Aparadores

Incorporar un mueble recuperado con efecto decapado a tu recibidor es una alternativa perfecta para lograr un ambiente original y rebosante de estilo. Puedes elegir un aparador, una cómoda o una alacena. Todo dependerá del espacio disponible. Combínalo, por ejemplo, con un banco como el de la fotografía y tendrás el conjunto perfecto.

Un mueble antiguo añade carácter y personalidad a cualquier espacio. En este recibidor luminoso, el aparador pintado en verde y con efecto decapado se convierte en la pieza protagonista, junto con la lámpara de techo de lágrimas de cristal. Los dos espejos idénticos y las lámparas de mesa con pie de cerámica en negro crean una composición simétrica y aportan equilibrio al conjunto.

Elegante y muy acogedor. Así es este recibidor proyectado por la decoradora Natalia Zubizarreta, que combinó un arrimadero clásico, en sintonía con el espacio, con un papel pintado textil que sube la temperatura del espacio y lo hace, además de más vestido, más arropado. 

Este recibidor, decorado por Meritxell Ribé, es la estampa de la calidez: un mueble de madera, un arrimadero que viste las paredes, papel pintado textil y una cuidada iluminación cálida, que envuelve el espacio y lo hace más acogedor y cosily. 

"Si tienes espacio para un aparador, escoge un modelo multiusos, con cajones y puertas, donde poder guardar cosas extras además de la vajilla". 

Nuestro cerebro asocia los tonos amarillentos con calidez, confort y relajación. Por eso, si queremos que en nuestra casa domine una atmósfera acogedora, es importante lograr una luz de ambiente cálida o neutra que genere ambientes agradables e íntimos. Para lograrlo, juega con varios puntos de luz: lámparas de sobremesa o de pie. Cada estancia tiene su truco, igual que los tiene iluminar el salón. 

Renovar la pantalla de la lámpara de sobremesa es otro cambia fácil, rápido y muy económico que da un resultado espectacular. Si buscas un efecto más cálido, apuesta por pantallas textiles, tamizan la luz y crean una atmósfera más acogedora. 

Las molduras se han convertido en un recurso muy fácil y, a la vez, de tendencia, para decorar y personalizar un espacio. Y olvídate de la idea que las molduras son un recurso clásico. Elígelas de segmento recto y obtendrás un efecto estiloso y, a su vez, actual. 

Decorar el recibidor con un arrimadero es una idea fácil y, a la vez de decorativa, muy práctica. Y es que un arrimadero te ayudará a proteger las paredes de roces y golpes. Aquí la decoradora Natalia Zubizarreta recuperó los arrimaderos originales y los lacó en blanco, para darle claridad y ligereza al hall. 

Las alfombras tienen un gran poder transformador del espacio. No solo lo vistes más, dándole un look más "acabado" y acogedor, sino que ayudan a delimitar visualmente un espacio. Y en recibidores, ofrecen, además, una cálida bienvenida. Lo ideal es optar por un diseño de pelo corto –acumulan menos suciedad que las de pelo largo– y poco grosor, para que no sea un obstáculo al abrir la puerta. 

Las plantas de interior son un recurso decorativo que elevará la calidez de cualquier aparador. Elígelas proporcionadas al tamaño del mueble. En este de la imagen, Solange Van Dorssen las ha acompañado de otros elementos, como cuadros o lámparas.

Fíjate en el mini terrario de pequeñas crasas situadas dentro de una cajita de cristal. Demuestran que la belleza no entiende de tamaños.

Es evidente, ¿verdad? Y es que los cactus son las primeras plantas que se nos vienen a la mente cuando pensamos en California.

Tratándose de un estilo en el que manda lo orgánico, lo vegetal y lo sostenible, la madera es, sin lugar a dudas, el material protagonista. Además, en tonos claros, que potencian la luz, son visualmente ligeros y crean decoraciones modernas y sencillas. Combínalo con blanco, añade alguna pieza de madera en bruto y el éxito estará asegurado.

Tres formas diferentes de presentar las plantas en un aparador de madera: en maceta de mimbre, en tubitos de ensayo de cristal pensados para esquejes o en una urna de cristal donde agrupar un conjunto de mini crasas. Por separado o todas juntas, como ha hecho aquí Solange Van Dorssen, la verdad es que quedan la mar de bien.

