Todos tenemos lugares especiales. Esos sitios a los que siempre procuramos volver, que han marcado nuestra vida y nos hacen vibrar. A Silvia y a su familia les encanta Formentera (¡y a quién no!), el paraíso balear que visitan una semana cada verano. Ya es un ritual. Pero también sienten lo mismo por Llafranc, en la Costa Brava, el lugar donde ha veraneado desde siempre el marido de Silvia. Dos destinos que aman por igual. ¿Y qué hicieron cuando surgió la oportunidad de tener la casa de sus sueños? Pues unirlos. ¡Entramos a descubrirla!

12 /14

1.

La piscina es un rincón paradisíaco y relajante

Piscina con hamacas y pared de piedra.

Zona de piscina con tumbonas de Pilma y puff, de Calma House.

El Mueble

"Aquí en la Costa Brava teníamos un terreno y decidimos hacer nuestra propia casa". Entre otras cosas, así se aseguraban de que Llafranc se convirtiera en un destino especial para sus hijos. Para unir estos dos lugares que conforman su 'geografía feliz', Silvia encontró una solución: "Decidí apostar por una decoración y un estilo ibicenco, playero. Y también por materiales y detalles típicos del Empordà”. ¡Voilà! Dos en uno. "El fondo de la piscina lo pintamos de color arena, para que luego el agua tuviera un tono turquesa más profundo", añade. ¡Cómo el de las playas de Formentera!

2.

La terraza es la estancia que más disfruta la familia

Terraza moderna con sofá con cojines de rayas y estampados.

Terraza con sofá con cojines, de Gra.

El Mueble

¿El rincón favorito de la familia? Para los tres hijos, la piscina. Para todos, el chill out. Lógico. Ahí las tardes son mágicas. Un sofá de obra en esquina con mil y un cojines, una barbacoa y una enorme mesa de comedor. Está claro que esta casa está hecha para vivir en familia y recibir a montones de amigos. Un punto donde se unirán para siempre Formentera y Llafranc.

3.

La gran terraza tiene barbacoa, un chill out y un comedor exterior

Comedor exterior

La mesa es de Mercantic y las sillas, de Sacum. Individuales y platos de Velafusta, vasos de Mercantic. Puff, de La Maison.

El Mueble

Su terraza es uno de los espacios más agradables de la casa. El sofá, de obra y en esquina, dispone de mil y un cojines. Junto a él, encontramos la barbacoa y la enorme mesa de comedor. En bruto, con vetas y nudos a la vista como la de la mesa, aporta calidez. La madera de iroko, que utilizó Silvia para los cerramientos, es muy resistente al exterior, y para los muebles de interior, utilizó roble.

4.

El salón es blanco y mediterráneo, y está abierto al exterior

Salón con sofás y butacas blancos.

Salón con sofás blancos que proceden de India & Pacific. La mesa de centro, de Carpintería Sais. Y las cortinas de lino, de Margarita Ventura.

El Mueble

Durante los tres años que duró la construcción de la casa tuvieron tiempo de pensar (y repensar) en todo. Y, por fin, el verano pasado estrenaron casa: "No estaba acabada. Faltaban los sanitarios y aún entraba y salía gente de la obra. Pero era tal nuestra ansiedad que no quisimos esperar más", recuerda Silvia. Ahora, las grandes cristaleras del salón permiten disfrutar del paisaje sentados cómodamente en sus sofás. No obstante, pueden cubrirse con unas originales persianas enrollables de esparto.  

5.

El look ibicenco está presente en toda la casa

Look ibicenco en el salón.

Salón con sofás blancos que proceden de India & Pacific. La mesa de centro, de Carpintería Sais. Y las cortinas de lino, de Margarita Ventura.

El Mueble

La casa, imbuida por el espíritu de la paradisíaca isla de Formentera, mantiene el estilo ibicenco tanto en el exterior como en el interior, recordando la arquitectura típica que caracteriza las islas baleares.

6.

El comedor, un rincón moderno y cálido con mucha madera

Comedor moderno con suelo de microcemento y mesa de madera.

La mesa es de Sais Carpintería y las sillas de Mercantic. Mantel de Filocolore y lámpara de Westwing. 

El Mueble

Una visita de los propietarios a Formentera les hizo cambiar el ocre de las paredes por el blanco: "De repente, lo vimos claro: ¿y si la hacemos toda en blanco? ¿Y si nos inspiramos en sus casas encaladas?". Dicho y hecho. El microcemento fue el material que les ayudó a crear una base luminosa y limpia, como la de las casas encaladas ibicencas. Sin juntas y fácil de mantener, es ideal para revestir suelo y muebles de obra.

