Consolas

¿Tu recibidor es tan pequeño que no te cabe ningún mueble? Asun Antó sugiere en estos casos optar por muebles mini, funcionales y que apenas ocupan sitio. Esta consola volada con cajones en blanco hace las mismas funciones de almacenaje en el mínimo espacio. Debajo colocó una cesta de fibra y en la pared un espejo de cuadrícula.

Si quieres dar a tu casa un aire clásico y elegante con poca inversión, las molduras son tus aliadas. Son fáciles de instalar (las de Orac Decor se fijan con un pegamento especial), y te permiten crear distintos dibujos en paredes y techos. En estos, solo son recomendables si son muy altos. Puedes fundirlas a la decoración pintándolas igual que las paredes o destacarlas con otro tono.

Las visitas a rastros a veces, dan estupendos resultados. La creadora
de Tessa Interiorismo encontró esta maravillosa consola antigua tipo escritorio, muy ligera y estrecha, y la decoró con una lámpara y un cuadro de look moderno. ¡Ideal!

Con cuatro cajones y una balda inferior esta consola rústica muy bien equipada se ha modernizado gracias a su nuevo color verde agua. Además, ese tono fresco y luminoso va muy acorde con la carpintería, las láminas botánicas y las plantas. Colocada tras el sofá, separa el salón del comedor. ¡Todo resta en sintonía!

Las consolas son otro must de toda casa El Mueble.  Esta en concreto es de madera y mármol: sus formas sinuosas, sus patas arqueadas y sus materiales nobles hacen de esta consola del siglo XVIII todo un signo de distinción.

Sylvia Preslar la encontró en un mercadillo parisino y la fichó para decorar este recibidor. Además, un cuadro de factura moderna apoyado y un sencillo jarrón con flores decoran su sobre y la rejuvenecen. ¡Es el equilibrio perfecto!

"Quería potenciar el aire clásico y elegante de la vivienda, pero aportándole luz y claridad", explica. Sin cambiar las puertas ni los suelos de madera, y sacando a relucir los altísimos techos y las chimeneas originales que hay en el salón y en el comedor, Dara nos cuenta que "lo esencial fue aclarar las paredes, que eran de un azul muy oscuro, con un color topo ligero que rezuma calidez". 

No en vano, tenían una misión clara: potenciar el espíritu exótico de la casa, pero suavizando el ambiente. Algo que lograron, además, usando colores neutros, sobre todo beiges y arenas, y mucho blanco. Es el que predomina; en las paredes, los techos, las cortinas, la tapicería del sofá, las sillas del comedor y un largo etcétera. 

En perfecto contraste con el blanco, el estudio apostó por ir salpicando de negro el gran interior. Así le dieron el aspecto sofisticado y moderno de las casas marbellíes. Lo vemos desde en las mesas de centro y auxiliares, a los cuadros, el aparador que tapa la trasera del sofá, el mobiliario de la cocina o los taburetes en la isla.

El recibidor de este dúplex en Alcoy es toda una declaración de intenciones. Es pequeñito, pero la decoración se ha mimado al detalle. Empezando por la escalera: "Era de mármol y resultaba bastante pesada. Así que decidimos forrar los peldaños con un parquet de madera natural de roble aceitado, muy bonito, y lo llevamos al resto de la casa. Con eso y la barandilla negra, que le da un puntito especial, la escalera se transformó", explican desde Ni2 Estudio de Interiores.

Además, aprovecharon el hueco bajo la escalera con un armario a medida para tener un plus de almacenaje y para integrarlo en el ambiente lo revistieron de fibras. Mención aparte merecen las baldosas porcelánicas, que son de estilo desgastado de diferentes tonos en la gama de grises y negros, y que enmarcan el recibidor. "Dan un efecto impactante y, además, son más sufridas que el parquet", apuntan. 

Un recurso muy interesante para lograr un recibidor pequeño bonito y útil es que además de los muebles adecuados en tamaño y que te ofrezcan algo de almacenaje, cuides la decoración de las paredes. El papel pintado o los revestimientos con textura te ayudarán a personalizar y enriquecer sin "llenar". ¿Qué te parece este ambiente con una pared de ladrillo en color blanco con consola de madera delante? Un recibidor en blanco y madera siempre es un acierto. ¡Resuelto en muy poco de manera perfecta!

