Camas

¡La cantidad de horas que has pasado balanceándote en ella cuando tus hijos eran pequeños! Pero ahora que ya son mayores ¿no crees que es hora de desprenderse de la vieja mecedora? Si ya has pasado por la etapa de repintarla y aún así no te convence, ¿por qué no la donas?

Que permite crear un nuevo techo liso sin necesidad de reparar o sustituir el original. Puedes ocultar grietas y humedades (estas sí han de desaparecer para que no vuelvan a salir) de forma sencilla. En definitiva, cuando un techo se encuentra en mal estado es una manera de crear una nueva superficie lisa que se puede pintar o revestir (a veces más económica que reparar el techo existente).

Un ventilador de techo aporta bastante peso por lo que te puede entrar la duda de si es posible instalarlo en un falso techo. Y sí, es posible, pero cumpliendo con las indicaciones adecuadas según el material del falso techo. Existen en el mercado tacos basculantes de acero con un tornillo que van fijados al forjado y no al falso techo.

El dormitorio es una invitación a no salir de la cama. Totalmente revestido de madera de alerce, cuenta con un altillo y el baño en suite. Un auténtico refugio para hibernar mientras esperamos el deshielo en el exterior...

Los complementos de pelo o furry son un gran aliado para dar un look invernal a un dormitorio. No solo son muy agradables, gustosos y abrigados, sino que visualmente logran subir unos grados la temperatura del ambiente. En este dormitorio, decorado por Carmen Caubet, los encontramos en la alfombra y en el cojín decorativo de la cama. 

¿Quién dice que el color blanco no es para el invierno? Sir ir más lejos, ¡la nieve es blanca! La clave es elegir blancos con matices cálidos –que tienda a amarillo y nunca a azul– y apostar por texturas y textiles abrigados. En este dormitorio, se ha elegido una alfombra de lana de pelo largo y la cama se ha vestido generosamente con varias capas de textiles calentitos. 

Últimamente los revestimientos son los trampantojos modernos más habituales porque juegan a confundirnos. Suelos o paredes que aparentan ser mármoles o maderas aunque en realidad son porcelánicos, vinílicos o papel pintado. Un ejemplo de ello lo tenemos en la pared del cabecero de este dormitorio decorado por Pía Capdevila. Parecen listones de madera ¿verdad? En realidad es un papel pintado muy bien conseguido. ¡Pía nos la has colado!

En este dormitorio tan fresco la interiorista Blanca Tey ha decorado la pared del cabecero con una pieza tan original que confunde en una primera ojeada. Parece una tabla o un cuadro decapado, pero en realidad es una puerta recuperada de anticuario colocada en horizontal. ¿A qué da el pego?

A primera vista este dormitorio parece estar decorado con unos marcos de cuadros o unas molduras con acabado vintage. Si te fijas bien, en realidad es un papel pintado súper original con dibujos de cuarterones con el que las interioristas Isabel Flores y Nuria Almansa han revestido la pared del cabecero. Logra un efecto de profundidad gracias a ese juego de perspectiva típico del trampantojo.

Este mueble con librería, diseñado por la interiorista Natalia Zubizarreta, esconde una agradable sorpresa en su parte inferior: ¡una cama plegable! ¿No te parece maravilloso? ¡Ya puedes invitar a tu amiga del alma a dormir!

En este dormitorio blanco, la interiorista Cristina Pérez ha prolongado el cabecero de la cama nido hasta convertirlo en un tablero rematado con una cajonera en la parte inferior. En la pared ha dispuesto una estantería para colocar cuentos y peluches. Todo ello descansa sobre una pared revestida con un papel pintado estampado con arbolitos en un suave color rosa. La decoración romántica no es exclusiva de los dormitorios de adultos, empieza en nuestra más tierna infancia.

Colocar la cama detrás del escritorio evita que tus hijos caigan en la tentación de estudiar tumbados. Si no la ven, no existe. En este dormitorio juvenil, Asun Antó ha dispuesto la amplia zona de estudio bajo la ventana. Va de pared a pared y rematada con dos cajoneras. Lacada en gris, hace juego con el cabecero con hornacinas que hacen de mesilla y estantería, un todo en uno muy completo.

Además de ganar en luz natural, otra de las ventajas de disponer la zona de estudio bajo las ventanas es tener perspectiva. Asun Antó así lo ha hecho en este dormitorio que comparten dos hermanos. De vez en cuando, a los niños les vendrá bien levantar la cabeza del libro o el ordenador y mirar al frente para descansar la vista. ¡No hay nada como repetir la regla del 20-20-20! Levantar la vista cada 20 minutos durante unos 20 segundos y enfocarla en algún punto que se encuentre a unos 6 metros de distancia (20 pies).

