La cocina es una de las estancias a las que le pedimos más: debe ser capaz, cómoda, funcional, decorativa y a la vez atemporal... Y ahora, además, cuando las cocinas se abren a la zona de día valoramos en muchos casos que sean discretas, que se camuflen en el espacio para que no eclipsen o condicionen la decoración de la zona de día. Es entonces cuando apostar por cocinas minimalistas adquiere todo el sentido del mundo. Y no, una casa minimalista no es una casa fría. Una imagen, o en este caso 15, vale más que mil palabras...

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1.

Minimalista en blanco y madera

Cocina blanca abierta a la zona de día con zona de barra_00521127

Minimalista no tiene por qué significar fría. Para prueba esta cocina, que la decoradora Bárbara Sindreu diseñó para pasar desapercibida en la zona de día –de ahí que los electrodomésticos se hayan panelado o escogido en blanco, campana incluida– pero para mitigar su posible frialdad le dio un toque de madera, en la encimera y las baldas, que suma calidez. 

Mobiliario realizado por Industrias Muntané. 

2.

Una cocina abierta a la zona de día

Cocina blanca abierta al salón comedor_00500665

Con esta cocina se buscó máxima discreción, para que desde el salón la cocina no fuera la protagonista del espacio. Por eso se optó por el blanco, para mimetizarse con las paredes; se prescindió de armarios superiores, que delatan a una cocina; y se ocultaron los electrodomésticos, como la campana, que es un diseño de encimera que desaparece cuando no se usa. 

Proyecto de la cocina de Dosde con mobiliario de Logos. 

3.

Moderna, atemporal y en blanco

Cocina blanca con puerta al jardín_00510159 O

Sí, una cocina puede ser moderna y, a la vez, atemporal. Con un mobiliario blanco, un clásico en las cocinas que nunca pasa de moda, y de líneas rectas, esta cocina se ve actual hoy y dentro de una década. La encimera y el antepecho, también en blanco, igual que las paredes y el techo le dan un look ligero y muy minimalista. 

Mobiliario de Dica. 

4.

Una cocina minimal en un espacio muy personal

Cocina blanca con barra revestida de madera en casa de montaña_00497725

Cuando cuentas con un espacio tan auténtico como el de esta cabaña de montaña, con las vigas de madera y el tronco a modo de pilar, ¡qué menos que convertirlo en protagonista! De ahí que la cocina, abierta al salón comedor, se haya diseñado para pasar desapercibida y no competir con la arquitectura del espacio. Blanca, con la campana integrada en el mobiliario y los electrodomésticos panelados o en blanco, es discreta y atemporal. La nota de contraste la pone la isla, revestida de lamas de madera. 

Mobiliario de la cocina, en MYM Construcciones. 

5.

Una cocina despejada y visualmente integrada

Cocina con muebles hasta el techo de color beige_491951

Una cocina minimalista es aquella que destaca por su funcionalidad, su diseño lineal y sin ornamentos y su capacidad para camuflarse en el espacio. Si quieres que la cocina pase desapercibida, no lo dudes: elige el mobiliario a juego con las paredes, como aquí. Y si quieres dar una nota de contraste, resérvala para la encimera o el antepecho, que es lo más fácil de renovar si te cansas. 

Mobiliario de madera lacada realizado a medida por Carpintería Manzanares. 

6.

El color también es para una cocina minimalista

Cocina pequeña abierta al salón con muebles de color visón_00469234

Aunque el blanco es el color en el que todos pensamos cuando visualizamos una cocina minimalista, el color no está prohibido, sobre todo si son tonos neutros o sobrios, como este elegante color visón. De hecho, esta mini cocina se apoya precisamente en el color para darle personalidad, ya que con los frentes sin tiradores y los electrodomésticos integrados resulta muy discreta. 

Mobiliario de Gunni & Trentino. 

7.

Muy capaz en blanco y gris

Cocina blanca con puertas acristaladas correderas blancas_00513232 O

Esta cocina es tan amplia y completa como liviana y minimalista. La elección del mobiliario en blanco, con frentes lisos y sin tiradores, contribuye a ello. La única nota de contraste es la encimera de color gris, ya que incluso las lámparas y los taburetes de la isla, así como la gran puerta corredera metálica se han elegido en blanco, lo que refuerza la sensación de ligereza. 

Mobiliario de Ikea. 

8.

