Una casa en el País Vasco reformada por Natalia Zubizarreta que cumplió el 'sueño americano' de sus dueños

Estamos en Álava, en una casa que ya tiene 25 años, pero no lo parece: acaba de vivir una superreforma de la mano de la interiorista Natalia Zubizarreta. Mide 300 metros cuadrados, repartidos en tres plantas y tiene una historia curiosa.

“Los propietarios son una familia con dos niños pequeños y dos perritos. Viven en Miami y fue un encargo totalmente a distancia. Solo los vimos una vez”, nos cuenta Natalia. Esto es confianza total.

Cuando preguntamos sobre la decoración, Natalia nos explica que la propietaria "buscaba un estilo americano. Por eso nos inspiramos en muchos estudios de Estados Unidos. De hecho, el gran reto fue integrar todas las necesidades de estilo y prácticas a las que la familia estaba acostumbrada en Miami, con una vivienda de enormes dimensiones, para pasar a vivir en una vivienda amplia, pero con otras medidas más ‘españolas’ y ajustadas. El segundo reto fue integrar el estilo americano que buscaban”, cuenta la interiorista.

Con esta premisa, “la distribución se adaptó parcialmente a la nueva vida de la joven familia: el salón se abrió al recibidor de un lado y, del otro, la cocina también se abrió, formando un único espacio tímidamente separado con las cristaleras de la cocina”, apunta.

"La cocina, por cierto, es la reina de la casa, un concepto muy americano, con dos fregaderos, frigorífico de puerta doble integrado, mucho almacenaje y la isla, comodísima sin duda con cuatro taburetes para toda la familia", explica.

"Para que fuera a prueba de niños y mascotas, el suelo es una baldosa efecto madera en formato de espiga en la cocina. Esta rompe con la madera natural del resto de la casa, se engama cromáticamente, y permite disfrutar la calidez de la madera, aunque con mucha más resistencia", comenta.

"Decoramos muy neutro, con mucho blanco, toques de madera, muebles y complementos con personalidad y algo de riesgo en materiales cerámicos de los baños o la cocina. Las lámparas y los apliques ponen el broche de estilo final", comenta Natalia.

Las habitaciones, también con tonos neutros, tienen los muebles a medida y también intentan emular el estilo americano que desprende toda la casa.

Cada habitación tiene su propia zona de estudio, por lo que cada niño tiene su propio espacio para concentrarse. Estos espacios los hizo a medida el estudio de Natalia Zubizarreta.

Cuando subimos, nos encontramos con otra idea que nos gusta: "La zona de distribuidor era muy amplia, por lo que decidimos aprovechar un rincón de trabajo con un escritorio a medida para la pareja. Los estores de tipo plegable a la hoja de la ventana le dan un 'look americano'".

"En estas habitaciones se hizo mobiliario a medida y ganamos un banco junto a la ventana, algo con lo que muchos sueñan y que también es muy americano". ¡Seguro que la familia está encantada con su vuelta a casa!