Arrimaderos

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Una balda en lugar de mesita de noche

Cuando no hay espacio para colocar una mesita de noche junto a la cama, sustitúyela por una balda corrida a lo largo de la cama o una estructura que proteja la pared de los roces y ofrezca algo de almacenaje. La tapa superior servirá para apoyar el despertador y la lámpara de noche.

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¡Visten tanto un salón!

Y pocas palabras bastan para ver esta evidencia. Un salón con mitad arrimadero, mitad papel pintado se vuelve cálido y acogedor al instante. Si usas un tono claro para la parte inferior, darás luz y amplitud a la estancia. 

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Hasta en el baño

Los arrimaderos son aptos para todas las estancias de la casa, incluso el aseo. Le dan un aspecto más cuidados y si se pintan con pintura antihumedad, son resistentes y duraderos. 

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Funcionan como cabecero

Protegen todo el perímetro de la habitación y si se trata de un dormitorio, ya no te hará falta cabecero, porque el mismo arrimadero funcionará como tal. La pared posterior de la cama libre de antiestéticas rozaduras y, encima, con un aspecto acogedor. 

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Un arrimadero que sirve de apoyo

Además de jugar con su color, puedes experimentar con su altura y llevar el arrimadero tan alto como quieras. En este caso, el friso que lo remata sirve para apoyar un reloj, pero también podrías apoyar algún cuadro sin tener que agujerear la pared. 

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En el cuarto de los niños, ¡imprescindibles!

Echa un vistazo a la pared de su cama y te darás cuento lo necesarios que resultan los arrimaderos en los dormitorios infantiles. Manotazos, rozaduras, manchas indescifrables... Si tienes un arrimadero, pasas un paño y listo. 

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Buenos delimitadores

Además de adaptarse a todo tipo de superficies, lisas o curvas, los arrimaderos pintados de un tono diferente del resto de la pared son capaces de delimitar zonas visualmente, como pasa en esta escalera, cuyos peldaños compartes color con el arrimadero en curva. 

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Busca tu estilo

Si bien es cierto que este tipo de piezas se relacionan con un estilo decorativo clásico, existen en el mercado opciones para todos los gustos. Decapados para ambientes rústicos, con relieves y molduras para espacios románticos o lisos y blancos completamente para dar un aire más actual. 

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Un arrimadero en la entrada

Son la mejor carta de presentación en un recibidor. En esta zona de la casa dan estilo y sirven para evitar las típicas rozadoras causadas por colgar chaquetas o bolsos y zapatos en la parte baja de la pared. Si lo pintas del mismo color de la puerta, como aquí, el efecto de continuidad es total. 

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Un clásico del pasillo

Los arrimaderos son todo un must en pasillos de casas o pisos señoriales. Los puedes encontrar en variados diseños y colores, con más o menos molduras y relieves, que marcarán el espíritu de tu zona de paso. 

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Su esencia, proteger las paredes

Además de su uso más típico, puedes añadirle otras funciones como en esta cocina, donde se han clavados ganchos en el arrimadero para colgar los trapos y así tenerlos a mano. Visten y protegen, ¿qué más se puede pedir?

Salón con sofá beige, arrimadero, cojines y mesitas de madera de centro.

Salón con sofá beige, arrimadero, cojines y mesitas de madera de centro.

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50. Elimina las manchas del café en el sofá con sal y vinagre

Eso sí, tienen que ser recientes. Y tan solo vas a necesitar sal y vinagre. En primer lugar pasa un paño de microfibra por la superficie manchada. Cuanto más líquido absorbas, mejor. Mezcla a partes iguales la sal y el vinagre y frota la mancha. Deja que actúe durante 20 minutos y verás cómo desaparece.

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Más cálido y recogido con un arrimadero

La madera crea un marco y consigue dotar al office de un rincón propio a pesar de que se encuentra en un espacio donde la cocina es la protagonista.

Mesa y sillas, en India & Pacific. Lámpara de techo, en Maisons du Monde. Alfombra, en Sacum. Office proyectado por Marta Prats.

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Con papel texturado

El respaldo del banco se ha revestido con papel pintado texturado para darle más confort. El listón en horizontal refuerza el look de respaldo. Proyecto de Gisela Grandes. Y otra idea muy decorativa: la mezcla de sillas de distintos materiales. Personalidad y dinamismo.

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Tostados acogedores

Recuerdan al café, a la madera, al relax y se asocian al aire libre, a lo natural y sencillo. En decoración, es un color cálido acogedor y transmite sensación de hospitalidad, creando un ambiente estable, protector y seguro. Combinado con blanco gana la luz y el brillo que le faltan.

Baño con arrimadero de azulejos blancos y paredes en negro.