7.

La cocina tiene isla y es muy chic, pero práctica

Cocina moderna con isla negra y taburetes.

Cocina con lámparas de techo, de Westwing.

El Mueble

La cocina con isla tiene una ubicación estratégica -en medio del hogar- lo que la convierte en el corazón de la casa, conectando con fluidez el comedor interior y la encantadora terraza al aire libre. El mobiliario ha sido cuidadosamente seleccionado para ser funcional, pero sin sacrificar estilo.

8.

Lo mejor de lo actual y lo rústico

Cocina moderna y rústica con isla y taburetes.

El suelo hidráulico es de Neocerámica y los taburetes, de Mercantic. Microcemento de Microempordà. 

El Mueble

El microcemento y el mosaico hidráulico dan personalidad a la cocina y contrastan con la blancura de las paredes encaladas. En la cocina se empleó un diseño en gris, blanco y amarillo en los muebles, tratado para soportar la humedad y las manchas, para darle personalidad.

9.

Los espacios abiertos, a la orden del día

Cocina moderna y rústica con isla y taburetes.

Muebles de Sais Carpintería, grifería de Grohe y tablas de Matèria. Placa y nevera, de Smeg. 

El Mueble

Los electrodomésticos se mezclan con detalles de diseño rústico, con los armarios de madera pintados a mano y encimeras de microcemento, creando una estética súper atractiva. La isla es el corazón de la cocina y ejerce de barra improvisada para charlar unos con otros mientras se preparan los platos de la comida o la cena.  

10.

Desde el comedor se ve el resto de la zona de día

Comedor moderno con ventanales y puerta corredera a la cocina.

Las puertas y ventanas de la casa son de Sais Carpintería. 

El Mueble

Una ve terminada la casa, los propietarios no lo podían creer. Era tal cual la habían soñado e imaginado mil veces en su cabeza. Blanco puro, madera, piedra típica del Empordà... ¡y muchísima frescura! Los cerramientos de madera de iroco y los suelos, de microcemento y mosaico hidráulico, dan personalidad a la casa, sobre todo cuando cambia el blanco por el gris en detalles de la cocina, el baño o el dormitorio. Un sello muy personal. Una gran puerta corredera de madera separa (o no) el comedor de la cocina.

11.

El baño está hecho con microcemento y tiene una gran ducha

Baño moderno con ducha revestido con microcemento.

Baño revestido con microcemento de Microempordà. Suelo de la ducha, de Neocerámica. Taburete de Merc & Cia. 

El Mueble

La pureza de líneas que otorga el revestimiento de microcemento encuentra su contrapunto perfecto en el toque cálido de la madera (banqueta y espejo) y el cesto de fibras

12.

El dormitorio principal es romántico y muy fresco

Dormitorio principal con cama azul y cortinas de lino.

Lámpara, colcha y butaca de fibra vegetal adquiridas en La Maison. Las cortinas son de Margarita Ventura, como el cabecero.

El Mueble

Las texturas naturales de máxima sencillez, como el lino y el algodón, son otra de las claves para dar autenticidad a la casa. Así, el dormitorio es un refugio sereno y acogedor, ideal para disfrutar de momentos de descanso y tranquilidad en una estancia romántica, veraniega y fresca.

13.

En los armarios del vestidor se han puesto cortinas en lugar de puertas

Vestidor moderno con cortinas en lugar de puertas en los armarios.

Realizado por Carpintería Sais, con cortinas de Margarita Ventura. Apliques de Mercantic y alfombra de Gra. 

El Mueble

El dormitorio principal posee un vestidor y una pequeña butaca de esparto para disfrutar de la lectura o simplemente descansar.

14.

En el dormitorio juvenil han jugado con los textiles

Dormitorio juvenil con cama y cortinas de lino.

Colcha verde de La Maison y cortinas de lino realizadas a medida por Margarita Ventura.  El cabecero de esparto es de La Maison y el taburete a modo de mesilla y la lámpara de sobremesa, de Velafusta. 

El Mueble

El lino, por supuesto, es un material estrella. Hay lino en las cortinas, las colchas, los sofás... Y también detalles rústicos que conectan con la tradición local, de la Costa Brava, como el esparto. Lo vemos en el cabecero del dormitorio de su hija, en la butaca de su habitación, en algunas lámparas, puffs... ¡Nos encanta!

Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter.