Habitaciones infantiles

Confeccionado con tela y rematado con un listón de madera, este arrimadero no solo decora la pared y da un extra de calidez a la habitación de los niños, sino que la protege de golpes y roces. 

Esta cama está rodeada de almacenaje y es ideal para darle orden a todo lo que tus hijos necesitan. El dormitorio tiene un escritorio y baldas que se integran al cabecero. Mobiliario a medida y silla, de Thinking Home. Lámpara flexo, de Sacum. Papel pintado, de Saint Honoré. Espacio, de Cristina Pérez.

Mira cómo el escritorio se prolonga hasta el cabecero de la cama, sacándole todo el partido a cada centímetro del dormitorio. Y por debajo de la ventana consigue aprovechar al máximo la luz que entra. ¿Quieres más inspiración de literas para dos? Mira, mira.

Ya sabes lo que dice el Feng Shui de los cabeceros robustos de madera, que nos dan seguridad y estabilidad. Eso mismo tendrás gracias a esta solución a medida que te permite proteger tu cabeza al tiempo que decoras con cuadros, sin necesidad de hacer agujeros en la pared.

Cecilia sigue contándonos: "Busqué tonos claros que dan mucha luz y amplitud y son fáciles de combinar". Las camas con cabecero integrado son de DM lacado blanco y el papel, de Acevedo Muebles, también en beige. Las rayas verticales dan la sensación de techos más altos. 

El cabecero es ancho, de esta forma se puede utilizar a modo de mesita de noche y a la vez, como cajonera. Y su profundidad hace que los cajones sean muy útiles para guardar desde ropa hasta juguetes. ¡Bien pensado! Todo está comprado en Acevedo Muebles. 

La decoradora Gisela Grande ha utilizado la pared más larga de la habitación para colocar dos camas seguidas solo separadas por una columna con estanterías. Un arrimadero protege la pared y a la vez, crea un rincón más abrigado y acogedor para dormir. Alfombra, en Lorena Canals.

Las estanterías altas y los cajones en las partes bajas de la cama, permiten que los niños puedan acceder fácilmente a sus cosas. La columna, a la vez, actúa de separador dando más intimidad a cada una de las dos camas. Guirnalda, en In By Be. 

La librería de madera empotrada es perfecta cuando de ahorrar espacio hablamos y lo más original de este dormitorio es que, en lugar de cabecero, tiene un arrimadero con repisa que le sirve para dejar lo básico y, a la vez, para proteger la pared de roces.

Este dormitorio era todo un reto: un techo abuhardillado y 8 m2 para dos. La interiorista Cecilia Crego hizo magia con un mueble a medida. "Querían dos camas, pero el techo no permitía poner literas, por eso aprovechamos la planta con dos camas nido en 'L'". Muebles, realizados por Vigo Garrote.

En este otro plano del dormitorio anterior puedes contemplar lo que encontramos en la pared contraria: un escritorio en "L" hecho a medida, realizado por Grup Escrivá Interios. Observa cómo el cabecero continúa en forma de arrimadero al llegar a la zona de trabajo.

Aquí se duerme en literas y se estudia cada cual por su lado para evitar distracciones. El decorador Pepe Llaudet creó este dormitorio con escritorios en forma de "L" y repisas para los libros en las partes altas. Mobiliario realizado por Decoraciones Muñoz. Lámparas, en Cottage Little House. 

La decoradora Júlia Casals es la artífice de este espacio al que no le falta ni le sobra nada. Cajones bajo un banco a medida y una zona de trabajo ideal para aprovechar las horas de estudio al máximo y ocultar el radiador. Mobiliario inspiración de la diseñadora y fabricado por Cardi Interiors. Sillas, de Kartell. 

En esta casa necesitaban zonas que permitieran a los niños tener a mano sus pertenencias favoritas y que les facilitaran el orden. Con estas literas en "L" la cosa resultó muy fácil. Pero nunca está de más leer algunas ideas de almacenaje para el dormitorio de los niños. Papel pintado, de Dijous.

