Cómo impresionar a tu suegra con estos trucos en casa

Lo dicen los expertos y si aplicas este trucos para mantener la casa en orden, dejarás impresionado a tu suegra, se presente a la hora que se presente. Porque tu casa siempre será un templo de la organización. Allá va: nunca “sueltes” lo que quiera que lleves en la mano y que vayas a guardar antes de llegar al sitio donde debe ir.

Entrar en casa y sentir un olor agradable da sensación de frescura y limpieza. Para lograr que se perciba un aroma especial, aplica unas gotas del perfume para la casa que más te guste sobre los textiles (cojines, cortinas, alfombras, tapicerías…) o una mezcla natural de agua y agua de rosas. ¿Un truco exprés? Tuesta pan o prepara café. Esto neutraliza los malos olores al instante. 

Para tener la casa ordenada dedica 5 minutos cada día antes de irte a la cama a pasear por la casa y guardar en su lugar lo que haya por medio. Así no acumularás desorden sino que el contador se pondrá a 0 para el día siguiente. ¡Que no te dé pereza!

Bicarbonato de sodio para limpiar el sofá. ¡No imaginas de qué manera desaparecerá la mancha de bebida derramada del asiento o alguna otra que haya dejado tu mascota! La tapicería quedará como nueva. Te recomendamos aplicar primero un poco en una zona que no esté muy expuesta para comprobar cómo reacciona el color.

Es normal que la ropa blanca con el tiempo empiece a amarillear. Para blanquearla sumerge las prendas en un recipiente con agua oxigenada (tres cucharadas por litro de agua), añade unas gotas de amoniaco y aclara un par de horas después con agua tibia o lava como habitualmente. Deja secar al sol -preferiblemente- y recuperarán la luminosidad. ¿Quieres más trucos para mantener la ropa de casa perfecta? Aquí.

Que la casa parezca más grande y luminosa (sin obras) le gusta a cualquiera. Pero a veces, los metros son los que son. Si no quieres escuchar a tu suegra decir eso de “qué pena que el salón no sea un poco más grande”, coloca un gran espejo en la pared más corta para ampliar visualmente la estancia.

Esto es lo que exclamará tu suegra cuando vea tu vergel, el del jardín o balcón. Lo que ella no sabe es que tienes un truco casero de jardinería para abonar tus plantas: la ceniza de la leña y los posos del café son perfectos. Añádelos a la tierra.

Parece que si el techo de una casa es alto, todas las habitaciones se ven más grandes, con más presencia y amplitud. Así que anota este truco deco: instala varios focos o apliques en la parte más alta de la pared, apuntando hacia el techo. Se alejará unos cuantos centímetros. Si las lámparas son empotradas, en lugar de colgantes, también ayuda. Así como instalar las cortinasdesde el techo hasta el suelo.

Tu suegra te visita el sábado y al viernes siguiente vuelve a pasarse y ve cómo duran las flores frescas de tu jarrón en perfecto estado. Seguro que te pregunta el truco. Además de cortar unos 2 cm por la base cada 3 días, cuando cambias el agua, añade una aspirina. Tiene acción antibacteriana y prolongará la vida de la flor fresca cortada. También funciona añadir un poco de azúcar.

Estos trucos de cocina harán que el bizcocho esté realmente esponjoso: usa los ingredientes a temperatura ambiente y mezcla o bate los huevos mejor con un batidor para lograr que cojan aire (masa aireada=bizcocho esponjoso). ¿Quieres recetas dulces e irresistibles? Aquí las tienes.

Poner la mesa y que el mantel no tenga ni una sola mancha, deslumbra a cualquiera. ¿Cómo lograrlo? A veces el jabón no termina con las manchas. Si se derrama vino, añade un puñado de sal nada más caerse y retira al cabo de un rato. Absorbe la mancha. Pero si la mancha es antigua o persiste tras el lavado, mezcla detergente para la ropa y agua oxigenada a partes iguales, frota la mancha con suavidad, deja actuar unos minutos y lava.

¿Te han dejado un Picasso los peques en el suelo de madera? Te suena esto ¿verdad? Coméntale este truco de limpieza a tu suegra para dejarla impresionada y que lo aplique en su casa por si a tus hijos les da por liarla allí también: aplica pasta de dientes sobre la zona y frota con un paño para que pierda intensidad.

Otra de las preguntas que le rondarán a tu suegra por la cabeza es de dónde sacas el espacio. Lo que ella no sabe es que las cajas y bolsas al vacío te hacen ganar centímetros muy valiosos dentro de los armarios. La ropa de temporada, cojines, edredones… usa estos complementos de orden y triunfarás. Solo necesitas colocar toda la ropa limpia y doblada y retirar el aire con un aspirador.

Ponerles estantes a su alcance y en el suelo cajas y cestas para organizar los juguetes ayuda a que ellos mismos mantengan su habitación recogida. No tendrás que ir detrás o encargarte tú. Es una manera de hacerles autónomos y de que colaboren “a su medida” en la organización de la casa. Ni siquiera en esta habitación tu suegra logrará cogerte desprevenido.

Sin manchas negras en el fondo y sin rallar. ¿Cómo? Añade un chorrito de lavavajillas a la sartén y un poco de vinagre blanco. Caliente a fuego lento durante unos minutos, retira la sartén y frota con una esponja con cuidado de no quemarte. Las manchas negras y la suciedad saldrán sin esfuerzo. Es un truco perfecto para sartenes y ollas con superficie antiadherente (porque no se daña).

Puede que hayas notado cómo tu alfombra ha perdido vida. Quizás llevas meses sin limpiarla. Devuélvele el aspecto del primera día, esparciendo hojas de té -usadas y secas-. Espera 15-30 minutos, retíralas y pasa el aspirador. Es más fácil acabar con el polvo y la suciedad. Además, sus colores se verán más vivos.

Puede que hayan cogido olor a humedad si no se han secado correctamente o  han estado en la lavadora cerrada más tiempo del debido. Para eliminarlo, lava toallas y sábanas con dos tazas de vinagre blanco en lugar de detergente y suavizante. Después, vuelve a lavar con detergente y una taza de bicarbonato de sodio y seca completamente al aire.

Olvídate de marcas en los cristales cuando los limpias. Hasta tu suegra te preguntará cómo los dejas tan relucientes, sin brillos ni pelusas. Límpialos con papel de periódico o con una media vieja y una mezcla de agua y amoniaco.