Diana Quan, experta Feng Shui: "Pintar paredes, mover los muebles de sitio o cambiar los cojines produce dopamina y nos hace felices"

Para el Feng Shui es muy importante contar con flores y plantas en casa. Eso sí, siempre deben conservarse en buen estado para que no afecten a la energía positiva de la vivienda. Intenta añadir, si puedes, flores de temporada en el recibidor, en el comedor o en el salón. Le darán un toque especial y colorido a los espacios y fomentarán la buena energía.

Es probable que durante estos meses tengas algunas comidas o cenas con familiares. Si tienes una terraza, intenta aprovecharla y crea una mesa adecuada a estas ocasiones especiales. Crea un ambiente acogedor con una mantelería en tonos neutros o individuales de fibra natural. Ya verás que si el entorno es agradable, conseguirás más armonía en la terraza.

Ni tienes por qué vivir en un piso señorial, ni te tiene que gustar el estilo clásico para añadir molduras en casa. Hoy existen versiones adhesivas, ligeras y muy fáciles de instalar, hechas de materiales como poliestireno o espuma de poliuretano. Se cortan con cúter, se pegan directamente a la pared o al techo y puedes pintarlas del mismo color de la pared para integrarlas o en otro tono si quieres que destaquen.

¿Lo mejor? Transforman al instante cualquier espacio. Aportan un toque elegante, ayudan a estructurar visualmente las paredes y dan ese efecto decorativo que parece sacado de una una casa de El Mueble. 

Es época de verano, de buen tiempo y de aligerar la cama. Renueva los textiles. Di adiós a las sábanas de franela y da la bienvenida al lino y algodón. Toca cambiar la funda nórdica por un diseño más atemporal o incluso añadir mantas en la parte inferior de la cama que sean algo más ligeras. Inspírate en este dormitorio en tonos suaves, frescos y que respiran verano.

Muchas veces no hace falta comprar más muebles, sino simplemente reorganizarlos por la casa. Quizás puedes cambiar esa consola que tenías en el salón y pasarla directamente al recibidor si tienes espacio. Le dará un aire nuevo a la estancia y sin gastar absolutamente nada. Puedes hacer este mismo truco con otros muebles de la casa.

Dale un cambio a las paredes de tu casa. Hay veces que solamente con pintar las paredes, una habitación puede cambiar por completo. Una idea es renovar el salón con un color potente como el azul, ya que aporta muchísima personalidad. Eso sí, ten cuidado y úsalo bien. El azul es un color que aporta calma, pero solo debe utilizarse en su versión más oscura si cuentas con buena luz en el salón.

Este es uno de esos cambios rápidos que transforman cualquier mueble al instante: cambias los tiradores y parece otro. Da igual si se trata de un armario de dormitorio, un aparador del salón, un mueble auxiliar del recibidor o incluso los frentes de los armarios de cocina. Basta con elegir bien los nuevos tiradores para renovar el conjunto sin necesidad de grandes reformas.