¿A quién no le gustan las fresas? Son probablemente la fruta preferida de la mayoría y es que su sabor es tan dulce y fresco que resulta absolutamente irresistible. Es un postre saludable del que nos encanta disfrutar. Y comerlas sin nada más siempre es un acierto, incluso troceadas en un bol de leche y con un poco de canela por encima son una delicia. No obstante, si queremos ir un paso más allá podemos incorporarlas a postres más o menos complejos.
Un buen ejemplo son los que te proponemos a continuación en los que podrás degustar las fresas en forma de tartas, bizcochos, galletas, mousses... y como extra, una receta de ensalada con la que vas a alucinar.