Árbol de Navidad

Pero no es el de su casa sino el de una de sus tiendas en Londres. La verdad es que nadie posa como la diseñadora y ex-spice frente al árbol. ¿Que es lo que me llama la atención de él? Lo altísimo que es y cómo combina adornos rosas y verdes. Hay alguno que hasta parece Living coral, el color del año según Pantone. 

Lo tenía montado desde el 11 de diciembre. Me gusta el rollo masculino que tiene pero quizás quitaría algunos adornos grandes y compensaría con otros pequeños. 

Nada más y nada menos, pero viendo la decoración de su casa, la llaman 'la casa rosa', donde reina el color y el animal print, el árbol de Navidad fucsia le va como anillo al dedo. Y mención especial también merece el super Belén con pozo, riachuelo y hasta palmeras. ¿Quién dice que modernidad y tradición están reñidos? En casa de Alaska y Mario seguro que no. 

Los adornos en rosa empolvado, blanco y plata destacan sobre las ramas verdes y le dan un aire muy chic al árbol de Navidad. Fíjate hasta los regalos se han contagiado de este trío luminoso y delicado. Pared pintada con color New Blush de Valentine. Butaca de Ikea tapizada con terciopelo de Gancedo. Árbol de 230 cm de alto de Jardiland. Adorno de alas de Blaubloom. 

 Son tendencia para vestir el árbol de Navidad. Le dan un aire étereo muy favorecedor. Este es de El Corte Inglés. Quedan bien si los combinas con otros diseños muy distintos, como unos adornos de origami rosa (de Maisons du Monde) y otros con brillo. 

Tres es el número ideal. Pon los adornos juntos para ver si encajan. En este caso se demuestra que rosa, blanco y gris forman un trío coqueto y luminoso. Bolas y estrellas de plata de Blaubloom. Bolas rosas de El Corte Inglés. 

¿Cómo? Pues con una decoración sobre el mueble principal de tu recibidor, sin olvidar el espejo; otro foco con un árbol del tamaño que mejor encaje con las dimensiones de la entrada; la escalera y barandilla; farolillos con velas o guirnaldas de luces agrupados en un rincón…

No necesitas hacer un gran despliegue para que el recibidor tenga una sugerente decoración. Basta con agrupar varios farolillos con velas y dejar que al fondo se vea el árbol de Navidad que decora el salón. 

Basta con vestir de gala el mueble principal de tu recibidor para que acapare miradas. Y lo puedes hacer de una manera muy natural con un arreglo con acebo, tan tradicional de la Navidad, y algunos adornos en madera. ¡Nos encantan las estrellas! 

Porque los recibidores de tamaño mini también pueden lucir la deco de Navidad más bonita y original. Fíjate en este árbol talla XS para colocar sobre un mueble y la idea do it yourself de la pared para dejar mensajes en sobres o crear un calendario de Adviento.

¿Qué te parece esta propuesta en tonos suaves y con letras colgando del árbol? ¡Es diferente! Además, te damos una idea que te va a gustar: coloca una falsa embocadura de chimenea en una pared junto al árbol y decora el rincón como si fuera un hogareño saloncito. Letras, de La-A y cajas de Velafusta.

Si en tu caso el recibidor está integrado en el salón, deja entonces que "asome" la Navidad. Pon el árbol cerca de la entrada principal para que se vea nada más llegar a casa. Bolas transparentes de Acanto, plateadas redondas y ovaladas de Parlane y blancas de Jardinland. Butaca de Ikea y espejo de Merc&Cia.

Tener espacio para colocar un árbol de Navidad en el hall siempre asegura una deco navideña de diez. Pero si además cuenta con una ventana, lo mejor es que lo sitúes cerca para que los adornos que cuelguen de sus ramas se vean desde la calle. Por la noche, iluminado, el efecto será perfecto.

Este recibidor ha elegido una decoración navideña tradicional en dos de los colores por excelencia de estas fechas: blanco y rojo. Copia la idea de colocar regalos alrededor del árbol para cubrir el pie. 

¡Así no hay excusa para no ambientar el recibidor por falta de espacio! ¿Es mini? Entonces anima paredes y puertas con una idea de árbol como este, que puedes hacer tú misma. Cuelga fotos o las felicitaciones navideñas más especiales.

Recibe esta Navidad con el sofisticado brillo del oro y cobre. Dos acabados que se llevan bien entre ellos. Así que úsalos en el árbol que decora el recibidor.

Una guirnalda verde o de luces colocada alrededor del marco de la puerta o de una ventana es un complemento decorativo infalible. Hay guirnaldas luminosas que se enfuchan y otras funcionan a pilas. Cesto de Lu Ink y adornos del árbol realizados por Marisa Bernal y Roser Prats con materiales de Scrap House.

Da igual el tamaño de tu recibidor, lo importante es que esté decorado con mimo. Escoge una gama de colores –aquí, el rojo– y úsala en todos los adornos: en el árbol, sobre la consola, en la escalera… Es una manera de crear sensación de conjunto aunque combines, como aquí, diferentes tipos de adornos. 

 ¿Te cabe un árbol de Navidad tamaño estándar? ¡Genial! Pero es muy importante que elijas el lugar idóneo para que no moleste en caso de que el comedor tenga que crecer y que tampoco sea un obstáculo para el día a día. Aquí se ha optado por colocarlo entre el comedor y el salón, una opción muy práctica en salones abiertos. 