Es un mueble que nos encanta para decorar los recibidores pequeños. La consola es uno de esos muebles prácticos y versátiles que encajan en este tipo de ambientes. Hay diseños actuales y otros más clásicos. Tanto en madera como en metal. Son ligeras porque su fondo suele ser reducido y la estructura de sus patas elevada. Puede incorporar cajones o solo baldas.

Y hablando de decoración de paredes… no podíamos dejar de mencionar los zócalos o arrimaderos, un elemento muy decorativo que, además, protegerá la pared de los roces en una zona de paso como es un recibidor pequeño. Tanto si lo quieres liso rematado con un listón moldurado como si prefieres paneles con cuarterones, hará tu mini entrada más bonita.

Las ideales para que un recibidor pequeño quede de revista son una lámpara especial (los diseños únicos tienen mucho peso decorativo y puede tratarse de una lámpara de sobremesa, una de pie ligera o un aplique que no ocupará espacio sobre el mueble); un espejo; y cuadros. La alfombra también aporta calidez, pero solo debes tenerla en cuenta si no entorpece ni el paso ni la apertura de ninguna puerta.

Y sin necesidad de meterte en engorrosas obras. Bastará con que decores la pared principal con un espejo de gran formato –como éste, tipo ventana– o bien con una composición de modelos de formas y tamaños diferentes. 

Procura que los muebles que elijas para tu recibidor tengan unas dimensiones proporcionales al espacio. Si cuentas con un espacio estrecho, con una consola con poco fondo acertarás seguro. Los muebles de líneas depuradas también son de gran ayuda a la hora de no agobiar el espacio.

En este pasillo largo, las interioristas de Deulonder Arquitectura Doméstica decidieron colocar una consola de metal, abierta y ligera con poco fondo para no entorpecer el paso y decorar con gracia la zona. ¡Ambas cosas las han conseguido!

Pequeña y lacada en blanco, una consola estrecha es el mueble perfecto para decorar un pasillo estrecho. Si tiene cajones, mejor. Servirán para guardar útiles pequeños como el cargador del móvil, las agendas o las gafas. Elígela de entre 20 y 25 cm de profundidad para que no se coma el terreno. El estilo clásico y refinado de esta de la imagen es ideal.

Si estás orgullosa de las plantas que decoran tu terraza, te vendrá bien tener un rincón de primeros auxilios para prestárselos cuando lo necesiten. Coloca una mesa de jardinería con todos los utensilios: guantes, macetas, regadera, tijeras de podar, abono, fertilizantes... Puedes guardarlos en cestas o estantes. ¡Y siéntete jardinera por un día! 

Como conclusión, Paula Duarte remarca la importancia de prestarle la misma atención a la decoración del recibidor que al resto de las estancias, ya que es ''quien nos da la bienvenida al llegar a casa''. ¿Estás de acuerdo? 

''Para que el recibidor encaje con el resto de la decoración de la casa, recurre a los mismos esquemas de color en paredes, incluso coordina su decoración con la del salón para crear un ambiente general armónico'', comenta la interiorista. 

''Cuando lleguemos de la calle deberemos tener una luz a mano para iluminar el acceso. Una lámpara sobre la consola o un aplique encima del espejo, pueden estar conectados a este mecanismo'', dice la interiorista. Para dar calidez también cuando la luz está apagada, puedes hacerte con una lámpara con pie de madera, que combinará genia con una consola de corte moderno. Es lo que ha hecho la decoradora Belén Campos en este recibidor. 

''Si el recibidor está situado al inicio de un largo pasillo de acceso a la vivienda, podemos definirlo con un tono diferente de pintura y una alfombra. Acortaremos visualmente el pasillo y será mucho más acogedor'', aconseja Paula. Este está decorado con un llamativo papel pintado con textura en color negro. Es una idea de Pía Capdevila. 

''Lo mejor en el caso de un recibidor pequeño, es que se encuentren sobre una consola o balda que sirvan para dejar las llaves'', dice Duarte. En este ejemplo, la interiorista Natalia Zubizarreta ha colocado una caja de cristal con marcos dorados que combina con el estilo elegante y algo art decó del espacio. 

