Librerías

¿Cómo convertir el salón de un piso "convencional" de obra nueva en uno personal y con encanto? Con detalles de estilo y piezas muy bien escogidas y singulares. La decoradora Asun Antó empezó por decorar la pared del estar con molduras, simulando plafones, y diseñó un mueble de salón a medida, también con molduras, que integra baldas, una vitrina y espacio para guardar. Los sofás, actuales pero de líneas clásicas, y las singulares butacas de Crearte son la guinda. 

Imagina este salón sin la librería ni el banco en "L" que recorre el gran ventanal. Y con dos sofás en medio del espacio. Así era este salón antes de que la decoradora Asun Antó hiciera su "magia". La clave fue alargar una de las paredes del salón para poder apoyar uno de los sofás. Solo con eso el espacio se liberó pudiendo diseñar esa completísima librería a medida. Y al ventanal se le dio un uso extra con un banco arcón en "L", que sirve de espacio para recibir o de asientos extras para la zona de tertulia.

El reto al que se enfrentó la decoradora Asun Antó con este salón fue darle "calor" a un espacio cuya reforma anterior había dado un look demasiado frío y de hotel. La decoradora se alió con los cuatro fantásticos: los textiles, con los que dieron color a unos espacios muy monocolor; piezas de mobiliario escogidas; las lámparas, que son grandes creadoras de ambiente; y las alfombras, que hacen más recogidos unos espacios muy amplios.

Cuesta creer que este salón tan blanquito y fresco fuera, antes de pasar por las manos de la decoradora Asun Antó, oscuro y anticuado. ¿El secreto? Una buena mano de pintura y la elección de piezas actuales pero atemporales, que encajaran con la base señorial de la vivienda. "La librería y la chimenea ya estaban, pero eran oscuras, así que las lacamos de blanco y ahora quedan más actuales y ligeras visualmente", recuerda la decoradora. 

Las molduras, como el papel pintado, se han convertido en una tendencia que vino para quedarse. Son un recurso decorativo para sumar personalidad, estilo y hacer más acogedora y vivida cualquier estancia de la casa. En este salón, la decoradora Asun Antó las usó para panelar la pared del salón. 

La decoradora Asun Antó aprovechó el espacio libre del gran ventanal en "L" con un gran banco a medida multiusos. Por un lado, sirve de rincón de relax y descanso, además de completar los asientos del salón cuando se necesita. Y para sacarle el máximo partido, lo diseñó con el sobre abatible, ganando un armario extra. 

Aprovechar la reforma para planificar un completo mueble de salón a medida es siempre un acierto. En este salón se flanqueó la chimenea con dos zonas de almacenaje complementarias. Por un lado, un armario alineado con las baldas del otro módulo, un estante decorativo y un mini banco con espacio inferior para guardar. Mientras que la derecha de la librería se ha equipado con dos estantes y un gran módulo bajo con gaveteros. 

En este salón la decoradora Begoña Susaeta apostó por el color para personalizar este espacio. Una opción que da estilo y singularidad y, a la vez, es muy fácil de renovar si te cansas. En este caso, como el resto de la decoración era muy neutra, optó por este azul verdoso, que se repite en uno de los sofás. 

Para aprovechar el espacio en el salón, puedes crear una librería a medida en la pared en la que se apoya el sofá. Solo debes tener en cuenta que si queda totalmente apoyado, la altura del respaldo deberá ser un espacio cerrado con puertas que "se pierde" en cuando a uso cómodo.

Dos diseños de sofá idénticos o diferentes, pero situados en paralelo en el salón, uno frente a otro, con un espacio en el centro para ubicar la mesa de centro. Pueden quedar ambos sofás adosados a paredes o solo uno y el otro exento (también ambas piezas exentas en salones muy amplios). El hueco central dependerá de las dimensiones de la estancia y, según sean, habrá espacio para completar con una amplia mesa o un par auxiliares, incluso, para cerrar el estar con un banco, puf o butaca.

Ya sea al jardín, al patio o a la terraza. Puede que el sofá quede delante de un ventanal con salida al exterior. En este caso, debes crear un pasillo entre la trasera del sofá y la puerta, que debe ser de al menos 60 cm para que el paso hacia fuera sea cómodo. El sofá quedará orientado hacia el interior de la planta, generalmente, enfocado hacia un mueble de audiovisuales.

La decoradora Pia Capdevila se enfrentó al reto de los cm con la reforma de este piso. Era de obra nueva, pero la distribución era "anticuada" y no se le sacaba partido al espacio, empezando por el salón. Pia unificó la zona de día y, con ello, logró un salón más esponjado, amplio y al que no le falta de nada. Un gran sofá rinconero, hecho a medida, se adapta como un guante al espacio, y una librería de punta a punta ofrece espacio de almacenaje y oculta los radiadores. 

Cómodo, amplio, luminoso, atemporal, abierto al exterior... El salón de esta casa en las afueras de Barcelona es todo esto ¡y más! La decoradora Pia Capdevila apostó por una decoración neutra inmune al paso del tiempo, y organizó el espacio con un gran sofá que sirve de separación con el rincón de estudio y la cocina. Y, para que nada interfiriera con la luz, completó el estar con una chaiselongue. 