Basta con mirar con otros ojos el mobiliario de tu casa. Ahí van algunas ideas: si cuentas con un mueble bajo para la tele, libéralo y equípalo con cojines y ya tienes tu banco. ¿La repisa de la ventana? Lo mismo. O incluso puedes reconvertir el leñero, como se ha hecho aquí, en un banco junto al fuego.

 Si ni la opción más mini te cabe, ¿por qué no hacer tu propio árbol para colgar? No te restará espacio en casa y a los niños les encantará, porque además podrán ayudarte a confeccionarlo. Aquí se han usado 5 varillas de madera de diferentes tamaños a modo de ramas y se han unido con una cinta decorativa de doble cara que se ha coronado con una argolla para colgarlo. ¡Solo quedará decorarlo!

¿El árbol se te come la mitad del salón? Antes de decidir prescindir de él, valora optar por uno mini, como este. Hará las mismas funciones que uno más grande y apenas ocupará espacio. Y a los niños les encantará decorar su arbolito de Navidad. 

“No renuncies a los adornos especiales para ti, aunque se repitan cada Navidad”, aconseja Elena. Y es que esta bola de cristal es un adorno antiguo al que Elena le guarda mucho cariño, igual que la guirnalda de espejitos que compró en Francia, y que cuando le da el sol, ilumina de manera natural el árbol.

"La Navidad, para mí, debe ser siempre con un árbol natural. El aroma que desprende, su encanto... No hay color", explica Elena. Para decorarlo, la decoradora usó ramitas de hiedra y tronquitos del jardín, que combinó con el resto de adornos, algunos de ellos recuperados. 

Elegimos bolas rojas con motivos con cuadros, con un punto british, y las combinamos con otras blancas, creando un ambiente navideño muy tradicional. Las bolas son de plástico, más resistentes. Y las combinamos con blancas y escocesas. El árbol mide 230 cm. 

En este caso la máxima del 'divide y vencerás' no vale sino que tienes que pensar en que la unión hace la fuerza. Decora la mesa con los mismos tonos cromáticos que las bolas del árbol y el resto de accesorios decorativos de la casa y triunfarás. 

 Uno de los peligros de la decoración navideña es su exceso. Por eso la estilista Olga Gil-Vernet recomienda no abusar de los adornos. "Menos es más", resume Olga. Si optas por una mesa dominada por los colores claros, el resultado siempre será más ligero. 

 "Solemos decorar el centro de la mesa, pero no le prestamos atención a las caídas del mantel o los laterales de la mesa. Unos detalles, como unas aplicaciones de estrella o una gran lazada, como aquí, con un tul, la vestirán más", explica Olga. 

Además de un árbol de Navidad para el salón o el recibidor, a tus hijos les encantará tener su propio árbol personalizado y colgado en la puerta de su dormitorio. Crea la estructura con maderas de diferentes medidas y únelas con un eje central que puede ser una tela bonita cubierta de alambre. Decóralo con sus dibujos, manualidades, fotos, postales...

Si tienes una cocina office, ¿no te encanta la idea de montar un comedor navideño ahí mismo? Inspírate en este comedor moderno y muy acogedor para una velada inolvidable. 

Este salón está lleno de vida... ¡y de luz! Al árbol, con su guirnalda luminosa, la mesa de centro, con su trío de velas y, sobre todo la chimenea, desde la embocadura hasta la repisa. Para evitar el efecto "agujero negro", la embocadura se ha vestido con una composición de velas de diferentes alturas y la repisa se ha decorado con una guirnalda y con dos grupos de portavelas, uno a cada extremo. Al elegirse todos en tonos dorados, dan sensación de conjunto sin competir entre ellos. 

Si te gusta la decoración de estilo más clásico, este salón de encantará. La manta de cuadros rojos, los calcetines para meter regalos y decorar la chimenea, las bolas del árbol en rojo y blanco... ¡Como siempre has imaginado estas fiestas!

Si tu salón es blanco y predomina un estilo clásico, decora el árbol de Navidad y la mesa de centro con adornos plateados: bolas para el árbol, velas, envoltorio de los regalos... ¡El resultado te encantará!

Tanto si sois de abrir los regalos en Nochebuena, el día de Navidad por la mañana o lo dejáis para el día de Reyes, de un salón rústico y romántico, como el de la imagen, ¡no querréis salir!

Tanto si tus invitados son adultos como niños, decorar el árbol de Navidad con las iniciales de los asistentes a este día tan especial es una gran idea.

Solemos hablar del rojo, el verde, el blanco y el dorado para decorar la Navidad (en este artículo también del azul), pero ¿y el rosa? Es cálido, suave y muy deco.

Si tus invitados vienen el 25, no lo dudes, puedes hacer un aperitivo navideño en el porche antes de entrar a comer. Con una decoración así, nadie pasará frío. Y si quieres sorprenderlos ¡en El Mueble tienes unos menús de Navidad de rechupete!

¿Tu salón tiene vistas al comedor? Coloca el árbol de Navidad entre ambos espacios para que esté siempre presente. ¡Seguro que tienes muchas ideas para decorarlo! Deja que te ayuden, pasaréis una tarde muy divertida.

Coloca un mantel de lino blanco a lo largo de la mesa y cubre las sillas con telas de pelo largo. El resultado será un comedor tan acogedor que nadie querrá que termine la sobremesa.

Decora tu mesa navideña con cristalería y súmale elegancia con una vajilla en tonos dorados, como hemos hecho en este comedor.