Separar la zona de descanso de la de estudio es vital para poner distancia a la hora de realizar ambas actividades. En este dormitorio juvenil, la interiorista Marta Tobella diseñó un mueble con armarios bajos, estanterías y escritorio volado sin fondo que divide ambas áreas. Al otro lado, ubicó el vestidor junto a la ventana, metros que hacen posible que desde el escritorio haya suficiente perspectiva.

No salgas de casa sin hacer las camas. Y tampoco lo dejes para después si te quedas. Tras unos minutos de ventilación, una de las primeras tareas que hacer en la mañana es esta. Acostumbra a los pequeños de la casa a que "estiren" ellos sus sábanas y edredón. Así ya tendrás la sensación de orden en casa para todo el día.

En este caso para los peques de la casa. Deben poner en orden su cuarto tras un día de uso, estudio y juegos. Es importante que se acostumbren a hacerlo antes de acostarse. Ellos deben preparar también su mochila para el día siguiente.

''Vamos a empezar a introducir acentos de color en algunas paredes de las casas. Serán tonos especiales, apagados y elegantes, como azules verdosos o grises tirando a topo'', concluye Paula Duarte.

Los estampados geométricos se volverán mini en 2022, así lo afirma Pia Capdevila, artífice de la decoración de este dormitorio presidido por un precioso papel pintado con motivos en espiga. Una apuesta de lo más elegante.

A la hora de decorar el dormitorio solemos elegir tonos suaves que invitan al descanso. Hasta ahora el blanco con todos sus matices, el beige y el arena en paredes se han llevado la palma, pero, ¡ojo!, porque en 2022 no van a ser los únicos tonos protagonistas. Para este dormitorio Isabel Flores y Nuria Almansa han elegido un discreto tono beige para las paredes y el techo que aporta calidez y aumenta visualmente la altura.

El espíritu eco está muy presente en nuestros hogares. Más de lo que creemos. Se ha convertido en todo un lifestyle tanto a la hora de elegir materiales sostenibles como de todo aquello que nos inspire la vida al aire libre. Por eso, las plantas naturales, pequeñas o XL, se consolidan como parte del decorado de los dormitorios de 2022.  La interiorista Marta Jaúdenes ha integrado así de bien esta palmera cerca de la ventana.

En este 2022 veremos dormitorios en suite a tutiplén. Una reforma que ha estado presente en muchos proyectos de 2021 y que el próximo año todo apunta va a ser máxima tendencia. ¡Y es que integrar el baño en el dormitorio resulta muy, muy cómodo! En este de la imagen, Javier Merediz ha incorporado el baño en el dormitorio, elegido un cabecero tapizado, la ropa de cama en colores pastel y ha revestido la pared en gris. ¡Menudo vaticinio!

Otra de las tendencias que va a subir como la espuma este 2022 es el empleo de los tonos empolvados: verdes, rosas, grises o azules son únicos para transmitir paz y tranquilidad. En este dormitorio se ha utilizado un rosa empolvado en la ropa de cama, que recuerda nuestra infancia. Junto con el beige proporciona al dormitorio un aire cálido y elegante. Con detalles dorados funciona a la perfección. 

Potenciar la conexión con la naturaleza se hace mucho más palpable en los dormitorios de 2022, bien a través de un papel pintado o un gran mural que capitalice toda la atención. Un paisaje que evoque escenas vividas de alguna etapa de tu vida hará que disfrutes más de tu habitación. Las interioristas Leticia y Gracia de Amescua han optado por este mural tan exótico en la pared del cabecero que traslada a un destino oriental. Blanco, grises y negros aportan serenidad y sofisticación a la estancia.

Decorar tu dormitorio con plantas exóticas hará el descanso más placentero. Piensa que las plantas propician la relajación y el bienestar mental.

¡No parece ni el mismo! La decoradora cambió el color de las paredes por este tono natural, y aprovechó todo el espacio bajo la ventana con un mueble a medida que integra la calefacción, un zapatero y armarios con baldas. "Quise darle un toque sofisticado y rústico, a la vez, por eso combiné esas lámparas, de cristal y doradas, con un banco a pie de cama más natural". 

"El suelo es de roble mate, parecido a los muebles, y da unidad a la decoración, desde los tres dormitorios hasta el estudio y el salón. La casa pedía un look natural y es justo lo que le hemos dado", indica Lara. 

