Alacenas

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4. Debajo, lo que más pesa

Reserva las baldas inferiores, más accesibles 8 (entre 90 y 160 cm), para los productos que más usas. En las baldas inferiores coloca los más pesados, como las botellas de agua, los tetrabricks o los aceites. Puedes guardarlos en cajones con ruedas para que sea más sencillo moverlos.

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5. Cada cosa en su lugar

Utiliza frascos de vidrio, tápers, cajas o cestos para guardar por categoría y aprovechar la altura de las baldas. Si son iguales o muy similares, contribuirás a que todo se vea más ordenado. Ajusta el tamaño de los envases a lo que vas a guardar (calcula un 50% más de su peso original). En los cajones, usa separadores para aprovechar el espacio.

Gran comedor con techo de vigas _00394869

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Una caja de luz

Este comedor con extra de luminosidad destaca por sus vigas de madera de roble y, entre ellas, el cristal que deja que la luz se filtre hasta la mesa, de corte clásico. Una combinación perfecta para esta casa de campo de la interiorista Sophia Wadsworth

Mesa y alacena, de Oka. Lámpara de techo, de Maisie K.
Vitrina decorada por Navidad.

Vitrina decorada por Navidad.

El Mueble

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Invita a los muebles a vestirse de Navidad

Invita a aquel mueble especial que tanto te gusta a participar tambie´n de la decoración de Navidad. Decóralo con una guirnalda de verde, si es una cajonera puedes dejar algún cajón entreabierto y que asome de él un regalo o, como aquí, que se ha engalanado de fiesta una pequeña alacena con guirnaldas de luces y de hiedra y portavelas. 

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¿Cómo guardar y colocar las vajillas más especiales? @constanzadeulloa_

“Lo ideal es una vitrina, una consola o una alacena, para no mezclar estas piezas especiales con las de uso diario (que tendrán que estar muy a mano) y evitar golpearlas sin querer. A algunos clientes les gusta utilizar papel para evitar el roce en las pilas de platos. En vajillas de muchos servicios, ayuda agrupar por juegos de 6, incluso envolviéndolos con film para manipularlos más fácilmente si no están a la vista y en sitios poco accesibles”, sostiene María.

Cocina rústica abierta al office_00455449

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Antiguo y recuperado

La cocina se abre al comedor, donde conviven muebles antiguos en madera oscura con una bonita alacena recuperada y pintada en color blanco. Te enseñamos la casa entera.

Taburetes pintados con Chalk Paint y mantel de lino de Crea, decora, recicla.
Cocina de casa de campo con piezas recuperadas_00457369

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33. Empezar una nueva vida

Este es el lema que aplicó Federica, de Federica & Co., a su casa de campo. Dejó su casa en Madrid para irse a Cantabria donde se encuentra este colorido y campestre refugio que hace guiños al vintage y al country a partes iguales. ¿Acaso la cocina no es para enamorarse con esos colores desgastados?

Papel pintado de Laura Ashley. Alacena, lámpara de bronce y papel en Federica & Co.
Baño con bañera en Neocerámica y grifería de Duravit.

Baño con bañera en Neocerámica y grifería de Duravit.

El Mueble

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Muebles del salón también en el baño

Como aquí, con una alacena en madera antigua que es el complemento idóneo a la bañera exenta en color negro de diseño retro. ¡Mueve el mueble! Lleva una pieza original que te encuentres en un mercadillo al baño y este ganará en personalidad.

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¡Que no falten las alfombras!

"¡Nos encantan! Cuanto más grandes mejor, porque dan mucha calidez a cualquier espacio. Además de vestirlo", asegura Natalia. 

00482286 vitrina alacena esquinera. Una vitrina alacena esquinera

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Una vitrina alacena esquinera

¿Un rincón muerto? Una vitrina alacena como esta puede darle juego y un plus decorativo. Son ideales para casas rústicas. Crean un punto de interés en la estancia y regalan espacio extra.

Lámpara, de Antic Corçà. Proyecto del estudio Lizarriturry Tuneu.
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Grande y empotrada

Esta alacena tiene muchísima capacidad, pero al estar empotrada, no llena el espacio. Las puertas, pintadas de verde suave, dan un toque campestre muy dulce al comedor. 

Mesa realizada por Antic Daviu Quera y sillas, en Azul-Tierra.

 

Cocina blanca con mueble vintage tipo alacena

Cocina con mobiliario y revestimiento realizado por carpintería Antonio Sánchez Olmos. Lámpara aplique en la Fontaine.

El Mueble

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Piezas vintage o recuperadas, un toque singular

Si quieres que tu casa sea única, apuesta por una pieza vintage o recuperada. No solo son muebles únicos e irrepetibles, sino que dan un toque muy especial a cualquier espacio. Este se ha confeccionado con unos estantes metálicos recuperados de un almacén de derribo. 