Baño con arrimadero de azulejos blancos y paredes en negro.

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¿Te acabas de mudar a un piso nuevo?

 O, ¿has heredado una casa familiar? O incluso, si ha habido algún acontecimiento relevante y no agradable últimamente como puede ser un fallecimiento o separación, no lo dudes: renueva, limpia y deshazte de las cosas que no quieras, es una forma de renovar la energía y eliminar la no deseada. 

¿Papel pintado en el baño?

Papel pintado de Gancedo. Mueble de Neolith, en Marmolería Erandio. Taburete de Zara Home. Toalla de lino de Matèria.

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¿Papel pintado en el baño?

"Un friso de madera blanco a media altura a modo de arrimadero y un papel pintado a continuación es una técnica que nos permite cambiar el look del baño cada vez que queramos", confiesa la decoradora.

Dormitorio juvenil con escritorio y cabecero, realizados a medida.

Dormitorio juvenil con escritorio y cabecero, realizados a medida.

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26. Paredes partidas: los zócalos

Los clásicos arrimados en blanco son un seguro para la luminosidad de un espacio, pero también nos los podemos imaginar al revés. Si ponemos color en la parte baja y el blanco se junta con en techo, la sensación de luz es mayor. Pintar siempre los techos de blanco es una costumbre muy acertada.

Pasillo blanco de estilo clásico con consola y suelo de madera.

Pasillo con consola de Villalba, lámpara de sobremesa de Oficios de ayer y la de techo de Villa Victoria.

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35. Zonas oscuras: soluciones para pasillos

Son espacios difíciles de decorar y de iluminar. Siempre se agradece que les llegue luz desde el salón o de algunas de las habitaciones y que estén pintados en blanco o similar. Aquí los arrimados son casi de uso obligado para evitar rozaduras en zonas de tanto paso. Para iluminar pasillos, ¡el blanco mejor que mejor! 

Pasillo con arrimadero blanco y papel pintado.

Pasillo con arrimadero blanco y papel pintado de Vescom. Cesto de Sacum.

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Renueva un ambiente con un arrimadero

Pon un arrimadero: de lamas de madera o de dos papeles pintados, uno arriba y otro abajo, con un listón de madera en medio. Si el arrimadero es claro, ganarás luminosidad. Meritxell Ribé.

Salón pequeño con gran ventanal y arrimadero de madera blanco.

Sofá y mesa de centro, en Coton et Bois. Puf y alfombra, en Sacum.

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12. Cada centímetro cuenta en la decoración de tu salón

Aunque tu salón sea pequeño no tienes por qué renunciar a tus muebles preferidos. ¿Qué te gusta el sofá curvilíneo pero sabes que un sofá de líneas rectas queda mejor en espacios pequeños? Tenemos la solución: coloca un arrimadero blanco como en el de la foto.

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Eligieron colores claros

"Para aumentar la sensación de espacio, optamos por una paleta de colores claros y serenos, como el blanco o el beige. Así creamos un ambiente amplio y relajante", explica Asun Antó. Otro truco: poner el sofá junto a la ventana, así el salón parece más grande.

Comedor con arrimadero blanco con cubrerradiador incorporado.

Mesa, silla y lámpara de techo, de Coton et Bois.

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Como parte del arrimadero

En esta cocina el arrimadero blanco tiene mucho peso decorativo. Para no restarle atractivo, la interiorista Asun Antó ocultó el radiador tras una estructura que perpetúa la estética del panel en blanco con molduras. Muy camaleónico. 

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Un mini arrimadero

El arrimadero es útil para que los niños no manchen la pared. En él incluimos una percha para que cuelguen su ropa o su mochila nada más llegar del colegio”, apunta Cristina.

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¿Demasiado estrecho para decorarlo?

Pues dibuja formas en las paredes con distintas molduras. Como aquí, creando un arrimadero. No necesitas nada más para dar estilo. Eso sí, elige las molduras estilizadas para no abigarrar el espacio. 

Alfombra de yute y cestos, de Matèria.

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Tiempo de cornisas

Han vuelto. Combínalas con molduras en las paredes y darás un punto de elegancia a la estancia de líneas más simples, además de dar a los techos y a los huecos de cortinas un mejor acabado. 

Mesa de centro, lámpara y mesa auxiliar, de Cottage Little House. Alfombra, de BSB. De Clara Masllorens.

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Suma calidez

No quieres llenar tu dormitorio de detalles. Te gusta que sea un espacio únicamente para relajarte y descansar. Entonces, dale importancia a las paredes. ¿Cómo? Un gran cabecero decorará pero un arrimadero creado con molduras también "envolverá" con calidez la estancia. 