Colocar de este modo las camas nos permiten usar la parte baja para almacenaje y liberar el resto del dormitorio. Las literas están hechas a medida según diseño de Cristina Pérez. La silla es de Sacum. Las lámparas, de El Corte Inglés. La alfombra, de Gra y la cesta, de Filocolore. 

Un cabecero en el que la trasera se transforme en librería es todo un acierto. Esta sencilla cama tiene otro secreto en los pies, donde han creado un pequeño mueble que mantiene oculto el radiador y permite tener cerca lo necesario. Pero eso no es todo, mira hacia arriba y contempla la balda mejor aprovechada del mundo.

Este espejo se inspira en el icónico modelo Adnet, diseñado en los años 50 por el arquitecto francés Jacques Adnet para la firma Hermès. La cuerda que sirve para colgarlo le da un look muy natural que encaja a la perfección en este dormitorio infantil con sabor a campo. 

Si decoramos las paredes, ya sea con pintura, papel pintado o con un arrimadero, ¿por qué olvidarnos del techo? Una de las tendencias de este 2019 que seguro que no dejará indiferente a nadie es precisamente darle al techo el protagonismo que se merece. Papel pintados, molduras, color... ¿Te atreves? 

 Ante la falta de metros lo mejor es creativos y con esta habitación infantil. El cabecero de doble cara (de Dijous) permite habilitar unos estantes para sus cosas y una balda sobre la ventana en donde guarda los juguetes de menos uso en cajas etiquetadas.

La decoradora Anna Taberner ha aprovechado el espacio bajo las ventanas con dos módulos dobles que además de servir para guardar los juguetes de los niños, hacen de banco para sentarse a leer. Cama y módulos de almacenaje, diseño de Anna Taberner. Mesa y sillas, de Ikea.

Este tipo de camas se adapta perfectamente a la evolución de los niños. En un principio hacen de juguetero y después de cofre de secretos.

 Una cama elevada y debajo, un espacio para todos los libros, será el atractivo principal de cualquier niño. Mobiliario a medida diseño de la decoradora, Laura Ehlis. Papel pintado, de Dijous.

Es una regla de oro para dormitorios pequeños. Si estos muebles tienen, además, espacios abiertos para poder ordenar (con gracia) se verán mucho más airosos y si son de poca altura, mejor, porque no "llenan" tanto visualmente. Cabecero de Ikea personalizado.

Usado en paredes y muebles, el blanco (o los tonos neutros) amplía visualmente y potencia la luminosidad de la habitación. Después, pon color en cuadros, textiles y complementos como en esta casa de la arquitecta y autora del blog Lost in Vogue, Eli García Cruz. Litera, cojines y cajas para juguetes de Kenay Home.

Si la habitación, además de pequeña, tiene el techo inclinado, aprovecha la zona de menor altura para colocar la cama y hazlo lo más pegada al suelo posible. En la cama están estirados y no necesitan grandes alturas, sin embargo, para jugar, si que las necesitarán. Cama nido, mesa y sillas de Ikea y alfombra en Kenay Home.

Esto es un lujo porque arriba siempre hay sitio. La altura excepcional te dará amplitud y, aunque en planta no haya demasiado espacio, puedes ganar un altillo como zona de juegos, descanso o lectura. O bien crear una estructura para almacenar a lo alto.

Se adaptan al espacio y sacan el máximo partido a los metros. Tenlo en cuenta para la zona de descanso pero también para planificar el área de estudio con una mesa colocada donde reciba el máximo de luz y estanterías que le ayuden a mantenerla libre de objetos. Mobiliario lacado diseño de la interiorista Júlia Casals.

Cuando dos niños de distintas edades comparten habitación, lo mejor es colocar la cama del mayor y la cuna en paralelo o en L. Escoge muebles evolutivos hasta que los dos niños sean lo suficientemente mayores para poner literas o camas en tren. Cama y cuna de Ikea, papel pintado de Sandberg, aplique de Bloomingville.

Cualquier irregularidad de la planta de la habitación es un buen lugar para crear un espacio de almacén para juegos, muñecos y cuentos con baldas, cestas, cajas y gaveteros. Entre pilares, detrás de la puerta, en el espacio que queda entre la cama y la pared… Librería de Canexel y cajas de Ikea y Zara Home.

