Por muy pequeño que sea tu dormitorio, siempre es posible crear un ambiente cómodo, despejado y con espacio para todo. La clave está en saber aprovechar los metros disponibles con soluciones tan prácticas y decorativas como las que hemos encontrado en estos 5 dormitorios (muy) pequeños: desde crear efectos ópticos para ganar amplitud hasta recurrir a cabeceros de obra y mesillas mini que se ajusten como un guante a las dimensiones de la estancia o sacar partido a huecos y esquinas con valiosas zonas de almacenaje. 

¡Black Friday en El Mueble! Disfruta de un 50% de descuento en las suscripciones a la revista ¡Solo hasta el 26/11! Descubrirás infinidad de ideas decorativas para convertir tu hogar en un espacio único. ¡No la dejes escapar!

1 /13

1.

1. Un dormitorio pequeño que engaña a la vista

Dormitorio con techo abovedado y pared del cabecero pintada de un color más oscuro que el resto.

Cabecero artesanal de marquetería, de Olmo. Lámpara de techo, modelo Yute III, de lamparas.es. Apliques de lectura, de Faro. Banqueta, de La Maison.

El Mueble

Pintar la pared del cabecero de un color más oscuro que el resto es un recurso decorativo que dará ilusión de profundidad, haciendo que el dormitorio parezca más grande de lo que es. Esto es especialmente efectivo si la habitación es estrecha, ya que la pared oscura "retrocederá" visualmente.

2.

Mueble a medida

Mueble zapatero bajo la ventana de un dormitorio pequeño.

Mueble diseñado a medida para aprovechar el hueco que queda debajo de la ventana.

El Mueble

En el mismo dormitorio, un proyecto de la decoradora Bárbara Serra, la pared de la ventana se aprovechó con un mueble a medida que recorre todo el frente. Si decides "copiar" esta idea, asegúrate de dejar suficiente espacio para abrir cajones o puertas sin obstrucciones y para caminar cómodamente alrededor de la cama.

3.

2. Con rincón de trabajo

Dormitorio con cabecero de obra y rincón de trabajo bajo la ventana.

Cabecero diseño de la decoradora Adriana Farré. Papel pintado, de Coordonné. Cuadro, de Carmen Figueras, en Coton et Bois. Escritorio de roble, en Vintage Industrial. Silla, de Kave Home.

El Mueble

¿Por qué no reservar el espacio que queda bajo la ventana para crear un rincón de trabajo en el dormitorio? Es fundamental que el escritorio que elijas se ajuste al espacio disponible y mejor si integra una cajonera que te ayude a mantener el espacio ordenado. Acompáñalo de una silla que pueda deslizarse fácilmente debajo de la mesa cuando no esté en uso. 

4.

El cabecero como repisa

Cabecero de obra con mesillas integradas.

Papel pintado, de Coordonné. Cabecero y mesillas de roble diseño de la decoradora Adriana Farré. Cuadro, de Carmen Figueras, en Coton et Bois. Apliques de Artemide, en Punto de Luz.

El Mueble

Un cabecero de pared a pared hasta media altura permite utilizar la parte superior como repisa. Lo ideal es que tenga un fondo perfecto para colocar libros y algún que otro adorno (pocos, para no recargar el espacio). En este caso, además, para que el resultado final no quedará desangelado, se apoyó un cuadro de gran formato.

5.

Ideas geniales para dormitorios pequeños

Ideas geniales para dormitorios pequeños

Ideas geniales para dormitorios pequeños.

6.

3. Además de pequeño, abuhardillado

Dormitorio abuhardillado con varios ambientes

Butaca, similar en Picontó. Lámpara de pie, de &Tradition. Cómoda, de IKEA. Lámpara cesta de Santa & Cole, en Avanluce. Plantas de Goya Floristas. Ropa de cama, de Filocolore. Alfombra, de KP.

El Mueble

En este caso, el techo a dos aguas ha marcado la distribución del dormitorio, que cuenta con distintos ambientes. Las zonas más bajas se han resuelto con muebles a medida que se ajustan a la inclinación del techo: una cómoda en un frente y el cabecero en el otro. Además, junto a otra de las ventanas, se ha creado un acogedor rincón acogedor para la lectura o el relax.

7.