Cabecero, banqueta y lámpara, de Coton et Bois. Dormitorio decorado por Asun Antó y Anna Ortiz. 

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Un mejor acabado

Las molduras también pueden servirte par dar un acabado más profesional a un arrimadero, por ejemplo. Este, realizado con papel pintado de Vescom, cuenta con una moldura para darle un final perfecto a juego con la cornisa del techo. 

Cesto, de Sacum. Decorado por Meritxell Ribé. 

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Un dormitorio con baño

Además de la bañera, también se ha instalado un lavamanos y un aseo, de forma que este dormitorio en suite no puede ser más completo e íntimo. 

Cabecero con repisa y separador, a medida con diseño de Anna Mercadé. Colcha y cuadrante, de Carmen Caubet.
Comedor con arrimadero en la pared.

Proyecto de la decoradora Meritxell Ribé.

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Un arrimadero con cuarterones

Es una opción perfecta para decorar la pared del comedor. Por un lado, enriqueces el interiorismo y, por otro, proteges la pared del roce y de posibles golpes con las sillas. Puedes diseñarlo liso o con cuarterones. Las molduras están de moda así que echa un vistazo a las de Orac Decor, por ejemplo, e inspírate.

Office con pared de papel pintado de cafeteras en tonos verdes.

Cocina con papel pintado de Manuel Cánovas, en Papeles Pintados Aribau. Mesa, sillas y lámpara, de IKEA.

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Un espacio muy personal

No podemos sacarnos de la cabeza esta cocina con un arrimadero y este llamativo papel pintado que enmarca la zona del office. 

Cocina con office con banco debajo de la ventana y arimadero en la pared.

Cocina con mbiliario diseño de Inés Sanchiz, en Kivk Cocinas. Sillas, en India & Pacific. Lámpara de techo, en Pluslight. 

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Bajo la ventana

Es una ubicación de lujo. Tienes luz natural y, si las vistas son bonitas, mucho mejor. En estos casos, aprovecharás mejor el espacio con un banco, como se ha hecho aquí. Dale intimidad con una persiana.

Office con banco en "L" lleno de cojines.

Office con mesa de madera maciza y banco lacado, de Pia Capdevila. Sillas, diseño de Charles y Ray Eames. 

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Un office con un banco en "L"

Si planificas un banco, como aquí, protege las paredes con un arrimadero o con papel vinílico. 

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El dormitorio juvenil.

Cama, armario y mesa son de Iñigo Echave. El papel es de Grupo La Madrid y la silla es de Egoa (todo en Iñigo Echave).

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Sin cabeceros.

Las camas nido no suelen llevar cabecero y, para contrarrestar el frío de la pared, pusieron arrimadero, un toque más cálido.

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Rosa para la reina de la casa.

 La habitación de la niña introduce, gracias a la ropa de cama, el color rosa, que encaja a la perfección con los tonos suaves que reinan en toda la casa.

Decoración de recibidores pequeños

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Recibidor pequeño y estrecho

Casi es una zona de paso donde podrías pensar que no cabe nada. Es el caso de este recibidor pequeño -decorado por Roger Bellera- en el que se aprovecha el amacenaje vertical. Las paredes son la clave. Se han revestido con lamas de madera blanca para protegerlas del roce de los abrigos colgados en el perchero. Debajo... ¡un baúl estrecho tapizado! Puedes guardar y sentarte para descalzarte, por ejemplo.

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Zócalos para recoger el espacio

El zócalo protege la pared de roces, disimula imperfecciones y recoge los ambientes. Se llevan las halfpainted walls o, lo que es lo mismo, los zócalos altos realizados con pintura. Pero si prefieres un zócalo más "normal", puedes hacerlo más bajo, de DM lacado, de bolon, de papel pintado... Hay mil opciones. Aquí se ha apostado por pintura de tono tostado, que ayuda a crear un ambiente acogedor. Sillas de Vinçon, mantel de La Maison, y lámpara de pie, en Sacum.

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Hola arrimadero, adiós roces

Un arrimadero es muy práctico en zonas de paso o expuestas a muchos roces. Con él protegerás y decorarás la pared. Elígelo de madera, de lamas vinílicas adhesivas, de papel pintado o de pizarra, si hay niños. Es muy fácil de colocar. Para que quede bien acabado, remátalo con una moldura. 

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Femenina y relajante

Una zona de estudio muy femenina y tranquila que combina el blanco del mobiliario y el arrimadero con el rosa de la pared. Es un proyecto a medida de Cristina Pérez, que suma la pureza de líneas con la suavidad del color rosa en la pared y los textiles. ¿Te has fijado en las cortinas? ¡Qué amorosas!

Sillas modelo Bombo Chair, de Sit Down.