¡No te preocupes! Para los niños puedes optar por un módulo de fondo 40 cm y customizarlo o bien crear un espacio de almacenaje abierto para su ropa con una cajonera, baldas y un par de barras instaladas entre una pared y un pilar. Armario realizado por Canexel Construcciones.

Ayúdales a adquirir la rutina de hacer los deberes con una zona de estudio en su cuarto: una encimera abatible, una mesa integrada en una estantería o un mueble de diseño ligero como este. Estanterías de Bel and Soph, silla en Maisons du Monde, lámpara de Dawanda y cortinas en La Maison.

Una gran idea para almacenar mucho más. Instala muebles con puertas para guardar lo que más se desordena y estantes para seguir guardando decorando organizándolo todo en cajas y cestas. Las estructuras tipo puente sobre la cama son versátiles y no saturan demasiado. Estantería de Coton et Bois.

Cuando no hay espacio para colocar una mesita de noche junto a la cama, sustitúyela por una balda corrida a lo largo de la cama o una estructura que proteja la pared de los roces y ofrezca algo de almacenaje. La tapa superior servirá para apoyar el despertador y la lámpara de noche.

Es una buena opción en habitaciones pequeñas de planta alargada. Esta solución de camas en altura, desplaza una respecto a la otra, y da más sensación de amplitud y si hay una ventana cerca, no la deja "encajada" entre pared y camas, con lo que la habitación gana luz. Mobiliario a medida y silla de Bloomingville.

Son los que crecen con tu hijo. La ventaja es que una cama de este tipo deja espacio despejado en la habtiación para jugar cuando es pequeño y se adapta a su tamaño hasta la medida convencional de cama individual de 0,90x2m. Armario de Ikea con tiradores de Zara Home, cama de Nobodinoz y mesa y taburetes de Play.

¡Aprovecha el hueco que queda debajo! Las literas que no son una única pieza con dos camas nos permiten sacar más partido al espacio, ubicando un armario, un escritorio o, como en este caso, una cama y un escritorio. Es cuestión de colocarlas en modo "tetris". Y es que las literas dan mucho juego.

Por pequeña que sea la habitación, siempre hay una cama. Aprovecha el hueco que queda debajo y coloca otro colchón o cajones para guardar juguetes, ropa, material deportivo… ¡lo que se te ocurra! Cama de Ikea, taburete de Filocolore y alfombra en Sacum.

Echa un vistazo a la pared de su cama y te darás cuento lo necesarios que resultan los arrimaderos en los dormitorios infantiles. Manotazos, rozaduras, manchas indescifrables... Si tienes un arrimadero, pasas un paño y listo. 

Puedes desinfectar cualquier tipo de prenda congelándola. Igual que los peluches de los más pequeños, sobre todo si son alérgicos.

Si este año el clan familiar se reúne en tu casa, dedica una mesa de Navidad exclusiva para los niños. Hermanos, primos y primas, todos juntos en su mesa. Piensa en algún detalle decorativo único y triunfarás.

 Si Santa Claus lleva todos los juguetes en su enorme saco, ¿por qué los peques de la casa no pueden hacer lo mismo? Con la ventaja que te lo puedes llevar fácilmente allá donde vayas. Además, al tener asas, puede colgarse, como se ha hecho aquí. La bolsa Djungelskog (8 €) es una de las novedades del catálogo de Ikea 2019. 

No hablamos de cubrir toda la pared de papel pintado. No. Hablamos de crear un cabecero de solo unos milímetros de grosor. Este papel de lamas de As Creation consigue el efecto de tener un mueble que no ocupa. Genial.

Es inevitable, los niños rozan las paredes y acaban manchadas en poco tiempo. Un papel pintado no solo las protege y disimula las manchas sino que también les da más abrigo.

Si el papel que te gusta es muy intenso, utilízalo en la pared en la que esté la ventana y deja el resto, liso y de color más claro. ¿Por qué? Porque la luz rebota en las paredes frontales. De esta forma, conseguirás multiplicar la claridad y a la vez, darle un toque personal a la estancia.