¿Qué tipo de mueble queda mejor en mi salón? La decoradora Pia Capdevila cuenta los pros y contras de 5 básicos

La librería es, con permiso del sofá, la gran estrella de un salón. Su principal ventaja salta a la vista: su gran capacidad para guardar y su poder para embellecer un espacio, ya sea con su diseño o con su contenido. Y es que, como destaca la decoradora Pia Capdevila, los libros son objetos que decoran. "Además, si se diseñan a medida, tienen la capacidad de aprovechar espacios allá donde sea. Y, aunque no lo parezca, logran conseguir amplitud al jugar con distintos planos y volumetrías", apunta la decoradora. 

Aunque parezca que todo son ventajas, las librerías también tienen sus contras: "Es importante que tengas una buena colección de libros para que no se vea vacía y pobre. Y cuanto más grandes son, más bonitas, por lo que se necesita espacio, cosa que a veces no es posible", sostiene la decoradora. 

"Los bancos, sobre todo si los planificas a medida, son un gran recurso para aprovechar el espacio al máximo, como el hueco debajo de una ventana, por ejemplo. Con el plus que ocupan menos que las sillas. Además, logran ser extensiones del estar y, equipados con unas colchonetas y cojines, decoran muchísimo. Y si los planificamos con almacenaje serán un recurso para guardar", apunta la decoradora. 

El precio es su principal handicap, según Pia Capdevila: "Suele ser una inversión elevada, sobre todo cuando lo planificas a medida y con almacenaje interior. Además, siempre es un mueble a medida que raramente vas a poder aprovechar en caso de traslado". 

Hace unos años, el mueble de la tele era un básico más del salón. Era inconcebible que, en un hogar donde hubiera tele, no hubiera un mueble donde ubicarla. Pero la irrupción y proliferación de las teles planas y su posibilidad de colgarlas a la pared y liberar, a su vez, espacio en el salón, ha hecho que sea un mueble que, en palabras de Pia, "empezamos a no poner".

Suelen ser piezas muy decorativas, pero en su contra, "es habitual que ocupen mucho espacio y, si cuentan con cajones, son más incómodos que las puertas", sostiene Pia Capdevila. 

Pia solo le ve ventajas a las mesas de centro, de hecho, "no creo que haya contras. A no ser que sufras por los niños. Pero en este caso buscaría piezas de cantos redondeados". Entre sus ventajas, la decoradora destaca que "una mesa de centro ayuda a marcar espacios y tiene una doble función, por un lado, decorar, y por otro, de apoyo. Y, las que cuentan con doble piso, además, ofrecen almacenaje".