Comedor con mesa de madera y hierro, armario chino como alacena y lámparas industriales.

Mueble chino, de Asitrade. Lámparas, De& Tradition. Mantel beige, de Matèria, y caldera, de Lo de Manuela. Jarrón, de Goya Floristas. Mesa, de Dareels. Sillas, de Ton. Alfombra, de KP. Ensaladera, de Catalina House y candelabros, de India & Pacific. Individuales negros, de H&M Home. Vajilla, de Catalina House. Cubiertos, de Zara Home. Servilletas, de Natura Casa.

El Mueble

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Antigüedades y estilo industrial, una mezcla que funciona

"Queríamos hacer algún rincón especial en el salón y elegimos hacerlo en el comedor con una pieza con mucha personalidad sobre una pared de espejos envejecidos –nos explica la decoradora–. Es un mueble antiguo chino entonado en azul como las butacas y el estilismo. Una pieza muy personal que enmarca el espacio del comedor, lo delimita, y sirve de apoyo de almacenaje para el comedor", matiza Natalia. 

Comedor rústico con alacena gris y gran ventanal en arco_0482241

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Comer con vistas al mar

Ahora es posible porque con la reforma se abrió la cocina al comedor, que comparten un espacio común e inmejorables vistas al mar. La alacena, a juego con la carpintería, la mesa y las sillas tienen ese carácter rústico que tanto deseaba la propietaria. ¡No te la pierdas

Mesa, sillas, alacena y lámpara, de Maisons du Monde.
Comedor clásico con mesa grande y sillas tapizadas.

Mesa, alacena y sillas de Oka. 

El Mueble

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Una mesa y unas sillas clásicas, a juego

Si no quieres arriesgarte a la hora de elegir la mesa y las sillas del comedor, apuesta por una combinación a juego, como se ha hecho aquí, donde la mesa y las sillas comparten el mismo estilo afrancesado. 

Comedor con mesa de cristal y sillas de fibra.

Mesa, diseño de Isabel Arrieta y sillas de Ikea. 

El Mueble

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Cristal y fibras, una combinación ligera y acogedora

El gran acierto de este comedor es la equilibrada combinación de materiales. Así, la frialdad del cristal y del acero de la mesa se ha compensado con la calidez, al tacto y a la vista, de las fibras de las sillas. El resultado es un comedor ligero y muy personal. 

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Con una alacena pintada en azul grisáceo

En este comedor el toque de color se dio con la alacena, una pieza singular de gran peso visual que se eligió en un azul grisáceo en sintonía con la carpintería. 

Mesa, sillas, alacena y lámpara, de Maisons du Monde. 

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Un comedor en azul y blanco

El color-block o la pintura "invader" es tendencia y consiste en llevar el color más allá de las paredes, por ejemplo, a los muebles que se apoyan en ella. Y esto es lo que ha hecho en este comedor la decoradora Estrella Salietti, que ha pintado del mismo azul el gran mueble del comedor que, combinado con el blanco de las paredes, da más profundidad a la estancia además de un toque de color muy personal. 

La mesa es de Merc&Cia, las sillas son de herencia y la lámpara de Biosca & Botey. 

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Un laminado con un buscado look rústico

Este suelo laminado que imita el castaño destaca por su tonalidad intensa, en sintonía con las vigas de madera, y sus nudos, que le dan un aspecto rústico que encaja a la perfección en este office con cierto sabor a masía. 

Modelo Castaño mejorado de la colección Eligna Wide de Quick-Step. 

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Un suelo de barro como los de antes

Los propietarios de esta casa de nueva construcción querían darle ese aire de masía centenaria y lo lograron no solo con la arquitectura, sino también con los materiales, como el suelo recuperado de barro. Se colocó a la vieja usanza, siguiendo las directrices del arquitecto Pedro Jiménez, que esbozó un dibujo específico para cada habitación de la casa.

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Muebles oscuros: un extra de calidez

Si buscas calidez, no lo dudes: alíate con un mueble de maderas oscura o de tonos medios, como el roble. Son una apuesta segura. 

Alacena diseño de la interiorista Cuca Arraut. 

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Recuperar elementos únicos

Siempre que sea posible, recuperar elementos originales de una casa la hace única. Paula indica que “al rehabilitar esta vivienda descubrí un tabique original de ladrillo. Se restauró por completo y resultó tener muchísima personalidad: marcaba la decoración". La interiorista decoró el comedor con una gran alacena para guardar la vajilla.

Mesa en Los Peñotes y aparador en Maisons du Monde. Sillas de Taller de las Indias, en India & Pacific y lámpara de techo de Mercantic.
 

 

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Aparador, vitrina o alacena. ¡Elige!