Homogeneidad crómatica

dormitorio abuhardillado 00571216

Cabecero con madera de roble realizado a medida. Mesita, de Ethnicraft. Lámpara de sobremesa, de Hübsch. Ropa de cama, de Filocolore. Alfombra, de KP.

El Mueble

Al pintar paredes y techos inclinados de blanco, el dormitorio se ve menos cerrado y más espacioso. Este fondo neutro contribuye a realzar tanto las pinceladas verdes de la ropa de cama, como los detalles en madera, que aportan el necesario toque de calidez en la decoración.

 

8.

4. Dormitorio pequeño con el techo blanco

dormitorio abuhardillado revestido de madera 00557319

Cabecero con hornacinas diseño de Deulonder, como el banco. Apliques, de Lucide. Bandeja, de Catalina House. Funda nórdica y plaid gris, de Filocolore. Plaid crudo, de La Maison.

El Mueble

El cuarto ejemplo es un dormitorio ligeramente abuhardillado con vigas vistas en el techo, elementos que siempre suman un encanto único y muy especial a la decoración, pero que si no se tratan bien pueden "comerse" el espacio. Para evitarlo, vigas y entrevigas se han pintado de blanco para conseguir el efecto óptico de alejar el techo y así crear sensación de amplitud y multiplicar la luz natural.

9.

Hornacinas en la pared de la cama

Cabecero con mesillas integradas en dormitorio abuhardillado

Cabecero con hornacinas diseño de Deulonder. Apliques, de Lucide. Bandeja, de Catalina House. Funda nórdica y plaid gris, de Filocolore. Plaid crudo, de La Maison.

El Mueble

El tabique de la zona de descanso se ha aprovechado con huecos y hornacinas decorativas de formas y tamaños variados, que conforman un elegante cabecero con mesillas integradas.

10.

Un banco a los pies de la cama

Bandeja en banco a los pies de la cama.

Banco con almacenaje, diseño de Deulonder. Bandeja, de Catalina House. Funda nórdica y manta gris, de Filocolore. Plaid crudo, de La Maison.

El Mueble

En el diseño de dormitorios pequeños, cada centímetro cuenta y es esencial maximizar el espacio disponible para lograr un ambiente funcional y acogedor. Por eso, una mente práctica como la nuestra ve el espacio que queda a los pies de la cama como una oportunidad valiosa para colocar un banco con almacenaje que proporcione, además de un asiento adicional, una solución discreta para guardar elementos como ropa de cama, zapatos o accesorios, así como una superficie de apoyo versátil, ideal para colocar libros, objetos decorativos o incluso como espacio para prepararse por la mañana. 

11.

5. Con acceso directo al jardín

Dormitorio pequeño con banco bajo la ventana

Cuadro, de Becara. Lámpara de sobremesa, de Zara Home. Banqueta, de Maisons du Monde. Butaca, de Sine Bomine. Cojines y plaid mostaza, en Rue vintage 74. Alfombra, de Kaymanta.

El Mueble

La luminosidad desempeña un papel fundamental en la percepción del espacio, ya que cuanta más luz entre en el dormitorio, más amplio parecerá. En este proyecto del estudio Murube Ecléctica, la presencia de una puerta acristalada que conduce directamente al jardín y una ventana, no solo proporciona una conexión fluida entre el interior y el exterior, sino que permite que la luz natural inunde la habitación.

12.

Molduras decorativas como cabecero

Dormitorio pequeño con pared del cabecero decorada con molduras.

Cuadro, de Becara. Lámpara de sobremesa, de Zara Home. Banqueta, de Maisons du Monde. Cojines y plaid mostaza, en Rue vintage 74. Alfombra, de Kaymanta.

El Mueble

Aunque la falta de espacio limite las opciones de colocar un cabecero, no tienes por qué renunciar a él. Una idea con la que sumarás estilo y una dosis de elegancia a tu dormitorio, es decorar la pared con molduras como se ha hecho en este caso.

13.

Un banco bajo la ventana

Dormitorio pequeño con banco bajo la ventana.

Banco de obra con cojines de Maison de Vacances, en Rue Vintage 74.

El Mueble

Crear un asiento en la ventana es una estupenda idea para aprovechar el espacio que queda debajo de éstas (y que normalmente subestimamos) y ganar un acogedor rincón para esos momentos de lectura o relax, sin ocupar espacio extra en la habitación.

Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter.