Salones

Es crucial tener en cuenta diversos factores, como la luminosidad y las dimensiones del salón, si te gustan los colores oscuros. Estos contribuirán a que tu salón se vea más acogedor y elegante, pero es esencial equilibrarlos con una adecuada iluminación y considerar el tamaño de la estancia para evitar que parezca más pequeña o claustrofóbica. Una idea genial es pintar solo una pared con un tono oscuro. Lograrás un impacto visual sin sobrecargar el salón.

Uno de los estilos que mejor se adapta a las tendencias más modernas es el rústico. Aquí, este salón unifica lo mejor de ambos estilos. Por un lado, el uso de la madera y la chimenea central son señales de que esta casa se encuentra en el campo, concretamente cerca de Puigcerdà; mientras que las líneas rectas y sobrias son propias del estilo más contemporáneo. Pero si algo nos encanta de esta casa son los grandes ventanales a dos alturas que dejan que la luz sea la auténtica protagonista. 

Escoge siempre materiales naturales de calidad. Lino, madera y terciopelo es un trío que funciona bien y es capaz de transformar el aspecto de cualquier ambiente. Como decíamos, es importante que tengas en cuenta que el lujo silencioso tiene que ver con una forma de entender el interiorismo en la que lo más importante es personalizar el espacio.

La gama de los grises, beis, pastel y los tonos tierra, en su versión más suave, resultan muy elegantes. A lo largo de este artículo te hemos ido contando cómo puedes incorporarlos en la decoración del salón (cortinas o tapizados, sobre todo, como en la foto) para conseguir un toque de lujo silencioso.

"Opta por una paleta de colores neutros como beige, gris y blanco para una base elegante. Después, podrás añadir toques de lujo discreto con elementos en tonos suaves como dorado mate o champán, como marcos de espejo, pies de lámpara u otros complementos. Esta combinación aportará sofisticación y calidez a tu espacio de manera sutil", dice Olga.

A este salón solo le faltaba una cosa: la chimenea. ¡Y aquí la tenemos! Es el rincón ideal para envolver de calidez a este salón tan invernal. Nos dan ganas de pasar horas y horas viendo nuestra película favorita mientras disfrutamos de este ambiente tan acogedor y confortable.

A pesar de que la paleta cromática de los salones de otoño e invierno suele ser más neutra que la de los meses de calor, nunca está de más añadir un toque de color para dar vida al espacio. ¡Mira este salón! La solución para añadir esa frescura de forma discreta y nada extravagante, ha sido intercalar los cojines neutros con otros de un color azulado ideal. Además, las plantas de interior también acompañan a este efecto de salón despierto.

Las texturas, los materiales, las tonalidades y, por supuesto, el toque de la chimenea hacen que este grandioso salón sea una fuente de inspiración para cualquier estancia que quiera convertirse en un espacio que combate al frío de golpe. Nos encanta la combinación del tono blanco nieve de la alfombra de pelo con la mesa efecto tronco de árbol y los sillones en un verde azulado que brinda armonía a todo el espacio. Nos hace sentir como si estuviéramos en un bosque nevado pero al calor de la chimenea.

La elección de un sofá en color crudo para un salón con las paredes pintadas en verde proporciona un cambio significativo en la decoración. Este tono neutro equilibra la intensidad del verde, creando una estética armoniosa y contemporánea. Además, sirve como lienzo neutro para resaltar otros elementos decorativos.

En este salón, algo pequeño y decorado en tonos blancos y beis, el sofá introdujo un cambio dinámico y fresco. Su color verde añade un toque de vitalidad y energía a este espacio tan neutral, creando un contraste visual atractivo. El sofá se convierte en un punto focal que ha logrado revitalizar la estética del salón. 

Añadir un sofá negro a un salón que ya cuenta con un armario del mismo color transforma la decoración al reforzar la cohesión visual y acentuar la presencia del tono oscuro en el espacio. Un cambio que se traduce en un ambiente más sofisticado, donde el negro se convierte en el hilo conductor que une los distintos elementos del salón.

La imponente pared de piedra de este salón añade textura y carácter al espacio y favorece una decoración rústica. Sin embargo, el sofá gris claro de líneas rectas pone el contrapunto moderno. 

