualización integral. El reto corrió a cargo de las arquitectas Odone Elorza y Elisa Martínez, que apostaron por un estilo clásico renovado. Prueba de ello es la preciosa librería del salón, una pieza original de la casa que se conservó pero para actualizarla se pintó en este estiloso verde. Muebles modernos y de diseño se entremezclan armoniosamente con detalles más clásicos en toda la casa. 

Esta idea para aprovechar al máximo un piso pequeño nos la regaló la interiorista Mercedes Pérez en el número de abril. Algo que plasmó en la librería a medida de este salón con alma de despacho. ¿Cómo? Dejando la última balda, a modo de escritorio, y colocando una silla de quita y pon.

Por si fuera poco Mercedes nos dejó otras perlas: "También puedes instalar una zona de trabajo detrás del sofá, pintar la librería del mismo color que las paredes para camuflarla y jugar con huecos simétricos para conseguir equilibrio".

Este mueble es la pieza destacada del despacho de los arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar. Combina una zona de baldas con un cajones y grandes huecos perfectos para tener en orden documentos, muestras y catálogos de trabajo... La hilera de cajones es un gran aliado para guardar lo más pequeño y contribuir al orden. 

De la reforma se ocupó la interiorista Meritxell Ribé y de la decoración se ocupó la propia Araceli.  "¡Soy una enamorada de la revista El Mueble y me ayudó muchísimo! Si me preguntáis qué buscaba, tenía claro que quería espacios abiertos con mucha luz. Quería mantener elementos arquitectónicos diseñados por mi abuelo, como el salón con chimenea y las estanterías, que eran de madera de caoba, aunque, eso sí, las pintamos de blanco para actualizarlas", bromea Araceli. "Mi abuelo me mataría si las viera".  

¿Cuántos adornos de todo tipo acumulas en las baldas de la librería del salón? Haz limpieza. Tira lo que no necesites, incluidos los detalles que dejaron de tener valor sentimental, y busca inspiración en nuestra web para crear bonitas (y ligeras) composición de libros, jarrones, cajas, esculturas o cuadros. 

En el salón se colocó una librería a medida en un retranqueo de la pared. Se aprovechó la parte inferior para unos armarios con puertas, que favorecen la sensación de orden, mientras que la parte superior cuenta con baldas abiertas que ayudan a decorar. 

Eso es posible porque el banco de madera tiene una profundidad que supera los 40 cm y el estor de tejido traslúcido resulta cómodo de manejar, a la vez que permite una buena entrada de luz. Las librerías a medida llegan hasta el techo y tienen seis baldas macizas cada una, capaces de soportar un gran peso además de generar una visión de conjunto simétrica y moderna.

De ahí la baja estatura de esta librería con una estética moderna. Tras pensar múltiples opciones, el estudio de Pia Capdevila optó por este diseño personalizado y hecho de DM por fuera y madera por dentro. La librería mide 300 x 50 x 30 cm, tiene forma de 'L' y le permite aprovechar la esquina de la habitación.

El papel pintado a cuadros, de inspiración british, es otro de los elementos que da a este salón un descarado look contemporáneo. Además de decorar, viste la pared y le da un confortable aspecto entelado que, en una casa de montaña, se agradece por la sensación de extra abrigo que aporta. 

Evita comprar por impulso los muebles del salón. Pueden resultar demasiado grandes o que no quede bien en el espacio del que dispones. Natalia Zubizarreta te recomienda: "Ve de grande a pequeño y no te precipites comprando. Lo primero: mide y planifica. Con un planito es más fácil evitar errores y ahora hay varias aplicaciones sencillas para el móvil o el ordenador que te ayudan a ello. ¿Lo más complicado? Ubicar el mueble para la TV y el sofá. Te recomiendo un mueble bajo y ligero si hay poco espacio o una estantería a medida que además sirva de librería".

La decoradora aprovechó el espacio a pie de cama para habilitar el vestidor, así disfruta de intimidad y de metros. Se ha organizado con armarios con puertas correderas, así liberan espacio. En blanco y con grandes cuarterones contrastan con el beige de las paredes y son decorativos. 

Este dormitorio es amplio y, a su vez, muy acogedor. La clave es aprovechar el espacio con buenas soluciones que, además de "llenar" los metros, suman funciones y hacen más práctico y confortable el dormitorio. Así, la decoradora Asun Antó aprovechó los metros para ganar un rincón de lectura. Completó la butaca con una completa librería baja que recorre todo el ventanal.

La decoradora Marta Tobella aprovechó la pared de este salón pequeño con una librería con truco que incluye escritorio. Y en solo 40 cm de fondo, lo mínimo para poder trabajar cómodamente con un portátil. El mueble es de hierro y madera y en blanco, se funde con las paredes y resulta más ligero visual- mente. Los módulos tienen distinto tamaño y, a modo de damero, dan dinamismo y ligereza al conjunto. Y, además de su función de librería, hace de barandilla de la escalera. 

¿Te gustaría tener tus libros y tus objetos más personales a la vista en tu dormitorio? Entonces, te encantará esta idea. La interiorista Aurora Monasterio ha diseñado una librería de obra, a medida y pintada de blanco, que enmarca el cabecero. Sobre él, ha colocado un espejo vintage con acabado envejecido que duplica la luz y el espacio.

Lo más habitual es reservar una de las paredes del salón (normalmente, la más larga) para colocar una gran librería. Pero también hay casos en los que se utiliza como elemento separador de ambientes o, incluso, para completar y optimizar un vano abierto. Fue lo que hizo en este salón Miquel Gomila, del estudio Aquitania. El interiorista diseñó una estantería de madera súper moderna y funcional, sustentada por dos columnas. 

Oto tipo de librerías que no fallan en un salón moderno son los diseños de líneas depuradas, que, al ser muy ligeros, contribuyen a crear ambientes minimalistas y desahogados. Y si además, cumple más de una función, mucho mejor. Para este salón, la interiorista Marta Tobella diseñó una librería a medida, realizada en hierro y lacada en blanco, que integra una zona de trabajo, ya que una de las baldas hace de escritorio.

Mezclar piezas de estilos y materiales diferentes también es tendencia. Así que, una librería de carácter industrial, con estructura metálica y baldas de madera, puede funcionar perfectamente en una decoración moderna. Una muestra es este salón, en el que la librería contrasta con detalles clásicos como la chimenea de mármol y con el look moderno que proporciona el color verde de las paredes.

Cuando la escasez de metros es un problema, lo mejor es optar por una librería empotrada que no entorpezca el paso. Los estantes con formas simétricas y un color que contraste con la decoración darán el punto moderno. 

Para este salón, el equipo de Coton et Bois diseñó dos librerías empotradas simétricas a cada lado de la chimenea. El punto moderno se consiguió, no solo con el diseño lineal y las puertas lisas en la parte inferior, sino también con el acabado en tono neutro. 

Si buscas una librería moderna, pero tampoco tanto, apuesta por un diseño de líneas rectas, que combine una estructura de hierro negro con baldas de madera. Eso fue lo que hizo en el equipo de Egue y Seta en este salón.