Cómo decorar tu casa con 'lujo silencioso': qué es, cómo aplicarlo en casa y trucos para elevar tu decoración

Para conseguir esa atmósfera serena que caracteriza al lujo silencioso deberás elegir colores neutros de base: blancos, beiges, tierras, grises... Siempre en su gama más cálida para conseguir espacios más amplios y luminosos. Puedes introducir acentos de color para no caer en la monotonía, como los pasteles o terrosos, suaves y sutiles, e incluso accesorios metálicos.

Calidad, atemporalidad y exclusividad son las características que deben de tener los materiales en el lujo silencioso. Gracias a esta base, los muebles y complementos son artesanales, bellos por sí mismos, únicos, duraderos, capaces de perdurar en el tiempo. Maderas con vetas, mármol, granito, pizarra, mimbre, yute, terciopelo, lino, cerámica o vidrio encabezan la lista. Un añadido más es su intensa conexión con la naturaleza en sus procesos productivos lo que hace que la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente estén muy presentes.

Otra característica del lujo silencioso es que la belleza va ligada a lo funcional. Un rasgo que lo diferencia del minimalismo, al que solo le mueve lo práctico. Sin embargo, ambos estilos tienen en común su búsqueda del orden. Un espejo grande o con un marco elegante y discreto, además de decorar, añade profundidad y luminosidad a la estancia.

Las superficies verticales son de vital importancia en el lujo silencioso. Unas paredes con molduras, un revestimiento de madera o un cuadro de grandes dimensiones siempre serán un acierto. Y una forma fácil de darle al espacio ese toque exclusivo que lo caracteriza.

Para llevar a tu casa el lujo silencioso debes ser cuidadosa en cada detalle, por pequeño que sea elevará el nivel del espacio. No tiene por qué ser caro, es más no debería serlo. Prima más la personalidad del objeto. Por ejemplo, una lámpara de techo elegante, como esta, se convertirá en punto focal por sí sola. La clave está en elegirla con tino. Huye de piezas comunes que no aportan nada.

Mientras que la ostentación y el consumo desenfrenado se aleja del lujo silencioso, la comodidad adquiere un protagonismo esencial. Los espacios, además de bonitos, deben de mejorar nuestra calidad de vida. Las soluciones de almacenamiento inteligente y la tecnología se integran de forma invisible en el lujo silencioso. Con ellos se logra el orden y la armonía sin menospreciar la estética.

Los textiles que predominan en el lujo silencioso son elegantes y discretos. Tejidos como la seda, el terciopelo, el lino, el algodón... en colores suaves aportarán esa sensación de calma y crearán ambientes acogedores.

Tu casa debe hablar de ti. El lujo silencioso se nutre de elementos únicos, con historias que te identifiquen. No desprecies los muebles antiguos que pertenecieron a tu familia, restaúralos y hazlos tuyos. Un aparador, una mesa de comedor, una librería... Son piezas personales que revalorizarán el salón, el recibidor o el dormitorio. No habrá otro espacio igual.

La conexión con la naturaleza y la necesidad de ambientes serenos invitan a que el lujo silencioso se rodee de flores. No hace falta decorar con súper ramos para conseguir un efecto sedante. Unas sencillas flores silvestres en un jarrón de cerámica artesanal o de vidrio ligero harán posible esa sensación de paz, bienestar y belleza que buscas. 

El lujo silencioso valora mucho invertir en arte, en ese arte que te gusta: cuadros, esculturas o piezas de cerámica artesanal pondrán una nota distinguida y sutil en cualquier espacio. Elegancia discreta y sencillez sofisticada para decorar una chimenea, un mueble o un simple banco de obra.