El salón es la estancia que nos puede resultar más cómoda si debemos montar un rincón de teletrabajo en casa, porque suele reunir las mejores condiciones de espacio y luz. A la hora de buscar la mejor ubicación, lo ideal es estar cerca de la luz natural. Pero evita darle la espalda, porque los reflejos en la pantalla te molestarían. Comprueba que tienes cerca enchufes y evita las zonas de mucho paso o cerca de la tele. Sillas del comedor, de Crearte. Escritorio de roble realizado a medida. Lámpara flexo, de Catalina House. Si pegas el escritorio a la pared, como en este salón decorado por Paula Duarte, favorecerás la concentración, porque no te distraes mirando a lo demás. Además, tiene otra ventaja, y es que puedes aprovechar cualquier rincón 'muerto' del salón. Sofá, diseño de Paula Duarte, realizado a medida. Mesa de centro, modelo Alpes, de Brucs. Lámpara flexo, de Jieldé, y lámpara te techo, en Naluz. Lo ideal es que el mueble que uses como mesa mida entre 70 -75 cm de alto, al menos 45 cm de fondo y un mínimo de 90 cm de largo para que sea cómodo. Para poder sentarte sin problemas, entre la mesa y el siguiente obstáculo debe haber al menos 90 cm libres. Mesa, de Ethnicraft. Sillas, de Ton. Alfombra, de Farma Living. Escritorio, de Zara Home. Silla, en Bazar Decoración. Escritorio, de Zara Home. Silla, en Bazar Decoración. Lámpara blanca, de Aromas del Campo. Alfombra del estudio, de Zara Home. Hoy en día, más que nunca, necesitamos que el salón sea un espacio flexible. Cambiar la ubicación de algunos muebles nos ayudará a lograr que todas las actividades de cada día y de cada miembro de la familia convivan en armonía.¿Tienes el sofá arrimado a la pared? Valora reubicarlo y usar su trasera de separación de la zona de ocio y trabajo, por ejemplo. Sofá modular Vallentuna, de Ikea. Mesas de centro, de Zara Home. Mesas auxiliares Lucas, y aparador Alma, todo de Brucs, en Sacum. También de Sacum, la mesa velador y la lámpara de sobremesa. Alfombra, de B&B y cortinas, de Zara Home. Con esta distribución, con los dos sofás enfrentados, se favorece la tertulia o los momentos de relax para leer, descansar... Al unir el sofá modular creando un gran sofá rinconero frente el televisor, se ha ganado una distribución perfecta para las sesiones de cine en familia. Deja que la luz natural te inunde de energía. Puedes quitar las cortinas o poner visillos, más ligeros, para que pase la luz. Para este agradable rincón de lectura, solo necesitas una colchoneta que te guste o unos cojines bonitos. Sofá y mesa de centro, de Coton et Bois. Para ello, es básico ubicar bien los sofás. Lo ideal es ver la tele de frente: se evitan reflejos y el ángulo de 90º es el menos dañino para la vista. De hecho, la pantalla no debería salir del campo de visión de 120º. Por lo que, si cuentas con varios sofás, coloca el principal en paralelo al televisor. Sofás, chimenea, mesa de centro, lámpara de pie y librería lacada, de Jeanette Trensig. Alfombra de Cotlin. Pavimento, de cerámica que imita la madera. Para evitar la fatiga visual, es básico respetar las medidas entre el sofá y el televisor: calcula separar el sofá 50 cm por cada 10 pulgadas del televisor. En el caso de los televisores 4K puedes reducir unos cm esta distancia porque la resolución es mayor. Sofá y pufs, en Tapicería Deco Lur. Mesas de centro de madera de roble, de Ethnicraft. Alfombra de lana, de KP. Usa muebles que se abran y se cierren o que tengan varios usos para ponértelo fácil y no llenar el salón. Estos pufs, por ejemplo, sirven de asiento extra, de reposapiés y de mesa de centro. ¿Y lo mejor? Cuando no los necesitas, los guardas debajo del estante y el estar queda totalmente despejado. Aparador realizado a medida según diseño de la Lory Hansen. Sofá con tapicería Hot Madison. Puffs, de Alonso Mercader. Alfombra, de Sika Design, en Home Design International. Su principal ventaja salta a la vista: tienes dos mesas en el espacio de una. Pero, además, dan mucho juego en el salo��n y flexibilizan el espacio según las necesidades. Una mesa puede servirte de centro y la otra de auxiliar, o incluso como zona de juegos de los niños. Sofás, diseño de Pia Capdevila. Butaca, de Sacum. Mesa auxiliar, de Notremonde. Visillos, de Yute's y cortinas, de Gancedo. Mesas de centro metálicas, de Última Parada. Alfombra, de El Papiol. Clases de pufs hay muchos. Pero si optas por uno mullido, como este, podrá servirte, además, de asiento extra o de improvisada colchoneta chill out para tumbarse. Además, al no ser rígidos puedes guardarlos bajo la mesa de centro o en un cesto. Si es desenfudable y con un tratamiento antimachas, mejor. ¿Tus hijos juegan y hacen deberes en el salón? Busca un sitio para sus juguetes, sus carpetas y sus libros favoritos. Los cestos y las cajas son un gran aliado y te servirán para que no esté todo a la vista. Resérvales una mesa pequeña y, eso sí, enséñales a mantener el orden y a dejar cada noche el salón recogido. Las alfombras son geniales en la zona de juegos de los niños. Normalmente, les gusta estar en el suelo y la alfombra te ayudará a delimitar el espacio. Puedes decirle que sus juguetes se quedan "dentro de la alfombra". Además, así los peques no se enfrían. Las de poliamida, algodón o lana son muy blanditas. Si quieres estar al día de todo lo que publicamos en www.elmueble.com, suscríbete a nuestra newsletter .