Dormitorios

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¡No hay sitio en la mesita de noche!

Quizá porque la lámpara de sobremesa lo ocupa todo, se viene encima la pantalla cuando estás tumbada en la cama o le das un golpe sin querer cada vez que haces la cama. Error. Esto te puede estresar y crear una sensación de agobio. Despeja la mesita y lleva la lámpara a la pared. Un aplique es la solución a tus problemas y ahora sí entrará el libro y el bote de crema de las manos sin hacer Tetris. Bienvenido dormitorio relajante…

Cabecero diseñado por la decoradora Paula Duarte. Mesita de Crisal; papel pintado de Pepe Peñalver y aplique de Ikea.
Dormitorio con escritorio y papel pintado.

Dormitorio con papel pintado, de Flamant. Banqueta y zona de escritorio, de Marina&Co. Alfombra, de Zara Home. Lámpara, en Marset.

El Mueble

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Un dormitorio con despacho

"Aprovechamos el espacio debajo de la ventana con un tablero a medida que sirve de escritorio y de tocador. De madera, contrasta con los armarios y da un extra de calidez”, sostienen las decoradoras. Una idea genial en tiempos de teletrabajo.

Dormitorio de verano con ventilador de techo y ropa de cama étnica en blanco y gris.

Papel pintado, de Phillip Jeffries. Estantería con cajones, de The Room Studio.

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Navy actualizado

Las clásicas rayas azul marino —que tan bien definen el sentir vacacional— han dado paso en este dormitorio abierto al jardín a otras en gris que lo actualizan. Las vemos en la ropa de cama y también en la original pared del cabecero revestida con papel textil de algodón. El ambiente sosegado y refrescante que se respira es obra de The Room Studio que, como en toda la casa, buscaba "darle un punto de sofisticación a cada estancia". El resto de la casa se reformó para disfrutar de las vistas.

Dormitorio de verano con cabecero de fibra y ropa de cama blanca y ocre.

El cabecero es una alfombra de Zara Home. Mesita de noche, de Jordi Quintana en Imo. Cortinas confeccionadas con tela de La Maison. 

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Fibra, el material del verano

Introduce en tu dormitorio alguna pieza de fibra natural y lograrás que se instale en él el verano, como por arte de magia. La interiorista Júlia Casals optó por colocar un cabecero, diseñado por ella, a partir de una alfombra de ratán y lo acompañó de una alfombra del mismo material. El resultado fue este dormitorio fresco y súper alegre.

Dormitorio de verano con cojines de rayas marineros y cuadro de madera en pared.

Banqueta, de Taller de las Indias.

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Un look mediterráneo

El uso de blanco, madera y fibra consiguen la dosis perfecta de relax y armonía que necesita un dormitorio de verano. La interiorista Blanca Tey se ha encargado de equiparlo con un cabecero de obra y piezas de anticuario, como las originales mesillas de noche en azul cielo o la antigua cubierta de puerta que decora la pared y hace de cabecero. En la ropa de cama no podía faltar el guiño marinero, azul y con rayas, que aporta frescor.

Dormitorio de verano con vistas a la playa y cojines a rayas azules y blancas.

Funda nórdica, de Filocolore. Cojines de rayas y con tela camisera, de Sira. Mantas, de Zara Home. Lámpara aplique, de Sacum.

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Un dormitorio de playa

La vista de la playa bajo la terraza se refleja en la cama de este dormitorio de verano decorado por la interiorista Marta Tobella en azul y beis, los colores del mar y la arena. Exterior e interior se aúnan en un mismo escenario.

Dormitorio de verano con ropa de cama en blanco y aguamarina con ventilador de techo.

Cabecero tapizado, mesitas de noche y lámpara turquesa, en el Estudio Del Pino del Valle. Alfombra, de KP. Telas de las cortinas, de Dedar. 

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Abierto al mar

Tener como vecino de enfrente al mar es toda una ventaja en un dormitorio de verano. Para decorarlo qué mejor que optar por una base neutra y pequeñas pinceladas de turquesa, en detalles. Es lo que ha hecho en este de la imagen la interiorista Cristina del Valle, garantizando la luminosidad y el frescor, a partes iguales.

Dormitorio de verano con vistas al mar y ropa de cama rosa.

Mesita de noche, de Maisons du Monde. 

