Las 10 tendencias de decoración que arrasarán este verano 2024: estilo japandi, nuevos colores y mezclas inesperadas

Hubo un tiempo en el que el blanco era el rey de la casa. Era la base ideal para crear hogares confortables y llenos de luminosidad. Sin embargo, las tendencias ahora nos llevan a abrazar una calidez diferente y unas atmósferas más emotivas que transitan la misma senda de los tonos neutros. El blanco depurado y los grises más fríos se están cambiando por beiges, colores tierra, mantequillas o blancos rotos más modernos inspirados en las casas escandinavas. El cambio es sutil, pero llenan los hogares de una nueva serenidad que respira verano.

Las tendencias de este año se enfocan en la conexión total con la naturaleza. La sostenibilidad es casi una prioridad y el uso de materiales nobles y texturas naturales como la madera, el yute y el algodón es el camino a seguir. Aportan calidez y autenticidad y se pueden poner en prácticamente todos los espacios, reforzando la sensación de frescura y paz que tanto se busca en los días calurosos de verano. Un ejemplo de ello lo tenemos en este bonito porche, con sofás de obra, cojines de colores suaves, muebles de madera y fibras y cortinas ligeras que se mueven con la brisa. ¡Qué gusto!

Las estanterías de obra y las hornacinas integradas parecen que pierden fuerza esta temporada a favor de las grandes piezas hechas a medida con materiales nobles. Las librerías recuperan el esplendor de antaño como pieza protagonista del salón con dimensiones más que generosas. Eso sí, la novedad está en el color. Se abandonan los acabados brillantes y los tonos más tradicionales y se apuesta por los mates en azul tinta, verde o incluso, rojo para los más atrevidos. La interiorista Sandra Vergara ya ha experimentado con ello en un precioso piso de Getxo con un resultado así de espectacular.

La fusión del estilo japonés y escandinavo, más conocido como Japandi, continua su particular ascenso este verano. Este enfoque de la decoración más minimalista combina la calidez y la funcionalidad escandinava con la elegancia y simplicidad japonesa. Esto se traduce en muebles de líneas limpias, colores neutros y espacios despejados, con pocas piezas y bien seleccionadas. Para crear esos ambientes sencillos y refrescantes pero muy muy acogedores, los estores y las cortinas dan un paso al frente y se revelan como la novedad del momento. Los diseños en depurados colores blancos se dejan a un lado a favor de tonalidades que viran hacia los beiges y tonos topo y tierra. Es más, los linos y algodones también dejan paso a otros tejidos y materiales como la seda salvaje, el cáñamo o el yute, que dan un plus de textura y frescor.

Este verano, los colores vibrantes como el verde aguamarina, el azul océano y el coral toman protagonismo. Inspirados en la naturaleza, estos tonos aportan energía y frescura a cualquier espacio. Combinados con neutros suaves como el beige o el gris claro, crean ambientes equilibrados y acogedores.

Fíjate en este salón. Sobre una base muy neutra han logrado esa sensación de casita de playa a través de los colores: unos sofás con tapicería muy marinera, unos cuadros con destellos aguamarina y una de las vigas principales del techo pintada en un verde muy sutil que transforma por completo el espacio. Las fibras naturales y la madera, ponen el contrapunto calentito y acogedor a la estancia.

El feed de Instagram de los amantes del diseño y la decoración se ha llenado de una nueva tendencia: los murales XXL pintados a mano. Que un artista pinte una de las paredes de tu casa puede parecer un sueño al alcance de pocos, pero es algo a lo que muchos rostros conocidos se están ya aventurando. La última en unirse a la tendencia es la influencer Blanca Miró, que se encuentra embarazada de su primer hijo. Si bien está muy de moda empapelar las habitaciones de los más pequeños de la casa, la catalana ha ido un paso más allá confiando en la artista Meg Boscawen para pintar las paredes de su futuro bebé con un paisaje bucólico espectacular. Esta tendencia es aplicable a comedores, salones, cocinas, aseos, recibidores o espacios donde se quiera dar un ‘punch’ de impacto a la decoración.

La delicadeza se impone, y ¿hay algo más delicado que el papel? El revival de las lámparas elaboradas con este material se asienta en los hogares de cara al verano que está a la vuelta de la esquina. Ya sea en lámparas de techo redondas y de dimensiones generosas o en originales lámparas de mesa con formas orgánicas y reminiscencias japonesas hechas con papel washi, como las archiconocidas Akari de Isamu Noguchi. En Zara Home, por su parte, apuestan por el papel maché con un acabado muy artesanal. La gran novedad es que llevan en colores intensos que evocan al buen tiempo, como el verde mint. ¿Su punto fuerte? La sutileza de su luz y el ambiente exuberante e íntimo que producen en el hogar.

El lujo silencioso del que tanto hemos oído hablar se traslada directamente a las terrazas y balcones , apareciendo en piezas de diseño con líneas suaves que dan un toque muy sofisticado. Es un estilo que tiende a crear espacios discretos a simple vista, pero repleto de pequeños detalles en el trasfondo: prima el uso de materiales naturales de calidad, una paleta de colores neutros que siempre son elegantes, patrones primarios y gran variedad de texturas y estilos que aportan contraste y mucha riqueza al espacio. Presta atención a este porche, donde se combina sin esfuerzo una imponente lámpara de forja clásica con las sillas Panton, icono del diseño, en un espacio exterior donde, a priori, no tendrían cabida. Este verano, no tengas miedo a las mezclas más inesperadas.

Una de las grandes apuestas de los interioristas y decoradores para este verano 2024 es el uso de grandes maceteros para adornar terrazas, porches, jardines e incluso interiores. Y cuanto más grandes, ¡mejor! Aparte de sus bondades decorativas, ofrecen la posibilidad de plantar árboles y arbustos de mayor tamaño para crear ambientes muy auténticos y naturales, en sintonía con esa tendencia hacia todo lo relacionado con la naturaleza de la que hablábamos antes.

Nos lo recomendó la estilista y decoradora Sol van Dorssen en este artículo: “Mi madre me enseñó a ir más allá y no quedarme en lo obvio. El mejor ejemplo lo puedo poner con la decoración de las mesas de centro. Ve más allá del típico jarrón con flores y atrévete con algún objeto más especial: un cuenco o bowl decorativo, un libro bonito, un candelabro, una pieza de diseño…”. En definitiva, huye de los tópicos e incluye piezas únicas en tu decoración, más allá de los típicos que se ponen como relleno. Los muebles esculturales están cada vez más presentes y hasta la mesita más pequeña puede llamar la atención. Este verano, nada queda al azar.