Baños

Si te enamoras de un llamativo papel pintado y tu baño es grande, no tengas miedo a colocarlo en tu casa. Ten en cuenta que el papel pintado es un revestimiento más económico que otros y que podrás renovar fácilmente si te cansas de él. 

Gracias a la cantidad de espacio que conceden 10 metros cuadrados, podrás colocar la bañera en una posición protagonista. En este bañom, la interiorista Paula Duarte la ha colocado en el medio, paralela al mueble de baño y dejando la ducha apartada al fondo. 

Hay acabados que tienen tanta fuerza que decoran por ellos solos. Uno de los más populares es el mármol, un revestimiento que es sinónimo de sofisticación y lujo. En este baño se ha empleado para paredes y suelos, pero también para revestir la zona de la ducha, que queda completamente escondida tras la pared que sostiene el mueble de baño. 

Otro de los recursos que se pueden emplear para dar personalidad a un baño grande son los revestimientos. En este caso, son los suelos hidráulicos de este baño los que aportan carácter y ayudan al espacio a salirse de la norma. También el mueble de azul índigo gana protagonismo gracias a los revestimientos blancos. 

Este baño de menos de 10 metros cuadrados está planificado para dar servicio a toda la familia. Y por eso se diseñó con un gran mueble de baño que regalara muchísimo almacenaje. Y no solo eso, sino que también se aprovechó la pared con la pequeña ventana para colocar un armario empotrado, perfecto para guardar las toallas o los objetos de menos uso. Es un proyecto de Blanca Ferré.  

Una de las ventajas de tener un baño grande es que uno puede concederse más licencias decorativas. En este baño, la interiorista Gabriela Conde ha combinado un acabado distinto a cada pared, incluyendo suelos y techos. Para que entone, en todos predomina el blanco, con pequeñas pinceladas de azul. ¿El resultado? Un baño original, fresco y único.  

Este baño de 9 metros cuadrados lo tiene todo. Gracias a su planta alargada se ha podido colocar un mueble a lo largo de toda la pared. Y no se ha renunciado ni a la ducha ni a la bañera, que se agrupan juntos a uno de los lados del baño tras una mampara con puerta abatible y sin perfiles. 

En un baño de planta cuadrada es posible colocar los elementos a los lados de la estancia, permitiendo que el espacio libre sea mayor y que pueda ser utilizado por dos personas sin molestarse. En este baño, proyectado por la interiorista Carmen Figueras, la ventana actúa como el elemento sobre el que giran el resto de elementos. 

Cuando los metros sobran, es posible planificar un baño con todas las comodidades. En este, de la interiorista Anna Vendrell, hay almacenaje gracias al enorme mueble de baño, una ducha separada con un murete y hasta bañera. Además, al contar con ventana y revestimientos en blanco, la luminosidad está garantizada. 

Cuando la planta del baño es alargada, lo habitual es colocar los sanitarios y elementos a lo largo de una sola pared. En este baño, los interioristas Asun Antó y Javi Baldrich, de Coton et Bois, colocaron un murete a media altura que concede cierta intimidad al inodoro. Detrás, tras una mampara fija con perfil negro, se ubican la ducha y la bañera. 

Si quieres que tu baño se vea más grande, hay alternativas como los revestimientos XXL o el microcemento que eliminan las juntas a la mínima expresión. Y en baños grandes, como este que no supera los 10 metros cuadrados, son todo un acierto. De hecho, gracias a la cantidad de espacio que hay se ha podido separar la zona de la bañera y la ducha con una puerta, de forma que resulta más íntimo y privado.  

La retroiluminación, ya sabes, un tipo de iluminación indirecta oculta detrás de los espejos, sigue ganando adeptos a la hora de iluminar la zona de los lavabos. Más aún, en baños pequeños, ya que, esta solución, además de multiplicar la luz y la amplitud, deja las paredes despejadas.

La moda de las formas orgánicas llega también a la decoración de los baños que, en el caso de los espacios mini, es ideal. ¿Quieres saber por qué? Estas líneas dan lugar a piezas redondeadas, que generan espacios confortables y visualmente más ligeros.