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Con vistas espectaculares a la costa

Despertarte cada mañana y ver en primer término la isla de Portitxol en Jávea es todo un lujo. Más que un dormitorio de verano parece un balcón al mar. El interiorista Pablo González enfrentó la cama a la ventana para que sus dueños pudieran disfrutar de unas vistas  de postal. Ropa de cama en color coral y piezas de fibra lo completan.

Dormitorio de verano en tonos rosas con banco mirador.

Escritorio y silla, de El Rastro. Manta y cortinas, de Ikea. Estor, de Aki. Cuadro, de Marta Gómez de la Serna.

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Un paseo por el campo

¡Cuánto nos gusta el uso del rosa empolvado en los dormitorios de verano! Da una sensación de paz que te hace sentir súper a gusto. En este dormitorio rústico, las interioristas Marta y Marieta Yanguas y Marta Gómez de la Serna llevaron ese color a los textiles que cubren la cama y al banco mirador con vistas al campo.

Dormitorio de verano con acceso al jardín, cabecero de capitoné blanco y ropa de cama verde y blanca.

Cabecero, cama, cortinas de lino y mesita de noche, de Freer Living. Banqueta, de Tine K Home. 

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Con el verde del jardín integrado

Si tu dormitorio da a zonas ajardinadas, lleva ese ambiente fresco a su interior. Es lo que hizo en este cuarto de tonos neutros la interiorista Paula Rombys al escoger la colcha en el mismo tono verde que los árboles del exterior. ¡Qué manera tan sencilla de conectar con la naturaleza! Una butaca de lectura y un banco a los pies de la cama refrescan la estancia.

Dormitorio de verano de estilo clásico y con vigas de madera en tonos arena.

Proyecto de la interiorista Paula Rombys.

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Beige en verano, marrón en invierno

En zonas de sierra y montaña, las noches de verano suelen ser frescas. En este dormitorio clásico, la interiorista Paula Rombys juega con los tonos terrosos de la estructura de la cama para combinar las mantas, según la temporada. En verano, la manta beis suaviza y refresca el ambiente, a juego con las vigas, el suelo y las contraventanas. En invierno, cede su puesto a la manta más oscura que es la que queda a la vista.

Dormitorio de verano en tonos mostaza.

Cabecero, de Decolur Sofá. Butaca, de Tabu. Lámpara de pie, en Bazar Decoración. Alfombra, de Gancedo. 

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Lleno de vida

El sol radiante de los días de verano cobra vida en este dormitorio gracias a los tonos mostaza que visten la cama. Los tonos arena del pavimento de madera, la pantalla de la lámpara y la butaca le hacen súper acogedor. Para equilibrar tanto chute de luz, la interiorista Sandra Vergara cubrió el suelo con una alfombra de motivos geométricos en azul.

Dormitorio de verano en blanco con butaca, banco y silla de fibras.

Cabecero realizado a medida por Cusó Tapissers con tela de Güell-Lamadrid. Banqueta, de Tine K Home. Alfombra, de Zara Home.

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Blanco con notas marineras

Los colores elegidos en la ropa de cama son capaces de transformar un dormitorio de invierno en uno de verano. Los tonos terrosos que hace meses vestían de calidez la cama ahora se han sustituido por azules lisos y rayados que le dan un aire marinero. La presencia de piezas de fibra ponen la nota refrescante y el orden rebaja la temperatura.

 

Dormitorio de verano en tonos rosados.

Mesitas de noche, de Sacum.

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En verano, mucha calma

El rosa es un color alegre que transmite mucha calma por lo que llevarlo a tu habitación será una gran idea. La interiorista Marta Tobella ha utilizado un tono asalmonado en el cuadro que decora la pared y va in crescendo en la ropa de cama. Junto a él, el gris pone la nota de contraste.

Dormitorio de verano con vigas de madera y revestimiento en arco en zona de cabecero.

Cama, de Mestre Paco. Lámpara de techo, de Tot Interiors. Banqueta, de Stand del Mueble. 

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Romántico y fresco

Si tienes una casa de campo, deberías respetar las tradiciones arquitectónicas de la zona ¡incluso en el dormitorio! Mira este cuánta personalidad transmite con su arco de piedra marés (típica de Baleares) que, integrado en la pared, hace las veces de cabecero, enmarca la cama y le da frescor. Las vigas de madera, el uso de lino en textiles, los tonos verdes y la cama con dosel, elegida por las interioristas Marta Jaúdenes y Olivia Reina, del Estudio LF91, refrescan la estancia y le dan un aire romántico.

