¿Te ronda por la cabeza la idea de tirar la pared que separa la cocina del salón? Pues en muchos casos es una buena idea esto del open concept. Lo importante cuando abres la cocina al salón o al comedor es planificar el mobiliario de la cocina, su distribución y estética. Primero para aprovechar bien el espacio y sacar partido a esa amplitud ganada. Y segundo para que los muebles estén acordes con la decoración del ambiente.
Se va a ver constantemente cuando estés sentada a la mesa o recostada en el sofá, así que tiene que resultar muy estética. En este sentido, también la iluminación de la cocina merece una atención especial con luces puntuales sobre la zona de trabajo que crearán una atmósfera bonita cuando las dejes encendidas y se vean desde el salón.
Asimismo, las islas harán que la zona de la cocina quede delimitada. En ellas, según el espacio del que dispongas puedes instalar la zona de cocción, la de lavado con el fregadero, ambas o solo muebles de almacén. Si hay placa o fregadero o algún electrodoméstico el fondo de la isla será de mínimo 60 cm. Y si vuela la encimera de la isla, en unos 40 cm tendrás una barra de desayunos y comidas rápidas.
Colocar la mesa de comedor como elemento de transición entre la cocina y el salón también funciona. Piensa que cuanto más cerca quede el comedor de la cocina mejor para evitar paseos al poner y quitar la mesa y más alejado queda el salón y, por tanto, más preservado de olores y humos.
Ventajas y desventajas de abrir la cocina
Las ventajas
Con una cocina abierta conseguirás una mayor sensación de espacio, continuidad visual, más luminosidad y no te perderás nada de lo que ocurra fuera de ella si estás preparando el picoteo para los invitados.
Las desventajas
Podríamos hablar solo de una desventaja a considerar y es que al cocinar los olores y los humos se "esparcen" fácilmente. Eso sí, tiene solución. Por un lado, una buena campana extractora (imprescindible, debes invertir en ella) y por otro hay soluciones que abren la cocina o la integran, pero la mantienen aislada.
¿Cómo? Con puertas de la cocina correderas y cerramientos acristalados. Los cerramientos interiores de cristal integran la cocina en el salón-comedor y la mantienen al mismo tiempo delimitada. Si hay puerta, además, podrás cerrarla cuando cocines y seguir viendo lo que ocurre al otro lado.
Abrir un vano en la pared que separa la cocina de la habitación contigua o tirar la pared por completo o crear un muerete, son opciones también prácticas y estéticas para integrar la cocina al tiempo que se gana sensación de amplitud, continuidad visual y más luminosidad.
Ideas de cocinas abiertas
Unidad (o no) en los revestimientos entre la cocina y el salón-comedor
- Al abrir la cocina al salón o comedor puedes elegir el mismo suelo para todos los ambientes. Consigues unidad y sensación de continuidad.
- ¿Puedo poner madera en la cocina? ¡Sí! Hay tarimas específicas ignífugas e hidrófugas. Y revestimientos cerámicos que imitan el acabado de la madera.
- También puedes cambiar de revestimiento en el suelo de la zona de la cocina y ayudarás a marcar ambientes. Por ejemplo, con un suelo hidráulico.
- En las paredes de la cocina prescinde de azulejos. La pintura plástica se puede lavar con un paño. Si se trata de proteger la pared… en la zona de cocción o delante del fregadero instala el mismo material que la encimera o una tira de azulejos que no llegue hasta el techo.
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