A veces creemos que, con lo más nuevo y caro del mercado, es con lo que conseguiremos que nuestra casa esté reluciente y sin ningún tipo de suciedad, gastándonos así mucho dinero en productos de limpieza que al final resultan no ser tan efectivos como nos habían prometido.
Estamos seguras de que tu madre o, incluso, tu abuela, alguna vez te ha dado algún tip casero que, al usarlo, te ha ido de maravilla. Y es que ellas solían usar productos 100% naturales y baratos, con los que conseguían resultados asombrosos. Productos como el bicarbonato o el uso del pomelo para dejar brillante tu casa son uno de ellos, pero también lo es el vinagre.
El vinagre blanco lleva siendo uno de los productos estrella en nuestras casas desde hace años. ¿Sus equivalentes a día de hoy? Los quita grasa o los mata gérmenes, solo que a precios más elevados. Este elimina hasta la suciedad más profunda como la cal, la plata... ¡Incluso ayuda a limpiar nuestro horno!
Desde El Mueble, te contamos el secreto para qué la alfombra de tu casa esté siempre limpia y libre de suciedad, ya que sabemos que esta tiende a ensuciarse de más y lleva consigo una gran cantidad de gérmenes.
EL TRUCO INFALIBLE CONTRA LA SUCIEDAD DE TU ALFOMBRA
Sí, sabemos que sueles usar la aspiradora para limpiar la alfombra de tu casa, pero te aseguramos que, aunque parezca la mejor idea en cuanto a tiempo y comodidad, no lo es en cuanto a higiene.
Primero de todo, deberás coger el vinagre blanco que, si no tienes por casa, no va a costarte nada caro ir a buscarlo al supermercado. En un pulverizador, mezcla 1/4 de este vinagre junto a medio limón, una cucharada pequeña de jabón en formato líquido y una taza de agua caliente. Mezcla bien todos los ingredientes y, a continuación, pulveriza tu alfombra con este mejunje. Y... ¡Voilà! Fácil, ¿verdad?
![Infusión tomillo y limón](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1000 674"%3E%3C/svg%3E)
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Ahora bien, si eres de las que no soportan el olor a vinagre, no te preocupes, porque hay otros remedios, también caseros, que podrás usar para obtener un resultado similar. Estamos hablando del uso del amoníaco o de la sal de mesa para eliminar el mal olor de las alfombras.
Con amoníaco
Para emplear este truco, deberás mezclar agua tibia y amoníaco, unos 20 ml de este último y unos 100 ml de la primera. Al igual que con el vinagre, pulveriza bien la alfombra o sus manchas y, seguidamente, friégala bien con la ayuda de un cepillo. Deja que el producto actúe durante unos 15 minutos y, por último, ponla en la lavadora.
Con sal de mesa
Este truco, más que para eliminar la suciedad, nos ayuda con el mal olor que desprenden las alfombras cuando ya hace un tiempo que no han sido limpiadas. Este tipo de sal, no va a suponerte ningún gran gasto, y lo único que deberás hacer será esparcirla y dejarla durante unos 20 minutos. Cuando haya pasado el tiempo, pasa la aspiradora y verás como el mal olor habrá desaparecido.