Kamala Harris vende su loft de San Francisco

Los 100 metros cuadrados del loft se distribuyen en dos plantas y una terraza. Así, desde el salón con doble altura se puede vislumbrar el área de dormitorio, al que se accede a través de unas escaleras ubicadas en el lado derecho del salón.

La gama de colores neutros crea una base muy sosegada sobre la que destaca un mobiliario de tintes clásicos y elegantes. Madera, mármol, latón o terciopelo son algunos de los materiales y tejidos que encontramos en el loft.

Todo el loft se distribuye en espacios abiertos que generan mucha amplitud y que permiten disfrutar más de la iluminación natural que entra desde la terraza. 

Justo en medio de los grandes ventanales de suelo a techo del salón, una chimenea de mármol negro permitía cobijarse del frío a Kamala Harris en los días invernales.

Aunque 100 metros cuadrados es un tamaño considerable, la distribución abierta del loft requería soluciones de almacenaje con mucho ingenio, como por ejemplo, aprovechar el hueco libre bajo la escalera para situar la lavadora y la secadora.

Cuenta con vistas a la calle principal y unos muros que otorgan cierta privacidad.

El comedor se decoró siguiendo un estilo clásico y formal, con una majestuosa mesa de madera y sillas tapizadas en terciopelo con capitoné. Para completar el look y aprovechando la altura, la pared se vistió como si de una galería artística se tratase.

Moderna y minimalista, así es la cocina abierta del loft de Kamala Harris. Los armarios con puertas en color gris casan a la perfección con el blanco reluciente de la encimera y el frente. Además, al aprovechar la zona superior para instalar más armarios e integrar el microondas, las opciones de almacenaje se duplican.

Una coqueta mesa redonda con sobre de mármol y pie de latón actúa como recibidor mientras vamos de camino al despacho.

El despacho se diseñó con una estética elegante, clásica y en cierto modo femenina, gracias a la mezcla de blanco y negro con detalles dorados.

El aseo de la planta baja es la zona más colorida de todo el loft. Aparte de la encimera de terrazo con toques de colores vivos, las paredes se pintaron en un intenso azul.

A pesar de tratarse de un espacio abierto, el dormitorio es un área privada que cuenta con vestidor y baño en suite. La gama de tonos totalmente neutra favorece el descanso.

La principal ventaja de que el dormitorio tenga un plan abierto es que permite disfrutar de las vistas al exterior desde la mismísima cama. ¡Qué lujazo!

No sabemos qué pasa con el terrazo, que es el rey de los baños del loft de Kamala Harris. En el baño de la suite se eligió para la encimera del lavabo y el suelo. En cuanto a la distribución, la zona del lavabo se dispuso a modo de tocador separada de la bañera. De este modo, comparte espacio con el vestidor. ¿Qué te parece la idea?

Aunque, en nuestra opinión, el baño se ve bastante viejuno y necesita un update urgente, la mampara de cristal es un recurso estupendo para utilizar la ducha en el día a día con total comodidad, y dejar la bañera para momentos puntuales.