Mármol

Cambia la encimera por una más actual y aprovecha para prolongarla en el frente de la zona de trabajo. "Taparás" los azulejos y el cambio será total. ¿Quieres tendencia? Opta por un material que imite mármol para conseguir el efecto que ves en esta cocina mini.

Los colores claros, incluso en pavimentos de estilo antiguo, como este suelo de mármol recuperado, consiguen dar un aire atemporal al espacio que nunca pasa de moda. Y menos ahora, cuando le mármol está experimentando un revival.

Recupera este acabado tan elegante y decora el baño con él. Úsalo no solo en las paredes y suelos, sino también en la encimera del mueble del lavabo. Y si no quieres hacer obras en tu baño, incorpora el mármol en accesorios que imitan el acabado.

Porque ese toque gold hará que tu baño esté de plena actualidad y sentirás cómo gana en sofisticación. Aquí la grifería y los toalleros ¡brillan! Para copiar también la idea de instalar en el frente del mueble los toalleros.

Los muebles de cocina sin tiradores o con sistema gola (tirador integrado) o uñeros soportan mejor el paso del tiempo que los que tienen tiradores. Lo más sencillo es lo que parece no envejecer. Siempre puedes escoger otros complementos para personalizar, esos que se sustituyen fácilmente. 

El revestimiento de mármol travertino de paredes y plato queda totalmente a la vista en este plato cuadrado con mampara transparente. Es otro ejemplo de espacio delimitado que no entorpece la continuidad visual. 

Mármol, granito y pizarra dan como resultado piezas únicas, impermeables y resistentes. Hay mármol desde 40 €/m², granito desde 60 € y pizarra desde 50 €.

Es una bañera que puede instalarse en interior o exterior y que tiene la particularidad de contar con chorros de agua a presión que crean burbujas en el agua con un efecto hidromasaje.

El clásico veteado blanco y negro del mármol va a ser un invitado estrella en los baños del 2019. Esta tendencia recupera la piedra natural tanto para el suelo como para las paredes, incluso para el lavabo. Baño proyectado por Foraster Arquitectos, mampara de Lasser y sauna de Klafs, diseñada por Freixanet Wellness Projects.

En esta otra opción de cocina moderna podemos ver que los opuestos se atraen. La calidez de la piedra natural junto con el inoxidable queda así de bien en esta cocina moderna actual y chic. 

 Le Corbursier las admiraba por su sencillez y su prestancia: 6 piezas, 2 tuercas y 10 tornillos consiguen hacer de la silla Thonet un icono del diseño. La versión más conocida es la de rejilla, aunque hay muchas variantes y modelos. Combínalas como en esta cocina. 

Al igual que los modelos sintéticos, realizados a base de resinas con cargas minerales como el cuarzo, los fregaderos de mármol se pueden fabricar de una pieza junto a la encimera, prescindiendo de juntas. Este tipo de piezas también se ven sobre encimera, un tipo de instalación que veremos más adelante. Sus vetas son únicas. 

Luminoso, natural, elegante y sofisticado. El mármol ha pasado por momentos bajos pero nunca ha dejado de ser un must en decoración. Hoy resurge de sus cenizas, y es que es un clásico eterno. Los más solicitados: Calacatta, Travertino y Macael.

Otro material que está de plena tendencia es el mármol. Si no sabes cómo introducirlo en casa, ¿por qué no con las mesas de centro? 

Además de la clásica madera, puedes conseguir un suelo blanco a base de baldosas de piedra natural, com el mármol. Elige un formato grande para ampliar visualmente la sala y el resto ya lo pondrá el acabado único de este material, bello y resistente a partes iguales. 

La dureza del mármol blanco contrasta con la calidez y robustez de la madera alistonada del mueble de esta cocina. La clave de esta mezcla es la compensación.

El mármol es un material muy usado tradicionalmente para los lavamanos. Por algo será... Su resistencia es única y la belleza de su veteado natural crea piezas exclusivas. Puedes encontrar modelos así en almonedas, rescatados del pasado, o hechos a medida. 

Restos de jabón, pelos, piel muerta... no suena nada bien, ¿verdad? Es un gran santurario para el crecimiento de bacterias y hongos. Lo ideal es desinfectar plato, mampara y revestimientos tras cada uso o bien asegurar una perfecta ventilación del espacio. 