Dormitorio de verano con papel pintado geométrico en la pared de cabecero y ropa de cama blanca y mostaza.

Cabecero de lino modelo Recto, de Casa y Campo. Papel pintado, aplique Birdy y alfombra de sisal, en Proyecto 3 Interiorismo. 

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Con salida al jardín

Si te gusta el dibujo capitoné pero ya tienes tu cabecero recién tapizado de lino, llévalo a tu dormitorio de verano de manera original. Forrando un asiento o revistiendo la pared del cabecero, como han hecho aquí las interioristas Cristina Afán de Ribera y Loreto Valbuena. Para ello han elegido un papel pintado geométrico que simula el trazado capitoné. Además de fibra y madera han utilizado piezas de metal que aligeran el cuarto.

Dormitorio con paredes blancas, mesita de noche verde suave y cojines verdes y amarillos.

Dormitorio con paredes blancas, mesita de noche verde suave y cojines verdes y amarillos.

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Complementa con verde soft

Y si te gustan las paredes neutras, lleva el verde al dormitorio en textiles y accesorios. Es lo que ha hecho aquí la interiorista Blanca Figueras al elegir la mesilla, los cojines y los cuadros con el verde como protagonista.

Dormitorio con cabecero hecho con unas puertas recuperadas decapadas en verde.

Dormitorio con mesita de noche, en La Maison. Lámparas, en Coton et Bois.

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Recicla una puerta y píntala de verde

¿Más opciones de llevar el verde al dormitorio? Con un cabecero tapizado en capitoné o una puerta o una contraventana de madera reciclada en majestuoso cabecero. La interiorista Asun Antó recuperó esta puerta de anticuario, la pintó en verde y la decapó para darle un aspecto envejecido. Plaids y cojines en verde y mostaza lo acompañan. ¡El resultado es espectacular!

Dormitorio con paredes en verde y ropa de cama verde y mostaza.

Dormitorio con banqueta, de Mercader de Venecia. Ventilador, de Faro.

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Desconecta en el dormitorio

Y puesto que el verde es relajante, qué mejor que llevarlo al dormitorio. La interiorista Cristina Mas Mir ha pintado las paredes decoradas con molduras en un verde aguamarina súper desestresante que invita a conciliar el sueño. Una butaca y la ropa de cama en color mostaza logra dinamizar el ambiente.

Dormitorio con cama y dos literas dobles 00526611

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Un dormitorio ¡para seis!

"En las casas de playa siempre se apunta gente a dormir, así que decidimos quitar metros al salón para ganar dos literas en un dormitorio. De esta manera pueden dormir seis personas ¡sin invadir las zonas comunes!", explica la decoradora Marta Tobella, de Sacum, responsable de la reforma. Y, cuando no se usan, sirven de zona de chill out improvisada. Te invitamos a descubrir el resto del piso

Literas, diseño de la decoradora. 
Dormitorio en blanco y azul decorado con motivos náuticos 00460587

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Un dormitorio muy náutico

Todo en este dormitorio nos evoca al mar. El papel pintado de barcos, las estrellas de mar decorativas, la lámpara hecha con una baliza, el juego de blanco y azul... ¿Te apuntas al housetour?

Dormitorio con cómoda y panel acristalado que separa varias zonas 00531708

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Después: una mega suite con tocador, despacho y zona de lectura

La decoradora anexionó la habitación contigua a la suite para ganar, así, un espacio muy generoso que organizó en 4 zonas, articuladas a partir de un original mueble en forma de H: dormir, tocador, despacho y estar junto a la chimenea. Cada zona disfruta de su intimidad, pero a la vez están conectadas visualmente y no se pierde la espectacular profundidad visual del espacio. ¿Quieres ver el palacete al detalle?

Dormitorio pequeño blanco con armario 00449677

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Después: una habitación luminosa y relajante

Sí, es la misma habitación. Pero tras pasar por las manos y la creatividad de la decoradora Pia Capdevila, que cambió la distribución de la cama para situarla en paralelo a la terraza, que ahora, con unas nuevas cortinas blancas, inunda de luz la estancia. 

