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1.

Sensación de continuidad, todo en sintonía

rincon del dormitorio con suelo puertas y paredes  en blanco 00497971

Esto implica que nada desentona ni destaca en el conjunto. Suelo, puertas y paredes buscan comunicar los espacios. Esto se consigue con un conjunto en los mismos colores: aquí, todo al blanco en los tres elementos. Es la base idónea para dar luminosidad y ceder todo el protagonismo al mobiliario.

2.

Un suelo muy marcado, el punto de partida

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Cuando el suelo, bien ya existente, bien de nueva instalación, es el protagonista porque tiene un diseño muy marcado, como la baldosa hidráulica o los cerámicos geométricos, este debe ser el punto de partida. A partir de él se escoge el color de puertas y paredes. Un color neutro no saturará y dejará que las miradas sigan fijas en el suelo.

Mesa, taburetes y lámpara de techo de Ikea y silla de Superstudio.

3.

¿Suelo con varios colores? Lleva uno a la pared

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Con un suelo llamativo, también puede pasar que puertas o paredes sean de uno de los tonos presentes en el pavimento, como en este caso. Se toma una de las tonalidades y se lleva a la pared, manteniendo en color blanco la carpintería interior (puertas y marcos).

Mesa y sillas de Coton et Bois. 

4.

Y cuando la pared destaca…

Salón rústico con pared de piedra y vigas de madera_00510580

Puede ocurrir que, como en el caso del suelo, haya una pared que destaque sobre el resto por su material (piedra, madera, ladrillo visto…), bien porque ya existía o porque se decide instalar en un reforma. Entonces este elemento es el que guiará la elección del suelo y de las puertas. Puede que el material ayude a definir el estilo del ambiente y esto también guiará la elección del suelo.

Casa de Covadonga Plaza. Cesta de Zara Home.

5.

Resaltar una pared con color (ojo con las puertas)

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Las bases neutras en el suelo te permiten escoger un color con personalidad para las paredes (una o varias, depende de la luz del espacio, de la distribución y efecto que se pretenda). Los suelos de madera en tono natural, veteados grisáceos o blanqueados son cálidos y te permiten escoger algún tono más frío para la pared. En este caso, las puertas pueden ir del color del suelo, de un tono blanco o del mismo color de la pared si quieres que pasen inadvertidas.

Sofá y butacas diseño de Sube Interiorismo y realizados a medida en Tapicería Deco Lur Sofá. Mesa de centro de Ethnicraft y auxiliar en Bazar Decoración.

6.

Combinar suelo y paredes en la misma gama cromática

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Otra opción, cuando nos planteamos la elección de colores de paredes y puertas en función del suelo, es optar por una tonalidad para pintar las paredes similar a la del suelo. Es lo que se ha hecho aquí. Solo las puertas destacarían, bien por ser de un color claro u oscuro.

Cocina proyectada por Deulonder Arquitectura Domèstica para Casa Decor 2019.

7.

El color de las puertas contrasta con todo lo demás

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Esta opción es para los que buscan sorprender. Se trata de escoger puertas que contrasten con el suelo y las paredes. Generalmente en un color oscuror. De esta manera se puede mantener un tono luminoso en la pared (que ocupa más superfice y, por tanto, llena más). El suelo puede ser claro o neutro y no importa si es un suelo de madera o cerámico.

8.

Suelos de madera, tan polivalentes

Cocina con suelo madera y puertas de metal y cristal_00500924

Un suelo de madera se adapta a todo. Las maderas más claras encajan con paredes claras en busca de luz y un lienzo neutro que decorar a posteriori. Pero también permiten el uso de tonos más intensos en la pared. Las maderas oscuras se llevan mejor con paredes y puertas neutras, mejor lacadas o pintadas. Así no se repite el mismo material en suelo y puertas. Mira aquí como una puerta de forja y cristal actualiza el suelo de madera.