Disfrutar de espacios más cómodos en los que poder recibir a amigos y familiares. Esta fue la clave de la reforma de esta casa. Y buen ejemplo de ello es este salón, que la decoradora Pia Capdevila planificó con un completo sofá rinconera que regala muchas plazas de asiento y, a la vez, recoge el espacio entorno la chimenea. ¡Qué acogedor! 

El salón forma parte de la masía original y se reservó para la zona más recogida, mientras que el comedor contiguo disfruta de doble altura de techos. Para multiplicar la luz, porque originariamente esta era una casa muy oscura, se abrieron ventanas, se hicieron de nuevas y se optó por una base blanca para paredes, vigas e incluso el suelo. 

Este otro dormitorio se apunta a la distribución compartida entre zona de descanso y estar, como la anterior. En este caso se ha creado un espacio confortable, cálido y de tendencia rústica con la madera como protagonista. Esta se encuentra en el techo de madera en acabado madera y pintada en otros muebles. La zona donde pierde altura el techo se aprovecha para ubicar la cama. En un lateral, el armario se prolonga en una estantería a medida, pieza que se encuentra ya en el salón informal.

Si sueñas con un salón de estilo clásico, este te va a enamorar. La interiorista Aurora Monasterio lo ha proyectado con una chimenea, grandes librerías y, por supuesto no podían faltar, dos sofás Chester de cuero marrón. El espejo, la mesa de centro con sobre de mármol, los cuadros y los tonos neutros lo actualizan.

Los colores ha sido una de las claves para dar estilo a este salón, decorado por Laura Ehlis. Y es que toda la decoración se ha basado en un dúo de blanco y gris. Lo vemos en paredes, estores, tapicerías y alfombras. Mientras el blanco suma luz, el gris da el toque actual. Y como nota cálida, la madera. 

Pocas cosas le sientan tan bien a un salón una chimenea. Si además tiene boiserie, esta la enmarca con sus molduras y la convierte en el centro de la decoración. Aquí a su lado tenemos a otra gran protagonista: la butaca. Es de Ikea y la tapizamos con la tela de flores Harrocate Blue de Gancedo.

De este salón, proyectado por Renova Solucions, nos encanta su fluida conexión con la terraza. De hecho, basta con abrir el gran ventanal para que prácticamente, duplique su espacio, ampliándose hacia el exterior. La clave es la acertada distribución, que deja un paso libre y cómodo. 

Este salón es una de nuestras portadas estrella del año pasado. Y es que, ¡cómo podíamos resistirnos! Sus vistas nos ganaron, pero también su decoración tan serena: sofás de lino y mesa de centro blancos, combinados con suelo y butacas de madera, y un toque de color en los cojines: la mezcla infalible.

Este salón ha protagonizado una de nuestras portadas más exitosas. Nos gusta su sofá tan cómodo como estiloso. La combinación de respaldo alto, grandes apoyabrazos, chaise longue y un color neutro es perfecta. Y la mesa de madera, claro.

La luz de este salón parece de otro mundo. Y el secreto del éxito radica en una reforma muy bien lograda: se ha cerrado la antigua terraza, convirtiéndola en una pared acristalada. Ahora hay espacio para un escritorio, para el comedor y mucha, mucha luz. ¡Qué bonita se ve con los estores de bambú!

Las tapicerías de base neutra le han ayudado a reforzar esa sensación de amplitud. Lino en estores y cortinas, para tamizar la luz, y lino con 40 % de poliéster en las fundas del sofá para facilitar su limpieza. Para unificar, Paula ha puesto en casi toda la casa un laminado, de Parador, de alta calidad (1 cm de grosor) que imita madera con elegantes rodapiés altos: "Tiene su mismo tacto, color y sonido al pisarlo". 

No es ningún secreto que las molduras son tendencia. No solo para vestir los techos, sino para panelar las paredes y darles un plus de estilo, personalidad y elegancia. En este salón, la decoradora Asun Antó se alió precisamente con las molduras para darle un aire clásico a este salón. Las butacas, los sofás con tachuelas decorativas y la librería refuerzan este aire clásico actualizado. 

¿Quién dice que lo clásico no está de moda? Este salón se ha decorado con un buscado aire clásico, desde su distribución simétrica, con dos librerías y sofás gemelos hasta la elección de una chimenea decorativa y los dos sofás chéster, un clásico que nunca pasa de moda y que ahora vuelve a estar más en tendencia que nunca. 

El azul turquesa con el que se ha pintado la librería es la clave de este salón de base clásica. No solo actualiza el espacio, sino que le regala personalidad y un look informal. La decoradora Begoña Susaeta ha elegido uno de los sofás a juego, para crear un conjunto visualmente más integrado. 

Con sofás claros, oscuros, estampados... Una alfombra de fibras vegetales es ese compañero que nunca falla en cualquier salón. Y es que tiene la virtud de llevarse bien no solo con todo tipo de sofás, sino también de estilo decorativos.

En este salón la decoradora Pia Capdevila ha optado por una gran alfombra con motivos geométricos y efecto deslavado para enmarcar el estar y darle un toque más personal y deco. El sofá gris ha marcado la elección cromática, con una combinación de gris y beige empolvados que aligeran el peso visual de la alfombra.