El truco infalible y casero para eliminar rayones de tus muebles de madera (y otros varios para disimularlos)

Los muebles de madera nunca pasarán de moda: la calidez y elegancia que desprenden hacen de cualquier estancia un lugar acogedor y coqueto. Sin embargo, con el paso del tiempo es habitual que la superficie se vea deteriorada por la aparición de arañazos y marcas.

Si te ha ocurrido, no te preocupes: no son irreversibles, y, de hecho, los productos que los harán desaparecen son básicos de cualquier alacena. Continúa leyendo y descubre cómo puedes tratar los pequeños desperfectos de tus muebles favoritos con productos del día a día, un remedio casero y más ecológico que los químicos de supermercado:

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El truco para eliminar rayones de tus muebles de madera

Los muebles de madera siempre son un acierto, te guste el estilo que te guste del mundo de la decoración. Sin embargo, con el tiempo y el uso diario, es común que aparezcan rayones y marcas en la superficie de la madera, lo que los afea hasta perder su valor original. Afortunadamente, existen trucos simples y efectivos que puedes utilizar para eliminar los rayones y devolverle a tus muebles de madera su belleza original. ¡Quedarán como nuevos!

• Paso 1: prepara una mezcla de vinagre de limpieza y aceite de oliva, a partes iguales. En caso de que no tengas aceite de oliva, el de girasol funcionará igual de bien.
• Paso 2: sumerge una bayeta de microfibra en la mezcla y aplícala en aquellos desperfectos que quieras hacer desaparecer
• Paso 3: con movimientos circulares, frota los arañazos y ¡voilà! Comprueba cómo desaparecen sin que la madera pierda su color ni adquiera olores indeseables.

El motivo por el que este truco es tan eficaz es la mezcla entre las propiedades naturales del aceite de oliva, reparador y abrillantador, y el vinagre, desinfectante infalible contra gérmenes y bacterias.

Recibidor con consola de madera con cajones, lámpara de mesa y espejo redondo. Debajo del mueble, cesta de fibra natural. 

Más trucos para disimular los rayones en la madera

Sin embargo, hay una infinidad de productos con los que puedes conseguir el mismo efecto. Son trucos sencillos, para los que no necesitarás más que elementos que seguramente ya tengas por casa: esta vez, en lugar de destinarlos a nuestras recetas, los usaremos para eliminar esos rayones tan antiestéticos y devolver a tus muebles su vitalidad del primer día.

• Las nueces, tanto en su forma natural como en aceite, son magníficas para reparar los desperfectos de tus muebles gracias a sus cualidades nutritivas. ¿Cómo? Prepara una pasta con un puñado de nueces molidas y un poco de aceite de oliva o agua. Aplica la pasta en las rayaduras y, tras dejarla reposar durante unos minutos, retírala con un trapo seco. Otra solución, más a corto plazo, es frotar directamente la nuez o su aceite en el arañazo: no eliminarás del todo el desperfecto, ¡pero funciona de maravilla para disimularlo!
• El café, además de ser un despertador matutino natural, te servirá para mantener tus muebles a punto. Es tan sencillo como mezclarlo a partes iguales con aceite de oliva, frotar la solución sobre la zona afectada de la superficie, y, tras dejarlo actuar durante unos minutos, limpiar el exceso con un cepillo.
• Para marcas puntuales y pequeñas, puedes aplicar con un hisopo una combinación de yodo con agua sobre el rayón, y dejarlo secar, ¡verás cómo desaparecen!
• Por último, el té negro y el vinagre son una mezcla efectiva para rejuvenecer tus muebles: coloca dos bolsas de té en un cuenco con cinco cucharaditas de vinagre blanco (es importante que esté tibio) y añade una cucharada de aceite de oliva. El té desprenderá su color en la solución y podrás aplicarla con un paño de microfibra para disimular los desperfectos ¡así de rápido!
• Para mantener y proteger tus muebles de antemano, te recomendamos el aceite de hígado de bacalao como barniz natural, aplicado dos veces a la semana.

Recuerda que puedes incorporar estos trucos en tu rutina de limpieza del hogar, para rejuvenecer tus preciados muebles, pero también funcionan para otras superficies como puertas de madera o encimeras: lo importante es que encuentres el más adecuado al tono de la madera, probando su aplicación primero en alguna zona pequeña a modo de ensayo.