''Y también un recurso económico para crear un recibidor agradable. Escoge una pared no muy larga para acentuarla, y empapélala con un diseño que vaya acorde con la decoración de tu vivienda'', comenta Paula Duarte. ¡No hay duda de que los recibidores con papel pintado siempre funcionan! Ha sido la alternativa elegida por la interiorista para este espacio, dotándolo de frescura y personalidad. 

''El recibidor es la antesala de lo que se van a encontrar nuestros invitados al llegar a nuestra casa, por lo que habrá de estar en consonancia con la decoración que tenemos en el resto'', afirma Paula Duarte. En este espacio, la interiorista se ha decantado por una consola moderna, con patas metálicas y sobre de madera que, acompañada por un espejo redondo, crea un conjunto dinámico, actual y muy estiloso. 

Los muebles siempre tienen que ser proporcionales a las dimensiones de la estancia y, más aún, cuando se trata de espacios pequeños. Si tu recibidor queda muy recargado o escoges piezas que dificulten el paso, lograrás el efecto contrario: parecerá más pequeño (además de incómodo y cero atractivo). Por eso, una consola estrechita es una opción perfecta.

"La calidez y el confort que aportan las alfombras de fibras naturales no tiene competidor. De lana, de algodón, de yute… Y siempre procuro que sean lisas, sin brillo y de colores claros", explica Asun. 

Si quieres un mueble más señorial y moderno, puede que la madera no sea la primera opción en la que pienses al elegir la consola. Pero no le cierres las puertas: puede formar parte del mueble, pero no como material principal. Fíjate en este diseño, en el que el sobre es de mármol, mientras que las patas lucen un diseño de madera estiloso y actual. 

Es sin duda la manera más sencilla de llevar la madera a tu recibidor: mediante un gran mueble que sirva para aumentar el almacenaje de tu casa, para apoyar un espejo o un cuadro y para dejar las llaves y la cartera cuando llegas a casa.

La madera es un material cálido, atemporal y que se adapta de manera versátil al estilo que elijas para el recibidor. Aquí, la interiorista Marta Tobella se decantó por una gran consola de madera tintada y líneas sobrias. Sobre él, un espejo de cuarterones, que suaviza su aspecto y dota al espacio de un toque más moderno. 

Aunque la madera es un material que relacionamos con el invierno, las casas de montaña y las veladas frente al fuego, también puede ser la baza perfecta para un recibidor de verano, como este. La clave está en combinarlo con materiales de fibras y otros elementos naturales, como jarrones con plantas verdes o flores. 

Por supuesto que una consola es el mueble perfecto para llevar la madera a tu recibidor, pero al elegirla ten en cuenta el acabado del suelo para que las tonalidades no se 'peguen'. En este caso, tanto el suelo como el mueble ofrecen el mismo acabado y son la alfombra y el cuadro los que ponen el toque de color y luminoso al espacio. 

¿Cuántas historias puede contar la madera? Si tienes un antiguo mueble familiar, no dudes en restaurarlo y colocarlo en el recibidor de tu casa. Cada mella, cada arañazo, cada esquina desgastada cuenta una historia diferente, que convierte a esa pieza en un objeto único para decorar tu casa. Además, también hablará de ti y de tu historia, así como el aprecio que tienes por los objetos recuperados. 

De nuevo vanos y puertas abrazan el blanco, a juego con el techo con molduras. El resto del salón se ha pintado en un azul grisáceo que le da un toque de contraste y modernidad. La propuesta es de la interiorista Paula Duarte, en la que una vez más nos da una lección de color.

Gracias a su versatilidad, la madera es perfecta para tanto muebles clásicos como modernos, dependiendo de cómo esté tratada y de la línea del diseño. Si eliges una pieza de líneas sobrias, como esta consola, con patas de hierro, que la estiliza, conseguirás calidez y un aspecto más liviano en el recibidor. Sí, aunque la madera tenga un gran peso visual, con los acompañantes perfectos, es el material ideal para decorar el recibidor.    

Los papeles con estampados de flores nunca pasan de moda. Este, de aire vintage y que simula antiguas postales florales, suma encanto y personalidad a este pasillo y le da un toque campestre muy acogedor.  

