Estreno casa y está llena de armarios

Por un lado, un gran frente de armarios lacado para dejar la ropa de calle y demás y, por el otro, el mueble de la cocina. Y es que en la reforma de esta casa proyectada por Glow Rehabilita, no se ha dado ni un rincón por muerto. Alfombra de BSB.

En la línea de disfrutar de espacios más diáfanos, el comedor se integró en el salón y a su vez se acercó de manera natural a la cocina para que la comunicación entre ambos espacios fuera más cómoda. La mesa, con sobre de madera y estructura de hierro, es de Sacum y la lámpara de techo, de Kenay Home.  

“Ampliamos las ventanas y las llevamos de pared a pared para que la zona de día disfrutara de más luz natural. Además, ahora el jardín es una prolongación del salón”, explica Irene Subirada, interiorista y directora de obra de Glow Rehabilita. El sofá, de un gris visón visón, liga muy bien con el tono de la madera del pavimento, de Pergo, y a la vez le da un punto cálido que rompe con el blanco que impera en el salón. 

Un gran frente de armarios integra la chimenea, el televisor y regala mucho almacenaje. La chimenea ya estaba en la casa pero se amplió en los laterales con dos leñeros para que coincidiera con las medidas del televisor y el conjunto se viera más ordenado. Es un diseño realizado a medida por Glow Rehabilita que se completó con dos hornacinas de madera, a juego con el suelo, que rompen con un diseño muy sobrio.

Y esto no es casual, sino muy estudiado: "Apostamos por colores claros y muy naturales, sobre todo en los elementos estructurales, como los armarios o el suelo. Queríamos que los ambientes fueran monocolores y atemporales, para que no cansaran. La nota diferente la aportan los muebles, como la mesa del comedor, que tiene un rollo industrial”.

"En la cocina hicimos un cambio de pavimento, al que le dimos muchas vueltas. A Belén le gustaba mucho el mosaico hidráulico así que optamos por una baldosa que imita este material, pero en tonos suaves, con un punto de mostaza... Que diera color a la cocina pero sin que fuera un contraste demasiado marcado con el resto de la zona de día", explica Irene. Es de Azul-Acocsa y el mobiliario, un diseño de Glow Rehabilita. 

El dormitorio, con un cabecero muy discreto en blanco que integra una hornacina a modo de gran balda, se ha decorado con las piezas básicas para crear una atmósfera nada recargada y que invite al descanso. 

“Belén y Manuel querían una suite abierta, pero tienen horarios muy distintos y era importante preservar la intimidad de cada uno para que no se molestaran. Por eso separamos la zona de cama con una puerta corredera”. El cabecero y el vestidor son un diseño de Glow Rehabilita. Los cuadros son de herencia. 

Tras el cabecero se planificó un completo vestidor con dos frentes de armarios y se aprovechó el espacio bajo la ventana con un escritorio para ganar una zona de trabajo. La cabina de ducha separa visualmente el baño, abierto, del vestidor.

“En un primer momento se pensó en incluir una butaca en el dormitorio, pero no cabía. Así que optamos por un banco con cojines a modo de rincón de relax, para leer...”. Colchas de Filocolore y butí de Cado. En el banco, cojín con adornos de Sira y los del asiento de Calma House. 

Para sacarle más partido al banco, se planificó hueco por dentro, lo que permite tener a mano los zapatos de uso más habitual. El sistema de apertura, a presión, es visualmente más discreto.