Un sofá blanco desenfundable puede transformar la decoración de un salón de manera notable al aportar luminosidad, frescura y versatilidad al espacio. Además, que sea desenfundable, no solo facilita la limpieza y el mantenimiento, sino que también permite experimentar con diferentes estilos y patrones a través de fundas intercambiables, adaptándose a las estaciones del año o a cambios en la decoración. 

Es lo que ganó este salón con el sofá chester de cuero en tono marrón oscuro. Su sola presencia eleva instantáneamente el nivel de sofisticación en el espacio y la rica tonalidad del cuero añade calidez y profundidad, creando un ambiente acogedor y refinado.

Gracias a su chaise longue, este sofá consiguió optimizar al máximo la zona de asientos del salón. Ofrece un rincón de relax perfecto y permite disfrutar de una amplia superficie para estirarse.

¿Qué sería de este salón sin un sofá de líneas rectas y tonos neutros que creará una transición armoniosa entre la zona de estar y el comedor? Sin duda, no sería un espacio tan bien definido ni presumiría del orden visual y de la sensación de confort que ofrece ahora.

Un juego de mesas nido de estilo retro y una alacena recuperada -todo, de madera oscura– hacían que en este salón se respirara un aire clásico, hasta que llegó él: un sofá modular en L, de formas redondeadas y respaldo bajo que, con su tapizado en tonos neutros y texturas suaves, introdujo una sensación de confort y modernidad al espacio. 

Con paredes en un tono beis muy suave, muebles de madera clara y una alfombra de fibra, este salón ganó una dosis de elegancia y un encantador look escandinavo gracias a dos sofás tapizados en azul intenso. 

Dafne lo tiene claro: "No subestimes el poder del negro para agregar un toque de elegancia a cualquier ambiente. Desde un cojín liso con un vivo negro, hasta una lámpara con pantalla de lino ribeteada en este mismo color, o una mesita auxiliar con patas negras. Eso sí, tampoco hay que abusar. Utilízalo de manera estratégica y con moderación".

Como bien apunta Sol, aunque no cuentes con un sofá de gama alta, vale la pena invertir en cojines de calidad de tejidos naturales en atractivas tonalidades. Esta simple adición elevará notablemente el nivel estético de tu salón, brindando un toque de elegancia sin necesidad de grandes gastos.

Haz de la lámpara tu signature piece (como dicen los ingleses). Desde una lámpara de araña hasta clásicos del diseño moderno que nos encantan, como la Frisbi, de Achile Castiglioni; la Disa, de Coderch; o la PH5, de Poul Henningsen, cualquiera que elijas le dará al salón un punto distinto y singular.

Si eres de los que va 'a lo grande', fíjate en la lámpara Vértigo, de Constance Guisset. También puedes decorar el salón de forma original con una lámpara de pie como la TMM, de Miguel Milá o la Arco: otro clásico de Castiglioni de los que quitan el hipo.

Verdes y terracotas son dos colores intensos y vibrantes que, en una pared, son un excelente recurso para aportar sensación de calidez en el salón. El negro o el azul marino también son muy buena idea para decorar una pared y añadir profundidad y calidez al espacio. Para rematar al conjunto, lo mejor es tapizar el sofá en blancos roto, naranjas, rojos o caramelo, por ejemplo. Cualquiera de estas cuatro opciones combina muy bien con los colores profundos que mencionábamos y añaden un punto cálido y acogedor.

Los espejos con marcos de mimbre, no solo aportan un toque boho en la decoración de este salón, sino que también ayudan a hacer que el espacio parezca más grande y luminoso.

Y disfruta de esos momentos de tranquilidad leyendo un libro, viendo tu serie preferida o echarte una rica siesta. Necesitas un sillón cómodo, una lámpara y una mesita en la que apoyar tus cosas.

"Coloca una cesta junto al sofá o en un rincón para guardar las mantas y que estén al alcance cuando quieras abrigarte", dice Eva.

