10 plantas perfectas para tu oficina

Lengua de tigre (¡o de suegra!), espada de San Jorge..., la sansevieria tiene muchos motes, pero lo mejor de todo es que es una de las plantas preferidas por la NASA debido a que produce mucho oxígeno, además de reducir el formaldehído, el benceno y el tricloroetileno. Riégala cuando veas que la tierra empieza a secarse.

Es una de las plantas de interior por excelencia ya que se mantiene con poca luz natural, aunque debes regarla frecuentemente. Además, es muy decorativa y el detalle greenery perfecto para tu oficina.

Es muy resistente. Por eso muchos aspirantes a "cuidadores de plantas" se inician con esta especie. Pero, ¡ojo!, los cactus necesitan estar cerca de la luz solar, así que colócalos junto a una ventana. Todo lo demás son ventajas: ocupan poco espacio y necesitan poca agua (una vez al mes).

Puede convertirse en un pequeño árbol con lo que es ideal si tu oficina está en casa y necesitas un poco de privacidad, porque ella marcará la frontera de tu espacio personal y laboral. Necesita luz natural y que la riegues cada dos semanas. Además, disminuye los síntomas de la alergia y alivia los catarros.

También llamada cuna de Moisés, es una planta interior muy resistente que además tiene flor. No necesita demasiada luz y debes regarla dos veces por semana. Actúa como filtro para los agentes contaminantes que hay en el aire. El espatifilo elimina gran parte de estas sustancias, ataca con más severidad al xileno o el tolueno, así como con restos de alcoholes, acetona y benceno.

Según el Feng Shui, la planta de Jade trae prosperidad y la abundancia, alivia las tensiones y restablece el equilibrio y la paz. Es perfecta para llevártela a la oficina y su mantenimiento es mínimo, pues basta con regarla dos veces al mes.

 Otra planta que resiste a lugares más oscuros es la palmera de salón. Es grande y proporciona un ambiente fresco y relajante. Hay que regarla frecuentemente, asegurándote de que la raíz siempre esté húmeda.

 Tremendamente resistente, el arma secreta del potos es que es capaz de eliminar tres tipos de tóxicos: el formaldehído, el xileno -que provoca dolores de cabeza, vómitos y náuseas- y el benceno -que nos provoca fatiga, mareos y taquicardias-. Si quieres tenerla en casa, mejor cuélgala, ya que es una planta muy tóxica para las mascotas. Cuando la veas alicaída, riégala y como nueva.

Los beneficios de tener plantas son infinitos pero hay plantas que te cuiden más que otras, como es el caso del aloe vera. Necesita agua cada 4 ó 5 días y recuerda: si te cortas o te haces una herido es el botiquín perfecto. Basta con partir una de sus hojas y aplicar el gel de su interior sobre la herida.

 Seguimos con las plantas que te cuidan, como la filodendro. No solo es bonita y tienes unas hojas originales, sino que mantiene a raya los dolores de cabeza, la pérdida de concentración y la somnolencia. Pero aún hay más, porque esta planta ayuda a aumentar la productividad y purifica el ambiente. Riégala varias veces por semana y di adiós al ibuprofeno.