Minimalismo cálido: qué es, por qué está de moda y cómo llevarlo a tu casa

La crisis ecológica que atraviesa el planeta, unida al ajetreado mundo de la vida urbana, nos empuja a buscar lugares donde recogernos, espacios reconfortantes y serenos que nos hagan sentir bien. Soñamos con un modo de vida natural, relajado y auténtico… En definitiva, con volver a los orígenes, a lo sencillo, en reducir las cosas a lo esencial y deshacernos de lo superfluo.

Puedes sumarte a esta tendencia y despejar los espacios: prescinde de muebles o complementos innecesarios, mantén todo en orden y añade elementos naturales que dan más calidez.

Está demostrado: nada como el contacto con la naturaleza para recuperar la sensación de bienestar y relax. Así que ¿por qué no decorar nuestras casas con materiales y elementos naturales que nos aporten calma y nos hagan sentir bien? Apuesta por muebles de madera maciza y combínalos con tejidos de lana, lino o algodón, adornos en cerámica, detalles en fibras naturales… Si estás buscando una lámpara de techo, los modelos de mimbre, ratán, yute, papel o bambú están de moda.

El minimalismo cálido fusiona lo mejor del estilo nórdico con la estética japonesa y los ambientes mediterráneos para lograr espacios despejados, con pocas piezas pero muy bien escogidas, en los que prima el orden, la sencillez y la funcionalidad. Así por ejemplo, a la hora de decorar tu mesa de centro, un par de libros como pedestal para una figurita de madera típica de los países nórdicos será más que suficiente. 

Potenciar la luz natural es una de las bases de este estilo decorativo, pues, sin duda, ayuda mucho a lograr un espacio más acogedor y apetecible. Viste los ventanales con tejidos ligeros en tonos neutros o, si tienes contraventanas, no descartes dejarlos sin vestir para permitir un mayor flujo de la luz. 

Tratándose de un estilo en el que manda lo orgánico, lo vegetal y lo sostenible, la madera es, sin lugar a dudas, el material protagonista. Además, en tonos claros, que potencian la luz, son visualmente ligeros y crean decoraciones modernas y sencillas. Combínalo con blanco, añade alguna pieza de madera en bruto y el éxito estará asegurado.

Una buena forma de conseguir ambientes únicos y personales es completar la decoración con algún que otro mueble de madera en bruto, con todas sus imperfecciones. Son piezas que guardan el encanto de lo genuino y que, sin duda, te ayudarán a poner este punto de autenticidad en la decoración.

Para este comedor, Carla Catalán, de Alto Interiorismo, escogió una gran mesa de madera de castaño, robusta, artesanal y con el dibujo de vetas y nudos.

¿Qué colores dominan en este tipo de decoraciones? Si quieres que en tu casa domine una estética minimalista súper cálida, es fácil: parte de una base neutra, con paredes y tapicerías en tonos blancos o crudos, y después se añaden pinceladas de contraste en una paleta de colores cálidos: desde el color beige y tonos arena hasta ocres y marrones. 

Los suelos, de madera clara o microcemento, y las paredes, mejor si tienen textura, que ofrezcan un tacto suave y cálido al pasar la mano. El acabado imperfecto de materiales como la cal, la arena, el cemento o la arcilla, aplicados con técnicas manuales, es perfecto para este tipo de decoraciones, pues ayuda convertir los espacios en lugares acogedores y únicos.

Si quieres sumarte a esta tendencia, elige muebles de formas redondeadas y líneas sencillas. Los diseños curvilíneos transmiten la sensación de comodidad y confort que busca esta tendencia decorativa.

Y especialmente con las que nos brindan los tejidos. Eso sí, tampoco abuses: el objetivo es enriquecer la decoración, pero si mezclas muchas corres el riesgo de generar una sensación de caos y, con ella, de desorden. Escoge diseños lisos o con motivos discretos, nada estridentes.

Con la sencillez como premisa, el minimalismo cálido tiene predilección por las piezas de cerámica de autor, hechas a mano, de diseños sencillos y belleza atemporal.

¿Sabes dónde encontrar cerámica artesanal contemporánea? Echa un vistazo a las tiendas on line La Oficial Cerámica, Dooc, Videgreniers, Doméstica Santander o Guille García-Hoz y, siempre que puedas, aprovecha tus escapadas rurales de fin de semana para descubrir talleres artesanos locales.

En una decoración que busca el contacto con la naturaleza, no pueden faltar unas plantas que pongan el punto natural. Cactus, sanseverias, ficus, una orquídea… Elige una variedad vistosa, pero que no acapare demasiado protagonismo, y recuerda que no queremos un rincón tropical.