Con diseño floral en una tonalidad azul sobre fondo blanco, este papel pintado es perfecto para decorar la pared del cabecero en un dormitorio de aire romántico. Es un recurso que no falla en cualquier ambiente y, además, la diversidad de diseños, estilos y estampados es infinita.

El punto romántico se reservó al dormitorio, en el que, a diferencia de lo que se hizo en el salón, el arco divisorio fue quien marcó la zona para el mini despacho, que disfruta de vistas a la ciudad y es súper tranquilo.  

Si su dormitorio no fuera grande, a la interiorista Paula Duarte no se le hubiera ocurrido pintar la pared del cabecero en un tono oscuro. Pero como lo es, este es el maravilloso resultado. Y para que ese gris no quede tan frío, mira lo bien que lo ha acompañado con unos manteles individuales de fibra. En el resto del mobiliario y la ropa de cama ha optado por tonos neutros para equilibrar.

Un dormitorio grande te permite, ¡por fin!, tener una cama king size. Si colocas una con dosel, no necesitarás nada más. Ella sola aporta nivel al espacio. El estudio Interior Facelift ha elegido una estructura de madera natural que en un ambiente blanco lo llena y decora. Y como hay buenas vistas, la presenta sin visillos en los laterales para disfrutarlas al máximo.

En un espacio blanco, la presencia de madera sienta fenomenal. Este dormitorio grande con elegantes molduras en las paredes es buena prueba de ello. No hace falta que la madera sea toda igual. La mezcla de distintas tonalidades y veteados le va genial. Añade algo de fibra —una alfombra o una butaca como aquí— y te quedará una estancia redonda.

Una estantería de pared a pared bajo los ventanales no solo ofrece espacio para guardar, sino que también crea un rincón luminoso para trabajar. Es la práctica sugerencia de Asun Antó para decorar este amplio dormitorio. Un banco a los pies, una cómoda frente a la cama y una butaca para leer o disfrutar del paisaje son el acompañamiento perfecto en un dormitorio grande. 

En este dormitorio de grandes dimensiones, una columna es la excusa perfecta para delimitar el área de descanso de la de trabajo. Bajo el gran ventanal, Asun Antó y Clara Infiesta han ubicado la cama y, a continuación, el escritorio que queda semi oculto detrás de la columna. La elección del blanco en paredes y el chorro de luz natural que entra hacen que el espacio parezca visualmente más amplio.

Los dormitorios modernos combinan con éxito lo antiguo y lo nuevo. Prueba de ello es este decorado por las interioristas Leticia y Gracia de Amescua. El precioso mural, que recuerda un antiguo tapiz oriental, ocupa toda la pared del cabecero convirtiéndolo en protagonista estelar. ¿Te has fijado lo bien que armoniza con las modernas mesillas negras y las lámparas doradas? 

Si te encanta viajar y te sientes ciudadana del mundo, tenlo presente en tu dormitorio. ¿Cómo? Con un mural que represente esos países que ya conoces y los que te quedan por visitar aún. El Estudio Hoc Volo revistió la pared del cabecero con un mapa mundi XL que hace soñar cada vez que se mira. Sus colores grises y tostados se repiten en la ropa de cama.

Los cuadros son otros de esos estampados que no pasan de moda.  La interiorista Carolina Juanes se ha decantado por ellos para el papel pintado que reviste la pared de este cabecero tapizado. Eso sí, ha optado por un tono gris más claro que hace destacar el papel. La perfecta distribución de cuadrados del mismo tamaño imprime al dormitorio sensación de orden y serenidad.

¿Te consideras una persona atrevida decorativamente hablando? Si es así, te encantará la propuesta de la interiorista Mª Ángeles Morral: revestir el dormitorio con dos papeles pintados de estampados diferentes: uno más exótico para el cabecero y otro rayado en la pared contigua. Sus nexos comunes son la gama de colores, idéntica en ambos, y su estilo clásico. Al predominar en ellos tonalidades oscuras, se ha elegido el cabecero y la ropa de cama clara. Un truco que ilumina el amplio dormitorio.

Si quieres un papel pintado para la pared del cabecero de tu cama que sea discreto y de profundidad, toma nota de este modelo que sugieren las interioristas Isabel Flores y Nuria Almansa. Dividido en cuarterones, tiene una apariencia añeja con sus tonalidades desvaídas y en lugar de camuflar el cabecero de tachuelas, lo refuerza. Ambos, cabecero y papel, forman un buen equipo.