Los objetos más raros de la tienda online de Marie Kondo

Según se explica en la tienda online de Marie Kondo, la gurú japonesa "usa un diapasón en su vida diaria para ayudarla a restablecer la energía de su hogar. Golpear la U de aluminio contra el cristal crea tonos puros que ayudan a restablecer una sensación de equilibrio", se indica. ¿En serio?  

Es el modelo Hanabunko y, según se explica en la web, es un diseño en porcelana hecho a mano por artesanos de la prefectura de Saga de Japón. "Su forma de libro es un ejemplo de la cerámica Hizen Yoshida-yaki, una tradición de cerámica establecida hace más de cuatro siglos". Además añade: "su apertura central ayuda a estabilizar los tallos y sirve como agarre antideslizante" . Lo dicho, raro, raro...

Porque tu ordenador merece tantos (o más) cuidados que tu cuero cabelludo. Este cepillo de la firma Hay ofrece dos opciones de cerdas suaves: pelo de cabra antiestático o fibras ligeras a base de vegetales. Además, su cuerpo está hecho de madera de haya cosechada de forma sostenible y está perforado para colgarlo fácilmente. Súper necesario.

¿En serio hay que pagar 65$ por un abrebotellas? En la web lo argumentan diciendo, además que es un producto artesano, "que es escultural y diseñado para caber cómodamente en la mano". Y le añaden un plus para justificar un poco más el desembolso: "cuando no está en uso, la forma de latón sólido puede actuar como un pisapapeles elegante o una pieza decorativa". No nos convence.

El agua de esta botella debe saber realmente bien, vamos como tener un manantial en casa. "Está hecha en los Alpes alemanes, contiene viales artesanales e intercambiables de piedras preciosas de comercio justo. Esta botella de vidrio sin plomo presenta una cápsula azul hielo de sodalita, calcedonia y cuarzo transparente". Lo dicho, igualito que estar en Lanjarón. 

Su fabricación es sostenible, vale. Está hecho en tejido denim por artesanos de San Francisco, correcto. Y sus dos lazos "envuelven y se atan en la parte delantera para facilitar el atado de las flores, mientras que una costura posterior puede engancharse en la pared o en el pomo de la puerta para colgar el ramo". Okey. Pero perfectamente podría confundirse con una servilleta de cocina.

Según se explica en la web de Marie Kondo, el diseño es milenario y originalmente se hacía con arena. "Incluye un soporte esférico para incienso en barra, y una pequeña plataforma para incienso de cono". Para muy muy fans.

Es de madera y sirve para realizar el tradicional masaje japonés, basado en la medicina oriental y el equilibrio de la energía del cuerpo. En nuestro caso, creemos que nuestros hijos pequeños lo perderían.

"Cuando lo agarra una mano mojada, los aromas e ingredientes botánicos del jabón se revelan en capas a medida que evoluciona su forma única". Parece una descripción de un museo de arte contemporáneo más que de un jabón. Eso sí, debe de oler muy bien: a pomelo, mango y melón.

Una auténtica joya para hacer compostaje en pequeño formato. ¿En serio Marie Kondo? Ahora la explicación no tiene desperdicio: "La caja está hecha en Alabama con madera urbana: árboles caídos que han sido desviados de los vertederos. Engrasado pero no manchado, tiene una bandeja de acero inoxidable con tapa". Lo usarás para: "cáscaras de plátano, posos de café, cáscaras de huevo y otros materiales compostables".