1. Vitrina modelo Karla de Maisons du Monde (850 €) 2. Aparador modelo Ivoine de Habitat (899 €) 3. Aparador modelo Córdoba de El Corte Inglés (745 €) 4. Aparador Stockholm 2017 de Ikea (349 €) 5. Vitrina modelo Rosario de Maisons du Monde (499 €) y 6. Aparador Sheldon de La Redoute Interieurs (349 €)

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S. Shabby

Se trata de un estilo deco que nació vinculado a las casas de campo inglesas. Hace referencia a los muebles recuperados, restaurados, pero los que lucen la pátina del tiempo en sus acabados. Parecen desgastados pero están bien cuidados.

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Otra compra básica en el comedor: un aparador o alacena

Es un mueble perfecto para decorar y que además ayuda a organizar vasos, copas y platos. Escoge un aparador bajo, alto, una alacena o una vitrina. Esta puede ser con puertas de cristal o combinarlas con cajones o armarios en la parte baja. Un dato práctico: si el mueble incorpora algún cajón, es perfecto para guardar la mantelería.

Mesa en Kenay Home, sillas y alacena en Maisons du Monde y lámparas de techo en La Nave Home.

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Jester red, un rojo arcilloso

El rojo que ha escogido Pantone para esta temporada es profundo, intenso, urbano, y muy elegante. Úsalo con mesura, como se ha hecho aquí en esta alacena, y darás personalidad sin saturar el ambiente, ya que se trata de un color de gran carácter. Agradece las maderas oscuras y la luz natural.

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Una alacena en el pasillo de acceso a la cocina

La decoradora Asun Antó aprovechó el pasillo que comunica con el salón y la cocina para reubicar esta alacena que, además de decorar, abastece la cocina. Para ello, se recomienda que queden unos 90 cm libres delante del mueble para poder pasar sin problemas. 

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Zonas de paso desaprovechadas

No des ni un centímetro de tu casa por perdido. Y las zonas de paso son, a veces, una auténtica mina. No se trata de abarrotarlas dificultando el movimiento, pero si son suficientemente amplias —un mínimo de 130 cm de ancho—, ¿por qué no aprovecharlas? Aquí se ha sacado partido al pasillo que comunica la cocina con el salón con una gran alacena que desahoga la cocina y, además, decora por sí sola. 

Cocina clásica verde con alacena y gran isla con campana de obra.

Cocina proyectada por Deulonder. 

El Mueble

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Una cocina de sabor retro

Este verde Celadón es lo primero que llama la atención de esta cocina, pero no lo único. Su gran alacena, su zona de cocción retro y su gran campana de obra marcan la personalidad de una cocina clásica con sabor vintage. 

Cocina clásica con detalles vintage.

Cocina clásica con detalles vintage.

El Mueble

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Decorada con detalles vintage

Darle un aire clásico a tu cocina es fácil con los complementos adecuados. En mercadillos y almonedas puedes encontrar auténticos tesoros, como tazas, balanzas o botes que puestos en lugares estratégicos, como esta alacena, pueden dar el toque decorativo buscado. 

Cocina clásica en blanco y tiradores de concha.

Cocina clásica en blanco y tiradores de concha.

El Mueble

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Con tiradores de concha

Esta cocina tiene puntos clásicos muy interesantes, como sus tiradores de concha que rematan el estilo clásico campestre de las puertas y cajones. El reloj de pared, las sillas del office, la grifería del fregadero, el revestimiento vítreo del salpicadero y las vitrinas y estantes para la vajilla antigua son las guindas del pastel. 

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Calcula bien el espacio

Cuando pongas una pieza con puertas en el pasillo debes calcular que puedas abrirla bien. El mínimo serían 60 cm para abrir la puerta y 60 cm para pasar. Alacena realizada a medida por Coton et Bois. Es una casa decorada por Asun Antó. 

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Un comedor para más de 12 personas

"Sonia quería integrar el comedor en la cocina, así que le reservamos la zona más luminosa y de caras al jardín. Y para tenerlo todo más a mano, planificamos dos completos vajilleros gemelos, que además salvan la ventana", explica Chone. Gracias a los bancos pueden caber cómodamente más de 12 comensales.

Mobiliario, diseño de Deulonder Arquitectura Domèstica. Sillas, de Flamant, en Luzio. 

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Un piso moderno de esencia clásica

Cierra los ojos e imagínate una caja negra y en un estado casi ruinoso. Ahora imagínate viviendo allí. "¡Ni de locos!", pensaríamos todos. Pero Elisa, la propietaria de este piso, supo ver más allá de esa oscuridad y distribución antigua e imaginó un piso moderno, orgulloso de su esencia clásica y con espacios amplios y confortables. Tras la reforma, la visión de Elisa se ha hecho realidad: ahora disfruta de un piso luminoso y con espacios amplios y confortables.