Cada vez es más habitual prescindir de bidé, más aún, en baños pequeños, donde cada centímetro cuenta. Por eso, los inodoros con bidé incorporado se han convertido en una opción muy demandada entre quienes deciden reformar el baño. También las duchas higiénicas están en el top de las tendencias.

Todo apunta a que en 2023 recuperaremos la esencia elegante y glamurosa del estilo Art Decó, que vuelve a la decoración de nuestras casas, aunque de forma sutil, eso sí. Lleva esta tendencia al cuarto de baño con un papel pintado con motivos geométricos como cubos, círculos, arcos de medio punto, rombos y triángulos. Y como no queremos que el baño se vea más pequeño de lo que es, reserva los estampados para una sola pared y decora las demás de un color liso, en la gama del papel.

Si prefieres no cambiar tu espejo, puedes optar por instalar, bien unos apliques de pared, bien unas lámparas suspendidas a cada lado. Pero si quieres ser fiel a la últimas tendencias, busca diseños especiales, con personalidad. Y lo más importante, asegúrate de que la luz no se refleja en el espejo. 

El minimalismo cálido que comenzó su reinado hace un par de temporadas, sigue mandando en 2023. Son espacios despejados, en los que prima el orden, la sencillez y la funcionalidad, decorados con materiales naturales y todo en una gama de tonos neutros muy suaves. Una estética que parece diseñada especialmente para baños pequeños, ya que contribuirá a ampliar los metros de forma visual.

Baño con revestimiento, de microcemento. Papel pintado, de Sandberg.

Asun Antó es partidaria de añadir un marco al espejo del baño. No es necesario descolgar el espejo, basta con añadirle un marco de madera o de colores claros encima y tendrás un espejo nuevo. 

Mª Lluïsa Malagarriga se centra en la importancia de los detalles. “Con tan solo cambiar las manillas de las puertas parecerán otras” asegura. Otra manera económica y original de renovar los armarios es hacerlo con fotografías. Es muy sencillo y muy adecuado, por ejemplo, en dormitorios juveniles. Se elige la foto, se imprime en un vinilo y se coloca forrando las puertas. Y ya tienes un armario nuevo. 

En el baño, la madera de pino sigue siendo la protagonista. La vemos en el techo abuhardillado, pero también en las carpinterías y el marco del espejo. Para darle más ligereza, se eligió un mueble abierto que se decoró con cestas de fibras. 

¿Y el baño, cómo puedes modernizarlo en 2023? Una idea fabulosa es esta que nos sugieren el arquitecto Fernando García en este baño en suite. Bueno, dos: un mueble volado en el que descansa el lavabo y un súper espejo, a modo de ventana, que va de pared a pared, para duplicar el espacio.

Otra de las fabulosas ideas que vemos en los dormitorios modernos es integrarle el baño. Y hay variadas propuestas de cómo hacerlo: abierto totalmente, con un medio tabique, con una celosía...

En esta imagen, el baño se incorpora visualmente gracias a la sustitución de una pared por una cristalera que, a modo de pecera, deja la zona del lavabo a la vista. Los lavabos exentos y los espejos redondos también lo modernizan.

Como en el salón o el dormitorio, basta con modernizar el baño con un mueble súper particular. Este lo es. Ha sido diseñado por la interiorista Gracia de Amescua para su propia casa.

Sorprende con su frente de madera alistonado con relieve que contrasta con la encimera negra y los lavabos en negro y cobre. La grifería empotrada, las lámparas tubulares suspendidas y el espejo sin marco también ayudan a su actualización.

En este baño semiabierto al dormitorio, el interiorista Javier Merediz nos da varias ideas fabulosas para modernizarlo. ¡Toma nota! Mueble volado, lavabo exento, grifería empotrada, mini celosía que separa ambas estancias y espejos retroiluminados. ¡Solo podemos aplaudir esta propuesta tan actual!

La interiorista Pia Capdevila apunta que las piedras, ya sean naturales, sinterizadas o superficies porcelánicas que simulan su acabado, seguirán marcando tendencia en 2023. Al igual que ocurre con la madera, su uso ya no se limita a revestir con elegancia suelos y paredes, sino que las piedras también dan forma a todo tipo de piezas de mobiliario de gran personalidad. 

