Puertas correderas para la cocina: 30 diseños de interiorista para la tuya

Si buscas una imagen limpia en la cocina, instala las puertas correderas de cristal con las guías escondidas en la cocina. Esto lo podrás hacer en caso de reforma y si has planificado un falso techo, en el que vayan también las luces empotradas y parte de la instalación eléctrica.

Las puertas correderas en la cocina son la mejor alternativa cuando esta carece de luz natural. Un sencillo diseño, como esta diseñada por Asun Antó, cederá su protagonismo a comedor, con la mesa y la lámpara también negras.      

Las cocinas de madera han vuelto con fuerza, pero esta da una vuelta de tuerca con una puerta corredera con acabado de madera, al igual que la pared semiabierta. Una solución que funciona gracias a que tanto la puerta corredera como la pared cuentan con grandes cristales que la iluminan. 

En una cocina de estilo clásico funcionan muchos tipos de puertas correderas, pero no fallan las de estilo clásico, con molduras y cristal. Para separar los ambientes aún más, se ha tapado el cristal por un visillo, que potencia su clasicismo.   

Si la pared está pintada, elige el mismo acabado para el lacado de la puerta. Más si empleas tonos oscuros, como en la imagen. Esta, además, presume del mismo diseño en relieve con finas molduras. 

Si separas el salón de la cocina con unas paredes y puertas de cristal, rebaja su peso visual eligiendo una perfilería fina. Con los marcos de cada panel más gruesos y los cuartetones de los cristales más discretos. En esta cocina blanca, es el amarillo de los asientos los que ayudan a unir los espacios separados por las puertas correderas. 

Si no te atreves con el mobiliario, utiliza las puertas correderas de la cocina para crear contraste. Estas son un diseño de la interiorista Bárbara Siegfried, de hierro y con un acabado oxidado tiene un estilo industrial que contrasta con el mobiliario de cocina, más moderno y minimalista.  

Abre tu cocina, parcialmente, al resto de tu casa con unas puertas correderas de las de toda la vida: encastradas, blancas, con carpintería de madera y doble. Estas tienen un punto art decó gracias debido al diseño del cristal. Esta cocina de Deulonder deja pasar la luz y conecta con el comedor.  

En cocinas minimalistas, es aconsejable permitirse alguna licencia como unas puertas más originales, como se ha hecho en esta cocina blanca. Para permitir aún más el paso de la luz, el espacio que ocupa la puerta cuando esta cerrada es también de cristal. 

Para separar la cocina de la zona del lavadero, pero no limitar la entrada de la luz, una corredera de cristal da sensación de amplitud y continuidad a la cocina. El cristal permite que el efecto lineal de la encimera se vea potenciado.  

Las puertas correderas en la cocina no tienen por qué ser o blancas o negras, pueden adaptarse, como aquí, al color de las paredes. Dejando la parte superior blanca, los techos parecen más altos. Y la puerta copia el diseño, manteniendo el efecto e intentando mantenerlas desapercibidas. 

Grandes, con los rieles a la vista y de imponente presencia. Esta tiene un punto clásico y elegante gracias a su sobrio diseño con relieve en cuarterores. Son la alternativa que menos obra necesitan, ya que van sobre el tabique y no en su interior.  

Este diseño de puertas correderas para la cocina se adapta al estilo denominado "nuevo industrial". Se trata de puertas de cristal con perfil en metal y barrotillo sencillo en colores claros. El nuevo industrial abandona el negro y la perfilería más gruesa con remaches. Así el resultado es elegante y ligero.

Si vas a cambiar las puertas de interior de la casa, ten en cuenta que la tendencia permite que la de la cocina tenga un diseño diferenciador. El beneficio de las puertas corredizas es que conceden espacio al eliminar la apertura batiente y producirse la apertura en el mismo plano (la hoja se desliza en horizontal). En este proyecto, a la cocina se accede por un par de hojas correderas lacadas en tono neutro con cristal transparente, idénticas a los paneles fijos de los laterales.

En este caso, la entrada a la cocina se delimita por un cerramiento acristalado compuesto por un fijo y un panel corredero idéntico. Los ambientes quedan comunicados aunque separados por esta puerta corredera que cierra la cocina del comedor cuando se están cocinando.

Debes saber que en el diseño de las puertas correderas de interior, el grosor y dibujo del barrotillo puede hacer que una puerta se oriente más a un estilo clásico o moderno. Las que están realizadas en madera suelen tener algo más de grosor que las de metal. Ambas las puedes lacar en el color RAL o NCS que quieras.

Un diseño espectacular para delimitar la cocina. ¡Estas puertas correderas decoran por sí solas! Se trata de puertas correderas de cristal con perilería en color negro y cuarterones rectangulares. Van instaladas de suelo a techo lo que concede más sensación de espacio y continuidad. Es un proyecto de Natalia Zubizarreta Interiorismo.

Otro ejemplo de puerta corredera para la cocina. En este caso esta estancia se delimita por tabiques de cristal y una puerta que combina madera y cristal. Lo ideal es que toda la carpintería de interior esté acabada en el mismo tono pero si vas a reformar la cocina y optar por un color diferente, puedes pintar tus puertas de la casa para igualar (o no y dejar que la de la cocina destaque).

Las guías por las que se desliza una puerta correderas pueden quedar ocultas tras embellecedores cuando estas no deslizan por el techo. Pero en las de mayor tamaño, las guías quedan empotradas en el techo de manera que solo se ven unos carriles -o como aquí que bajan unos cenímetros- y pueden o no llevar en el suelo. Lo ideal, para no "romper" la sensación de continuidad, es evitar la guía del suelo (también resulta mucho más limpio y seguro).

Las puertas correderas pueden quedar a la vista u ocultas dentro del tabique. Las primeras necesitan una pared totalmente despejada para cuando la puerta queda abierta. Las segundas se integran en un tabique de mayor grosor en el que se empotra un casoneto (una caja metálica donde se oculta la puerta). Pero en este caso, debes saber que no se puede colgar ni fijar ningún mueble en el espacio que ocupa el casoneto en el interior del tabique. 

Lacada en blanco con hendidura inferior en la parte ciega de la puerta y cristal en la superior. Este diseño de puerta corredera para la cocina es clásico. De los que nunca fallan en los casos en los que se quiere un diseño especial aunque se trata de una puerta corredera empotrada en el tabique. 

Un diseño clásico de puerta corredera en madera lacada y cristal que queda enmarcada por el lado del salón por una librería a medida. Ten en cuenta que si quieres tirador en las puertas este puede quedar integrado (y por tanto a ras de la puerta) o sobresalir para lo que debes tener en cuenta el toque de apertura para no dañar ni tirador ni pared o cerco.

Aquí tienes un ejemplo de puerta corredera de cristal y madera para la cocina con tirador integrado de manera que no "roza" con el panel fijo sobre el que se desliza. La parte inferior tanto del panel como de la puerta es ciega (de manera que no se ve el lateral de los muebles bajos de cocina) y la superior acristalada con barrotillo.

Puertas correderas de cristal para delimitar la cocina de una zona de paso o distribuidor. En este caso se han escogido en acabado lacado en blanco con cristal transparente, haciendo grandes cuarterones. Cuanta más superficie acristalada, más ligera resulta la composición.