Sofás y mesa de centro, diseño de Hoc Volo. Cojines de Batavia y los tipo riñonero, de Sandra Marcos. 

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Mucha madera y lámparas especiales

El gran reto con el que se enfrentaron fue llevar luz a toda la casa, porque este era el típico piso del barrio madrileño de Chamberí: tubular, con muchas habitaciones pequeñas, un salón mini y un pasillo interminable. "Debíamos romper con esta distribución clásica, ganar un salón amplio, evitar al máximo el pasillo y llevar la luz del salón al resto del piso. Se plantearon muchísimas propuestas, y al final mezclando una y otra salió esta distribución, con una zona de día amplia y muy luminosa que integra salón, comedor y cocina", recuerda Leticia.  

Aparador es de Vical. 

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Una alacena personalizada

Personaliza tu muebles para convertirlos en únicos como esta alacena-vitrina. En tres pasos parecerá otra: Pinta, coloca papel pintado y cambia los tiradores. 

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El juego de café

Así como los vasos no se deben apilar porque pueden estropearse, las tazas de café, si no tienes más remedio, puedes apilarlas de dos en dos, haciéndolas encajar una sobre otra ligeramente. Aunque mejor, cada una sobre su plato.

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Los platos apilados por tamaño

De postre, lisos y hondos con sus respectivos. Mejor en una torre de mayor a menor tamaño, aunque es preferible separarlos por tipo para que sea fácil acceder a los de abajo. Aparador con vitrina de Asitrade en Sleeping Company.

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Un paño suave para eliminar el polvo

Aunque tengas la vajilla y la cristalería guardada en una vitrina, alacena o aparador cerrados, antes de colocarlos en la mesa pasa un paño suave para eliminar el polvo que se haya podido acumular si llevas un tiempo sin usarlas.

 

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Las fuentes al fondo

Las fuentes puedes colocarlas de pie al fondo del mueble. Quedarán “sujetas” por los platos que coloques delante. Si además las guardas en una vitrina con puertas de cristal, decorarán.

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Las copas más grandes y altas al fondo

Para organizar copas, vasos, jarras y tazas hazlo por tamaño, las más altas y grandes al fondo ya que con las pequeñas delante, tendrás hueco para sacarlas con cuidado.

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Pequeñas piezas de menaje como cuencos

Recipientes pequeños como tazones o cuencos puedes apilarlos para ganar espacio dentro del mueble donde los guardes pero es preferible colocar entre ellos un trozo de papel o plástico protector para no marcarlos.

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Nada de guardar en torres inestables

No apiles bajo el lema “cuanto más alto, mejor”. Esto solo puede darte disgustos si hablamos de platos, vasos y copas.

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Sí a los ganchos

Puedes instalarlos dentro del mueble, en la base de un estante, para colgar tazas. Vajilla de la Cartuja de Sevilla.

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En alacenas

Son muebles específicamente diseñados para guardar y organizar platos, otras piezas de la vajilla, menaje en general y copas y vasos. Como suelen tener puertas de cristal, coloca tras ellas las piezas más bonitas y reserva las menos vistosas para la zona de almacenaje con puertas opacas. ¿Quieres customizar una alacena? Clica aquí.

Comedor clásico

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Una elección clásica para el comedor

De madera y con sus patas torneadas, esta gran mesa de comedor da un look clásico a este comedor. 

Mesa de Mis en Demeure.
Comedor actual con paredes de ladrillo visto

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Una mesa de comedor muy actual

Con las patas de madera y el sobre lacado en blanco, esta mesa es perfecta para comedores pequeños, ya que mide tan solo 120 cm de largo. 

Mesa de Kenay Home. 
Comedor con mesa de madera y alacena blanca

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A medida y de maderas recicladas

Cuando cuentas con los metros justos, apostar por una mesa de comedor a medida es siempre un acierto, como se ha hecho aquí, ya que la ajustas al máximo al espacio del que dispones.  

Comedor con mesa redonda con sobre de cristal y alacena

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Muy ligera y con un look retro

Esta mesa de comedor es un diseño a medida de la interiorista Isabel Arrieta y destaca por su sobre de cristal  y sus patas cromadas. Esto, sumado a su diseño redondo, la convierten en una opción perfecta para comedores u offices pequeños.

Comedor con alacena y mesa redonda de madera y suelo hidráulico

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Un comedor redondo

Lo son la mesa, la lámpara de techo y las sillas también apuestan por las formas curvas. Una elección muy decorativa perfecta para espacios pequeños. La forma de la mesa hace que a pesar de ser robusta y de madera se vea ligera. Su acabado se ha engamado con la madera del vajillero. Así todo encaja.