Estores

En este caso, las chicas de Santayana Home han creado una cocina más rústica, pero con guiños modernos, como vemos en el suelo. "Abarcamos todos los estilos sacando el máximo partido a cualquiera de ellos", nos explican.

El escritorio es parte del mismo mueble que la litera. Las letras y el caballito son de Velafusta. Las lámparas son de Little House.

​La cocina es un salto de estilos. Y sí, ¡se atrevieron a poner papel! Buscaron la combinación negro y blanco, "una buena transición con el salón. El negro hace de elemento conductor. Pusimos papel pintado de rombos negros y en el frente de la cocina apostamos por hidráulicos, también en negro y blanco. Aunque la cocina es algo rústica con esa gran mesa, el papel y el hidráulico ¡le sientan increíble!".

 Dos grandes ventanales abren el dormitorio al jardín, y hacen de la estancia, un balneario de luz. Cabecero, en Alarcón. Mesillas y lámpara, en Coton et Bois

Si no quieres "perder" ni un centímetro, opta por un estor. Aquí, al aprovecharse el espacio bajo la ventana con un mueble a medida, era además la mejor opción. Si lo prefieres puedes combinar dos estores, uno más vaporoso y otro un poco más tupido, para regular la entrada de luz según las horas de más o menos sol.

Cama, armario y mesa son de Iñigo Echave. El papel es de Grupo La Madrid y la silla es de Egoa (todo en Iñigo Echave).

La mesa, la alfombra y el armario son de Iñigo Echave. La silla es de Vitra (en Iñigo Echave).

 La ropa de cama y las cortinas de lino incorporan matices del gris para poner un acento diferente en el dormitorio principal.

Sobre el aparador, vemos un par de cubos plateados, ambos de Bervic. El bol de cerámica es de Mayflower.

Está justo en medio de los dos salones abiertos. La alfombra es de Gra. La mesa de trabajo, con caballetes de plancha de hierro, y la lámpara trípode son de Bervic.

De esa anterior habitación principal salió también el cuarto de la niña, a quien crearon su propio baño y otro para los chicos. La pared se revistió con friso a media altura y un bonito y femenino papel pintado.  

"En el mismo salón, pensamos un rincón escritorio-estudio, con un estante de roble, y dos butaquitas que se integraran bien con el resto del interior. La idea era una casa muy “para vivir”. El sobre de escritorio fue realizado por Vivestudio. La silla es de Francisco Segarra.

Carmen traía de su vida anterior sus objetos más queridos y, gracias a todo lo aprendido en las páginas de El Mueble, las musas de la inspiración decorativa la visitaron y logró su objetivo. "En el balcón pusimos pavimento de madera y muchas plantas. Usamos un material que imita la madera y que es muy resistente. Quedó coqueto, disfrutamos del exterior, de las vistas, y también parece dar profundidad al salón", nos cuenta. 

"El arrimadero blanco del salón lo puse para dar unidad a la casa. Tenía piezas diferentes que venían de la otra casa, y me pareció una manera de poner un marco y de unificar los diferentes muebles. También elegí el blanco para que conjuntara con la librería blanca del salón", nos explica. ¡Se nota que sus ideas han salido de El Mueble!

"Necesitaba dar unidad a todas mis cosas en esta nueva casa, encontrar la armonía, por lo que busqué elementos que las unificaran. Tenía todos los muebles de mi anterior piso y quería volver a utilizarlos, unir mis piezas más queridas, los retales de mi vida. No hice obra, solo actualicé", nos cuenta, emocionada con el resultado. Y añade: "Los estores en realidad eran las cortinas de lino de mi casa anterior. Las mandé recortar para aprovecharlas porque la tela de lino era muy buena, y también para disfrutar de las vistas del parque, no las quería tapar con una cortina clásica". 

Si en el salón, el mueble aprovecha toda la pared, en el dormitorio se ha sacado partido al espacio bajo la ventana (generalmente inutilizado) con un mueble a medida que va de pared a pared. Hace las funciones de cómoda y tocador, además de regalar muchísimo almacenaje. 

Colócalas de manera estratégica para iluminar cada rincón de la casa con su luz suave y acogedora. Elige pantallas en tonos beige, para que sean más cálidas, y enciéndelas también durante el día.

De pie: Muy prácticas y decorativas en zonas de lectura o el estar, debes elegirlas en proporción a los muebles que acompañan. Las hay de tamaño XXL y otras que incluyen un foco para leer.

Gracias a un cerramiento de terraza se ha ganado un rincón para leer en esta casa en lo que antes era una galería alargada y estrecha de 120 x 250 cm. La idea es de la decoradora Rocío Montesino. Los muebles diseñados a medida del espacio aprovechan cada centímetro no solo con un sofá con espacio para guardar debajo del asiento sino con estanterías abiertas en las que se organizan los libros y delimitan la zona respecto al resto de la vivienda. Para filtrar la luz, venecianas en blanco, igual que las carpinterías.