En cuanto el sol aparece y llega el buen tiempo, los balcones, terrazas y jardines empiezan a lucir una de las plantas más bonitas y coloridas de esta temporada del año: los geranios. Además de por su belleza tan espectacular, los geranios también tienen un hueco especial en el corazoncito de los amantes de la jardinería, ya que es planta muy fácil de cuidar, con una alta resistencia al sol, muy generosa en cuanto a su floración y superfácil de reproducir mediante esquejes.
Esto significa que, con un poquito de conocimiento, puedes sacar de una misma planta de geranio varias más, lo que te ayuda a multiplicar la belleza de sus flores en tu espacio exterior sin gastar una fortuna en la compra de nuevas macetas. Para asegurarte de que tu geranio enraíza bien, clave para su correcta reproducción, te vamos a contar el truco de los trucos: usar avena en los cortes de su tallo para estimular y acelerar el crecimiento de sus raíces.
La avena, buenísima para los geranios
Sí, cuando decimos avena nos referimos al mismo cereal que muchas solemos consumir a la hora del desayuno, generalmente en formato porridge. Resulta que la avena es rica en nutrientes esenciales que fortalecen el sistema radicular de los geranios y estimulan el desarrollo de sus flores. Además, la avena contiene fósforo, potasio y nitrógeno, elementos fundamentales para una floración abundante y duradera en el tiempo.
Otro punto muy positivo para que la avena funcione como enraizante de los geranios es que, al ser natural, mejora la microbiota del suelo y favorece la retención de la humedad. Además, cuando se degrada, libera compuestos beneficios que enriquecen el sustrato del geranio, ayudándolo a dar más flores, aumentando el verde de sus hojas y potenciando un crecimiento más vigoroso.
![La avena estimula el crecimiento y la floración de los geranios](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1000 750"%3E%3C/svg%3E)
La avena estimula el crecimiento y la floración de los geranios
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Cómo usar la avena para que tus geranios se reproduzcan sin parar
Usar la avena para ayudar a que tu geranio enraíce bien y pueda reproducirse sin parar, es tan fácil como tener a mano varios esquejes frescos de geranio, algunas semillas de avena entera y seguir este sencillo paso a paso:
- Paso 1. En primer lugar, necesitas conseguir los esquejes de geranio. Para ello, elige una planta madre que esté saludable y selecciona varios tallos que veas que están sanos. Lo ideal es que cada tallo tenga una longitud de unos 10 - 15 centímetros y que no estén en flor.
- Paso 2. Una vez seleccionado los tallos, deberás hacer un corte limpio en cada uno de ellos, justo por debajo de un nudo.
- Paso 3. Por otro lado, deberás preparar las semillas de avena, las necesitarás enteras con la cáscara y sin germinar.
- Paso 4. Ahora, en los cortes de cada tallo tienes que clavar, con mucho cuidado, una o dos semillas enteras de avena. También puedes insertar algunas más alrededor del corte, en la parte baja del tallo.
- Paso 5. A continuación, pon cada esqueje en un sustrato que esté húmedo, bien aireado y rico en materia orgánica.
- Paso 6. Los primeros días, es aconsejable que coloques tus esquejes de geranio en un lugar a la sombra y que los vayas regando ligeramente.
- Paso 7. Si sigues bien este paso a paso, verás cómo, en una o dos semanas, aparecerán nuevas raíces en tus esquejes.
- Paso 8. Cuando los esquejes estén bien enraizados, ya puedes transplantarlo en su ubicación final.
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