Es un básico del recibidor. Porque será el último sitio donde nos vamos a mirar antes de salir de casa. Pero, además de práctico, es una pieza muy decorativa que te ayudará a crear una bonita composición en el recibidor. Los tipo ventana o con cuarterones nos gustan mucho por su elegancia y valor decorativo. Si no quieres colgarlo, puedes apoyarlo sobre el mueble, dará un look más casual y además podrás jugar con los diferentes elementos para variar la composición de manera fácil y rápida.

Si cuentas con iluminación general, ¿por qué una lámpara de sobremesa, podrías pensar? Por muchas razones. Una lámpara de sobremesa decora y, si eliges una pantalla de tela, ofrecerá una luz muy cálida y agradable, ideal para darte la bienvenida a casa. Lo ideal es que podamos encenderla desde el hall, para poder entrar en casa y darle a esa luz sin necesidad de encender los focos del techo. En cualquier caso, opta siempre por leds cálidos, de unos 2.700 ºK. 

Tiene fama de ser un color frío pero no será así si te alías con las texturas. El interiorista Roger Bellera ha añadido un cabecero de madera, lanas y linos para equilibrar la temperatura. Gracias a ellos ha logrado llenar de color y calor este dormitorio.

En lugar de que la solución cubra toda una pared, escoge un diseño a medida que se adapte a las necesidades del espacio y a las que tengas (guardar zapatos, organizar mochilas, almacenar papeles de casa…). Podrás salvar pilares, llevar el mueble hasta la altura de la ventana o integrar un radiador. Aprovecha todo el largo de la pared para compensar el fondo reducido que debe tener una pieza de este tipo a modo de aparador.

Los muebles de rejilla o cannage regresan con mucha fuerza y este otoño para Natalia Zubizarreta serán un básico en sus proyectos. Lo veremos en sillas, muebles, cabeceros y más. "Es el material estrella últimamente y coge fuerza", indica.

Cuando un recibidor es grande, puedes permitirte alguna licencia más, como colocar 2 grandes espejos gemelos sobre un gran mueble, que haga contraste. Aquí la modernidad de estos, tipo ventana, son el contrapunto del aparador recuperado.  

Si un espejo funciona bien en un recibidor pequeño, en uno grande, como este, suma calidez, regala luz y llena de estilo. Un aparador de madera y un espejo tipo sol, como los elegidos por la interiorista Natalia Zubizarreta, harán delicias en la entrada de tu casa. 

Las duras y modernas líneas del aparador de madera que decora este recibidor se ven suavizadas gracias al espejo redondo. La lámpara y adornos de cerámica blanca se suman a ese objetivo. Y todo crea un fantástico contraste con las molduras de las paredes, que crean un conjunto equilibrado.   

Si un espejo en el recibidor es el complemento perfecto, si, además, se trata de un espejo ventana el éxito está asegurado. Ten en cuenta, además, que siempre quedará bien apoyado sobre el mueble, de manera desenfadada y algo informal.  

Si haces como en este salón y te decantas por decorar con una gama de tonos neutros y cálidos, ganarás una estancia acogedora y hogareña. El blanco aportará luz, y la madera potenciará la calidez de los neutros.

Es cierto que, a la hora de decorar el salón, prestamos poca atención a las cortinas. ¡Si es tu caso, cambia el chip! Cuelga de las ventanas unas de lino con caída espectacular y en colores neutros. Como estas con las que ha modernizado el salón la interiorista Solange Van Dorssen.

Si tu recibidor es de estilo clásico y está dominado por líneas rectas muy marcadas, como este de la imagen con las molduras y el aparador, ¡dale dinamismo! ¿Cómo? La interiorista Natalia Zubizarreta ha optado por colocar un espejo redondo para dotarlo de movimiento. Ha elegido un bonito modelo de diseño que no deja indiferente a nadie.

Lo tiene claro: nunca frente a la puerta de entrada. ¿El motivo? La energía que entra rebotaría en él y saldría. Mejor coloca el espejo en un lateral. Es lo que ha hecho en este recibidor la interiorista Marta Tobella.

Los detalles en azul nos ayudan a poner ese toque elegante de la colección otoño-invierno de El Corte Inglés Home. Lo hemos usado en la alfombra y en el aparador de inspiración oriental Xian (850 €).

Una buena opción para comedores de reducidas dimensiones es optar por una mesa de comedor redonda. Puede ser fija o extensible. La ventaja es que al no tener esquinas los pasos son más fluidos y el rincón se sentirá más ligero. Es perfecta tanto si ocupa una zona de paso como si queda en una esquina.

