4 averías comunes que sufren los grifos de tu casa y cómo solucionarlos

Todos los días los accionamos varias veces. Los grifos de la cocina y del baño son indispensables para el día a día, pero rara vez nos damos cuenta de lo mucho que dependemos de ellos hasta que empiezan los problemas. Aunque no lo creas, hay muchas averías que puedes intentar solucionar por tu mismo, sin tener que llamar a un fontanero si tienes las claves para solucionarlas. Hoy te explicamos de la mano de un asesor en fontanería de DE.CO.MA. las averías más comunes en los grifos y cómo ponerles fin rápidamente.

LAS AVERÍAS MÁS FRECUENTES EN LOS GRIFOS (Y SU SOLUCIÓN)

1. el grifo gotea continuamente

• El problema: los grifos pueden gotear por varias razones. Lo más probable es que la goma del empaque o los anillos de caucho estén rotos o deteriorados. También puede estar en el aireador; puede que se haya dañado la "tela metálica" por donde sale el agua.
• La solución: en ambos casos, para sustituirlos hay que desmontar el grifo, revisar las piezas y cambiar la que esté en mal estado.

2. Sale agua entre las juntas del grifo

• El problema: las piezas se pueden aflojar con el paso del tiempo o por haber recibido algún golpe. Para evitar estas fugas suele ser suficiente con apretar las piezas.
• La solución: si el problema persiste, desmonta todas las partes y sustituye las gomas y/o arandelas por unas nuevas.

3. El grifo pierde agua por la base

• El problema: las peanas y bases del grifo son elementos que se deterioran con facilidad debido a la humedad, a los productos de limpieza y al propio uso.
• La solución: comienza por comprobar si las piezas y latiguillos están en buen estado y reemplaza las dañadas. Para alargar su vida útil puedes emplear silicona o similar para sellar la unión entre la peana y la pila o la pared a la que esté sujeto.

4. Sale poca agua del grifo, pero con mucho ruido

• El problema: si al abrir el grifo hace mucho ruido, pero no sale agua o sale poca, lo más probable es que se trate de una obstrucción. Las más frecuentes se producen dentro del grifo, aunque el problema también podría estar en las cañerías. Lo primero es verificar si es el grifo. Para ello, desmonta todas las partes y límpialas.
• La solución: la limpieza se realiza con antical y agua. Si precisas algo más agresivo, puedes probar a frotar los interiores con sosa cáustica, pero hazlo con cautela, porque este producto puede dañar el esmalte del grifo.

antes de empezar a arreglar un grifo

• Cierra siempre la llave de paso. Suele estar situada en la cocina, el cuarto de baño o la terraza.
• Numera las piezas. Fíjate cuando estés desmontando el grifo e identifica el lugar y posición de cada parte para luego colocarla adecuadamente. Incluso haz una foto.
• No te pases con la fuerza. Ojo al apretar las roscas y encajar las partes. Si haces mucha presión, puedes partir los ejes de las piezas internas.
• Mide el espacio. Antes de sustituir un grifo, toma bien las medidas. Escoger el grifo adecuado te evitará muchos problemas en el futuro.

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