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Después: con un gran armario a pie de cama y una zona de tocador

Para darle unos cm al dormitorio, la decoradora integró el baño a la suite, pero sacó la zona de tocador, así el baño se quedaba solo con el inodoro y la ducha y podía ser mini, y el dormitorio sumaba unos cm extras. Además, con la nueva distribución aprovechó todo el pie de cama con un armario a medida en "L" que, al ser blanco, se integra perfectamente en el espacio. Si te ha gustado como ha estirado la decoradora los metros del dormitorio, espera a ver el resto del piso... 

dormitorio clasico con papel pintado en la pared del cabecero 00531707

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Después: un dormitorio muy elegante y moderno

La decoradora aprovechó la espectacularidad del espacio, con sus techos altos de más de 4 metros de altura y ese precioso ventanal, para crear un dormitorio moderno de lo más elegante, que contrastara con el clasicismo arquitectónico. El cabecero negro, que lo diseñaron a medida, está montado con listones y la pared se ha revestido con un papel pintado de espiga que simula un efecto de pared entelada. 

Dormitorio con cabecero a medida y salida a la terraza

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Después: un dormitorio luminoso, moderno y acogedor

La decoradora Pia Capdevila no dudó en anexionar la habitación contigua para ganar un dormitorio súper amplio de 28 m2 que organizó en dos zonas: la de cama y la de vestidor. Para la zona de dormir, optó por un cabecero tipo murete a medida, que le permite salvar una columna. Y los blancos y los beige son los tonos que se imponen en una decoración fresca y actual. 

Dormitorio con cama en medio y cabecero a medida con espacio para guardar

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Después: un dormitorio más optimizado con la cama como protagonista

¡Qué cambio! La decoradora conservó los armarios empotrados en el pasillo de acceso del baño, pero le dio por completo la vuelta a la zona de cama, situándola en medio del espacio y creando un cabecero a medida que sirve de separación visual entre la zona de descanso y el vestidor y el baño. 

Dormitorio blanco y rosa con vistas al bosque

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Un dormitorio con una decoración sencilla que invita al relax

Lo recargado y sobredecorado no va con una slow deco o la filosofía slow life, que aboga por una vida basada en la desaceleración, la armonía y la sencillez de las pequeñas cosas. Por eso la slow deco defiende una decoración sencilla, con pocas piezas y en orden para que el espacio respire y transmite una atmósfera relajante, como la del  dormitorio de esta casa

Escritorio de El Rastro. 

   

Dormitorio de masía con vigas y ventanales con vistas al jardín

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Con ventanas al jardín

Luz a raudales, el jardín que se cuela en casa, y una atmósfera tan relajante que es imposible no desconectar y olvidarse del estrés. Así es este dormitorio, donde se ha priorizado su hilera de ventanas que se abren al exterior como elemento decorativo, de ahí que el resto de la decoración sea muy monacal, para no hacerlo sombra.  ¿Quieres ver el resto de la casa?

Cabecero de Serralleria Mase. Mesita de noche en Aquitania. 
Dormitorio blanco abierto al baño

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Un dormitorio en suite abierto al patio

La misma máxima de las piezas básicas la encontramos en el dormitorio de esta casa de Formentera, donde se ha priorizado un ambiente parco en mobiliario pero muy acogedor, gracias a la elección de piezas naturales, como la gran lámpara de bambú y lino, el cabecero de bambú o el mueble de microcemento y madera recuperada del baño. 


El mueble del baño es un diseño de GCA. Pavimento y encimera de microcemento.
 
mujer haciendo la cama

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Dejar la cama hecha antes de salir

Ahora sí, ya has ventilado la casa diez minutos y has pasado una bayeta por la mampara. Es el momento de volver a la habitación a cerrar las ventanas y hacer las camas. Puede parecer una tontería, pero verás que ver una cama hecha es fundamental para mantener el orden y la limpieza en casa. ¡No te llevará más de cinco minutos! Y te sentirás muchísimo mejor cuando llegues del trabajo.

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Un dormitorio ideal para relajarse

¿Para dormir y relajarte prefieres tonos suaves? El tono beis perlado que Gloria Borrás ha empleado en las paredes de este dormitorio te hará conciliar el sueño ipso facto. En este caso, se ha dinamizado la cama con colchas y plaids en tonos contundentes, como mostazas combinados con grises azulados.

Lamparitas, de Little House. Cuadros, de Coton et Bois. Ropa de cama, de Filocolore. Cojín de rayas, de Gancedo. Cojín y plaid azul, de La Maison.