El Día de Reyes, la mesa de comedor se convierte en punto de encuentro de la vida familiar por excelencia. Por eso, vístela con esmero. "Escoge, al menos, tres tonalidades o texturas diferentes para decorar tu mesa con manteles, salvamanteles, caminos de mesa, vajillas, cubertería, servilletas, velas, centros de mesa… Cada uno de estos elementos, le dará al comedor esa calidez y elegancia que buscas", dice Eva Mesa.

Y es que son geniales para hacer que tu casa se sienta más cómoda y acogedora. Son suaves y agradables al tacto, ayudan a mantener el calor en los espacios, como una capa extra de aislamiento, y son como héroes silenciosos, absorbiendo ruidos y haciendo que tu casa sea más tranquila. Eso, sin mencionar el valor decorativo que aportan a cualquier rincón.

Como dice Eva Mesa, no hay momento mejor que el invierno para que tu chimenea atrape todas las miradas y potencie esa sensación de calidez que tanto se necesita dentro de casa.

Con el objetivo de aprovechar la pared del gran ventanal del salón se instaló un banco en L hecho a medida. Está realizado en DM y lacado en el mismo color blanco de las paredes. El asiento abatible proporciona mucho espacio de almacenaje en el interior. Para hacer más cómoda esta zona, se utilizaron colchonetas para los asientos y cojines en la zona del respaldo.

Aunque no hay que pasarse, no puedes olvidarte de poner en tu casa las luces navideñas. Un error de Navidad muy común es olvidarnos de poner este toque tan luminoso y especial en estas fechas. Además de añadir un toque de luz, también nos adentra de lleno en el espíritu de las fiestas.

Si tu salón es el punto de encuentro para toda la familia en Navidad, seguramente también sea el lugar escogido para abrir los regalos. Por eso, que no falten nunca estos paquetes con un bonito papel y lazo que adornen la parte inferior de tu árbol de Navidad. Tu salón navideño estará decorado siempre con mucha magia e ilusión.

Para aquellos que viven la Navidad con mucha intensidad y en familia, no hay nada mejor que acentuar todos los adornos a lo grande (sin excederse). Por ejemplo, puedes reducir adornos en el resto del salón si escoges un árbol de grandes dimensiones que se lleve todo el protagonismo. Así, tu salón navideño lucirá como tal, sin necesidad de añadir más elementos en el resto del espacio.

A la hora de decorar nuestro salón navideño, hay muchas personas que prefiere hacerlo siguiendo un estilo muy tradicional. Para que quede bonito, escoge un árbol con la apariencia más natural posible, añade tus bolas de Navidad o adornos siguiendo una misma línea cromática o mezclando tonalidades con materiales que combinen bien (como el dorado y la madera), y pon luces de Navidad bien distribuidas. 

El blanco es el punto ideal para dar a tu salón un toque invernal y navideño. Junto a pequeños detalles rojos y dorados, tu árbol lucirá así de bonito. Pero además, para dar esa sensación de confort y calidez, puedes añadir textiles con tejidos y texturas invernales como el pelo o la lana. De esta forma, darán el punto navideño perfecto: decoración de Navidad, luces y accesorios para estar calentitos en casa. ¿Qué más podemos pedir?

Las chimeneas navideñas también son claras protagonistas en un salón al que se le quiere dar espíritu de Navidad. El árbol, las guirnaldas, las velas... todo suma para darle ese toque de tradición y calidez propio de estas fechas.

Las rayas son tendencia en la decoración del sofá en 2024 porque combinan bien con otros patrones, como los cuadros, y porque aportan volumen y rompen con la monotonía de lo liso ahora que en el hogar se apuesta por una decoración maximalista. Prueba a combinar una butaca a rayas con un sofá liso. También puedes optar por rayas anchas en el sofá y más estrechas en el reposapiés, pero siempre del mismo tono.

En esta temporada del año, donde los días se acortan y la luz natural disminuye, Paula tiene una estrategia efectiva para infundir calidez y atención en los espacios: añadir pequeños detalles de iluminación en rincones que tienden a quedar en penumbra. "Coloca estratégicamente lámparas, ya sea junto a la chimenea o en las baldas de la librería, para crear puntos de luz que, además de una función práctica, generen una atmósfera acogedora y focalicen la atención en esos lugares específicos".