Si cuentas con espacio, integrar el vestidor en el baño es una opción muy práctica, ya que tienes la ropa al alcance al salir de la ducha, y además liberas espacio en el dormitorio. En este vestidor, que encontrarás en nuestro número de marzo, se han enfrentado dos armarios gemelos en la entrada del baño. Sus puertas se han diseño a juego con la carpintería de la casa. Y el toque negro de los pomos va en sintonía con la griferías negras del baño. 

Este vestidor, organizado con dos completos frentes de armarios en L, pertenece a una súper suite de más de 40 m² que cuenta, además de con dormitorio, con zona de estar y baño. El vestidor, que apareció en El Mueble de julio, era una habitación contigua que se abrió al espacio y se destinó por completo a vestidor. Para darle más encanto, la decoradora Asun Antó ideó los armarios con molduras y pomos en negro, a juego con los del mueble del baño, y enteló sus frentes. Su look es más elegante y acogedor. 

La decoradora Cris Afán de Ribera aprovechó el acceso al dormitorio y al baño con este completísimo vestidor en U, con dos frentes paralelos simétricos. Acristalado, es ligero y muy decorativo. Al verse el interior, la decoradora revistió la estructura con laminado de roble, para darle un plus más decorativo y sumar calidez a un espacio de techos altísimos. Este vestidor apareció en nuestro número de febrero. 

Y relacionado con la idea de incorporar la tecnología, una de las tendencias cada vez más demandadas está relacionada con la reforma del baño. Se trata de sustituir los inodoros convencionales por modelos inteligentes que cuentan con sistema de lavado, calefacción, sistema higienizante… Si ya vemos con frecuencia la instalación de duchas higiénicas junto a inodoros, este es un paso más.

La decoradora Marta Tobella aprovechó el hueco libre entre la ducha y los sanitarios para colocar este mueble hecho a medida doble. Tiene mucha capacidad y visualmente es ligero. Se han combinado dos hileras de cajones en cada módulo porque aprovechan mejor el espacio que los armarios y, abiertos, dejan todo el contenido a la vista gracias a su extracción total. Este mueble realizado a medida de roble con 4 cajones y 2 hornacinas costó unos 1.500 €.

Ese mueble de baño diseño de Natalia Zubirreta parece un cubo de madera. Fue diseñado por ella misma en roble natural y acabado mate. Es cálido, moderno y tiene mucha capacidad. La encimera y los cajones están cortados a inglete, lo que da continuidad al mueble. Mide 200 x 50 x 60 cm, pero al estar volado, y no llegar al suelo, resulta ligero visualmente. Y, además, ¡es algo que facilita la limpieza del baño! Este mueble costó unos 3.600 €. 

Pia Capdevila diseñó un gran mueble lacado en gris para este baño con el objetivo de que conservara el look monocolor y ocupara todo el espacio bajo el espejo de pared a pared. Tiene un solo lavamanos, así que queda libre mucha superficie de encimera para disfrutar de ella y dar sensación de orden. El mueble bajolavabo costó 2.800 € fabricarlo. 

Begoña Susaeta, de Sube Interiorismo, aprovechó la luz natural de este baño y planificó una gran ducha que recuerda a un spa. El mueble está realizado a medida y es diseño de ella misma, con unas hendiduras que aportan elegancia y practicidad a la vez, y costó 2.450,53 €. Además, el azulejo amarmoldado del frente de espejos dan un toque especial al baño. 

Este original baño es proyecto del estudio Elba Danel. Para hacerlo aún más personalizado, la mampara está hecha a medida fija y es diseño de la decoradora. Es ideal porque permite aprovechar la luz que entra por la ventana e iluminar así toda la estancia. El mueble, de madera maciza, es también obra de la interiorista y costó 907,50 €. Se buscó una base monocolor y para contrastar añadieron elementos externos de hierro, piedra y madera maciza.

Si tienes un baño pequeño, lo mejor es que elijas modelos volados en los muebles y sanitarios. La estancia se agrandará visualmente y no saturarás el espacio. Esto es lo que se consiguió en este baño con el mueble hecho a medida en color blanco. Si dejas la parte inferior libre, y colocas unas cestas en el suelo en un banco, podrás depositar las toallas y así poner orden. ¡Mezclar blanco y madera siempre es un acierto!