 

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Busca el contraste

Una cama vestida en blanco y arena invita al descanso. Es perfecta en invierno, ya que crea una atmósfera acogedora, y en verano, porque el blanco da el matiz fresco al conjunto. La interiorista Natalia Gómez Angelats, además, ha revestido la pared del cabecero con un papel pintado en un tono arena tostado jugando a los contrastes.

Cabecero, mesita de noche y lámpara de techo, diseño de la decoradora. 
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Cuando el color arena se sofistica

Si te gustan los colores fuertes, te encandilará este dormitorio cuyas paredes se han pintado en un tono arena potente llegando a alcanzar el grado de ocre. Eso sí, si lo utilizas rebaja las tonalidades de la ropa de cama, elige blancos y beis claritos ¡y darás en el clavo!

Baño actual en blanco con murete que separa del dormitorio 00335928

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Con aires de casa de campo

Existen pilas de muchas formas y estilos. Las de este baño son altas y redondas y tienen cierto espíritu vintage que resulta muy campestre.

Importante: A la hora de elegir la encimera para el lavabo, asegúrate de que se trate de un material resistente y de calidad, por ejemplo, de madera maciza. Piensa que tendrá que aguantar el peso del lavamanos.

​Mueble bajolavabo a medida, realizado por Es Grop. Doble Lavamanos, de Duravit. Grifería, de Bossini-Cristina. Cestos de mimbre, de Pomax, en Aquitania. Toallas, de Zara Home. Botes de gel y crema, en Es Bosc.
Dormitorio con cama tipo dosel y ventilador de techo 00461872

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Refresca con un ventilador

El ventilador es una buena alternativa al aire acondicionado (aunque no son incompatibles entre sí) que te puede ayudar a ahorrar en la factura de la luz. No enfrían el aire, pero con su movimiento crean ambientes más frescos de manera natural. 

Cama y ventilador, de Cassai Home & Fashion. 
Dormitorio de verano con ropa de cama en tonos azules y espejo con marco metálico y cuarterones 00507550

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Rayas por doquier

Es ver una colcha a rayas blancas y azules, y pensar en el verano. Desde luego, este clásico estampado define a la perfección el espíritu de la época estival, ¡y lo bien que le sientan los plaids de lino cayendo con gracia!

Mesita de noche, de Catalina House. Espejo, de Sacum. Lámpara y funda nórdica, de La Maison.
Dormitorio de estilo náutico decorado en blanco y azul 00460587 df2cfc20 1333x2000

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Estilo náutico en el dormitorio

Si tienes una casa de vacaciones en la costa, puedes permitirte decorarla con estilo náutico todo el año. Para un acabado sutil, decora la pared del cabecero con un papel pintado estampado con siluetas de veleros, y procura que no falten las rayas blancas y azules en los textiles de la cama. 

Papel pintado, de La Maison. Lámpara de sobremesa, de Pardo. Sábanas y cojines, de Lexington. Cesto, de Let's Pause.
Dormitorio con papel pintado floral azul y blanco en paredes y techos 00457379

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Un fondo floral con espíritu inglés

No todo ha de tener inspiración marinera para ser tendencia, los motivos florales de este papel pintado de espíritu british también son de lo más veraniegos (y elegantes). Si no quieres empapelar las cuatro paredes hasta el techo, puedes decorar únicamente la pared del cabecero. Quedará igual de bonito.

Cómoda y papel pintado, de Laura Ashley, en Federica & Co.
Dormitorio decorado en tonos azules con cabecero, banco y alfombra de fibras

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Oda al blanco y al azul en el dormitorio

El combo de cabecero de fibras + ropa de cama de lino y algodón en colores blanco y azul siempre funciona en verano. En este dormitorio, además, se pintaron los marcos de las puertas, las vigas y las ventanas a juego para darle un aire más campestre y veraniego. ¡Qué monada!

Cabecero, a medida por Nice Home Barcelona. Mesita de noche, de Cottage Little House. Banqueta, en La Maison.
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Errores que debes evitar al colgar las cortinas

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Errores que debes evitar al colgar las cortinas

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Errores que debes evitar al colgar las cortinas

Dormitorio con cabecero y banco a pie de cama de madera y gran lámpara de fibras naturales.

Dormitorio con cabecero de madera de teca, banco y lámpara, de Sacum. Lámpara de techo en Ladies and Gentleman. Cortinas y alfombra, de Filocolore.

