Como ya sabrás, los conejos son excelentes mascotas para niños. Pero estos animales domésticos que enternecen nuestros corazones y que son como peluches dispuestos a recibir mimos por nuestra parte (aunque siempre dejándoles su espacio y libertad para explorar a sus anchas), a menudo se confunden con... ¡roedores!

Puede que tú misma llevases toda la vida pensando que los conejos son roedores, pero estamos aquí para desmentirlo, y es que los conejos son lagomorfos, una especie de mamíferos que también incluye a las liebres y las picas. Alucinante, ¿verdad?

Los conejos son lagomorfos

Parece ser que hasta comienzos del siglo XX, los conejos estaban clasificados como roedores. ¿El motivo de la confusión? Que los dientes de ambas especies crecen en torno a los 10 centímetros cada año, y en consecuencia, necesitan roer constantemente para desgastarlos y mantener un tamaño óptimo que les permita alimentarse sin problemas.

No obstante, con el tiempo se descubrió que los conejos pertenecen a otra especie, concretamente, a los lagomorfos. Pero, ¿cuáles son las características de los lagomorfos y en qué se diferencian de los roedores? Descuida, ¡estás a punto de descubrirlo!

Conejo tumbado sobre una sábana.

Un conejo tumbado sobre una sábana decorada con flores.

Ivan Samkov/Pexels
  • La principal diferencia entre los lagomorfos y los roedores es que los primeros tienen seis incisivos, concretamente, cuatro dientes en la parte superior y dos dientes en la inferior. Sin embargo, los roedores cuentan únicamente con cuatro dientes, dos arriba y dos abajo.
  • Por otro lado, los lagomorfos tienen pelo en todas sus extremidades, pero los roedores carecen de pelo en estas zonas.
  • Una de las diferencias más notables entre los lagomorfos y los roedores son las dimensiones de sus orejas. Las orejas de los lagomorfos destacan por su gran tamaño, además, sirven para regular su temperatura corporal. Los roedores, sin embargo, no tienen las orejas tan largas (piensa en un hámster).
  • Los lagomorfos tienen una estructura ósea y una anatomía más próxima a la de los artiodáctilos (ciervos, gacelas, etc.), a diferencia de los roedores.
  • Los lagomorfos son herbívoros, pero los roedores pueden ser omnívoros.
  • En cuanto al hábitat, los lagomorfos hacen sus madrigueras debajo de la tierra, pero los roedores pueden vivir en todo tipo de lugares subterráneos, como las alcantarillas. ¿Te imaginas encontrar un conejo en una cañería?
  • Los ratones huyen despavoridos cuando se asustan, pero los lagomorfos golpean sus patas traseras contra el suelo si tienen miedo o se enfadan.

Como has podido comprobar, las diferencias entre los conejos y los roedores son abismales. A partir de ahora, dejarás de pensar que un conejo y un hámster pertenecen a la misma especie, y seguro que los niños se lo pasan de lo lindo aprendiendo las características de unos y otros. Al fin y al cabo, los conejos son animales domésticos muy queridos por ellos y, como su curiosidad es infinita, querrán saber más y más sobre su especie favorita.

Y recuerda que para que los conejos vivan felices en casa, necesitan tener un espacio amplio en el que moverse. Más que una jaula, lo ideal sería que contasen con un refugio adaptado a sus necesidades, del que pudiesen entrar y salir a sus anchas.

Eso sí, al tener que roer sus dientes constantemente, te advertimos de que los cables pueden correr peligro. Para evitarlo, no olvides procurarle a tu conejo los juguetes y accesorios que necesita para descargar toda su energía de un modo menos destructivo.

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