Transforma la habitación de tus hijos con estos trucos y empezarán a dormir mejor

Qué mal se pasa cuando no se duerme bien. Si tienes hijos pequeños sabrás de sobra cómo es esa sensación de niebla mental que te acompaña día tras día cuando los despertares nocturnos son demasiado frecuentes.

Salir del bucle parece imposible, muchos creen que se trata simplemente de que pase el tiempo hasta que el cerebro de los niños madure y siga los ritmos de sueño de los adultos. Pero a veces la espera se hace interminable y en muchos casos incompatible con el ritmo de vida tan exigente que llevamos.

¿Cómo podemos conseguir, entonces, que los niños empiecen a dormir mejor desde ya? Una de las soluciones que está cogiendo más fuerza últimamente es la de contratar a una coach de sueño infantil.

Gracias a VELUX, hemos podido hablar con Olga Sesé, conocida en redes como Baby REM, una experta que promete resultados en unas dos semanas con su método de sueño respetuoso. Ella propone hacer una serie de pequeños cambios en las habitaciones de los niños para que les resulte más fácil dormir.

Qué condiciones deben darse para que los niños duerman bien durante la noche

Según la propia Olga Sesé "el sueño es un factor fundamental en el correcto desarrollo de los niños, ya que durante las primeras horas de sueño, en la fase de sueño profundo, es donde se interiorizan los conocimientos adquiridos durante el día, y las últimas, en las que ocurre la fase REM, fase en la cual el cerebro y el organismo se energizan y es cuando se sueña. Con lo cual, si un niño no duerme correctamente, puede provocar que tarde más en desarrollar habilidades esenciales, como puede ser el habla o el caminar", por lo que sabemos que es fundamental también para ellos tener un buen descanso.

Hay una serie de aspectos que ella recomienda tener en cuenta a la hora de dormir a los pequeños. Son detalles que afectan sobre todo a la habitación de los niños que muchas veces pasamos por alto, pero que alteran la calidad de su sueño.

• Regular la cantidad de luz que reciben durante el día. La luz solar es la encargada de regular nuestros ritmos circadianos. Los niños necesitan recibir luz de día para generar cortisol y que haya suficiente iluminación en casa (y en la escuela) es fundamental, también pasar tiempo al aire libre.
• Una temperatura adecuada fruto de la ventilación es fundamental. Nadie duerme bien con frío, tampoco con excesivo calor. Olga recomienda que los niños duerman en invierno a 21º y en verano a 24º. Ventilar también para regular los niveles de humedad.
• Controlar cuándo se hace de noche. Las persianas juegan un papel fundamental a la hora de oscurecer los espacios, especialmente en verano, para que los niños se puedan ir a dormir en oscuridad total. Si vamos oscureciendo la casa previamente, su cuerpo empezará a segregar melatonina para que empiecen a relajarse y les cueste menos conciliar el sueño.
• Fuera aparatos electrónicos. Las habitaciones infantiles pueden ser la oficina de mamá o papá durante el día, pero de noche tienen que ser un remanso de paz. Si este es el caso, o si el niño ya cuenta con aparatos electrónicos propios, de noche deben estar apagados.
• Un momento para el silencio. Unas ventanas que aislen bien de los ruidos del exterior son vitales para que el niño pueda dormir tranquilo, si no, siempre podemos recurrir al ruido blanco para tratar de amortiguarlos.
• Elimina el uso de tablets y móviles antes de acostarse. Lo ideal sería que no estuvieran expuestos nunca antes de los 6 años, pero es imposible aislarles del mundo actual. Las horas previas al sueño, eso sí, deberían ser siempre sagradas porque la luz azul que emiten es estimulante, no relajante. Si hay que elegir, siempre será mejor que vean la tele a la tablet un rato antes de dormir.

¿Vas a reformar tu casa? Ten en cuenta esto y mejorarás la calidad del sueño de todos

Almudena López de Rego, arquitecta de VELUX, tiene claro que las viviendas pueden y deben diseñarse teniendo en cuenta todos estos aspectos. "A la hora de realizar una reforma para transformar el espacio de los más pequeños de la
casa no solo debemos centrarnos en aspectos estéticos, sino que es la oportunidad para hacer de sus habitaciones espacios saludables a través de la luz natural y la entrada de aire fresco".

Y es que, como ella misma explica, "llegar a la cama habiendo recibido la suficiente luz natural durante el día nos ayudará a conciliar mejor el sueño, y como pasamos más del 90% del tiempo en interiores, la iluminación de estos espacios es fundamental. En el caso de los espacios bajo cubierta, recomendamos que la zona acristalada supere el 15% de la superficie de la habitación. Nuestro nuevo estándar 2en1 duplica la entrada de luz natural instalando solo una ventana", concluye Almudena López.

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