El secreto del éxito del método de The Home Edit podría resumirse en tres principios básicos: una estética característica basada en el orden por colores, el uso táctico de contenedores de almacenaje y un enfoque sistemático a la organización que está pensado para resistir cualquier desastre que uno a posteriori. ¿Parece fácil, verdad? Un consejo, antes de ponerte manos a la obra, sigue estos consejos de Clea y Joanna:
Paso 1: Empieza por poco
Según estas nuevas gurús del orden, el mayor error que cometemos al organizar nuestra casa es tratar de "purgar" y organizar simultáneamente. Para Clea y Joanna es básico empezar por liberar espacio y eliminar el desorden antes de organizar. De hecho, ellas son de la opinión que nuestra casa debería estar, como máximo, un 80% llena.
Su consejo a la hora de ponerse a ordenar es empezar por áreas específicas, pequeñas y fáciles –por ejemplo, un cajón– y avanzar hasta las más difíciles, como la despensa. "Siempre debes abordar un espacio de principio a fin antes de pasar al siguiente", sostiene Joanna.
Paso 2: Clasifica, categoriza y etiqueta
Una vez que hayas eliminado los elementos que ya no necesitas, toca clasificarlo todo. Es un paso que comparten la mayoría, sino todos, los expertos en orden. Extiéndelo todo, agrupa los elementos en categorías y guárdalos en contenedores específicos: "Al utilizar recipientes diseñados para encajar, aprovecharás al máximo el espacio en tu despensa y evitarás tener que jugar al Tetris con la comida". Y, sobre todo, etiqueta cada contenedor: "Las etiquetas son como la policía: te exigen que cumplas", dice Clea.
Paso 3: Prioriza el uso, no la estancia
¿El salón, además de ser la sala de reunión familiar, es también la zona de juegos de los niños ? "Piensa en las formas en que una estancia funciona más allá de su propósito central", explican Clea y Joanna. Una vez hecho esto, crearás muchas más oportunidades para la organización asignando artículos específicos a espacios de almacenaje específicos dentro de la habitación donde se usan. Siguiendo el mismo ejemplo, tendrá todo el sentido del mundo que en el salón incluyas un mueble o un cesto para guardar sus juguetes.
¿Te atreves a empezar?