El Mueble

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Una gran lámpara que presida la cama

No descuides la iluminación general al decorar el dormitorio. Aunque sea una luz que enciendes solo por necesidad y no para hacer la atmósfera más relajada, es básica cuando entres en el cuarto a buscar algo. Elige una con presencia, como la lámpara de fibras elegida por la interiorista Esther Mercé para este dormitorio. Bonita, ¿verdad? Recuerda que también es fundamental la temperatura de la luz. Para el dormitorio, mejor cálida (2.200 - 2.700 K).   

Dormitorio blanco con muebles de madera y textiles en azul y blanco.

Dormitorio con butaca de Becara. Lámpara, de Luca. Cómoda, de Mercantic.

El Mueble

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Un dormitorio para relajarse

Primero, elige un colchón de calidad (será básico), y después añade tonalidades que inviten al relax, como el verde, el azul, rosas suaves, arenas, beige e incluye alguna nota de blanco, el neutro por excelencia.

Dormitorio con cabecero tapizado, cortinas grises y banco tapizado al pie de la cama.

Dormitorio con colcha, manta y cojines de rayas de Sitjar. Sábana y cuadrante de lino de Zara Home. Cuadrantes de punto de Matèria. Espejos de Carolina Blue.

El Mueble

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Las cortinas son importantes

Vestir las ventanas te ayudará en la tarea de decorar el dormitorio. Y es que si no las pones, parecerá que está a la mitad. Puedes elegir unas tipo visillo, aunque no impedirán el paso de la luz. Para ello, es mejor elegir algún tejido más tupido, que asegure la oscuridad aunque se haga de día. También puedes combinar ambas opciones. Mira más tips para elegir las cortinas del dormitorio.   

Dormitorio con papel pintado vegetal, cabecero de madera de pared a pared y banco tapizado al pie de cama.

Dormitorio con cabecero, diseño de la decoradora Paula Duarte. Mesita de noche, de Crisal. Papel pintado, de Pepe Peñalver. Lámpara de techo, de La Redoute Interieurs. Banqueta y silla, de Maisons du Monde. Alfombra, de Tailak.

El Mueble

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Protege la pisada

Es otro de los básicos en la decoración del dormitorio y dar calidez. Una alfombra subirá el nivel de la decoración, pero, además, tiene otras funciones prácticas: aísla del ruido y el frío, protege la pisada y también el suelo de posibles golpes. Tienes varias opciones: una grande que albergue la superficie de la cama y los laterales o tan solo a cada lado de la cama. Lo importante es que la pises al poner el pie en el suelo.      

Dormitorio moderno con cabecero de terciopelo azul y ropa de cama color arena y caldero.

Dormitorio con cabecero, diseño de la decoradora Lucía Mariñas.

El Mueble

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Que no falten los cojines

Para que la cama se sienta (y vea) gustosa y acogedora, añade varios cojines. Para una cama grande se recomiendan entre 6 y 8 cojines, sin contar las almohadas y teniendo en cuenta los cuadrantes y los más pequeños. Al combinarlos, los estampados quedarán genial con una colcha lisa que luzcan alguna tonalidad similar. Otra opción es que todos sean lisos y emplear la norma 60/30/10 (un 60% de un color dominante, un 30% de un color secundario y un 10% de otro color que cree contraste).  

Dormitorio con cabecero de obra y ropa de cama de color gris, blanco y color arena.

Dormitorio con cabecero con mesitas de noche integradas, de Renova. Lámpara aplique, de Faro

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¿Qué poner en la pared de un dormitorio?

Es una de las preguntas que más nos hacemos al decorar el dormitorio. Y es natural, ya que ayudará a dar una personalidad u otra, así como dejar que unas tonalidades estén más presentes que otras. Un truco que no falla es colocar un gran cuadro y acompañarlo de otros más pequeños. Colocar dos iguales, de la misma serie, también es un acierto. Mira más ideas para decorar la pared del cabecero.    

Dormitorio con cabecero iluminado con tiras led.

Dormitorio con cabecero y mesita de noche, diseño de la decoradora Pia Capdevila. Aplique, de Santa & Cole​. Papel pintado, de Sanderson.

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Añade una luz envolvente

Una forma de decorar el dormitorio y crear, al mismo tiempo, una atmósfera acogedora y envolvente es mediante la iluminación. Unas tiras led colocadas en el cabecero o en al bajo de la cama crearán una cortina de luz muy atractiva. Y lo mejor es que se puede hacer con una pequeña inversión.