Junto al comedor, un mueble auxiliar decora, pero también cumple una función práctica de almacenamiento. Podrá ser más o menos voluminoso según el espacio. Aparadores, vitrinas y alacenas; incluso carros auxiliares o librerías, son muebles perfectos para organizar vajillas, cristalería, mantelería y cubertería.

Lo mismo que indicamos como error decorativo garrafal no iluminar bien el comedor, no aprovechar la luz natural al máximo es otro de los fallos de la lista. Si hay ventana cerca de la ubicación del ambiente, hay que multiplicar la luminosidad con cortinas que tamicen sin oscurecer y con tonos en las paredes que reflejen la luz.

Si en tu apartamento pusiste esos muebles que no usabas y están desfasados , ¡píntalos con chalk paint! Estrenarás mueble por muy poco dinero. Y no solo blancos, que siempre funciona. Atrévete con colores en pequeñas piezas, como este aparador en azul grisáceo.

En El Mueble somos muy fans de los decapados de pintura, y es que se trata de un método ideal para darle personalidad y espíritu nostálgico a cualquier pieza. El aparador de este salón, por ejemplo, potencia su estilo vintage gracias al decapado en color verde agua, una apuesta muy fresquita e ideal para el verano.

Los materiales naturales en paletas sosegadas son el contrapunto perfecto a la decoración de verano más colorida. Nos referimos al estilo Japandi, que gana terreno entre las tendencias más punteras por su frescura y su sencillez.

Con una pared tan espectacular como esta, decorada con molduras blancas ¿quién necesita cabecero? El propio muro acicalado se alza como protagonista y se convierte en el luminoso cabecero de cama de este dormitorio. Y para no restarle protagonismo, a los pies se ha colocado un sencillo banco de bambú, a juego con la butaca.

Las plantas siempre han estado de moda, lo único que ha variado es su número, su tamaño y su ubicación. Antes solo decoraban jardines y terrazas pero ahora invaden los interiores dándoles alegría, frescor y ese toque green tan actual. Si quieres que tu casa sea cool, coloca plantas en puntos estratégicos y elige maceteros súper bonitos para que luzcan todo su esplendor.

Poner en alza la belleza de las piezas hechas a mano va a seguir en auge durante los próximos meses. Si quieres seguir esta moda a pies juntillas, opta por proteger el suelo del salón con alfombras artesanales. Los motivos geométricos, tipo kilims, y los diseños orientales llenarán de color y estilo la zona de tertulia, el comedor o una zona de paso, como este decorado por las interioristas Marta y Marieta Yanguas y Marta Gómez de la Serna.

En este salón se ha jugado, de nuevo, con el contraste para crear un estar tan moderno como personal. Así, se ha optado por un sofá y una butaca de diseño, de líneas curvas y orgánicas que destaca sobre la arquitectura señorial de este salón, creando un conjunto decorativamente muy interesante. 

Las lámparas de sobremesa antiguas pueden actualizarse con el simple hecho de sustituir la pantalla. En este recibidor de la imagen la interiorista María Santos ha elegido un modelo con base vintage de vidrio soplado en forma de huevo y detalles dorados y la ha modernizado con una pantalla blanca con bordes negros. Acompáñala de cuadros y libros. El resultado —perfectamente asumible en un salón— ¡no puede ser más elegante!

El aire de casa también debe "limpiarse", en este caso, de CO₂ y de otras partículas invisibles que pueden resultar nocivas. Y la mejor manera de hacerlo es ventilándola, al menos, 10 minutos cada día. ¿Cuándo y cómo debemos ventilar la casa? Lo ideal en invierno es hacerlo al mediodía o aprovechar el momento en que incida el sol para que entre lo menos posible el frío en casa, mientras que en verano se recomienda hacerlo al caer la tarde. 

La decoradora Solange Van Dorssen ha colocado sobre un aparador este precioso cuadro botánico con un discreto marco negro. ¿El objetivo? Es una clara llamada de atención. Si te fijas en el cuadro, tu mirada desembocará en el mueble. Y sí, se siguen llevando apoyados en el suelo, la chimenea o la pared. Un truco: elige un cuadro vertical en un mueble horizontal para dar dinamismo a la estancia.

Para disfrutar de las vistas, cuando estas merecen la pena, otra idea para colocar el sofá en el salón es orientarlo hacia la ventana. De esta manera se crea una zona de estar muy agradable. En caso de que haya televisor en el salón, este puede ubicarse delante de la ventana en un mueble bajo o quedar en una bancada de audiovisuales en un lateral de manera que el sofá no quedará enfrentado a este mueble.