Cocina de Héctor Aguirre, diseñador de Kökdeco. Puerta diseñada por él. Muebles de Arpa, encimera Calacatta de Neolith, suelo de madera de roble de Surco y baldosas de Vives.

9.

Suelo de madera, paredes y puertas en neutro

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Blanco puro, blanco roto, blanco huevo… un color neutro en paredes y puertas y un suelo en madera clara tiene este efecto: neutralidad, sencillez, sosiego. Con el suelo en madera oscura el efecto es más elegante al tiempo que tradicional.

Casa de la interiorista Lucía Mariñas. Butacas de Porro en Qbika y alfombra en Kilombo.

10.

Paredes y puertas al unísino

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Otra opción para elegir color de puertas y paredes según suelo es buscar el contraste, aunque no excesivo. Para ello los tonos medios son muy adecuados por lo cálidos que resultan (arenas, tierras, verdosos medios, grises suaves…). Se trata de que puertas y paredes tengan el mismo color (se consigue lacando las puertas en el tono exacto). El suelo puede ser de madera, cerámico, barro, microcemento…

Sillas de Coton et Bois.

11.

Suelo de microcemento o cemento

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Microcemento, cemento o cerámicos efecto cemento. Un suelo de este tipo puede ser grisáceo o tomar otras tonalidades (recuerda que el microcemento se puede realizar en una amplísima variedad de colores). Con esta decisión tomada, las puertas pueden ser de madera y dar calidez a través del material o lacadas. También influirá en un efecto más rústico o industrial o uno más actual.

12.

Mármol o piedra en el suelo

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Como en el caso de los suelos de microcemento, según el estilo decorativo que se pretenda, con un suelo en mármol o piedra, las puertas pueden ir lacadas para un estilo más moderno e incluso minimalista o en madera, buscando calidez, tradición y atemporalidad. En tonalidades de mármol y piedra claras, puertas y paredes pueden subir el tono y al contrario (suelo oscuro, puertas luminosas).

Muebles de DM lacado realizados a medida por JJ Fusters, encimera de mármol blanco envejecido y taburetes de Ikea.

Suelo, pared, puertas… ¿por dónde empiezo? La elección de cada acabado suscita muchas dudas. Son elementos que forman parte del todo de la casa, envuelven los muebles y la decoración que elijas, pero también forman parte de ella.

Lo ideal es elegir el suelo antes que las puertas y estas en función del suelo. Después viene el tono de la pared para que conjunte con el resto y con la idea de estilo decorativo que tienes en la cabeza

Pero hay ocasiones en las que no siempre se puede cambiar el suelo o no se quiere. Y entonces se puede renovar la casa con un cambio de puertas o de pintura. Ya hemos visto las diferentes opciones que hay en función de suelo, pero lo más importante a la hora de escoger acabados y colores para suelo, puertas y paredes, es pensar en el conjunto, tratar de imaginar la imagen final global. Así un elemento tendrá relación con otro, nada desentonará y lograrás el tan ansiado efecto decorador.

Ya hemos visto que hay muchas posibilidades. La decoración no es una ciencia exacta sino que cada elección depende de muchos factores. Hemos tratado de darte las nociones básicas e imprescindibles para que sepas qué te apetece y entonces tomes la decisión correcta.

  • Si vas a cambiar el suelo, escoge suelo y luego puertas y, por último, color de las paredes.
  • Si vas a mantener el suelo, las puertas deberán combinar en un tono similar o contrastar con él. El color de las paredes es lo último que eliges.

Te recomendamos evitar que el suelo y las puertas sean oscuras. O que el suelo y todas las paredes también lo sean. Son las combinaciones más pesadas y que más oscurecen y recargan. Pero no te decimos que evites un suelo oscuro, solo que en ese caso lo compenses con paredes claras. Debes tener en cuenta que puedes usar el color de las paredes y el material y tono de las puertas para actualizar un espacio o darle sofisticación, tradición, etc.