Son muchos los extranjeros que deciden comprar o alquilar una vivienda en España. Entre todas las ciudades, Barcelona es una de las elegidas como favorita para vivir. Personas procedentes de una gran diversidad de países, encuentran en la capital cosmopolita de Cataluña, una puerta abierta a grandes oportunidades, sobre todo profesionales. Sin embargo, los extranjeros también tienen que asumir los elevados costes de la ciudad. La continua búsqueda por encontrar una vivienda acorde a ellos, les ha llevado no solo a comparar precios, sino a encontrar en las casas y pisos de Barcelona muchas características comunes en su decoración y arquitectura que les han llamado la atención.
Ejemplo de ello es una usuaria de la red social TikTok que se ha vuelto viral al hablar a través de esta plataforma de algunos elementos decorativos de los hogares de Barcelona. Se trata de Kirsten, una joven americana que vive en la ciudad condal y, literalmente, ha alucinado con algunos aspectos que ha encontrado en la mayoría de apartamentos que ha visitado en busca de su piso perfecto. Bajo el título de 'Cosas que me vuelven loca de Barcelona', Kirsten ha hablado de los "azulejos psicodélicos" que según ella, "parece una competición por ver quién tiene el diseño más disparatado".
Pero no solo se ha quedado aquí. También ha criticado que las ventanas parecen de papel, las reformas son de mala calidad y que las cocinas imitan los mismos patrones, diciendo que todas son "blancas y relucientes". No obstante, sin duda alguna, lo que más ha dado que hablar, ha sido la descripción que ha hecho del típico suelo de terrazo de las casas vintage de Barcelona (y de la mayoría de casas de España que se alzaron durante los años 70) y que ha llamado "suelo de mortadela". Una forma disparatada y divertida de ponerle nombre a las baldosas más típicas y tradicionales de España (junto al toldo verde de los balcones). Con todo ello, hemos hecho un recopilatorio de otras características curiosas de las casas de Barcelona que llaman la atención de los extranjeros.