La cal es el enemigo número uno de las planchas de ropa. Por ello conviene atacarla de inmediato cuando aparecen los primeros síntomas y limpiarla bien.
¿Cuáles son? Manchas blancas en la suela de la plancha, pérdida de agua o incluso que el agua que salga esté sucia. Para evitar males mayores, lo mejor es hacer una limpieza a fondo de la plancha para eliminar la posible cal acumulada.
Con el uso, la cal se acumula en la suela de la plancha y en su depósito. Esta acumulación dificulta la salida del vapor y puede acabar dañando la plancha de vapor. Para evitarlo, conviene hacer una limpieza periódica. Y si vives en una zona donde el agua es muy dura, deberás hacerla más a menudo para evitar sorpresas desagradables.
¿Cómo prevenir la acumulación de cal?
Desde Polti España recomiendan dos hábitos que permitirán reducir al mínimo las tareas de mantenimiento de la plancha y evitar la acumulación de la cal:
- Usar agua destilada o desmineralizada, sobre todo si en vives en una zona donde el agua es muy dura, o agua del grifo si las instrucciones del fabricante así lo indican.
- Vaciar siempre el depósito al final de cada uso.
Trucos naturales para limpiar la plancha de cal
Si a pesar de realizar un mantenimiento periódico y limpiar la plancha, aparecen manchas de cal, con estos remedios naturales podrás eliminarla.
Alíate con el vapor
Desde Poli España recomiendan "llenar hasta la mitad el depósito de la plancha, colocar un recipiente debajo de la suela y vaporizar continuamente hasta que se haya vaciado toda el agua. Con este ejercicio, la presión de vapor también hará que se escapen los residuos de cal. Algunas planchas de nueva generación tienen una función específica para hacer este tipo de lavado".
"Desconfía de las soluciones domésticas basadas en agua destilada y vinagre, ya que la acción corrosiva del vinagre puede dañar los componentes internos de la plancha", sostienen desde Polti España
Una disolución de bicarbonato
Si la suela de la plancha presenta manchas de cal, puedes limpiarla con bicarbonato, que ayudará a disolver la cal. "Vierte bicarbonato en un recipiente con agua fría, para crear una especie de pasta. Ayudándote con un paño suave, utilízalo para limpiar la suela y eliminar los depósitos de cal incrustados. Finalmente, enjuaga con un paño húmedo y limpio antes de usar la plancha de nuevo", recomiendan desde Polti España.
Con cera de velas
Frota una vela contra la superficie templada de la plancha y acto seguido activa la función del vapor. Frota la plancha sobre un papel de estraza o un paño limpio: con esta acción destaparás los agujeros de la plancha que habían quedado obstruidos con la cera llevándose consigo los resto de cal y residuos. Después retira la cera que quede en la base de la plancha con un paño suave.
Cómo limpiar la suela de la plancha...
Si está quemada
Es habitual que la base de la plancha presente quemaduras, que de no limpiarse, pueden acabar manchando la ropa y dañándola. Existen varios trucos para eliminarlas:
- Con pasta de dientes: Con la plancha desenchufada y fría, extiende pasta de dientes sobre su base, calienta la plancha, activa la función de vapor durante unos minutos y frota la plancha sobre un paño limpio. Desconecta la plancha, déjala enfriar y cuando la base esté fría, elimina los restos de dentífrico que pudieran quedar con un paño.
- Con sal gruesa: Vierte varias cucharadas de sal gruesa en un paño. Enciende la plancha y, una vez caliente, frota hacia delante y hacia atrás la base de la plancha sobre el paño con la sal. Hazlo con suavidad para evitar que la base se raye. Debes saber que si tu plancha tiene una suela antiadherente, no se rayará con la sal. Una vez la plancha esté fría, pasa un paño limpio con un poco de jabón de lavavajillas.
Si la ropa se pega...
- Con bicarbonato y limón: La mezcla de limón con un poco de bicarbonato de sodio obtiene un limpiador muy potente que, gracias a sus compuestos ácidos, permite limpiar la base metálica de la plancha eliminando los restos adheridos y dejando la superficie brillante.
Uses el método que uses, es importante que adquieras unos hábitos periódicos de limpieza de la plancha, solo así evitarás que la cal se acumule, pudiendo dañar el buen funcionamiento de la plancha, y que la suciedad de su superficie acabe estropeando la ropa.