María Acha, interiorista: "No es tan fácil tirar tabiques. El error más delicado, a mi juicio, es equivocarse con la distribución"

"El error más delicado, a mi juicio, es equivocarse con la distribución de un espacio (o peor aún, de toda la vivienda). Por eso no hay que escatimar esfuerzos en esta fase. Desde el estudio, hablamos con los clientes, profundizamos en sus rutinas, gustos y necesidades, y buscamos así la mejor solución antes de mover un solo tabique. Si la distribución no funciona, cualquier ajuste posterior implica tocar instalaciones y acabados, con el quebradero de cabeza que conlleva", detalla la interiorista. 

Ya hemos leído que la distribución le importa mucho a la interiorista. Pero, de lo más "grande", hemos ido a lo "pequeño", precisamente, a esos detalles que tienen mucho peso para María Acha en un proyecto. Son los 8 errores que le dan verdadero pánico. Y ¡atent@!, alguno, al ojo no experto, podría pasar incluso inadvertido, pero a partir de hoy no vas a poder dejar de tenerlo en mente. 

"Inspirarse es fantástico; clonar, no. Cada espacio es único y la copia suele acabar normalmente en desilusión", así de rotunda se muestra María Acha. Así que el primer error de la lista nos invita a inspirarnos pero luego a personalizar y poner en práctica la creatividad. 

El motivo es que ese corte "resulta agresivo y rara vez queda perfecto", indica María Acha. La opción que ofrece para solucionar este error que le da verdadero pánico es que "si hay que cambiar de tono, mejor aprovechar el rincón para hacerlo". Conclusión: rincón en L para cambiar de color, sí; arista vista, no. ¡Y pinta como un verdadero profesional!

"Elegir mal el color de la junta de un revestimiento cerámico puede arruinar la pieza más bonita y rectificarlo es mucho más tedioso de lo que parece", nos explica la interiorista. Si quieres marcar contraste, hay que escoger bien el tono. Si buscas unidad, lo mismo. Porque como nos dice María Acha, ponerle solución es bastante tedioso.

Hay que analizar dónde irá en altura y punto de la pared para que quede centrada con el lavabo y a una distancia adecuada (y ergonómica) de este. "Fijar mal la posición de la grifería empotrada implica que si hay que corregirla, habrá que picar azulejo o el revestimiento de esa pared, ya terminado. Algo que conviene evitar a toda costa", señala María Acha. Así que es un error que da mucho pánico, a ella como interiorista, y a cualquiera que lea esto.

"Usar luz fría o, peor aún, mezclar temperaturas de color en el mismo ambiente es un error que me da verdadero pánico. Ni el mejor proyecto resiste una iluminación mal elegida", contundente la interiorista consultada. Busca unidad en el mismo tono de luz en todas las luminarias del espacio y evita la luz fría para iluminar bien. Quédate con 2700k. 

"Me dan pánico las transiciones de suelo mal resueltas. Si cambias de material bajo una puerta, debe quedar justo en el centro de la hoja; si no, se asoma el otro suelo y rompe totalmente la armonía", detalla María Acha. Y lo mismo sucede con el punto en el que se unen dos tipos de materiales o acabados en el suelo. El punto tiene que ser el adecuado, bien estudiado y resuelto en un trabajo fino.

María Acha, con el ojo muy hecho a los materiales y sus características, no puede evitar considerar un verdadero error el "combinar madera natural con imitaciones sintéticas poco logradas. Una mala elección puede resaltar la artificialidad y deslucir el encanto de lo natural".

"Bloquear la entrada de luz natural en un espacio con tejidos pesados, muebles altos o plantas mal ubicadas es un gran error", señala María Acha y añade que, aunque adora las plantas, "tenemos que encontrarlas el lugar ideal sin que perdamos luminosidad ni vistas exteriores". Privar a un espacio de luminosidad podríamos considerarlo sacrilegio desde el punto de vista decorativo. ¡Gana luz natural siempre!