7 cosas desfasadas que parecen de tu ABUELA y que ahora mismo son una tendencia absoluta

¿Te acuerdas de esa alacena que presidía el salón, el comedor o la cocina en casa de tu abuela? Que sepas que vuelven a estar de moda. En su interior puedes guardar vajillas, libros o lo que quieras. Moderniza la madera oscura, pintándola de colores claros y, si quieres, puedes forrar la trasera con un papel pintado bonito.

En el recibidor de mi abuela siempre me llamaron la atención dos piezas decorativas: un brasero de latón y una damajuana verde de vidrio que años más tarde heredé. Estos botellones transparentes están a la orden del día. Se presentan ahora en tamaños más pequeños y decorados con ramas de eucalipto, olivo o pampas. Marta Jaúdenes y Olivia Reina han utilizado estos jarrones para decorar la mesa tocinera de este salón y como base de la lámpara de sobremesa. Dos ideas que actualizan este elemento.

"En la cacerola de cobre los guisos se hacen mejor y se mantienen calientes por más tiempo" proclamaba mi abuela a quien quería oírla. ¡Y cuánta razón tenía! Las sartenes y las ollas de cobre son tendencia. Pablo González las ha introducido en esta cocina rústica. Duraderas y antibacterianas, las piezas actuales se recubren de estaño o acero inoxidable para evitar el famoso cardenillo (esa capa verdosa y tóxica que se formaba al cocinar salsa de tomate u otros ácidos).

¿Quién no se acuerda de su abuela con la aguja de ganchillo en la mano? Las técnicas artesanas como croché, macramé y cerámica son el último grito en decoración. Los tradicionales tapetes de antaño se convierten en otras piezas más actuales, como cabeceros, guirnaldas o decoraciones de pared. Mireia Pla ha elegido esta obra de macramé para decorar este dormitorio.

En el capítulo de revestimientos, los materiales naturales, como el ladrillo y la piedra, están al orden del día. En casa de mi abuela materna, había una pared de ladrillo visto pintada en un color Marsala brillante que hoy habría dado el cante. Celi Colomer ha respetado en esta cocina la pared de ladrillo, pero la ha pintado de blanco mate para darle más luz y amplitud.

Que levante la mano quién no ha visto este artilugio en casa de su abuela. Se llama platero, es de madera y viene dispuesto a exhibir la vajilla de diario, tal y como hacía por entonces en las casas de pueblo. Si te fijas en las cocinas de El Mueble lo verás en más de una. Carolina Sánchez Vadillo lo ha recuperado en esta. Una excelente manera de no saturar las paredes de armarios.