En pleno barrio de El Clot, en Barcelona, se esconde un pequeño apartamento, pero con mucho carácter que nos ha enamorado por completo. Su propietaria, María Trabuchi, arquitecta, diseñadora y cofundadora de Estudio Dott junto a Eugenia Gatti, lo encontró hace dos años y decidió convertirlo en su laboratorio personal. "Fue un reto, pero también una oportunidad para experimentar con materiales y soluciones que normalmente no podemos probar en los proyectos de nuestros clientes", explica.

Inspiradas en la arquitectura danesa, María y Eugenia diseñaron este piso combinando minimalismo, color y líneas limpias, logrando un estilo elegante con un toque vintage. El edificio, construido en 1876, se encuentra en una zona llena de bares, calles peatonales y antiguos espacios industriales reconvertidos, lo que aporta un ambiente joven y dinámico. Además, la altura baja de los edificios de la zona permite que este primer piso disfrute de abundante luz natural.

"Cuando encontramos el apartamento, los suelos estaban cubiertos con baldosas de porcelana y tenía un falso techo instalado. No estaba en su estado original, pero las reformas que se habían hecho se veían anticuadas.", comenta.

Y es que cuando María adquirió el apartamento, se encontró con un espacio segmentado, techos bajos y materiales desfasados. Decidió derribar los tabiques y comenzar de cero. Así creó un espacio abierto donde la luz fluye sin obstáculos y cada rincón se adapta a sus necesidades. ¡Vamos a verla!

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