Ya existía pero Meritxell le añadió el frente de mármol, muy resistente, elegante y con personalidad. Además, a los propietarios les gustaba la nostalgia que desprenden este tipo de chimeneas. Sillón, de Crearte, y mecedora, de Fredericcia. Alfombra, de Francisco Cumellas. Cuadro, de Sol Fàbrega.

Un toque señorial para la zona de estar y uno más vital en la cocina. Para que quede perfecto, requiere un borde que separe bien los dos pavimentos, como esta cenefa negra. Mobiliario, de Bulthaup. Encimera de Silestone negro y electrodomésticos, de Gaggenau. Decoradora: Mar Barroso.

"Al dueño le encanta el mármol. Buscamos por toda Europa un bloque que pudiera revestir paredes de 3 metros de altura de una sola pieza, ¡y lo logramos! Fue un trabajo muy meticuloso", explica Abel. Grifería de Grohe. Velas de Muy Mucho. Cremas de Caudalie.

"Fue un trabajo muy meticuloso, casi matemático, queríamos que todas las vetas del mármol fueran continuas, en paredes, bancos...", explica el decorador. Mármol similar en Levantina. Mampara de Piuma System, personalizada por Àbag.

Aunque se suele equiparar con el granito, porque también se ha empleado tradicionalmente en encimeras de cocina, lo cierto es que presenta importantes diferencias, sobre todo desde el punto de vista de la dureza. El mármol es menos denso y mucho más poroso que el granito. Resulta perfecto para cocinas con un punto retro, aunque hay variedades de tonalidades para todo tipo de cocinas.

Es la opción más habitual, sobre todo si cuentas con un gran ventanal, como ocurre aquí. Además, es la manera de aprovechar mejor el espacio. Para integrarla mejor en la decoración, se ha revestido con el mármol travertino del suelo.

Una gran ventana en el baño siempre es una buena oportunidad para colocar la bañera. Todo son ventajas: sacas partido a un espacio difícil, no pierdes claridad y puedes bañarte que unas super vistas. Semiencastrada, como esta, puedes aprovechar el desnivel para ocultar las instalaciones.

¿Te imaginas comiendo unas frescas manzanas en esta preciosa cocina? El fregadero, igual que la encimera, es de mármol. El escurridor es de Ikea.

Mejor que de acero inoxidable. Esta es industrial, cubierta de revoco.

Con la bañera de dos plazas bajo el ventanal, esto es todo un spa con mirador. Elegante y luminoso, la elección de los materiales y el mobiliario ha tenido mucho que ver. Por un lado, el mármol travertino, que en un suave tono crema viste el suelo, la encimera y las paredes. Y, por el otro, el bajolavabo. Realizado en DM, es un diseño tan completo –tiene armarios, cajones y una zona de baldas abiertas– como decorativo, gracias a sus puertas acristaladas en aspa. 

 Aunque tu baño no tenga tanto espacio como este, puedes darle el mismo estilo sofisticado. Los apliques en forma de bombilla dan ese aire retro de camerino al baño, para el que la decoradora Bárbara Sindreu diseñó muebles a medida. Pero quizá una de las ideas más originales es la zona de tocador, con butaca y todo. 

¿Te duchas a diario? ¿Entonces por qué tienes una bañera que te quita el doble de espacio que un plato de ducha? Una bañera te ocupa, como mínimo, 80 x 160 cm, mientras que un plato de ducha cómodo mide 90 x 70 cm (los hay a partir de 70 x 70 cm y hasta modelos esquineros). Para solucionar de manera fácil el cambio de revestimiento al quitar la bañera, puedes usar microcemento y cubrir con él la pared de la zona de aguas.

Con el bidé pasa lo mismo. Si lo utilizas muy de vez en cuando puedes prescindir de él y ganar un valioso espacio, de unos 43 x 63 cm, para tener más almacenaje en el baño, por ejemplo.

Este diseño de Boffi incluye luces en todo el perímetro, la iluminación ideal para tener un reflejo fiel. Un punto de luz en la parte superior da claridad y en los laterales elimina sombras. Evita solo las luces superiores porque generan sombras.

Este baño pequeño aprovecha el espacio entre la pared y un pilar con un mueble bajolavabo abierto. Gracias a los cajones cuenta con espacio de almacenaje cómodo y práctico. 

Va de pared a pared y saca partido a la zona de la ventana que, además, baña de luz natural el espacio, ampliándolo. Los revestimientos blancos a media altura en blanco y el gris suave de la parte superior de la pared contribuyen a llenarlo de luminosidad.