En el número 721 de El Mueble del mes de julio, el estudio Egue y Seta nos recordó que la mejor idea para un piso pequeño es dotarlo de un baño en suite.

Y nos ofreció esta magnífica propuesta, una celosía de madera que lo integra dándole privacidad y personalidad. La luz se filtra entre los listones y ofrece un juego de sombras muy decorativo.

Acristalar el baño fue la solución para que tuviera luz natural. El espacio puede tener intimidad con una cortina de screen y los espejos cuelgan del techo. Es un proyecto llevado a cabo por Antinea Interiorismo y la decoradora Marta Noguera.

El bajolavabo de obra, revestido de cemento de cal griego de Kourasanit, está integrado en el dormitorio a modo de tocador. Las fibras naturales también son muy útiles para conseguir espacios acogedores.

Si tu baño pequeño tiene un gran ventanal, ya tiene mucho ganado. El paisaje exterior da profundidad visual al espacio. Así fue este proyecto de Estudio Boira que pudimos ver en el número 717, correspondiente al mes de marzo.

La bañera, ubicada bajo la ventana, hace que se pueda ver el cielo mientras se está en el agua y el mueble volado aligera la estancia revestida de cemento y madera. 

En el baño también se incluyó algún delicado detalle navideño, como los mini árboles que decoran la encimera o la estrella luminosa junto al lavamanos. 

Los baños de los pisos pequeños suelen ser minis. Para aprovecharlos al máximo, en el número de febrero encontramos este proyecto de Elisa Martínez y Odone Elorza.

¿Sus magníficas ideas? Colocar una mampara sin apenas perfilería que se pliega por completo y unas baldas que hacen las veces de mueble bajolavabo. La de arriba acoge el lavamanos y la de abajo sirve para dejar toallas. El espejo redondo le da amplitud y dinamismo.

Nos encantó este apartamento de 32 m², reformado por el arquitecto Rafael Fullana, que publicamos en el mes de febrero. Su clave radicaba, por un lado, en derribar los falsos techos para ganar altura; y por otro, en levantar un tabique de un metro rematado en una cristalera.

Así la zona de día quedaba separada de la de noche y se ganaba privacidad sin restarle luz. Otra idea genial para pisos pequeños es integrar el baño en el dormitorio.

La interiorista Sylvia Preslar proyectó este dormitorio en un suave tono crema y granate para jugar al contraste. El color Viva Magenta lo llevó al papel pintado que recubre la pared del cabecero y a los arrimaderos a media altura. Tonos que se repiten en la ropa de cama. 

Terraza Balear nos regala otro sitio donde colocar las plantas de interior para decorar un baño pequeño. Sobre un taburete o en las baldas de la pared, por ejemplo, para no restar espacio.

Una hiedra será la variedad perfecta para verla descender poco a poco cada día, tumbada en la bañera.

El baño es una estancia en la que hay mucha humedad. Por eso, deberás elegir plantas de interior que la absorban, como calatea, espatifilium, cintas o hiedra.

Decora con ellas ubicándolas bien en el suelo, si son grandes y tienes suficiente espacio o en un rincón del mueble del lavabo, si son pequeñas. Así nos las muestra en este baño la interiorista Asun Antó.

Otra manera de decorar el baño con plantas es colocarlas junto a la bañera. Si eliges una variedad portentosa, verde y de hojas grandes, le dará un toque sofisticado a tu baño. Este de la imagen te invita inmediatamente a meterte en ella y relajarte con las vistas de dentro y las de fuera.

En el baño, el mueble es antiguo y Natalia cambió los tiradores. "De El Mueble he cogido muchísimas ideas, entre ellas jugar con las alfombras para dar calidez. Creo que las orientales dan muchísimo estilo… El look fresco al combinarlas con otras de fibras lo saqué de la revista", señala. 

Dentro de la bañera, en el suelo o en cestas, los regalos de Navidad también pueden invadir el cuarto de baño. ¡Y prueba de ello es este de la imagen!

La Navidad es un poco loca —y más si hay niños— y admite escenas imposibles en otros momentos. Podéis encontrar los paquetes allí pero estaría bien que os los llevárais al salón para abrirlos con tranquilidad.