Por otro lado, personalmente conservaría esa pieza de mobiliario heredada que tanto te gusta. Se podría modificar su uso si este está obsoleto, como en el caso del tocador/peinador de nuestras abuelas. Con una lámpara de mesa y un pasacalles oculto, podría transformarse en un escritorio para el teletrabajo semanal.

El papel pintado es el gran protagonista de este pasillo que da acceso al dormitorio, vistiendo este espacio con un aire vintage y sumando mucho estilo. A pesar de sus grandes flores negras, la base de color crema les resta peso visual e ilumina este espacio que cuenta con poca luz natural. 

"Recoloca tus cuadros y fotos. Enmarca láminas con motivos de naturaleza o florales y haz una composición con tamaños, marcos, motivos... No tienen que ser todo láminas o fotos enmarcadas, también pueden ser telas", recomienda la decoradora. 

La madera decapada de la consola, el cuadro apoyado en su sobre y hasta la lámpara cuentan con unas tonalidades claras que ayudan a dar a este recibidor un look natural. A él contribuye también la cesta de mimbre, que sirve para dejar los sombreros de verano o los zapatos. Añadiendo una planta (que necesite poca luz si el espacio no está bañado por la luz) el resultado será de lo más natural. 

Los muebles de oficios con muchos cajones y compartimentos pueden hacer las delicias de tu recibidor si quieres darle un punto indiscutiblemente industrial. Para suavizar su efecto, añade una lámpara clásica y algunos elementos de cristal que no 'pesen'. 

El acabado cromo funciona también a la perfección en un recibidor de estilo moderno. Aportan luminosidad y ayudan a que la luz se vea multiplicada. La madera lavada también ayuda. Si eliges todos los muebles de líneas rectas, asegúrate de incluir alguna pieza de formas curvas, como la decorativa lámpara de cristal apoyada en el sobre. 

Si eliges una pieza recuperada, bien de herencia o adquirida en un mercado de pulgas, tu recibidor conseguirá un toque vintage único. Puedes restarurarla tú o encargárselo a un profesional: la clave es no que no pierda su esencia a 'otra época'. Puedes combinarlo con piezas más actuales, como un espejo redondo con cuerda. 

"Si el sofá no está arrimado a la pared, puedes sacarle partido apoyando una pieza auxiliar a su trasera: una mesa de trabajo, por ejemplo, o una consola o un banco con un puf que puedes esconder debajo cuando no lo utilizas".

El recurso de pintar solo una pared de color y el resto en blanco es una opción perfecta para dar personalidad al recibidor sin restarle luz. Aquí, se ha optado por un cálido arena, que contribuye a sumar calidez y da profundidad al espacio, ampliándolo visualmente. 

Los espacios abiertos están menos insonorizados. Es decir, las puertas interiores de paso también aíslan del ruido, por ejemplo, desde el recibidor al salón o de la zona de día a la de noche. Pero también la calidad y diseño de las puertas interfiere en el nivel de aislamiento. Las puertas macizas son las más aislantes, así como las de diseño batiente (más que las correderas). Además, existen juntas isofónicas que añaden confort acústico al cerrar mejor y sin ruidos.

Crema, beige, arena... Son colores perfectos para ampliar el recibidor y, a su vez, hacerlo más acogedor. Y es que tienen la facultad de reflejar la luz y devolverla muy cálida y agradable. Además, son colores atemporales que aportan un plus de estilo en espacios pequeños. En este recibidor, resulta, a su vez, muy natural, combinado con la madera y las fibras. 

¿Pintar techo y paredes de un recibidor en color gris oscuro? ¡Ni de locos!, podríamos pensar. Pero la verdad es que funciona. Y prueba de ello es este recibidor decorado por Elena Eyre. No solo resulta muy estiloso y envolvente, sino que al estar abierto al salón pintado en beige, el contraste hace que la luz se multiplique y con ello la sensación de amplitud. 

Lo hemos dicho: el blanco es un gran aliado para espacios pequeños y poco luminosos. Pero es muy importante evitar el blanco puro, porque puede resultar demasiado frío. Un truco es reservarlo para el techo, como se ha hecho en este recibidor, y optar por un gris muy suave en las paredes: das color pero sin renunciar a la luminosidad.