Una cocina con vocación de mueble de salón

Cocina de color caqui con mesa de comedor integrada_00519547

Esta cocina debía ser especial pero sin resultar estridente, porque es el espacio tan singular en el que se enmarca, el protagonista. La decoradora Lara Pujol optó por un mobiliario de líneas rectas, sin tiradores y paneló todos los electrodomésticos para que no se viera de manera evidente que se trata de una cocina, pero le dio el toque especial que el espacio reclamaba: un elegante verde caqui.

Mobiliario, diseño de Laura Pujol, realizado a medida con el modelo 610 con puertas lacadas en acabado mate y color Otawa de Mia Cuina. Encimera y mesa, de Neolith. 

9.

Minimalista y con mucho estilo

Cocina blanca con isla revestida de porcelánico que imita el mármol_00501881

A esta cocina proyectada por la decoradora Lucía Mariñas no le falta ni le sobra nada. Es discreta y atemporal, con su mobiliario de líneas rectas y frentes lisos en blanco, pero a la vez es personal y estilosa, con la gran isla y el antepecho revestidos de mármol Calacata. 

Mobiliario de Santos. 

10.

Pequeña pero super aprovechada

Cocina pequeña blanca con pasaplatos y puerta acristalada_00513339

Metros no le sobran a esta cocina, pero los arquitectos Ana Blanco y Fran Mengíbar, de Mengíbar Blanco Estudio, la han aprovechado al máximo sin que con ello el espacio se vea recargado. De hecho la cocina puede presumir de un look muy minimalista, gracias a la unidad de blanco de paredes, techo, mobiliario y encimera. 

11.

Una cocina blanca totalmente integrada

Cocina blanca con electrodomésticos integrados y campana blanca_00497501 O

Minimimalismo en estado puro. O casi. Así es esta cocina, proyectada en blanco en su totalidad, campana y tiradores de los armarios incluidos, y con los electrodomésticos integrados, para que nada rompa visualmente la sensación de diafanidad. 

Mobiliario realizado por Glow Rehabilita. 

12.

Minimalista y con personalidad abierta al salón comedor

cocina-abierta-al-comedor-con-lamparas-de-techo-00483287

Abrir la cocina a la zona de día siempre es un acierto, sobre todo si vas limitado de espacio. Pero el reto, entonces, es que la cocina no domine demasiado decorativamente hablando. Por eso, apostar por un mobiliario discreto y sin estridencias ayuda a que la conexión entre salón comedor y cocina sea más fluida. Aquí, se ha optado por un mobiliario en un beige suave, que enmarca el espacio de la cocina pero sin romper decorativamente con el resto del espacio. 

Mobiliario de la cocina de Blum. 

13.

Una cocina en blanco moderna y con vocación atemporal

Cocina grande, blanca y minimalista con isla_00480346

La decoradora Elena Jiménez tenía clarísimo que para su nueva casa quería una cocina amplia y confortable a la que no le faltara detalle. Y, como el resto de la casa, sería blanquita y con vocación atemporal. A estos requisitos sumó un diseño de líneas rectas muy minimal y con tiradores integrados, así el look de la cocina es más diáfano. El toque de madera del suelo y de los taburetes, y los apliques vintage le dan un plus de calidez. 

Mobiliario de Santos, en Estudi Ferran. 

14.

Una completísima cocina mimetizada en el salón

Cocina grande y blanca abierta al salón_00510107

Esta cocina tiene espacio para todo... ¡pero no se ve! Y es que a simple vista, no vemos ni la campana, ni la placa, ni los electrodomésticos. Y es que los que no están panelados son blancos como los muebles y la campana se ha empotrado en el techo prácticamente despareciendo. La única licencia es el módulo central a modo de hornacina revestido de mármol Calacata. 

Mobiliario diseño de Kökdeco y fabricado por Ébano. 

 

15.

Muy discreta y comunicada con el comedor

Cocina blanca comunicada con el comedor con puertas acristaladas_00483085

Esta cocina es supercapaz aún sin ser enorme. Y es que la decoradora Begoña Susaeta ideó una pared de armarios, que integra los electrodomésticos y las columnas de almacenaje y llevó los muebles hasta el techo, para no desperdiciar ni un cm. Y a pesar de todo, resulta ligera, porque al ser de color blanco y con un diseño lineal muy discreto, el mobiliario bien podría mimetizarse con las paredes. 

Mobiliario de la cocina de Santos.