Integrar la televisión en la decoración del salón es siempre un reto. Por un lado, no queremos darle mucha visibilidad, pero, por otro, somos conscientes del papel que desempeña en nuestra vida y la de nuestra familia. Tanto si sois de largas sesiones de cine, como si solo la encendéis para ver las noticias, la televisión ocupa un lugar protagonista en nuestro salón. Y, aunque las antiguas –y voluminosas– televisiones de tubo han dado paso a pantallas más discretas, extraplanas y supergrandes, hay que reconocerlo: a nivel decorativo, la caja tonta quita puntos. Por eso, te damos varias ideas para esconder la televisión y que pase completamente desapercibida. 

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1.

Muebles para esconder la tele: ahora se ve

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Una de las mejores ideas para esconder la televisión es un mueble a medida que lo integre todo. Desde la librería hasta la chimenea, pasando por la tele, por supuesto. Así se hizo en este acogedor piso, en el que se proyectó un gran mueble de pared a pared.

Sofás, en Molins Design. Mesa de centro y auxiliar y lámpara, en Coton et Bois. Estantería, realizada a medida por Molins Design.

2.

Ahora no se ve

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Gracias a este mueble a medida, realizado por Molins Design, la televisión se esconde tras un panel cuando no se utiliza. Una solución discreta que oculta al cien por cien la televisión. 

3.

Tras unas puertas con rieles

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En una estantería de obra, también puede ocultarse la televisión. Los rieles a la vista y en negro añaden un punto chic y moderno a un mueble predominantemente blanco. Es una idea que, con un poco de maña, puedes hacer tú mismo.

Butaca y mesa auxiliar, de Coton et Bois. Armario para ocultar la televisión, realizado a medida.

4.

Con una puerta corredera

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Instagram vía @brightinteriorsco

La misma solución, pero con la puerta integrada completamente en el mueble. ¡Cualquier diría que hay una tele tras el panel corredero! Una estupenda alternativa si no quieres que tus reuniones en el salón giren en torno a la televisión.

5.

Dentro de un armario

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En la habitación de los niños, en la tuya o en el estudio. Un armario empotrado puede ser el mejor escondite para tu televisión. Abres las puertas y hay una tele, las cierras y desaparece. Para esa idea también valen vitrinas, alacenas o, incluso, aparadores. Si cabe la tele y tiene puertas, ¡es un escondite genial!

Escritorio y banco diseñados a medida por Sandra Dachs. Sillas en La Maison.

6.

Una tele que sube y baja

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Instagram vía @thehousethatdiybuilt

Escondida en un mueble, la pared o incluso el techo. Los sistemas de elevación de pantallas planas son una revolución para quienes, de verdad, no quieren ‘ver’ la tele en su casa. Aunque esra solución implica perder algo de almacenaje. Se manejan con un simple mando y están tan escondidas que no se adivina su presencia.  

7.

Integra la tele en una galería de cuadros

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Instagram vía@alireevedesign

Otra forma de que la televisión resulte inadvertida es disimularla con la presencia de diferentes cuadros, como se ha hecho en la imagen. Parece uno más de la composición, ¿verdad?

8.

Camuflada con la pintura

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Es otra manera de esconder la televisión sin comerse demasiado la cabeza. Elige un color oscuro para la pared, como el gris de la imagen, y cuando esté apagada sufrirá el ‘efecto camaleón’ y su presencia será ínfima.

Banqueta, en Maisons du Monde. Puf, en Matèria.

9.

Esconde la tele tras un cuadro

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Otra idea para que tu salón se parezca a uno de los de El Mueble. Si sois de los que no encendéis mucho la televisión, escóndela tras un gran lienzo. Cuando queráis ver una peli, lo retiras ¡y listo!

Sofás, de Kibuc. Mesa de centro, de Maisons du Monde. Puff, de Coco-Mat.

10.

Obras de arte ‘correredas’

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Instagram vía @helladeprinse

Creativa, original y artística. Esta idea para esconder la televisión ¡nos encanta! Dos baldas de madera convertidas en raíles por los que se desliza un cuadro que oculta el aparato.

11.

O un cuadro que se abre

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Otra opción ingeniosa con cuadros. Aunque, en este caso, en vez de ir sobre rieles se abre hacia los laterales. Se trata de paneles motorizados que pueden personalizarse.

12.

Hermanada con la chimenea

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Cuando ambos elementos van completamente encastrados en el mueble, pierden algo de protagonismo para cedérselo al mueble que los alberga.

Sofás, realizados por sofás Esteve. Mesa de centro, de hierro y cristal, y estantería, diseñada por Boyfe. Banqueta, en Sacum.

13.

Si no quieres esconderla, réstale importancia

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Un gran cuadro junto a la televisión le restará importancia visual. Elige uno con mucha presencia decorativa y que case con el estilo de tu salón. La televisión seguirá estando ahí, pero no será en lo primero que se pose la mirada al entrar en la estancia.

Mesa de madera de roble, de Mujika Aramendi Decoración.

14.

Haz como que no está

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Es un poco como ignorarla. Coloca delante una butaca y olvídate de que está ahí. El salón volverá a ser un lugar de reunión y largas conversaciones y abandonaréis la sensación de que se ha convertido en una sala de cine.   

Mesa de centro, de madera de roble y sofás, en Tons. Puff y alfombra, de Coco-Mat. Butaca, en Coton et Bois. Espejo, en Azul-Tierra.

15.

Cómo esconder los cables de la tele

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Si no te molesta la presencia de la tele, al menos los cables sí que deberían estar ocultos. Si va anclada en la pared, intenta que las conexiones estén cercanas para que los cables no queden colgando. Pero si va apoyada en el mueble, utiliza cajas y cestas para esconderlos. Aquí tienes más ideas para esconder los cables.

Puff redondo, de Lo de Manuela. Aparador, realizado a medida.